Transcripción automática
0:00:00 ¿De qué viene la charla esta noche?
0:00:02 Hablaremos yo, Eddie Alfred, Jorri.
0:00:06 Muchos de ustedes lo van a recordar ahora, especialmente cuando haga referencia a sus...
0:00:10 No lo ubico por el nombre.
0:00:12 Es el teatro del absurdo, el creador de Ubu Ray, Ubu en cadena.
0:00:18 Bueno, comencemos diciendo que el 10 de diciembre de 1896, fue una noche excepcional para el teatro de París,
0:00:25 porque tuvo lugar el estreno más polémico si borramos el Hernaní de Víctor Hugo.
0:00:33 Bueno, en la representación del 1896, Searmón también un leo árbara,
0:00:39 porque marcó el punto de arranque del teatro del absurdo,
0:00:42 esta corriente que acentúa las ambigüedades, las paradojas,
0:00:48 los contracentidos del lenguaje verbal, en fin, hacen unos cuantos chistes.
0:00:54 Para poner de relieve el carácter trágico de una existencia sin sentido,
0:00:59 me parece que es mucho decir, pero voy a cruzar rápidamente el charco de la polémica.
0:01:04 Hay cosas muy divertidas del absurdo, sin necesidad de que vengan a poner de manifiesto el sin sentido de la existencia.
0:01:12 La existencia puede tener mucho o poco sentido o ninguno, con o sin teatro del absurdo.
0:01:18 Cosas hay de Ionesco, que son muy divertidas, y sin embargo,
0:01:22 no muestran el absoluto y el carácter trágico de una existencia sin sentido.
0:01:27 Demuestran eso sí, que es posible jugar a la paradoja con el lenguaje, eso es lo que demuestra.
0:01:33 La obra que se estrenaba allá en 1830 era Uburre de Alfred de Jarrí.
0:01:40 ¿Quién era esteñasto? Había sido el 11 de septiembre de 1873 en La Val,
0:01:46 que era una ciudad a orillas, desde no sé qué río, en mitad del camino entre París y la costa atlántica,
0:01:53 es decir, entre París y Mar del Plántar.
0:01:58 Me llamo, se llamaba la ciudad, que era una ciudad muy conocida por la correalidad de los habitantes
0:02:04 y por el alto nivel de alcoholismo, siendo la primera circunstancia hija de la segunda.
0:02:13 La madre de Alfred se ocupó de la educación del chico, lo anotó en el liceo de Ren, lo anotó.
0:02:20 En aquel entonces, el tipo ya era un chico precoz y salvaje que atemorizaba todo el mundo.
0:02:27 Era petitso, pero apuesto.
0:02:30 Y como nunca le habían cortado el pelo, lo llevaba hasta la cintura.
0:02:35 No, no era tan difícil porque acuérdense que he dicho que era petitso.
0:02:43 El encuentro de Zarrí en la escuela con un maestro de física estaba destinado a producir historia literaria.
0:02:50 El profesor se llamaba Eber y era tan gordo que parece que lo tenían que ayudar a meterse en el aula.
0:02:57 Era el típico maestro que los estudiantes reconocen como víctimas.
0:03:02 Entonces le tiraban cosas en el pizarrón.
0:03:06 En fin, además el profesor, que era especialmente torpe, no era capaz de levantar una tiza sin que esto se convirtiera en un drama.
0:03:15 Entonces el nombre de Eber se hizo legendario.
0:03:19 Los alumnos empezaron a inspirarse en él para escribir narraciones extravagantes.
0:03:25 Toda la clase parece que escribía acerca de las aventuras de un personaje llamado PDB, que no era otro que el profesor Eber.
0:03:34 Lo describían con tres dientes, uno metálico, otro de madera y otro de piedra.
0:03:40 Con una sola oreja desplegable y un cuerpo tan grueso que siempre caía al suelo y que no podía levantarse por sin medio.
0:03:47 Ya Rí, con 13 o 14 años, lideraba la creación de estos relatos sobre el profesor Eber.
0:03:54 Al poco tiempo, todo lo que leían o representaban ya estaba referido al profesor Eber.
0:04:02 Aprovechaban las obras de los autores griegos, o también de los modernos, para hacer parodias y escribir nuevos capítulos de las aventuras de PDB.
0:04:13 Todo este movimiento resultó ser finalmente un esboso del que iba a ser Ubur Rey, esta pieza que iba a sacudir a París.
0:04:21 Después de terminar el bachillerato, Alfredito salió hacia París para ingresar en la escuela normal,
0:04:27 escuela en la que acababan de incorporarse también Paul Valerí y Andrés Gied.
