Transcripción automática
0:00:00 Aquí estamos hoy, más íntimos que otras veces, examinaremos un catálogo de lugares
0:00:08 maravillosos de las mil y una noches. Haremos un breve saqueo de las mil y una noches.
0:00:15 Atención, primer lugar maravilloso. En Miracán, que es una isla del Océano Índico, nacen
0:00:26 los mejores caballos del mundo. Y esto por el siguiente motivo.
0:00:31 Miracán es el único lugar conocido en el que van a parearse los caballos de mar, no
0:00:38 los minúsculos y desconcertantes hipocampos, sino estupendos y verdaderos caballos que
0:00:48 viven en las profundidades. Bien, todos los meses los palafreneros del rey de Miracán
0:00:55 llevan las yeguas a la plaza, a la débil luz de la luna nueva, y se esconden de cuereatarlas
0:01:03 en masmorras subterráneas. Atraído por las yeguas, los caballos marinos se acercan a
0:01:10 tierra, miran atentos a su alrededor, y si no descubren presencia humana, se unen a las
0:01:19 yeguas y las fecundan. Cuando los caballos marinos intentan que las yeguas los sigan
0:01:26 al mar, y vayan a vivir con ellos a las profundidades, advierten que las yeguas están atadas, y
0:01:33 entonces, alertados por los relinchos, los hombres salen de sus escondites y espantan
0:01:42 a los caballos que regresan a las aguas. Unos meses después nacen los potrilos, que
0:01:48 son los más veloces del mundo, y que valen una fortuna.
0:01:53 La isla de la Alcánfort es el segundo lugar, y está situada también en el Océano Hídico.
0:02:02 Debe su nombre a los muchísimos alcancoreros que crecen en la isla. Las ramas de estos
0:02:08 árboles son tan grandes que su sombra puede cobrijar a miles de personas. Si el viajero
0:02:14 desea tomar al canfor de un árbol, no tiene más que pinchar el vegetal, y saldrán de
0:02:20 él gotas de agua y al canfor que al contacto con el aire, tomarán una consistencia gomosa.
0:02:27 Pero, esto no importa absolutamente nada, porque lo más importante de la isla es que
0:02:33 así vive un animal extraño. El carcadán, si es parecido al camello, pero distinto.
0:02:43 Se en la cabeza un cuerno enorme. El destino del carcadán es siempre el mismo. Cuando un
0:02:49 elefante se cruza en su camino, el carcadán lo atraviesa con el cuerno, y sigue caminando
0:02:57 con el elefante clavado durante largas jornadas. Estas largas son estas jornadas y tan calurosas,
0:03:05 que el elefante muene y su grasa se derrite al sol del mayor guía.
0:03:10 Entonces se ocurre por la cara del carcadán y lo deja ciego. Como sabe cualquiera, sobre
0:03:17 cuyos ojos se haya escurrido la grasa de un elefante. Cuando esto ocurre, es decir,
0:03:24 cuando el carcadán queda ciego, aparece el ya conocido Averrock, que lo toma entre sus
0:03:31 largas y se lo lleva para alimentar a sus crías. El Averrock, como ustedes sabrán,
0:03:39 conjeturado por eso que se cuenta, es adecuadamente enorme.
0:03:46 Después de este ejemplo de ternura viene otro lugar que es la ciudad de Bronze. Se cuenta
0:03:54 que es una ciudad deshabitada del norte de África, que posee un palacio de mármol
0:04:01 sumtuosamente decorado. En el interior del palacio puede verse una tumba muy grande,
0:04:08 perteneciente a Kishbenzadad Benad el Grande. Poseedor de cuatro mil caballos, casado con
0:04:15 mil muchachas y bendecidos con mil hijos. Parece que este hombre vivió mil años y
0:04:21 acumuló riquezas imposibles de alcanzar por ninguno de los reyes de la tierra.
