Encontrá todos los archivos de audio en MP3 del programa de radio La Venganza Será Terrible de Alejandro Dolina

29 de Junio de 2007

Amores de dos califas: Iazid II y Abdul al-Dawla

Transcripción automática

0:00:00 Amores de califas.
0:00:02 En realidad, ojalá fuera amores de califas, es el amor de un par de califas nada más.
0:00:07 Se sabe que los califas de Bagdad
0:00:09 han tenido
0:00:11 con las mujeres del aren
0:00:14 comportamientos bien distintos en los casos.
0:00:17 Para algunos
0:00:19 las chicas del aren eran asuntos sin importancia y para otros
0:00:23 eran el aspecto central del califato y aún de la vida.
0:00:27 Se escriptó sobre dos califas de Bagdad
0:00:29 que tuvieron relaciones notables con algunas esclavas del aren
0:00:33 y hablaremos sobre ellos esta noche.
0:00:36 Veremos que estos hombres obtuvieron sus amores de manera bien distinta.
0:00:40 El primero de los califas fue Yassir II.
0:00:44 Gobernó en Bagdad
0:00:46 entre los años 720 y 724. Yassir II.
0:00:52 A Yassir se lo consideró
0:00:54 un degenerado
0:00:56 y un incompetente en cuestiones políticas.
0:00:59 Yassir II. degenerado en los generales
0:01:02 y un incompetente en los políticos
0:01:05 no degenerado e incompetente en las cuestiones políticas.
0:01:09 No. Degenerado
0:01:10 que al hacer política
0:01:12 era apenas incompetente.
0:01:15 Es decir, mejoraba muchísimo.
0:01:20 Parece que los historiadores lo despreciaron
0:01:23 por haber amado demasiado
0:01:26 a una esclava.
0:01:29 Según parece otra vez, y va.
0:01:32 Apenas igual el califato Yassir se enamoró locamente
0:01:36 de una esclava que además era poetisa y cantante.
0:01:40 Su nombre era Javaba.
0:01:43 El nombre no era muy bueno en realidad.
0:01:46 Javaba desmerece la hermosura y canto y la poesía.
0:01:50 Pero se llamaba Javaba
0:01:53 y era hermosa.
0:01:55 Dicen que por aquel amor Yassir
0:01:58 entró en transe
0:01:59 y llegó incluso a pronunciar frases incoherentes
0:02:03 como por ejemplo
0:02:05 nena.
0:02:06 Un general de aquellos tiempos llamado Masubi.
0:02:13 Masubi hubiera sido mucho mejor que Masubi.
0:02:17 Pero Masubi
0:02:20 significa también
0:02:21 está bien, no me importa, Subi.
0:02:25 Masubi.
0:02:28 Pero no, se llamaba Masubi, era un general
0:02:31 adficionado a las crónicas y escribió sobre este amor.
0:02:36 Parece que un día, parece no lo diré más,
0:02:38 escribió este hombre, un día mientras Javaba cantaba
0:02:43 es horrible, ¿no?
0:02:45 Yassir experimentó un placer tan grande que se desmayó.
0:02:51 Mire usted, ¿no? Se desmayó el tipo.
0:02:54 Se emocionaba tanto para escuchar el canto de Javaba.
0:02:58 O cantaba también Javaba
0:03:01 que la gente se desmayaba.
0:03:09 Es mejor para una cantante llamada Javaba
0:03:14 que sus triunfos se cuenten
0:03:18 en cualquier tiempo pasado
0:03:20 menos el pretérito imperfecto.
0:03:25 Así cantaba Javaba, es horrible, mucho mejor.
0:03:28 Así cantó Javaba, así ha cantado Javaba y así.
0:03:38 el califa visitaba a esta mujer
0:03:45 todos los días.
0:03:47 Permitía que saliera del aren
0:03:49 y que lo acompañara en salidas por ahí, lo cual es raro.
