Transcripción automática
0:00:00 Bueno, aprovechando que hay muchos niños esta noche de la sala, vamos a hablar de
0:00:05 baccanales y orgías en la República Romana.
0:00:12 Uno de los barrios de la ciudad de Roma, en la época de la República, el Aventino,
0:00:17 el Aventino, hay un equipo de fútbol ahí también, era un lugar extraño en aquellos días.
0:00:24 Se ubicó en una colina al sur de Roma y vivían así, en tiempos de la República,
0:00:29 toda clase de personas ajenas a la política, actores, poetas, extranjeros, prostitutas, etc.
0:00:40 En el siglo III, en ese barrio, III a.C., el templo E. Minerva que estaba situado en la
0:00:48 cima de la colina, era la sede del colegio de los escribas y de los instriones. También estaban
0:00:55 así los archivos, el archivo del gobierno, se ponen. Había en ese barrio una gran solidaridad
0:01:01 entre los artistas, como siempre la hay, no parece que se adulaba mutuamente, qué tal, qué linda obra,
0:01:07 qué estrenaste hoy, hay, etc. Cada vez que llegaba un habitante en un nuevo vecino,
0:01:15 él lo recibió por los más encumbrados y sus capacidades artísticas eran recomendadas
0:01:23 a los sediles para que la tuvieran en cuenta, comprando cuadros, empleando actores, etc.
0:01:32 Más allá de estos asuntos, era ventino, era una comunidad cerrada, a la cual los gobernantes temían.
0:01:40 Cuenta grimal que los gobernantes vivían en la angustia de quien espera una conspiración.
0:01:46 Miraban con recebo ese barrio. Temían que sucedieran así cosas que escaparan a cualquier vigilancia.
0:01:58 Temían a las asambleas nocturnas que pudieran deshacer, desconocer todo lo que se decidía
0:02:06 en forma adurna en el foro, que era el barrio de los macarugos, de las decisiones políticas.
0:02:14 Para los funcionarios, el aventino era una ciudad donde se reemplazaba el esfuerzo por el placer,
0:02:22 la virtud por el vicio y era un barrio inaccesible a la mirada de las instituciones.
0:02:29 Pero algo vino a cambiar las cosas.
0:02:33 Hay un suceso llamado escándalos de las vacanales que terminó con un decreto estatal en el año 186 a.C.
0:02:42 Este decreto prohibió celebrar en Roma los misterios de Baco, que era una ceremonia destinada a halagar a este Dios anualmente.
0:02:52 Un griego proveniente de Truria, de la Inmezl, y que se decía sacerdote, había fundado en el barrio de la aventino una secta
0:03:03 que se decía de iniciados que celebraban el culto de Baco.
0:03:08 Baco era la versión romana de Dioniso, Dios de vino, de fervor erótico, etc.
0:03:18 Una música de tambores y símbolos acompañaba a los ritos de estas personas.
0:03:25 Al principio, sólo las mujeres podían ser sacerdotizas y tres veces al año celebraban sus ritos en un lugar apartado,
0:03:35 en un bosque sagrado, lejos de los caminos.
0:03:41 Pero la secta sufrió cambios, a pedido de una dama de capua se admitió a los hombres jóvenes en el sacerdoso.
0:03:48 Las reuniones de tres por año pasaron a ser cinco por mes y empezaron a celebrarse por la noche.
0:03:58 Hacían banquetes orgiáticos y pronto el desenfreno sexual fue Mayús Cullón
0:04:06 y era impuesto por obligación a los concurrentes, so pena de muerte, desenfrenarte o te matamos.
0:04:16 Dice desenfrenado, además.
0:04:18 Sí, dicen las crónicas.
0:04:25 Las hombres como poseídos profetizaban mientras las damas corriían las nudas hacia el tíber.
0:04:34 Algunas personas de la concurrencia desaparecían de pronto, levantadas por un sistema de máquinas y casagañotes
0:04:42 y se las decía raptadas por los dioses.
0:04:45 Eran los que se negaban a prestar juramento, a entrar en conjura, a ayudar en los crímeres o a dejarse violar.
0:04:55 Esta secta pronto se convirtió en instrumento de poder.
0:05:01 Además de divertirse, asesinaban a los rivales o a los parientes de quienes podían heredar, falsificaban testamentos, etc.
0:05:12 Pero una de estas intrigas terminó con la secta.
0:05:16 En cierto ocasión, un habitante del aventino, el joven Pulio Erucio, había perdido a su padre y su madre.
0:05:25 Se había casado nuevamente...
