Ascetas

Transcripción automática

0:00:00 Asegiendo con tíles pedidos vamos a hablar de unos azetas pintorescos,
0:00:04 tal vez los más pintorescos entre todos ellos.
0:00:09 Me refiero a los estilistas, no los estilistas,
0:00:13 cada vez que los nombres lo hicieron.
0:00:17 Los estilistas no, como todo el mundo, saben los peluqueros.
0:00:20 El peluquero que no desean ser llamados peluqueros, le queda aquí con el nombre de la nubra.
0:00:25 No hay nubros, no hay nubros, no hay nubros, no hay nubros, no hay nubros.
0:00:29 Son todos estilistas, coajers, dueños de salones marculinos,
0:00:34 pero no peluqueros, son más de diez.
0:00:38 Estos estilistas no eran peluqueros sino azetas.
0:00:43 Es un grupo, hijo del monje, sumón estilita.
0:00:47 El primer grupo de culosex ponente fue el señor llamado Simón,
0:00:53 que nació en el año 369 en Isidro,
0:00:56 allá en la frontera de Isla y de Silicia, en decirlo, me cura el periodo.
0:01:02 Durante sus primeros años fue pastor,
0:01:05 todos, todo el mundo,
0:01:07 durante sus primeros años, pastor en la antigüedad.
0:01:11 Los de todos, los reyes de Troya, el hijo de Príamos, los dioses, los héroes,
0:01:17 son primeros pastores.
0:01:19 Las héroes son tanto cuidadores de obje,
0:01:22 pero como después se trasladan a los patrónes y menes,
0:01:25 los pastores en el sentido cuidadores de obje.
0:01:28 Bien, este cambió.
0:01:31 Y posteriormente ingresó en el monasterio de Teleda,
0:01:34 cerca de Alepo, allí donde el sordo de Alepo.
0:01:39 Lucharon del monasterio de Teleda,
0:01:42 pues parece que el ardor de sus mortificaciones
0:01:45 aterrorizaba a los monjes y a las autoridades.
0:01:49 Después de varias peripexias,
0:01:51 dijo su domicilio en la cima de una montaña,
0:01:54 así como al norte de Antioquía.
0:01:57 Y para asegurar su permanencia en aquel lugar,
0:02:02 para no tentarse y rajarse y así como haríamos,
0:02:06 cualquiera de nosotros,
0:02:08 se hizo encadenar a un peñasco
0:02:11 con una cadena de 10 metros de largo sujeta su piede derecho.
0:02:16 A su piede derecho hay una piedra en el otro extremo de nuevo.
0:02:19 Pues yo que solamente sostiene la cadena de su tobillo,
0:02:24 esto es la libertad para hablar con el mundo entero,
0:02:27 por mucho que harás que una cadena.
0:02:30 Esto es así, en un extremo el pie de derecho de la cifra sin manca,
0:02:35 en el otro extremo el peñasco,
0:02:37 que viene a ser como el centro de un círculo de 10 metros de radio,
0:02:43 quiere decir que hay unos 300, 14 metros cuadrados de...
0:02:49 de libertad que no es poco, es una casa grande.
0:02:53 Es más grande que la nuestra.
0:02:55 Más grande que cualquiera de las nuestras,
0:02:56 hay que tener una casa de 314,
0:02:58 con más decisiones y centenas de centimientos cuadrados.
0:03:04 Así estuvo varios meses hasta que el patriarca de Antioquía,
0:03:09 que lo vio,
0:03:10 hizo observar que era muy fácil
0:03:13 girarse de una cadena y no de la voluntad.
0:03:16 Pues no te vas porque te has atado, le dijo.
0:03:22 Con cadena cualquiera.
0:03:24 El asunto es llegar a seguir con aquella pequeña superficie,
0:03:29 con el solo uso de la voluntad.
0:03:31 Entonces Simón construyó una columna de 5 metros de alto,
0:03:35 que terminaba en una plataforma de 2 metros de helado,
0:03:38 rodeada de unas balastradas en las que el futuro santo se apoyaba,
0:03:43 nunca panócaerse, ¿no?
0:03:45 Y pasaba la mayor parte del tiempo parado para no dormirse.
0:03:50 Se instaló lo alto de aquella columna y allí se quedó.
