Transcripción automática
0:00:00 Continuamos en la venganza, será terrible, estamos en nuestro galponsito en el auditorio de Radio del Plata, en la calle Gorriti 5963, la semana que viene también...
0:00:14 No, la semana que viene no, mañana. También estaremos aquí.
0:00:17 Ah, esto se confundan.
0:00:18 Entonces, esto les para qué hablas.
0:00:20 La semana que viene también.
0:00:21 La parte de la boca.
0:00:24 Digo.
0:00:25 Ahora hable usted.
0:00:26 Bueno, la semana que viene estaremos aquí, pero estamos hablando de esta semana porque el día jueves la venganza será terrible, se presenta en verano de emociones.
0:00:34 Vásenla a vale del bar del Plata a las 10 de la noche.
0:00:36 Hemos recibido el libro Historias de Villa Gessel, que es de nuestro amigo Juan Ignacio Provendola, que casualmente es un hombre de Gessel.
0:00:50 Son delatos que van desde el año 1816 en adelante.
0:01:01 Su padino es alemán, es Ernesto que va a dar de las hermas.
0:01:03 Hay de todo aquí.
0:01:04 Es tameré, es todo.
0:01:05 El viejo Gessel, la ditadura.
0:01:11 Los jugadores de fútbol.
0:01:12 Los jugadores de fútbol es un libro que promete mucho.
0:01:19 Verdades, secretos y misterios.
0:01:21 De una ciudad que se hizo leyenda.
0:01:27 A mí siempre me ha llamado mucho la atención Villa Gessel, lo cual no dice nada acerca de este libro.
0:01:32 No, es cierto.
0:01:33 También, y mucho más, me llama la atención.
0:01:37 Traga.
0:01:38 La cabeza de Juan Ignacio Provendola.
0:01:41 Y decir que la literatura me gusta más que Villa Gessel.
0:01:45 Es un buen negocio, me parece.
0:01:49 Entonces, vamos a hablar ahora mismo de almas ausentes.
0:01:55 Atención, vamos a cerrar todas las puertas.
0:02:00 Cuidado, mire.
0:02:01 Ya hay gente que se está retirando.
0:02:04 Bueno, chato.
0:02:05 Exactamente, porque hemos avisado que es un tema sabú.
0:02:12 Hemos contado aquí en este programa alguna vez que era común en algunos pueblos antiguos la siguiente creencia.
0:02:21 El alma podía ausentarse del cuerpo sin causar la muerte inmediata del abandonado.
0:02:28 Bueno, es una creencia que requiere otras previas.
0:02:32 La primera de las cuales es existe la alma.
0:02:36 De todos modos, la ausencia del alma, aunque no te matara, podía ser perniciosa.
0:02:44 Era probable, incluso que el alma no regresara jamás.
0:02:49 Y en ese caso, sí, si ya no volvía más el alma, el desalmado moría.
0:02:55 Era posible también que se produjeran confusiones y que el alma viajante encontrara cobijo en otro cuerpo
0:03:04 o que recibiera algún tipo de maltrato que viniera a perjudicar al hombre que había perdido su alma.
0:03:12 Por ese motivo, y eso fue lo que contábamos aquella vez, había toda una serie de ardiles y protocolos para detener las fugas de almas.
0:03:23 Se prohibían los estornudos.
0:03:25 Claro, que mejor momento que un estornudo para que se te escape el alma.
0:03:29 A veces no solo se te escapa sino que la de casa fuera.
0:03:32 ¡Waaaa!
0:03:34 El alma estaba durmiendo la siesta, añorando algún viejo amor.
0:03:40 Allá en el fondo del coleto, estornudo iba para la esquina.
0:03:43 Dimojada para colmo.
0:03:45 Entonces se prohibían los estornudos.
0:03:48 Se las rebuscaban para no dormir con la boca abierta.
0:03:52 Qué difícil.
0:03:53 A veces se ataban a un suelo cerca de cualquier orificio del cuerpo para atrapar almas alientes.
0:04:01 Caramba.
0:04:02 El alma le salía por algún orificio y se quedaba enganchada del anzuelo que toda tucia había puesto en la vecindad de aquel agujero.
0:04:13 Alma fuerte, claro.
0:04:14 En la India, rígida en sus castas, parece sin embargo que era posible cierta movilidad social que se basaba en la transferencia del alma.
0:04:25 Pero ya veremos que hay una trampa aquí.
0:04:28 Se cuenta que un rey transfirió su alma al cadáver de un brazhamán y al mismo tiempo un chandela atento,
0:04:37 traspasó su alma al cuerpo abandonado del rey.
0:04:40 Es decir, estaba jugando.
0:04:42 Qué promiscuidad.
0:04:44 El rey se pone a jugar.
0:04:45 Ah, le paso mi alma tal cosa.