0:03:53 No era usual, generalmente las chicas del aren se quedaban allí
0:03:56 y el neato iba, las visitaba
0:03:58 y chau, ¿no? Que la sacaba a dar una vuelta.
0:04:03 Un día sucedió algo terrible.
0:04:05 En medio de una comida campestre
0:04:08 no nos atrevemos a decir un picnic
0:04:10 porque sería un insulto a la civilización islámica.
0:04:14 En medio de una comida campestre
0:04:16 luego de cantar para el califa.
0:04:19 Cantar para el califa es...
0:04:21 Es una canta para el carné.
0:04:23 Claro, me recuerda ese excelente inciso.
0:04:26 Cantar para el carnero, que significa morirse uno.
0:04:30 Ya casi nadie utiliza este academicismo.
0:04:33 Por ejemplo, fulano, cantó para el carnero,
0:04:36 queriendo decir que murió.
0:04:39 En este caso no, Javaba, cantó para el califa
0:04:42 en una reunión campestre.
0:04:45 Pero sucede que después de terminar la canción
0:04:49 se atragantó con una semilla de granada
0:04:52 y entonces se murió.
0:04:54 Es decir, cantó para el carnero.
0:05:00 La pena de Yacid fue tan grande.
0:05:02 Ya me lo imagino, si se desmayaba
0:05:04 cuando la mina cantaba una canción
0:05:06 al verla morir atascada con una semilla de granada
0:05:10 no quiero ni imaginarme lo que ha hecho.
0:05:13 Se olvidó de su deber de gobernante,
0:05:16 de tanta pena, y se olvidó de todo,
0:05:19 de los fieles, de los infieles.
0:05:21 Ni siquiera quiso enterrar a Javaba,
0:05:26 Dejó en su palacio el cuerpo en balsamado
0:05:29 y lloró sobre él cada día.
0:05:32 Se negó a que lo separaran del cuerpo de su amor
0:05:35 y olvidó su deber en las mezquitas,
0:05:38 incluso en los rituales de los viernes.
0:05:41 Y, por lo tanto, se vio obligado a rezar las plegarias
0:05:44 sin la presencia del califa.
0:05:46 Y, así, segundo enloqueció.
0:05:48 Dejó de comer.
0:05:50 Nadie podía separarlo del cuerpo en balsamado
0:05:53 de Javaba.
0:05:55 Unas semanas después,
0:05:57 los creyentes caminaron
0:05:59 tras el féretro del califa.
0:06:02 Quiero decir que murió también.
0:06:04 Lamentablemente fue estigmatizado
0:06:06 por todos los historiadores
0:06:08 y sólo recuperó prestigio y respeto como califa,
0:06:11 cuando escribió sobre él
0:06:13 Abua Al-Faray al-Isfahani,
0:06:16 autor del libro de las canciones.
0:06:19 Y allí se citó a Javaba,
0:06:21 como una de las artistas
0:06:23 que más contribuyó al desarrollo del canto
0:06:25 y la poesía embagdad.
0:06:27 Y se habló de, y así, segundo, como un hombre,
0:06:29 en el que el gusto estético
0:06:31 estaba lo suficientemente desarrollado
0:06:33 como para apreciar las dotes
0:06:35 de un artista excelente.
0:06:37 Un desarrollado que incluso hasta el desmayo llegaba.
0:06:40 Y esa fue la historia de Yassid II.
0:06:45 Esa es la primera de los historiadores.
0:06:47 Un hombre que descuida sus deberes de gobernante, etc.
0:06:50 Segunda historia.
0:06:55 Nos referiremos a Abdud al-Daula.
0:06:59 Abdud al-Daula,
0:07:02 que vivió mediados del siglo X.
0:07:06 Abdud al-Daula era un militar
0:07:09 de la dinastía chiíta de los Bujíes.
0:07:14 No era califa.
0:07:16 Al principio, en pieza historia,
0:07:19 el califa era al-Thay,
0:07:21 que era abasi.
0:07:23 Pero era un califa nominal y simbólico.