0:03:54 5 metros de largo, de alto, me lo había dicho,
0:03:57 y 2 por 2 de superficie, y 4 metros cuadrados.
0:04:02 Imagínese el cuerpo de Simón siempre que expuesto a la intemperia,
0:04:06 agarraba la luz y el sol, los pájaros, etcétera.
0:04:11 Y Simón se dice,
0:04:14 un día le salieron lageras.
0:04:17 Y un día sus lagers, disculpe, Rolón,
0:04:20 la mena de muchas repugnaciones, ¿sí?
0:04:22 Se llenaron de buzanos.
0:04:25 Buzanos que caían de su cuerpo a sus pies,
0:04:29 de sus pies a la columna, de la columna al suelo.
0:04:33 Es el delante.
0:04:34 Así en el suelo un joven dificuló, llamado Antonio,
0:04:39 porque este hombre, con toda su humildad,
0:04:41 tenía uno que le estaba por debajo, calcule.
0:04:45 Antonio tomaba los buzanos, se los devolvía,
0:04:49 y Simón volvía a colocarlos en la llaga correspondiente.
0:04:53 Y le hablaba al buzano y le decía,
0:04:56 comed lo que Dios te da.
0:04:59 ¡Por favor!
0:05:02 Le decía, al buzano.
0:05:03 Es decir, no se lo estaba parado arriba de una columna,
0:05:05 así cometo se volvía a hablar con los buzanos.
0:05:12 Ahora, además de los buzanos, parece que Antonio,
0:05:15 este ayudante que tenía Simón en el suelo,
0:05:18 se encargaba de subirle libros y objetos de culto,
0:05:21 para saber dónde conseguiría.
0:05:23 Y ahí estaba, miento.
0:05:25 Cuenta el cronista, que ojo esto,
0:05:30 enseguida, señora.
0:05:32 Y sobre la columna,
0:05:35 Simón permanecía expuesto a la mirada de todo el mundo.
0:05:39 Bueno, naturalmente.
0:05:40 Estaba sobre una columna, sin ningún tipo de...
0:05:43 Me parece que lo cubriría.
0:05:44 Me parece que lo cubriría, estaba a la vista de todo el mundo,
0:05:47 con un espectáculo insólito.
0:05:50 Sus oraciones eran tan variadas y continuas,
0:05:53 que había quienes las contaban por diversión.
0:05:56 La gente acurrida al pie de la columna,
0:06:00 desde todas partes del mundo antiguo, para mirarlo,
0:06:02 así como hoy,
0:06:04 concurren a observar cómo se rompe e iglacear perito moreno.
0:06:10 Y que miraba cómo caían los buzanos,
0:06:12 que provenían de las llagas de Simón.
0:06:15 Estaba muy flaco este hombre, además,
0:06:17 porque no comía más que una vez por semana.
0:06:21 Una vez por semana comía.
0:06:23 Estuvo mucho tiempo sobre la columna.
0:06:25 No un mes, ni dos, ni un año, ni dos.
0:06:29 En realidad se quedó desde el año 423,
0:06:34 hasta que murió, en el 459,
0:06:37 36 años arriba de la columna.
0:06:41 Ahora bien, cuando los peregrinos lo vieron agolizar,
0:06:44 vieron que andaban medio...
0:06:46 ¡Mormoso!
0:06:47 Y dije, ¿en qué se tapó el morir?
0:06:49 Entonces armaron un gran tumulto,
0:06:53 y enviaron desde Antioquía una guardia formada por 600 soldados.
0:06:58 Para proteger el futuro cadáver.
0:07:01 Bueno, de los debutos,
0:07:02 que se lo iban a disputar para conseguir alguna reliquia milagrosa.
0:07:06 Aquellos tipos que eran tenidos por Santos,
0:07:10 corrían ese peligro.
0:07:11 Todo el mundo quería quedarse como un pedacito de ellos,
0:07:14 para atraer la suerte.
0:07:18 Bueno, después de este hombre,
0:07:21 el espiritismo se convirtió en una forma corriente,
0:07:26 el espiritismo en Siria,
0:07:27 se extendió hasta Visancio,
0:07:29 él se iban a dar un miato de arriba de las columnas por todas partes.
0:07:33 Donde había una columna,
0:07:35 seguramente se encargaba alguna cerca para estar más cerca de Dios.
0:07:42 En general, los tenía por locos, a los espíritas.