0:05:37 Con un tal tito sempronio, no puede ser.
0:05:40 Y tanta vacanal.
0:05:42 Tanta vacanal, yo.
0:05:44 No, no, no, está bien. No, no había perdido a su padre ese mal.
0:05:48 Un joven llamado Pulio Erucio había perdido a su padre y su madre.
0:05:57 Se había casado nuevamente con un tal tito sempronio, lociamo punto armado.
0:06:04 Como Pulio era menor, su padrastro era tutor de sus bienes, hasta que el muchacho tomara la toga viril.
0:06:15 Sus bienes eran muchos, ciertamente.
0:06:18 Tito, el chico, tuvo miedo de...
0:06:21 Mejor dicho, el tito era el marido de la madre.
0:06:24 Tuvo miedo de quedar en la ruina cuando Pulio fuera mayor.
0:06:27 Y entonces decidió hacerlo matar para quedarse con todo.
0:06:32 Hay un pibe, Pulio Erucio, se muere su padre.
0:06:40 La madre se casa con un neato.
0:06:42 Y como él era menor, este neato administra los bienes.
0:06:47 Pero como va creciendo el pibe, el neato nuevo dice...
0:06:52 En cuanto este cumpla a los 18 años, se va a acercar a toda la fortuna y a Dios mi plata.
0:06:57 Me podría poner un resultado anergo, el ato.
0:07:00 Un resultado, resulta que...
0:07:05 Bueno, el padrastro decide hacer matar a Choc para quedarse con todo.
0:07:13 Y decidió iniciarlo en los misterios de las vacanales,
0:07:16 esperando que el muchacho resultara muerto, porque en medio del desenfreno aprovechaban para cometer crímenes.
0:07:25 Y la madre estuvo de acuerdo.
0:07:27 Mirá vos y será la vieja.
0:07:30 Bueno, entonces la madre le dijo al hijo que había prometido a los dioses iniciarlo en el culto de Baco.
0:07:39 Y el pibe, Pulio, no sospechó nada y aceptó.
0:07:43 Su madre le advirtió que para iniciarse,
0:07:46 debía observar por 10 días una continencia sexual absoluta.
0:07:51 Debía también purificarse en el agua para luego ser llevado a santuario.
0:07:56 Así que debía prepararse bien y lavarse un poco.
0:08:00 Pero algo interrumpió el plan.
0:08:02 El pibe, Pulio, se enamoró de su vecina, una prostituta llamada Hispala.
0:08:08 Ella también se enamoró de la chica.
0:08:11 Era sevillana, esclava en su juventud y una vez liberada se había establecido en el aventino.
0:08:18 Hispala había participado de las vacanales y estaba al tanto de lo que allí sucedía, incluso de los crímenes.
0:08:25 Una tarde, Pulio fue a visitarla y ella quiso amarlo en ese momento.
0:08:30 Pero él le contestó que no podía porque iba a enrollarse en el culto y estaba en un período de abstinencia.
0:08:36 Hispana desesperó, comprendió que las intenciones del padrastro eran terribles.
0:08:43 Llorando hizo prometer a Pulio que no iría a la iniciación y Pulio, enamorado, aceptó.
0:08:50 Cuando volvió a su casa, le dijo al padrastro que no se iniciaría y el padrastro lo atascó ahí mismo.
0:08:56 Pulio eludió los golpes, se haría corriendo, se refugió en casa de una tía.
0:09:01 Hispala se constituyó en casa de la tía y allí le contó a ambos lo que sucedía en las vacanales
0:09:08 y lo que sospechaba del padrastro Tito Centroño. Decidieron contar todo al Cónsul, el Cónsul Postuño.
0:09:15 Postuño fue a casa de la tía, empezó la investigación, le preguntó a Hispala sobre lo que pasaba en las vacanales,
0:09:23 la mina contó todo, las sorgías, los crímenes, tal y la porquería.
0:09:30 Hispala y Pulio se ocultaron por un tiempo mientras las autoridades destruían la secta
0:09:37 y decretaban, que ahí viene lo malo, la prohibición de las sorgías. El padrastro fue de penminido.
0:09:45 Por uno la ligamos todos.
0:09:47 Por uno la ligamos todos, fue lo que dijeron los tipos de lorgias, que ya estaban en Calzoncillo.
0:09:52 Ahí, en el rincón oscuro, en ese especie de baldío en donde hacían lorgias, viene de acá.
0:09:59 Es bien, bien, bien, por uno.
0:10:02 Lo que dijo el señor.
0:10:04 La ligamos todos.