0:04:33 No se había salvado el servicio militar, mejor dicho se había salvado porque hizo lo siguiente.
0:04:42 Injirió una dosis de veneno y fue antes de la revisación.
0:04:51 Entonces fue al hospital y cuando lo revisaron, estaba más muerto que vivo y no lo admitieron en el ejército.
0:05:01 De ayer lo mandaron a una escuela, todavía no había cumplido los 20 años y ya estaba destruido.
0:05:06 Es que se mandaba casi una botella de whisky por día, no se paqueteó un veneno.
0:05:13 Andaba por ahí vestido como un antiguo caballero con capa y zapatos de punta.
0:05:18 Estábamos casi en 1900, ¿no?
0:05:21 También llevaba unos revolveres de juguete en unas cartucheras.
0:05:25 Vivía en una oscura guardilla que era un poema.
0:05:29 Como no tenía dinero, comía lo que pescaba en el Sena.
0:05:34 Eran verdaderamente un pescador muy experto y mientras tanto escribía, mientras tanto no creo.
0:05:41 Escribía U-Ray y el personaje principal era U-Boo, que intentaba de un modo criminal conseguir el trono de Polonia.
0:05:52 U-Boo saqueaba el país, pero derrotado por los ejércitos de Sar de Rusia, huía a Francia,
0:06:00 donde prometía cometer nuevas atrocidades entre la población.
0:06:05 U-Boo era el arquitecto del sinismo, la grosería, la ineptitud echa autoridad.
0:06:12 En fin, dicen que había tomado ideas, ya lo di, de distintas obras teatrales,
0:06:16 pero bueno, todo el mundo toma ideas de distintas obras, salvo que decida inaugurar un mundo nuevo,
0:06:24 con nuevos lenguajes, nuevos códigos, nuevas personas, etc.
0:06:28 En la primavera de 1896 publicó en la revista El Libro de Arte seis fragmentos de U-Boo Ray y gustó.
0:06:37 Más tarde, Jarrey fue nombrado secretario de la compañía de teatro de Lueve,
0:06:42 y sus esperanzas de poner en escena la obra crecieron.
0:06:48 Imagínense, dijo, esta es la media, ¿no?
0:06:52 Referiéndose a la posibilidad de treinar una obra o quizá alguna otra cosa.
0:06:56 Bueno, hizo entonces lo siguiente.
0:06:59 Para no chocar con los directivos, preparó primero una obra de Ibsen, la puso en escena,
0:07:04 y así con la confianza de la compañía, ganó la posibilidad de estrenar U-Boo Ray en diciembre.
0:07:10 Así que no fue directamente revolucionario, sino que para no espantar a los burgueses estrenó primero una obra de repertorio.
0:07:20 Cuando llegó el momento de estrenar U-Boo Ray, tuvo mucho público.
0:07:24 Hay el teatro nuevo, parece que el decorado lo había diseñado tu luz lotre, pero no estoy seguro.
0:07:31 Jarrey había aconsejado a los actores interpretar sus papeles de una forma normal, no afectada a usted.
0:07:40 Lo cual le habrá costado muchísimo, me imagino, sabiendo cómo son los actores.
0:07:46 El texto debía ser hecho de forma convencional, que yo creo que es la forma adecuada para representar el teatro del absurdo.
0:07:58 Si uno está, por ejemplo, solicitando en una ventanilla un pasaje por mar para ir desde París a Marsella,
0:08:07 no tiene que hacer toda clase de gestos para que el público entienda que esto no es posible,
0:08:12 que no hay mar que conduzca desde París a Marsella, sino que debía hacerlo del modo más normal.
0:08:18 Bueno, llegó el día del estreno, va a empezar la obra que se llevó, aparece el primer actor, Genier,
0:08:26 y se dirige al público para decir la primera palabra de la obra.
0:08:30 Y cuando la dijo, todos saltaron de sus hutacas porque la palabra era majde,
0:08:35 cosa que ahora se puede decir en todas partes, pero en aquel entonces no tanto.
0:08:41 Hasta una hora después no se pudo reanudar la obra.
0:08:44 Pues se suspendió.
0:08:46 Qué escandaloso.
0:08:51 El público se dividió en dos grupos, los que pateaban y chiflaban y los que aplaudían.
0:08:57 Estaba Malarmé, el líder de los poetas simbolistas, estaba Jim Huerto-Riza, ¿no?
0:09:02 Y los actores esperaban tranquilamente en el escenario.
0:09:05 Después la obra continuó, llegó a su fin, y Jean-Rice hizo instantáneamente famoso.
0:09:10 Para uno por su locura, para otros por su genio.
0:09:14 La crítica de Léz-Jurnal fue la siguiente.