0:07:46 Casi todos ellos se subían a columnas, como se ha dicho,
0:07:51 ahí está el caso de Alico o Luco de Espeso.
0:07:55 Alico estuvo 33 años, ahí hubo una columna.
0:07:58 Y Luco de Espeso,
0:07:59 eso es aquel lugar donde el Templo de Diana, el Templo de Árcelis,
0:08:03 y Luco estuvo 50 años, en Andrécora.
0:08:07 Existieron también por otras setas extravagantes,
0:08:10 por no subirse una columna,
0:08:13 por ejemplo, al no encontrar columnas, no hay columnas en todas partes.
0:08:16 En cambio, hay árboles en todas partes,
0:08:18 entonces se subían a un árbol.
0:08:21 Una crónica sila del monasterio de San Marón cerca de Fanea,
0:08:25 reescribe la vida de San Marciano,
0:08:29 el Santo de Dios de hoy, San Marciano.
0:08:32 Es santo que se subieron sin presa.
0:08:36 A veces parece que se caía.
0:08:40 Pero, escúchate, como se caía estaba un cadenado al trónico.
0:08:44 Tenía una cadena para no irse al suelo,
0:08:46 entonces quedaba colgando.
0:08:48 Él decía que el diablo lo empujaba,
0:08:50 quedaba ahí colgando,
0:08:51 entonces se venían obesiles,
0:08:53 lo volvían a poner en sus sitios.
0:08:57 Otros llamados anesfren,
0:08:59 que es el padre de la iglesia siria,
0:09:01 hablaban los llamados Ramoneadores,
0:09:04 que nos hacían votos de no ser más exigentes
0:09:07 que las restias salvajes.
0:09:09 Entonces, rechazaban todo alimento producido
0:09:12 por la mano del hombre,
0:09:14 vivían desnudos en los bosques,
0:09:17 andaban en cuatro patas,
0:09:19 comían como los animales y usaban las manos,
0:09:21 y ahí su nombre, ¿no?
0:09:23 Y los Ramoneadores.
0:09:25 Aparecían con ellos algunas mujeres
0:09:27 que se los acompañaban en la austeridad,
0:09:31 vivían en las caberlas, en fe, es un mal.
0:09:35 Otra forma de asistismo era la del éxtasis,
0:09:38 no éxtasis con equis,
0:09:40 sino con eso, de griego estasis.
0:09:43 Esta forma consistía en guardar durante días enteros
0:09:46 de una inmobiliar absoluta, estatuaria,
0:09:50 de pie o de rodillas o en alguna otra actitud,
0:09:54 muchas veces absurda, ¿no?
0:09:56 Algunos permanecieron en cien agas llenas de moquitos,
0:09:59 ahí firme justamente como estas.
0:10:04 Esta actitud era practicada también en otro tiempo
0:10:07 por los intubes.
0:10:08 Cuando llegaron los misioneros cristianos a la India,
0:10:11 se perturbaron mucho,
0:10:13 porque a veces iban a convertir a una persona
0:10:18 y se encontraron con gente a la que no le podía sacar
0:10:21 ni una palabra, estaban ahí estáticos.
0:10:25 Hay que decir que los aceptas de la India
0:10:27 llegaron a procurarse castigos tremendos.
0:10:31 Según la crónica, los penitentes
0:10:33 se oían coigarse cabeza abajo
0:10:35 o pedir que los coigaran, en realidad.
0:10:38 Y coigarse uno mismo cabeza abajo es un poco difícil.
0:10:43 Y bueno, se tendían, también como ya sabemos,
0:10:47 en lechos de aceradas cubas,
0:10:49 las famosas camas de clave.
0:10:52 Pasaban semanas enteras en el uno absoluto,
0:10:55 no enterrados vivos durante todo un mes.
0:10:59 Estos eran los partidos.
0:11:01 Otros llevaban unos complicados aparatos
0:11:03 destinados a impedir que se cae el dolor
0:11:05 o que procuraban un gesto continuo en sufrimiento.
0:11:09 Ahí lo tiene a San Eusebio, no ya en la India,
0:11:13 sino en el dimensionado Monasterio de Peleda,
0:11:19 del cual era un valor san Eusebio.