0:07:27 Mientras tanto, Abdud era un militar,
0:07:29 un Bují, que eran unos aristócratas.
0:07:32 Y en determinado momento, estos aristócratas
0:07:35 ganaron poder
0:07:37 y se convirtieron en la verdadera autoridad secular establecida.
0:07:41 Es decir, había un califa,
0:07:43 pero el que cortaba el bacalao era
0:07:45 Abdud al-Daula.
0:07:47 Mejor todavía, Abdud al-Daula,
0:07:50 el militar.
0:07:51 El califa se llamaba al-Thay
0:07:53 y el general Abdud lo manejaba.
0:07:55 Abdud, por otra parte, proporcionaba a Bagdad
0:07:58 la protección militar que Bagdad necesitaba.
0:08:02 Pero la relación
0:08:05 entre el califa y el militar
0:08:07 vino a complicarse.
0:08:09 Parece que Abdud al-Daula
0:08:11 dio dos pasos que resultaron
0:08:13 chocantes
0:08:15 a los ojos de cualquier buen musulmán
0:08:17 y anunciaron la decadencia del califato
0:08:20 como autoridad suprema.
0:08:22 Ante todo, fue el primer líder musulmán
0:08:26 que reivindicó el título de
0:08:28 Shahan Shah,
0:08:30 que era un insulto para el Islam
0:08:32 porque ese era el título de los reyes pre-islámicos
0:08:35 de Persia
0:08:37 que habían peleado contra los primeros maumentanos.
0:08:40 La segunda transgresión de Abdud al-Daula
0:08:42 fue su exigencia
0:08:45 de que en las plegarias de los viernes
0:08:47 el nombre del califa
0:08:48 se proclamara después del nombre suce.
0:08:51 Primero decían
0:08:54 Abdud y después decían Thay.
0:08:57 Hasta ese momento
0:09:00 no había habido grandes chocques.
0:09:03 Pero un día Abdud, el más poderoso entre los musulmanes
0:09:06 se enamoró de una de las mujeres del aren
0:09:09 llamada Yahab.
0:09:12 Yahab se llamaba Taqikh.
0:09:15 Dicen que la primera vez que este general
0:09:19 Abdud, general y califa de hecho,
0:09:23 estuvo con Yahab,
0:09:27 se quedó con ella varias noches.
0:09:30 Quiero decir, el primer lance venereo
0:09:33 con esta mujer duró varias noches.
0:09:38 Cuando reapareció en el palacio,
0:09:41 salió de la pieza,
0:09:43 tuvieron tres noches ahí o cuatro encerrados.
0:09:46 Cuando salió de la pieza,
0:09:48 Abdud observó que los asuntos de gobierno
0:09:50 se habían acumulado
0:09:52 y se sintió miserable por tener
0:09:54 sus deberes.
0:09:56 Decidió entonces no volver a ver a Yahab.
0:09:59 Bueno, eso es fácil de decir,
0:10:02 después de haber estado cuatro días seguido
0:10:04 con la misma mina.
0:10:06 Uno también tiene ganas de no haber ganado.
0:10:08 Dicho lo mismo, aún sin desatender asuntos de gobierno.
0:10:11 Y por ahí la mitad del tiempo.
0:10:16 Pero, yo como es esto,
0:10:18 la pasión que ella le inspiraba volvió a atentarlo.
0:10:21 Y la fuerza decía,
0:10:23 voy de nuevo a la plata.
0:10:29 Y pasó otras largas jornadas junto a ella.
0:10:33 Luego de aquellos días de amor,
0:10:35 Abdud se enteró,
0:10:37 ha salido otra vez de la pieza,
0:10:39 se enteró de que habían sucedido algunas cosas
0:10:41 que lo preocuparon.
0:10:43 Qué raro, el tipo se metía en la pieza con la mina,
0:10:45 no se enteraba nada,
0:10:47 cuando salía, le dián, han descubierto América.
0:10:50 Ha caído el muro de Berlín.
0:10:53 Claro, no me molesten.