0:09:18 Tengo Léz-Jurnal aquí.
0:09:20 Pero justo.
0:09:21 Sí, pues siempre leemos los diarios.
0:09:24 A pesar de una acción imbécil y de una estructura mediocre, ha nacido un nuevo género,
0:09:31 creado por una extravagante y brutal imaginación, más de niño que de hombre.
0:09:36 Pero me...
0:09:38 Es buena la crítica, o sea.
0:09:40 Tenía 23 años, Yarrí, de todos modos.
0:09:44 Sigo escribiendo, se reía del sexo, se burlaba despiadadamente de la religión.
0:09:49 En sus teorías acerca del teatro, Jean-Rice reivindicaba la máscara.
0:09:53 Insistía en la utilización de la máscara como dispositivo apropiado
0:09:58 para mostrar actitudes eternas del carácter humano.
0:10:03 Yarrí consideraba, por otra parte, que las máscaras proporcionaban una falsedad
0:10:08 que era vital para sobrevivir.
0:10:11 Después, ya en 1900, Yarrí escribió, hubo encadenado.
0:10:17 Y allí aparecen unos personajes que son los hombres libres
0:10:21 que están comprometidos a estrictas prácticas de desobediencia.
0:10:27 Son como unos soldados que pertenecen a un disciplinado ejército anarquista
0:10:32 en el que cada orden desobedecida escrupulosamente.
0:10:38 La desobediencia escrupulosa es muy difícil.
0:10:42 Es más difícil que la obediencia escrupulosa.
0:10:45 Los hombres libres de Ubu encadenado se sublevan
0:10:50 a fin de conseguir privilegios y la cómoda seguridad de la vida en prisión.
0:10:55 Se sublevan para que los aprisiones los contengan con prohibición.
0:11:05 Yarrí después se dedicó a una ciencia que él mismo había inventado, que era la pata física.
0:11:10 Habrán ustedes oído hablar de ella, que es la ciencia de lo particular.
0:11:14 Es decir, la pata física trata las leyes que rigen la excepción.
0:11:19 Bien, vivió siempre Yarrí en una situación de increíble miseria.
0:11:24 Borracho todo el día, con la salud arruinada por la tuberculosis y el hambre.
0:11:30 Varios amigos tuvieron que sacarlo del tuburio donde vivía en medio de la roña.
0:11:35 Lo llevaron al hospital de la caridad en París, un hospital de mendigos.
0:11:39 Y así murió el 1º de noviembre de 1907.
0:11:43 Tenía 29 años el pobre Yarrí.
0:11:46 Pero 20 años después apareció Antonín Arthaud.
0:11:50 Y fundó el teatro Alfred Yarrí en París.
0:11:53 Y allí surgieron los escritos y obras en las que más tarde se basaría en Ionesco y el propio Beckett.
0:12:00 Pero esa es la otra historia.
0:12:03 Cuando André Pérez de Tom creó el manifiesto surrealista,
0:12:07 tanto él como quienes acompañaron al movimiento se apropiaron del mito que Alfred Yarrí había creado en los círculos de París
0:12:15 y escribió Pérez de Tom en una nota alzodero.
0:12:23 Nosotros mantenemos que desde Yarrí como desde Wild,
0:12:27 la diferencia durante mucho tiempo considerada inevitable entre arte y vida ha sido liquidada como principio.
0:12:34 Esto decía el amigo Breton en una época que uno no puede menos que mirar con cierta envidia.
0:12:41 Está leyendo en estos días algunos manifiestos surrealistas, ultraístas, que en su día.
0:12:50 Borges ha sido ultraísta, no escribía mucho para Ultra en el año 1921.
0:12:55 En aquellos momentos del siglo, la arte era una preocupación muy grande.
0:13:00 Había infinidad de escuelas que salían generalmente a destruir todo lo anterior.
0:13:05 Eran escuelas equivocadas pero necesarias.
0:13:09 Cuando uno observa estas cosas siente un poco de envidia por aquella época.
0:13:14 Por lo siguiente, en aquellas polémicas entre academicistas y escuelas sincronoclastas,
0:13:21 que se establecía una relación como de guerra,
0:13:27 pero en definitiva ambos bandos estaban preocupados por el fenómeno artístico
0:13:32 y quedaban afuera de este asunto los mercachiles y los estúpidos.
0:13:38 Estaban afuera de eso.
0:13:39 Si uno tenía propensión a los escalafones y tenía espíritu burgues,
0:13:47 bueno, si hacía por ahí ortodoxo y si uno era más aventurero,
0:13:54 por ahí sentía ganas de arrumbar todo y internarse en los potreros o en los yuzales de la heterodoxia.