0:10:07 Estos muchachos, Pulio y la prostituta enamorada, Hispala fueron recompensados.
0:10:13 A ellas se le otorgó el derecho de casarse, cual carecía en las prostitutas.
0:10:17 Y se casó con Pulio, naturalmente.
0:10:20 Bueno, sería que hubieran otorgado el derecho de casarse y hubieran casado con otro.
0:10:24 Cómo se enerse.
0:10:26 Y él resultó inscripto entre los ciudadanos que estaban exentos de cumplir con las obligaciones militares,
0:10:35 lo cual no era poco, porque el servicio militar de Roma era muy estricto, muy rígido,
0:10:42 y los muchachos sometidos a él envejecían prematuramente.
0:10:46 Se salvo de la colima, el entorno.
0:10:48 Se salvo de la colima, pero una colima que duraba hasta los 60 años.
0:10:51 Pior que Marina.
0:10:53 Pior que Marina, que acá eran dos años y nos quejábamos.
0:10:57 60 años.
0:10:58 En Atena será peor todavía.
0:11:00 ¿Sabes cuánto duraba el servicio militar?
0:11:03 Toda la vida.
0:11:06 Bueno, una vez suprimidas las vacanales, Pulio y Hispala se mudaron de aquel barrio, el Aventino, para siempre.
0:11:14 No dice aquí la crónica.
0:11:17 ¿Qué pasó con la gente que asistía a aquellas vacanales, aquellas orgías, en aquel barrio,
0:11:28 en aquel lugar oscuro a brillas del té?
0:11:31 No lo dice.
0:11:33 Pero una mala lo dice.
0:11:36 Fuimos a la discoteca, le contamos esta historia al discotecario,
0:11:42 que contaba varias veces especialmente la parte de las orgías y las minas que hacían, que se llevaban.
0:11:49 A él le gustan esos detalles.
0:11:51 Añora las vacanales.
0:11:54 Yo tradiceno conóxios, algunas por acá.
0:11:57 Alguno maldío.
0:12:00 Y hablando de Valdío, me dio un disco que es viejo Valdío, un tango muy lindo de Roberto Grela,
0:12:07 que fue compuesto evidentemente pensando en este rincón orciástico del Aventino.
0:12:14 Vamos a escuchar la versión del mundo rivero con el estupendo acompañamiento del autor del tango,
0:12:22 Roberto Grela y su conjunto de guitarras.
0:12:24 Viejo Valdío.
0:12:37 Valdío de Barrio.
0:12:42 Un cacho de vida.
0:12:46 Perdido a los lejos.
0:12:48 Asane a Raval.
0:12:51 Bordiado de casa, sumilde y vieja.
0:12:55 Esquira laguna y aquel saucedal.
0:12:59 Valdío de Barrio.
0:13:03 Recuerdo de infancia, curretes traviesos soñando bonar.
0:13:10 Mi juego hacía antaño, mis sueños lejanos.
0:13:15 Camino del tiempo, que casi andarán.
0:13:22 Recuerdo de aquel barrio que rivetió la luna.
0:13:30 Vestigo nascarado, vestido del fangar.
0:13:37 Y el viejo parolito, con su luta anochada.
0:13:43 Vente mezclor romances, de cenas hiperescar, como esa carecita.
0:13:52 Eres gran abatáculo.
0:13:56 Mi suerte fue sorpica que siempre se negó.
0:14:02 Viene rodar fulero, por tras de la vida.
0:14:08 Hoy traigo de regreso, casus al corazón.
0:14:18 Valdío de Barrio, me llueven los ojos.
0:14:23 El alma vacía se aprieta en dolor.
0:14:27 Envuelten el humo de las horas viejas,
0:14:31 que traen el encanto de la vocación.
0:14:36 Valdío de Barrio, amigos primeros,
0:14:42 que rumbo la vida nos quiso marcar.
0:14:47 Se pierden los gritos la cara borrosa,
0:14:52 que sólo me encuentre, que extraño que está.
0:15:00 Recuerdo de aquel barrio que rivetió la luna.
0:15:09 Vestigo nascarado, vestido del fangar.
0:15:15 Viene viejo, barrio, con su luz trasnochada.
0:15:22 Vente mezclor romances, de cenas hiperescar, como esa carecita.
0:15:30 Eres gran abatáculo.
0:15:34 Mi suerte fue sorpica que siempre se negó.
0:15:40 Vení, vení, vení, vení, vení, vení, vení, vení, vení, vení, vení, ven spunero.
0:15:45 Por el caso de la vida hoy traigo de regreso,
0:15:50 casus al corazón.
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