0:11:21 Bueno, Eusebio se va a encollar los inforones de hierro
0:11:24 unidos entre sí por una cadena,
0:11:26 pero en una cadena corta,
0:11:28 que lo obligaba a mantener el cogote cerca de la cintura,
0:11:31 así que andaba siempre en cordón.
0:11:34 San Eusebio murió con el aparato pueste,
0:11:37 culpa de la presión.
0:11:39 Después de haberlo soportado durante 40 años,
0:11:44 según Tío Loreto,
0:11:46 si señor Aseguida,
0:11:47 ¿no existen?
0:11:48 No existen, ya va.
0:11:50 Según Tío Loreto,
0:11:51 justamente propiciaba esta clase de uso de cadenas
0:11:56 que obligaban a agacharse,
0:12:01 desde que se puso el aparato,
0:12:03 San Eusebio nunca más volvió a ver el sol en las estrellas,
0:12:08 porque estaba como el catobleta,
0:12:10 con la cabeza en quien había mirado al suelo.
0:12:14 Otros aspectos procuraron vivir en casas
0:12:17 en las que era imposible la entrada de luz,
0:12:20 incluso la entrada de cualquier persona.
0:12:22 San Aseximo pidió que le construyeran una casa totalmente sellada,
0:12:27 y él permaneció adentro,
0:12:29 que es el lugar,
0:12:30 que se hiciera la gracia.
0:12:34 Le dejaron, disculpe, un agujero en el techo,
0:12:37 que ni siquiera estaba construido en línea recta
0:12:39 para que no entrara el sol.
0:12:40 Bueno, era oblicuo,
0:12:41 y eso también es oblicuo a veces.
0:12:43 Y en su caso, si usted hace un agujero en línea recta,
0:12:45 solo conseguirá que le entre una vez al ala.
0:12:50 Si tiene suerte,
0:12:51 en algún lugar dentro de la zona entre los trópicos.
0:13:01 Este agujero servía también para que le bajaran una vez por semana
0:13:05 lentejas crudas remojadas en agua.
0:13:08 A él le gustaba.
0:13:12 Otro, San Salamán,
0:13:13 se dice cómo le va, si ya se lo ve.
0:13:17 San Salamán,
0:13:19 sí, ya sé que está purado,
0:13:21 pero es hermano de las mujeres.
0:13:23 San Salamán no salía nunca, por ejemplo,
0:13:26 porque era ahorita,
0:13:29 y se encerró en una casita a orillas de leufora test,
0:13:33 tapió las puertas y las ventanas,
0:13:36 y parece que recibía alimentos para un año,
0:13:39 a través de un túnel construido bajo el tierra.
0:13:43 El último aceto de esta noche, San Marón de Silu,
0:13:46 que murió en 433,
0:13:49 fijó su domicilio en un árbol hueco,
0:13:52 cubierto de espinas en su interior,
0:13:55 y amontonó piedras sobre sí.
0:13:57 Así pasó los últimos 11 años de su vida,
0:13:59 así es que le pones la marvida a todo hombre.
0:14:04 Esa es la lista que tenemos hoy.
0:14:07 Eres luego el hombre contemporáneo,
0:14:14 el hombre que diseña el pago de cualquier precio,
0:14:17 el hombre acostumbrado a solicitar rápidas heritazas
0:14:22 y pagar por ellas.
0:14:24 Pero la criatura vulgar que ya se hablaba a Ortega,
0:14:28 no entiende, no entiende a los asesinos.
0:14:41 Quiere ser un hombre que
0:14:44 quiere hacerse mal y con dos años,
0:14:47 que está influido por una sociedad
0:14:51 que le ofrece la siguiente estructura.
0:14:57 Trate de conseguir más, cada vez menos,
0:15:01 y que uno no ve que quiere acercarse a Dios
0:15:05 permaneciendo 50 años arriba de una columna,
0:15:08 que pareció demasiado.
0:15:12 Algunos dicen, yo entiendo la persona que hizo homenaje a privaciones
0:15:15 para obtener después algo mejor.
0:15:18 Si yo me privó, se saliera paseado,
0:15:21 era el bailongo para escribir un libro,
0:15:25 para recibirme de médicos.
0:15:27 Pero después cosecharé el fruto de esfuerzo.
0:15:30 Mi vida será mejor después de recibirme lo que sea.
0:15:35 Pero el asierta también está haciendo eso.
0:15:39 Él está pagando el precio de algo que él cree que es mejor.