0:14:03 Pero en todo este mejunje, incluso en estos odios muchas veces reales y otras veces fingidos,
0:14:12 no intervenían ni los mercaderes ni los estúpidos estaban afuera de esto.
0:14:17 Y los medios de comunicación que naturalmente han hecho tanto bien en tanto sentido al hombre,
0:14:22 especialmente al hombre deseoso de informarse y de tomar conexión con ciertas nociones,
0:14:27 también han venido a perturbar esto porque apareció un fenómeno nuevo en el arte,
0:14:32 que es la industria. No nos vamos a estender sobre esto, pero aquella época era más sencilla.
0:14:40 ¿Ve qué estábamos hablando?
0:14:46 Bueno, no me acuerdo.
0:14:49 Estamos en una presencia ríe y de la embigia que sentíamos de esas épocas,
0:14:56 en que incluso los artistas tenían hasta una inocencia que les permitía creer
0:15:02 que una actitud artística nueva iba a destruir las viejas y iba a formar un nuevo mundo.
0:15:10 El posmodernismo nos ha enseñado, por un lado, algo que es interesante,
0:15:14 que es la convivencia de distintas escuelas, la existencia de muchos modos de ver el arte
0:15:21 y la posibilidad de que todas estas escuelas coexistan.
0:15:30 Pero también nos puso las puertas de una indiferencia estética
0:15:38 y a menudo de un relativismo moral también.
0:15:43 Pobre eserrín, ¿no? Las horas lean las, son muy divertidos.
0:15:50 ¿Para qué es presionante? Porque si él murió a los 29 años, qué precocidad, ¿no?
0:15:58 Yo estaba pensando en mi vida a los 29 años y ahora prefiero pensar en la dera a los 29 años.
0:16:06 Imagínense, ahora que está de moda ser Peter Pan y no crecer nunca
0:16:10 y hay gente que tiene 35 años y dice, bueno, me voy a empezar la secundaria.
0:16:17 Ya está bien, vieja, me he visto solo, dice.
0:16:21 Bueno, ya que hablamos de teatro el Absurdo, hagamos que Gabriel Rolón, que es psicoralista,
0:16:30 haga la dedicatoria.
0:16:32 Bueno, Alejandro, déjeme dedicar a algún autor que a mí me gusta.
0:16:37 Griego también, digo, ya que estos hombres se inspiraban en eso, a Aristófanes
0:16:43 y ya que de reyes de, reyes teatralizados, se trataba lo que hacía Jerry también,
0:16:49 al amigo, al otro rey, el candúo por Colona, a Elipo.
0:16:54 Y, siendo que hablamos de mendigos en París, de los Pistados de los Mendigos en París
0:16:59 y que lo hemos nombrado al principio del programa a Víctor Hugo, déjeme dedicar esto a Jean Valján y sus miserables.
0:17:04 Muy bien, señores, escucharemos el Bals llamado Absurdo,
0:17:09 actualmente escrito en conmemoración del estreno de Hugo Reym.
0:17:17 Lo canta nuestro querido amigo Horacio Molina. Adelante.
0:17:24 Ayer me estaba recordando tu casa, mi casa,
0:17:42 por tal donde la luna se aburrió esperando.
0:17:47 Se dron por donde el tiempo se perfuma y pasa.
0:17:52 Y al mes que nos pusimos viejos y estamos más solos,
0:18:03 siento un bals en tu piano llorar y me pongo a pensar si no llora de amor.
0:18:13 Era la enla primera que apagó la rojera y enciende el rojo.
0:18:23 Y una noche te acuerdas un beso debajo del cerezo, se llaba nuestro amor.
0:18:33 Pudo el amor ser un nudo, a dudo que pudo luchando vencer.
0:18:43 Una casa era pobre, tan rica, fácilmente se explica que no pudo ser.
0:18:55 Así por el recuerdo lloro tu casa, mi casa,
0:19:05 tu amor quedó marchito en un estuche de oro.
0:19:10 Mi amor que al fin de darse se quedó sin barazas.
0:19:15 Y al mes que nos pusimos viejos y todo fue en vano,
0:19:25 siento un bals en tu piano llorar y me pongo a pensar si no llora de amor.
0:19:36 Era la enla primera que apagó la rojera y enciende el rojo.
0:19:46 Y una noche te acuerdas un beso debajo del cerezo, se llaba nuestro amor.
0:19:56 Pudo el amor ser un nudo, a dudo que pudo luchando vencer.
0:20:06 Una casa era pobre, tan rica, fácilmente se explica que no pudo ser.
0:20:18 En la venganza será terrible hemos escuchado Horacio Molina interpretando Absurdo.
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