0:04:25 La ciudad de Bronze tiene 25 puertas, en lo que pueden ver ni tampoco abrir, excepto por
0:04:32 dentro. Las muchachas también, pero las murallas de la ciudad, están planqueadas por dos torres
0:04:40 de bronze y son de piedra negra. Para entrar, el visitante debe seguir las construcciones
0:04:46 de Lemir muy sabendo salir. Abricará una escalera de madera y la cifrará contra la
0:04:52 pared. Una vez en la muralla, el visitante verá dentro de la ciudad diez hermosas muchachas
0:04:59 que lo tentarán con sus encargos. El viajero no deberá hacerles caso, pues son en verdad
0:05:05 espectros, y saltar la muralla, en virtud de la tentación, puede ser fatal. Lo mejor
0:05:13 es caminar por encima de ella hasta llegar a una de las torres de Bronze.
0:05:18 Una vez así, por una puerta de Évano, el visitante pasará a una habitación con una
0:05:23 enorme cúpula de oro rojo que cubre un pabellón sostenido por aves con patas hechas de esmeralda.
0:05:31 Cerca de allí se podrá ver una fuente, y junto al borde de la fuente un diván, y en
0:05:37 él tendida una bella mujer. El viajero advertirá espantado que la mujer está muerta, que
0:05:44 le han arrancado los ojos, que les han dado un baño de mercurio, y se los han vuelto
0:05:48 a colocar, y esto le da una horrorosa impresión de vida. Una rablilla de oro a los pies del
0:05:55 diván revela el secreto de la ciudad de Bronze. Parece que durante el reinado de Tasmur, un
0:06:02 descendiente de los Reyes amalecitas, una sequía acabó con la ciudad.
0:06:08 Después de comerse todo lo que les quedaba, la reina envió mensajeros para cambiar sus
0:06:14 fabulosas riquezas por algo para comer. No encontraron a nadie y regresaron a la ciudad
0:06:21 con el tesoro intacto. La reina decidió exponer públicamente las riquezas, cerró las puertas
0:06:27 de la ciudad, se encomendó a la voluntad del Señor y murió de hambre con su pueblo,
0:06:33 dejando los edificios y las riquezas acumuladas como monumentos eternos a la inutilidad de
0:06:42 todo atesoramiento. Eresir esta ciudad sirve para decirle a uno, inútiles, atesorar.
0:06:51 Podrían haberse ahorrado tal inigente construcción y limitarse a las palabras, pero no lo hicieron.
0:06:58 Conozcida es la isla del viejo del mar, ya hemos hablado, me parece a mí, del anciano
0:07:03 del mar. Es un lugar muy peligroso. El anciano del mar, sentado junto a una noria, con mirada
0:07:10 triste, espera que algún infortunado se cruce en su camino.
0:07:18 Si el viajero se apiada del viejo y lo carga sobre sus espaldas, se convertirá en bestia
0:07:26 de carga para el resto de sus días. Sucede que el anciano rodea con sus piernas que son
0:07:32 negras y áperas como la piel del búfalo, el cuello del incauto y lo aprieta hasta dejarlo
0:07:38 inconsciente. Luego lo golpean la espalda para hacerle comprender quién es el amo, lo cual
0:07:44 no era imposible, ya que habíamos quedado aunque el viajero se haya venconsciente y
0:07:48 venconsciencia nos impide comprender toda la noción, inclusive aquella que se escribe así.
0:07:56 El amo es del anciano. El caso es que una vez que ese hombre comprende, el anciano lo
0:08:05 obliga a llevarlo por toda la isla para ayudarlo a tomar de los árboles los mejores frutos.
0:08:11 Sinvar el marino mató al anciano del mar por su arte y lo hizo de siguiente modo.
0:08:18 Teniendo al anciano acuestas consiguió fabricar vino y lo convidó. El anciano del mar se emborrachó
0:08:27 y empezó a balancearse sobre los hombres sinvar que notó que ya no lo primrea como de
0:08:33 costumbre. Entonces sinvar de saludó de su cuello las piernas con un movimiento rápido,
0:08:41 finalmente despidió a ese desagradable anciano al suelo, saltó sobre él y le desacudió
0:08:49 con una piedra en el marote así que lo liquidó. El último padre fue realmente lamentable.
0:08:58 No importa mucho, lo que importa es que lo emborrachó y consiguió que se cayera.
0:09:02 Después todas esas torpes de inscripción, de inscripción, de como se tiró al suelo,
0:09:07 agarró unas piedras y se la partió en el marote. Son desagradables.