0:15:45 Él cree que se acerca a Dios y cree que eso merece el precio que él está pagando.
0:15:50 Se puede objetar, si es su creencia,
0:15:55 en esta soltidad de ser algo que nombrá, no sé qué sé.
0:16:02 Igual, desde luego, no sé, no sé,
0:16:06 no sé, me acuerdo de ese pasetismo,
0:16:09 pero no es tan sencillo, no sé.
0:16:13 Por lo general, Alejandro III ha sido los caninos
0:16:18 por los cuales la gente quería acercarse a Dios,
0:16:22 pensando en este tipo de temas exactamente.
0:16:25 Uno, como los asietas a través del sufrimiento del cuerpo,
0:16:29 la mostiorizando el cuerpo y los sentidos,
0:16:33 otro como los monjes,
0:16:35 listando las emociones y pasando muchas horas y horas en retiro
0:16:39 y en el control del encuentro espiritual
0:16:42 y otros a través de la inteligencia,
0:16:44 o sea, priorizando el pensamiento.
0:16:48 Sí, sí, digo, discúmenos.
0:16:50 Si, no sé,
0:16:52 y solamente en esto me dudo un poco al pensamiento de Burdíez,
0:16:56 decía que a lo mejor la verdadera elevación
0:16:59 tenía que ver con poder trabajar salamente cada uno de esos tres elementos.
0:17:03 El cuerpo, el espíritu y el pensamiento,
0:17:06 para ver si en armonía pudiera uno acercarse
0:17:09 y hacer un poco más la idea de lo que Dios fuera.
0:17:12 Hay otro pensamiento que empieza parecido a eso, la idea.
0:17:18 Y que es que...
0:17:22 la idea es buscar no un acercamiento a Dios,
0:17:24 dicho así, con cierto sentimiento.
0:17:27 Sí, lo digo.
0:17:29 Si no buscar, un estado superior de conciencia.
0:17:32 Esa es otra cosa.
0:17:34 Y ahí a lo mejor nos damos cuenta
0:17:38 de que una privación,
0:17:40 que es el tipo que está pasando hambre,
0:17:43 en una de esas empiezas,
0:17:45 con una serie de presesiones
0:17:50 que de otro modo no tendrían.
0:17:53 Es un camino lateral, pero...
0:17:56 Haxley dice nada esto.
0:17:59 Y Haxley mismo experimentó,
0:18:01 incluso experimentó con drogas, porque pensaba
0:18:03 que en una de esas drogas
0:18:06 ya habría el camino,
0:18:08 de un estado de conciencia,
0:18:10 que normalmente lo tenían.
0:18:12 Y él mismo señala, se la acepta,
0:18:14 lo que busca es alterar
0:18:16 su casi estabilidad,
0:18:18 su química, si no quieran verla.
0:18:22 Es una demacía que llace la palabra.
0:18:27 Alterar su estabilidad.
0:18:33 Para ver qué pasa.
0:18:35 Es un poco brutal de hacer
0:18:38 un estado de conciencia.
0:18:40 Otros han buscado, incluso,
0:18:43 el procedimiento orgiástico
0:18:47 para llegar a otro estado de conciencia.
0:18:50 Porque han pensado
0:18:52 que el desemprendo sexual
0:18:55 puede conducir a otro...
0:18:59 a un escalón distinto.
0:19:02 Yo creo que esto sucede.
0:19:05 Creo que los encuentros sexuales
0:19:08 más exitosos
0:19:10 consisten justamente en eso.
0:19:12 En atravesar un umbral
0:19:14 y entrar en un estado de conciencia
0:19:16 que es distinto,
0:19:18 hay que atraerlo cuando estamos en la piscina.
0:19:25 no están descabrillados
0:19:27 pensar que está 50 años
0:19:30 de una columna, una vez más cerca de Dios,
0:19:33 que está mirando televisión.
0:19:36 Y entiendo así que estar cerca de Dios
0:19:39 puede ser, si usted no cree,
0:19:41 entrar como que me queda demasiadas veces
0:19:44 en un estado tan en que los pensamientos vengan
0:19:48 y barajados de otra manera.
0:19:50 Y hay una situación, Alejandro,
0:19:53 que es bastante cotidiana en la conciencia
0:19:56 y que es la relación de uno con el amor,
0:19:59 que tiene la facultad de producir
0:20:02 estados de conciencia diferentes
0:20:05 en su plenitud y también en su final.