0:04:47 Y hay otros que están atentos.
0:04:48 Y cuando vos, por jugar, por hacer una gracia, le pasaste tu alma, ponedle al cadáver de un brazhamán.
0:04:55 Chau, te lo ocuparon.
0:04:57 Vas a volver y ya hay otro adentro.
0:04:59 Y perdiste el rey, no.
0:05:01 Entonces el chandela fue rey y el rey fue brazhamán, pero muerto.
0:05:08 El chandela fue invitado a demostrar su habilidad de externar el aliento y, solamente para demostrarlo,
0:05:16 lo transfirió al cuerpo muerto de un loro.
0:05:20 Los hombres del rey y estaron al brazhamán, que era el rey en realidad, que estaba ocupando el cuerpo del brazhamán,
0:05:28 aprovechar la oportunidad de rescatar la posesión de su propio cuerpo y así sucedió.
0:05:33 Se pueden escribir 70 historias, todas tan malas como la que acabo de encontrar.
0:05:41 Otra historia de este orden aparece entre los malayus.
0:05:44 El rey Xiang había transferido incautamente su alma a un mono.
0:05:49 Verdadamente, para transferir el alma a un mono hay que ser un incauto.
0:05:54 Y un visil ambicioso, que nunca falta.
0:05:56 Visil, quiere decir ambicioso también, aprovechó la ocasión para enviarla a suya al cuerpo del rey.
0:06:03 De este modo, tomó posesión de la reina también, la hizo su mujer y del reino.
0:06:12 Mientras el verdadero rey, Languid, decía en la corte, bajo la apariencia de un mono.
0:06:18 Que feo.
0:06:19 A usted le gustaría ser un mono mientras un visil ambicioso está en su cuerpo y olga con su mujer.
0:06:28 La beneficia, que feo.
0:06:30 Con su mujer, olga.
0:06:34 Pero un día, ya lo adivinaron ustedes, el falso rey que jugaba a grandes apuestas presenciaba un combate de carneros
0:06:44 y aconteció que el animal por quien había apostado cayó muerto.
0:06:49 Todos los intentos por reanimarlo fueron vanos, pero el falso rey con verdadero espíritu competitivo
0:06:55 transfirió su alma al cuerpo del animal muerto y así pudo reanudar el combate.
0:07:01 Pero Xián, desde el cuerpo del mono, vio su oportunidad y se reintegró al lugar que el visil había dejado temerariamente.
0:07:10 Xián volvió a sí mismo y el usurpador quedó en el cuerpo del carnero y allí encontró la muerte.
0:07:19 O sea, cantó para el carnero.
0:07:23 De modo parecido, espero que no hay igual, los griegos cuentan como el alma del pensador hermótimo de clasomene
0:07:31 acostumbraba a salir de su cuerpo y a andar por todos lados enterándose en sus correrías de lo que sucedía en las casas de sus amigos.
0:07:43 Pero un día en que su alma estaba ausente, sus enemigos hurdieron a apoderarse del cuerpo inhabitado
0:07:50 y lo arrojaron a la llama, lo arrojaron.
0:07:53 El alma errante se perdió.
0:07:57 Entre los índios Salish de Oregon, esa misteriosa región, que se llama Oregon,
0:08:05 en los Estados Unidos existía una creencia extraña al respecto.
0:08:11 Creían que el alma podía ausentarse sin que la persona se enterase.
0:08:16 En un sueño le era revelado al brujo el nombre del que había perdido su alma
0:08:25 y se apresuraba a comunicar tal pérdida a la víctima.
0:08:30 Por ahora no entiendo.
0:08:32 Generalmente eran varias las personas que sufrían esa pérdida al mismo tiempo
0:08:37 y todos los nombres le eran revelados al brujo que avisaba y reunía a los de Salmada.
0:08:44 Muchas personas perdían el alma porque el alma se escapaba durante el sueño
0:08:48 y un brujo, vaya a saber por qué, la New Age,
0:08:53 laboraba de eso.
0:08:55 Descubría dónde estaba.
0:08:58 Entonces llamaba a los hombres de Salmado, los hacía cantar toda la noche.
0:09:02 Al amanecer iban a una tienda aislada, por ejemplo el asombro de casero,
0:09:08 que quedaba herméticamente cerrada y en total oscuridad.
0:09:13 Si hacía un agujero en el ticho por donde el brujo introducía a la alma cerrada.
0:09:21 Está poniendo la piel de la china.
0:09:23 Sucedía muchas veces que a la llamada del brujo se presentaban una cantidad enorme de almas,
0:09:29 incluso ajenas, a los tipos que andaban buscando la sur.
0:09:33 Muchas de muertos, por lo que el brujo debía clasificar y apartar a las almas no pertinentes.
0:09:40 Es muy importante esto que acabamos de decir.
0:09:42 ¿Por qué dice?