0:09:14 Cuando Ceresar se vio aparecer la mañana había llegado justamente a este punto de la narración
0:09:22 y cayó discretamente. Nosotros haremos lo mismo que Ceresar y calzaremos discretamente,
0:09:31 al menos en lo que se refiere a este catálogo de lugares maravillosos que provienen de
0:09:37 las noches. Pero lo en cuanto a la dedicatoria, se podría caso involucrar a los anónimos
0:09:45 escritores de las medias una noche, aquellos relatores nocturnos que en la esquina tal
0:10:00 vez de El Cairo o tal vez de Alejandría empezaron a dar vida por primera vez a estos relatos,
0:10:07 sino también a los traductores de las noches, a los que llevaron este libro infinito para
0:10:17 postularlo a la admiración de los occidentales.
0:10:22 Y recuerdo aquel pensamiento de Borges cuando decía que era muy diferente la actitud de
0:10:29 aquellos caminantes del Cairo que escuchaban a los confabulatori en las noches, contar
0:10:38 estos cuentos y la de los ingleses, por ejemplo, que conocieron la versión de Pátam. Borges
0:10:48 decía que a los primeros le parecía maravilloso que una tortuga pudiera ser confundida y que
0:10:55 a los ingleses le parecía maravilloso que existían personas capaces de creer que a una tortuga
0:11:11 pudiera confundirse la donona isla.
0:11:16 Entonces, dedicamos también a los ingleses y a Barton, y a Galart, y a toda la gente que
0:11:25 se puso a traducir las noches.
0:11:28 Y, tal vez, hemos buscado una canción para ilustrar este catálogo y hemos buscado una
0:11:36 cuyo título es tremendamente desleñoso con todos los lugares mencionados. El tango
0:11:44 se llama, a mí le jamé en mi barrio. Y es un tango que casi nadie conoce ya, pero algunos
0:11:51 de ustedes podrán recordarlo más cuando lo escuchan, que a lo de su título. Lo canta
0:12:02 El Mundo Rivero, es una grabación de 1951 con acompañamiento de guitarras. Ya van a
0:12:08 ver que no es tan desconocido como parece. A mí, de jamé en mi barrio, canta ya W.
0:12:21 Que me hablaste, mi amor, que quiere comparir, para las noches de lujo rasta un ojo difícil,
0:12:40 que sozlaba mi alcunia como el rango de cil, si yo sé que a mi lado nunca fui lo feliz.
0:12:48 Que perfecí ascendé, despertarte y oí, que me hablaba y yo, que se me comparí. A mí
0:12:58 me canta el barrio, de casitas de pareja, rincones donde se amaban, recuerdo de cosas
0:13:09 bienas, que hasta el salió te remoja de magreza colorosa, paro antes de la valla.
0:13:18 Me aquí las naves, conmigo, la fiel tolga y la azucan, yo siento beicalo de hogar.
0:13:25 A mí, de jamé en mi barrio, aquí el luchaste y el joven, aquí amén, aquí el divino,
0:13:36 y el intendere que morir. Vos aquí te cuasero, donde son nada más.
0:13:42 Marimos en la niega, tiempos a las nevas, la encierzo del troceo que le tuvo quemar,
0:13:49 la nostalgia del barrio que ya nunca verás. Resperar que apete, despertarte y oí, que
0:13:58 me habló y yo, que querés comparir. A mí me canta el barrio, de casitas de pareja,
0:14:06 rincones donde se amaban, recuerdo de cosas bienas, que hasta el salió te remoja de magreza
0:14:13 colorosa, paro antes de la valla. Me aquí las naves, conmigo, la fiel tolga y la azucan,
0:14:20 yo siento beicalo de hogar. A mí, de jamé en mi barrio, aquí el luchaste y el joven,
0:14:26 yo siento beicalo de hogar. A mí, de jamé en mi barrio, aquí el divino,
0:14:34 aquí el luchaste y el joven, aquí amén y así el divino, y aquí tendré que morir.
0:14:44 Resperar que apete, despertarte y oí, que me habló y yo, que querés comparir.
0:14:51 Ha cantado el mundo rivero, de Francisco Amor, a mí, de jamé en mi barrio.
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