0:10:56 Bueno, una de las cosas que había ocurrido
0:10:59 era la siguiente,
0:11:02 en la plegaria de los viernes,
0:11:04 volvieron a nombrar primero el califa vací
0:11:06 antes que a él.
0:11:08 Ah, lo que es el amor.
0:11:11 Abdud castigua a los culpables de semejante desertino
0:11:14 y prometió no volver a distraerse.
0:11:17 Prometió pero no pudo cumplir,
0:11:20 porque vinieron nuevos días entre las delicias de la arena.
0:11:23 Parece que además el tipo no podía estar
0:11:25 un rato con la mina, que es lo primero que se me ocurre.
0:11:28 Si se encontraban se quedaban juntos tres o cuatro días.
0:11:32 Y se pedió pesado.
0:11:34 Porque hay que establecer un límite,
0:11:37 una diferencia entre la mante constante,
0:11:39 y forzado, y atento, y gentil,
0:11:41 y el pesado.
0:11:45 Y después de un momento,
0:11:47 la dama, que desde luego
0:11:50 necesita un galán
0:11:53 de luxuria sostenida.
0:11:56 Pero sostenida hasta cuándo?
0:11:59 Ya hasta cuándo?
0:12:02 Son las 10 de la mañana fraco,
0:12:04 me tengo que ir a trabajar.
0:12:06 Tomá tela, todo ya que...
0:12:09 Veo que hay un punto,
0:12:11 donde uno deja de ser un gran amante
0:12:13 para empezar a ser un mala amante.
0:12:17 No tiene ganas de decirle, no, fraco es nada.
0:12:19 Claro, toma un café con leche.
0:12:25 Pero este tipo era seguidor, como Mosque Velorio.
0:12:32 También otra noche, otra de esas
0:12:35 cuádruples noches,
0:12:37 Abduz se enteró a la salida de que el califa Altai
0:12:41 había construido poder haciendo
0:12:43 fastuosos regalos
0:12:45 a sus propios hombres, a los hombres de Abduz.
0:12:48 Y horrorizado, viendo que perdía poder
0:12:51 por culpa de su amor, hizo algo espantoso.
0:12:54 Llamó a un ayudante llamado Shukr
0:12:57 y le ordenó que tomara a Yahab
0:13:00 y la ahogara en un río.
0:13:03 El racionamiento era tan simple y tan estúpido que da asco.
0:13:06 Quien se de al placer, dijo Abduz,
0:13:09 mientras se rascaba contra la pared,
0:13:12 perderá poder terrenal.
0:13:15 Si esta chica me aleja de mis obligaciones de poderoso,
0:13:18 prescindiré de esta chica y para no tentarme
0:13:21 la ahogaré en un río.
0:13:23 Y eso fue lo que sucedió.
0:13:25 Se cumplió el asesinato de la hermosa Yahab.
0:13:29 Y estos son los dos casos extremos
0:13:32 que quería plantearle a usted, que le dio el rollo.
0:13:35 El primero, el de un hombre que murió el mismo por amor.
0:13:38 El segundo, el de un hombre que amaba tanto el poder,
0:13:41 que resolvió matar a Nadama, que le gustaba,
0:13:44 nada más que para no tentarse con ella.
0:13:47 Y este último caso es el extremo del canalla, redondame.
0:13:50 ¿Y a cuál se parece más?
0:13:57 espero que hay así el segundo.
0:14:00 Si bien vamos a reconocerle algo a los historiadores, Alejandro,
0:14:03 que lo corrieron un poco de figurara
0:14:06 y de grandes califas y eso.
0:14:08 Y es que el demasiado amor que él sentía
0:14:12 era realmente una contra para sus funciones públicas.
0:14:15 O sea, un rey demasiado enamorador,
0:14:18 con su atención, demasiado capturado por un objeto de SEO.
0:14:22 Imagínese, se desmayaba cuando a la otra le cantaba
0:14:25 El Taita de la Rava.