0:20:08 Porque también aquel que se ha elevado
0:20:11 a partir de ciertos sentimientos sexuales
0:20:14 y de motivos con alguien,
0:20:16 el dolor y las llagas internas de esa familia
0:20:19 también produce un estado de conciencia
0:20:22 muy diferente, no ordinario.
0:20:25 A veces, a esos estados de conciencia
0:20:28 y en ese sentido funciona la musa.
0:20:31 En ese sentido funciona la musa,
0:20:33 abriendo un escado tal de sensibilidad,
0:20:39 de refinamiento de los sentidos,
0:20:43 que no hubiera sido posible
0:20:46 sin la influencia de alguien, sin la presencia de alguien.
0:20:49 En ese sentido alguien puede ser musa.
0:20:56 Hemos elegido para hablar
0:20:59 de esta charla,
0:21:02 de esta moda conciencia que hemos tenido
0:21:05 sobre las acetas.
0:21:08 Es un tal bello.
0:21:10 Pocas veces ponemos porque su título
0:21:13 no ha sido para brimar.
0:21:17 Se llama desde uno de los talos menos conocidos
0:21:21 y más extraños de Carlos Ardell.
0:21:25 Desde luego el delenque los aceitas
0:21:29 sentían por lo menos.
0:21:33 Escucharemos a Carlos Ardell, el soltor,
0:21:36 en esta versión de 1933.
0:21:39 El talgo ha sido compuesto seguramente
0:21:41 pensando los aceitas,
0:21:43 pero se disimula y se disimula con más de lo mismo,
0:21:46 porque la letra es ampliamente metafísica.
0:21:50 Está esa pensando en la existencia acabada
0:21:54 de un paraíso y de un ordenamiento burocrático
0:21:58 en ese talo sin el.
0:22:00 ¡Parelante, Gustavo!
0:22:02 El día que compres la acción a verión,
0:22:06 a dar cuenta de mi vida que me convida a ser otro.
0:22:10 El día que jale también te venga de despegar,
0:22:14 a ver la pura espada y a Dios no puede jamás.
0:22:20 Y el día que pasa,
0:22:23 la acción se va a dar a ver
0:22:26 y a Dios no puede jamás.
0:22:30 Y le digas que paletado va su ley
0:22:33 que va a hacer al hacerse con discurso,
0:22:36 al amarse más que a él.
0:22:40 Verlo de por su corío,
0:22:44 que más de ciego de amor
0:22:48 pueda hacer que Dios sea otro
0:22:50 que la verdadera su suelo.
0:22:54 La sueña de mi venceda
0:22:58 es la abuela de su amor.
0:23:02 Esperando lo que fuera,
0:23:05 de quien te disquiera que si juega en mi dolor.
0:23:10 Y, sin embargo, el eterno
0:23:14 era el mismo mi venced.
0:23:18 Y él me amaba de su cisierno
0:23:20 por seguir con su cisierno
0:23:22 y todo el que era el venced.
0:23:26 Pero el día de tu juicio
0:23:29 no nos creería
0:23:31 cuando se conquías de cargo
0:23:33 por la fertilidad
0:23:35 cuando sientas la mirada penetral.
0:23:38 Pero el Señor,
0:23:39 que se llegara a ser alma
0:23:41 como un rayo de su amor.
0:23:45 Y se acuse tu conviercia
0:23:47 al tirar a que es genial
0:23:49 que vos mismo está a incomarles
0:23:51 y entregas a mi rival.
0:23:54 Y tú no podes ser esta con él,
0:23:58 que me mandaste a la prisión
0:24:01 no por más que vos seas mi venceda
0:24:04 que no por la venceda.
0:24:08 De quien vi la venceda
0:24:12 es la abuela de su amor.
0:24:16 Esperando lo que fuera,
0:24:19 de quien te disquiera
0:24:21 en mi pelo y mi doble.
0:24:24 Y de embargo, al eterno
0:24:28 que veré mi ponida de venced
0:24:32 y el mi amor, su cisierno
0:24:34 por seguir con su cisierno
0:24:37 por dos dos porciones
0:24:40 vos el venced.
0:24:46 Ha cantado Carlos Garvel
0:24:49 de ven Carlos Garvel dice.