0:09:43 Que no me acuerdo qué es.
0:09:44 ¿Cómo distinguirlas?
0:09:45 Alegaba entonces el brujo las almas de los que habían muerto.
0:09:50 Porque si te dan el alma de un muerto y vos estás vivo, te morís instantáneamente
0:09:57 y te retorces junto con la vieja, el tipo del pegamento,
0:10:03 y el que se ensartó con un clavo.
0:10:09 Entonces, elegía las almas de los presentes y las colocaba sobre la cabeza de sus respectivos dueños.
0:10:16 Y cada uno se iba para su casa con su alma, lo más chulo.
0:10:20 Con frecuencia, la pérdida del alma se adjudicaba a los demonios.
0:10:25 Los espasmos y convulsiones eran atribuidos por los chinos a la intervención.
0:10:32 Me gusta más si atribuía a los demonios que no se adjudicaba.
0:10:37 Pero bueno, disculpeme, al final los distraje.
0:10:44 Los chinos creían que todo eso lo hacían unos espíritus perversos
0:10:47 que gozaban arrancando almas de los hombres.
0:10:50 Y quién no.
0:10:52 Cuando en China, más precisamente en Hanchéu, un niño se retorcía en convulsiones.
0:10:58 Los parientes aterrorizados subían al techo de la casa y con una caña de bambún
0:11:04 en la que ataban la ropa del niño, intentaba casar al demonio raptor del alma.
0:11:10 Bueno, el resultado de la casa era evidente.
0:11:14 Si una vez puestas las ropas al niño, este se recuperaba,
0:11:18 es que habíamos casado al demonio en cuestión o algo así.
0:11:26 De igual modo, algunas regiones de la India capturaban el alma perdida de un hombre
0:11:31 con sus propios zapatos y la restauraban al cuerpo calzándose.
0:11:37 Ponían los zapatos.
0:11:38 El alma iba a los zapatos y después le ponían los zapatos al desamor.
0:11:41 Está bien eso.
0:11:42 Y te demostras.
0:11:43 Últimos ejemplo.
0:11:44 Se creía incluso en las civilizaciones más encumbradas que el alma de una persona podía
0:11:50 evitar cualquier objeto ajeno al cuerpo.
0:11:53 Si este objeto portador del alma era maltratado, el dueño del alma moría.
0:12:00 En el año 930, el emperador Romano Lecapeno, no el emperador Romano Lecapeno,
0:12:08 sino el emperador llamado Romano Lecapeno.
0:12:12 Ya que en el año 930 no había emperador Romano.
0:12:17 Pero sí había un emperador que se llamaba Romano Lecapeno, que calculó yo y calculó
0:12:23 mal que era un emperador bizantino, pero no, era de la dinastía masedónica de los emperadores
0:12:29 tardorromanos, lo cual es lo mismo.
0:12:33 Fue informado a este muchacho, por un astrólogo, que la vida de Siméon, que era príncipe
0:12:39 de Bulgaria y enemigo de Romano Lecapeno, estaba ligada a cierta columna de Constantinopla.
0:12:46 Allí recibía su alma, de tal modo que si se quitaba el capitel a la columna, Siméon moriría
0:12:55 inmediatamente.
0:12:57 Romano Lecapeno aprovechó la insinuación y mandó que le quitaran el capitel a la columna.
0:13:08 Más tarde ordenó que hicieran una investigación y el emperador llegó a saber que Siméon había
0:13:15 muerto en Bulgaria repentinamente.
0:13:19 Hasta ahora no creía nada de lo que...
0:13:21 Ahora me convencí.
0:13:23 ¿Quién puede dudarlo?
0:13:25 Acabo de convertirme al mormonismo.
0:13:31 De todos modos, Alejandro, usted hizo alguna referencia a esta cuestión de las palabras,
0:13:35 que es algo que nos lleva todo.
0:13:37 Un hombre que carece de alma es un desalmado, pero alma tiene un sinónimo que es, este,
0:13:42 ánima y alguien que carece de alma en ese sinónimo es alguien desanimado.
0:13:47 El desánimo no es lo mismo que el mal.
0:13:49 Y ella hay una confusión para los católicos y para los que creen en el alma.
0:13:52 Pero fíjese que hay, digamos, miradas de las distintas civilizaciones sobre el alma,
0:13:58 en términos de ocupación, como un tiempo compartido.
0:14:01 Como budistas uno puede salir y dejar el cuerpo libre.
0:14:04 Y después digo, esta cuestión más extraña, los haitianos, por ejemplo,
0:14:09 creen que el alma sobrevive al cuerpo, pero puede ocuparlo cuando quiere,
0:14:13 siempre y cuando se pagó el suamo.