0:14:29 Probablemente deberían tener cosas que no sé si es posible,
0:14:33 pero una pasión por el ejercicio leal del poder
0:14:37 para poder gobernar que sería más deseable para el pueblo.
0:14:40 Claro, pero claro, lo que pasa es que los hombres
0:14:43 que disfrutan del poder están tan obsesionados por él,
0:14:48 que es muy raro que tengan una pasión del tipo de mayas.
0:14:53 No suele.
0:14:57 Pero acá en el islam está bien,
0:15:00 porque el poder es más una consecuencia hereditaria
0:15:04 que el resultado de una vida de pasión,
0:15:06 sino lo mismo ser el hijo de un califa
0:15:09 y heredarlo que es el fidel Castro.
0:15:13 Son vocaciones de poder bien distintas.
0:15:16 Acá por ahí, siendo califa, por ahí llegaste al poder
0:15:21 sin desearlo.
0:15:24 Bueno, ¿a quién dedicamos esto?
0:15:26 Esto va a ser difícil.
0:15:28 ¡Es jababa!
0:15:30 ¡Jababa!
0:15:32 ¡Puetiza, cantante, bella!
0:15:35 Se lleva a todos los premios.
0:15:37 Yo jababa, tú jababas, él jababa.
0:15:40 ¡Qué manera de jabar!
0:15:43 ¡Jabaste!
0:15:45 ¡Jababa!
0:15:50 Bueno, el pobre disc me también ha viajado
0:15:53 porque tenía que soportar noches interminables
0:15:58 a este califa y encima de la escuela mataron.
0:16:01 ¿Cómo sabe, Roland, de las asuntos del colifato?
0:16:04 Del colifato, sí.
0:16:06 Del califato.
0:16:11 ¿Con qué ha decidido a hablar esto?
0:16:13 Hemos sido a buscar una canción
0:16:17 que al parecer cantaba jababa.
0:16:20 No me digas, Roland.
0:16:22 Sí, sí, sí. Que hablaba de sus propios ojos.
0:16:25 Y a lo mejor esa canción, que fue tomada después por su amante,
0:16:30 pudo ser Los Ojos de Mimosa.
0:16:33 Que lo tenían tan obsesionados.
0:16:35 Tan obsesionados por el califa
0:16:38 que perdió el consenso de los historiadores
0:16:41 por culpa de su amor.
0:16:43 Así que escucharemos los ojos de Mimosa,
0:16:46 que es una jota.
0:16:50 Sí, hay algo que abundan en el islam.
0:16:52 ¡Es una letra, lien la jota!
0:16:54 Jaja.
0:16:56 Casi mal lo debería haber elegido por eso.
0:16:59 Jaja.
0:17:01 Escucharemos esta jota en la voz de Carlos Gardel, su autor.
0:17:20 ¡Es una letra, lien la jota!
0:17:23 ¡Es una letra, lien la jota!
0:17:41 Son los ojos de Mimosa.
0:17:47 Como el filo de Urcunia.
0:17:53 Son los ojos de Mimosa.
0:17:59 Y son los vivos sin ellos.
0:18:03 Virgencica, con el filo.
0:18:09 Son los ojos de Mimosa.
0:18:17 Virgencica, con el filo.
0:18:39 Arrollito de mi aldea.
0:18:53 Así se puedo contar.
0:18:59 Arrollito de mi aldea.
0:19:05 Que por mi amor o el lapiero.
0:19:10 Una lágrima, poder ramar.
0:19:17 Una lágrima, poder ramar.
0:19:25 Arrollito de mi aldea.
0:20:00 En la venganza de la terriba hemos escuchado a Carlos Gardel interpretando los ojos de Mimosa.
0:20:30 Y el rey de Mimosa.
0:20:35 Y el rey de Mimosa.
0:20:40 Y el rey de Mimosa.

Comentarios (0)

No hay comentarios. ¡Podés ser el primero en comentar!


Tenés que Iniciar sesión para comentar.
Podés darle estilo y formato al texto utilizando Markdown