0:14:15 Yo le he contado la ceremonia de solificación,
0:14:17 que se chupa el aire de una cerradura, el brujo se suba un caballo
0:14:21 con el otro para atrás, las tres vueltas, y ya es dueño del alma del tipo que le formó.
0:14:25 ¿Qué tiene que subirse al revés?
0:14:27 Se sube al revés, va montado al revés y pasa tres veces alrededor del rancho.
0:14:30 Hay otras civilizaciones para culturas que creen que el alma radica en un huevo,
0:14:34 esto es, así donde hay un huevo adentro, cabio un alma.
0:14:37 Por eso algunos demonios comen esos huevos.
0:14:40 Y finalmente, esta cosa de pensar cómo funciona esto.
0:14:43 El alma, a ver, cómo decirlo, es el carné de los alterios, digamos,
0:14:48 el carné educado de los alterios.
0:14:50 Uno no cree en general en el alma,
0:14:52 yo supongo que sería un desalmado o que no la tendré,
0:14:55 y sin embargo hace referencia a cosas que se hacen desde ese lugar,
0:14:59 y toda la miseria de lo peor que uno tiene,
0:15:01 pudiera salvarse pensando en una idea que es de los otros, pero no existe,
0:15:05 como si sus peores acciones pudieran justificarse porque usted las hizo desde el alma.
0:15:10 Y desde el alma es un hermoso valcecito que vamos a escuchar ahora,
0:15:16 previo un pequeño recuerdo que he tenido,
0:15:19 los pitagóricos creían en la transmigración de la sala.
0:15:24 Y pensaban que en algún momento,
0:15:26 era posible que el alma de un hombre se refugiara,
0:15:30 siquiera momentáneamente, en un poroto.
0:15:35 Aquí, creo.
0:15:36 En un aba.
0:15:38 Y entonces tenían prohibidos comer porotos.
0:15:41 Esto aplica todo.
0:15:42 Porque tenían miedo, imagínense, de comerse a algún amigo.
0:15:48 Y que se quijara después.
0:15:50 Y usted cree que murió pitágoras.
0:15:53 Se dice que en un campo de abas.
0:15:57 Yo, de alguna vez, inventé una especie de...
0:16:01 Oh, no se inventan las metáforas, solo se descubre.
0:16:05 Descubrí que atribuí al poroto la capacidad de cobijar un alma,
0:16:13 tenían que ver con la fama que esos alimentos tienen.
0:16:18 Alientos, álitos o suspiros.
0:16:21 Sí, sí, almas.
0:16:22 De manera que, como bien ya sabemos,
0:16:24 alma quiere decir eso.
0:16:26 Ánima de suspiros.
0:16:27 Y siendo los porotos...
0:16:29 Generadores de suspiros.
0:16:31 Generadores de suspiros.
0:16:33 Podía ser que los pitagóricos hubieran conjeturado
0:16:37 que a veces almas humanas se cobijaban así.
0:16:41 Ahora sí escucharemos, ya incluso pensando en esto.
0:16:45 Pensando sobre todo en esto.
0:16:46 Pensando en esto.
0:16:47 ¿Qué es lo que debe haber estado pensando Rosita Melon
0:16:50 cuando compuso este balz?
0:16:52 Escucharemos desde el alma y nos daremos cuenta
0:16:55 de que efectivamente en un poroto puede estar un amigo.
0:16:58 Canta Antonio Tormo.
0:17:18 Almas, si tanto te han herido
0:17:21 ¿Por qué te niegas al olvido?
0:17:25 ¿Por qué preciés llorar lo que has perdido?
0:17:29 Buscar lo que has querido, llamar lo que murió.
0:17:33 Vives inútilmente triste
0:17:37 y sé que nunca mereciste pagar con penas
0:17:42 la culpa de ser buena
0:17:44 tan buena como fuiste por amor.
0:17:48 Pues lo que empecé una vez
0:17:51 lo que después dejó de ser
0:17:55 lo que al final por culpa de un error
0:17:59 fue noche amarga del corazón.
0:18:04 Almas, no entones tu ventana
0:18:08 al sol feliz de la mañana
0:18:11 no desesperes que el sueño más querido
0:18:15 es el que manos quiere, es el que duele más.
0:18:19 Vives inútilmente triste
0:18:23 y sé que nunca mereciste pagar con penas
0:18:28 la culpa de ser buena
0:18:30 tan buena como fuiste por amor.
0:18:34 Dejas las carretas
0:18:38 vuelve a tu antigua ilusión
0:18:42 junto al dolor
0:18:46 y abre una herida
0:18:50 te niego a la vida
0:18:54 trajendo tu amor.
0:19:08 Vives inútilmente triste
0:19:13 y sé que nunca mereciste pagar con penas
0:19:18 la culpa de ser buena
0:19:21 tan buena como fuiste por amor.
0:19:38 Era Antonio Tormo en la venganza será terrible desde el alma.
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