Transcripción automática
0:00:00 Hablaremos de Catalina la Grande y su amante Sergei Saltikov.
0:00:06 Atención, los que gustan de las historias picantes.
0:00:11 Así que, vamos a Rusia.
0:00:13 La esperatriz de Rusia, ya por el año 1750, era Isabel y no tenía hijos.
0:00:20 Había dado a ella misma una especie de golpe de estado, sabiendo que no tenía resendencia.
0:00:26 Había dispuesto que el trono lo heredara el Duque Pedro, que era un sobrino de ella.
0:00:31 Efectivamente iba a ser Pedro III.
0:00:34 A Pedrito III lo habían casado con Catalina, una princesa alemana, que después iba a ser Catalina la Grande.
0:00:42 Isabel quería que esa unión diera frutos de los mentes para que no le pasara lo mismo que a ella.
0:00:48 Así que la línea dinástica se perpetuara.
0:00:54 Catalina permanecía virgen y el Duque Pedro no parecía tener intenciones de amarla.
0:01:03 Había tres motivos por falta de uno.
0:01:06 Tenía un problema físico, el amigo Pedro.
0:01:12 Además estaba loco.
0:01:16 Y por cierto que era poco, su esposa no le gustaba.
0:01:21 Así que Catalina, que la pasaba en los salones de lectura, neta leer, no parecía preocuparse demasiado,
0:01:30 aunque tenía miedo de que la encerraran en una masmorra sin la situación persistida.
0:01:35 Ya sabe cómo era el dañe, esta gente.
0:01:40 La empelatriz Isabel estaba un poco preocupada.
0:01:43 Contábamos hace un tiempo que lo primero que pensó fue que el Duque Pedro era un ser extraordinariamente sucio.
0:01:50 Recuerda, le habían dicho que Pedro no tenía interés en el comercio sexual porque era muy sucio, no se bañaban los ajos.
0:01:58 Entonces le hicieron bañar de preco.
0:02:01 Pero no dio resultado.
0:02:06 Después la empelatriz supo el problema físico de Pedro,
0:02:12 pero no había sido informada acerca de que existía una operación muy simple que podía solucionar el asunto.
0:02:18 Entonces para que Catalina quedara de algún modo embarazada, la empelatriz comenzó a conseguir diamantes
0:02:26 para luego hacer creer que ese embarazo era el producto de la unión del pobre Pedro con su esposa.
0:02:33 Dijimos alguna vez que el primero de los amantes que se consiguieron se llamaba Sergei Sáltikov,
0:02:38 pero nunca contamos en detalle qué es lo que pasó con aquel romance, digamos lo así.
0:02:45 Sergei Sáltikov era un hombre apuesto, hijo de un distinguido general, la empelatriz Isabel,
0:02:54 y él hizo para entregarselo a Catalina porque primero lo había probado a Oréga.
0:03:01 Y dice la crónica, ¿no?
0:03:04 Habiendo corrado que su rendimiento era satisfactorio, la empelatriz pensó que bajo sus expertos servicios
0:03:12 Catalina daría un heredero a la dinastía romanos.
0:03:19 Dicen que Sáltikov era un mujer hielo notorio.
0:03:24 Se consideraba irresistible y en la mayoría de los casos lo era.
0:03:29 Había ganado una reputación por sus técnicas amatorias, aunque algunas damas lo consideraban
0:03:36 exagerado en su sofisticación y lo rechazaban por afectado.
0:03:42 Sáltikov estaba casado, pero eso no perturbó a la empelatriz Isabel en su elección.
0:03:50 Todos sabían que Sergei Sáltikov aceptaría la tarea sin problemas.
0:03:57 Y efectivamente, Sáltikov agarró viaje.
0:04:00 Isabel le encargó a una pareja noble, María y Nicolay Shoblokov, la misión aparentemente
0:04:10 delicada de juntar a Sergei con Catalina.
0:04:14 Este matrimonio María y Nicolay Shoblokov tenía que hacer alguna cosa social.
0:04:22 Y este matrimonio aceptó con entusiasmo.
0:04:27 En realidad, el tipo Nicolay Shoblokov aceptó la encargo porque él mismo tenía ganas de
0:04:33 convertirse en amante de Catalina.
0:04:36 Y había conjeturado que en caso de que Sergei resultaba ser un fracaso, él estaba totalmente
0:04:42 dispuesto a cuarres suplentes de suplentes.
0:04:45 Pero no hubo tiempo para eso.
0:04:47 Los Shoblokov iniciaron sus trabajos en 1751.
0:04:52 Casi a diario invitaban a Catalina a reuniones cortesanas en donde mayormente cantaban y jugaban
0:05:00 a los dados.
0:05:02 Esas invitaciones eran recibidas por Catalina, en verdad porque no toleraba estar con su esposo.
0:05:10 Parece que Pedro le imponía su presencia y en esos casos tenía la costumbre de pasarse
0:05:19 frente a Catalina, parlocheando sobre temas de mucho interés para él pero de ninguno
0:05:24 para él.
0:05:25 Y le obligaba a escucharlo durante horas.
0:05:29 Dice Catalina en sus memorias.
0:05:31 Cuando por fin se marchaba, hasta el libro más aburrido era para mí un entretenimiento
0:05:35 encantador.
0:05:36 Es decir, el tipo la tenía podrida.
0:05:39 Entonces Catalina aceptaba aquellas invitaciones a cantar, a beber y a jugar a los dados.
0:05:44 Y en esas reuniones armadas por los Shoblokov estaba entre unos cuantos Sergei Saltikov
0:05:52 que comenzó la solución de Catalina.
0:05:56 Un día, a que el grupo que se reunía en casa de los Shoblokov salió a casar.
0:06:02 Viajaron a una isla del Delta del Neva en donde pasaron toda la jornada.
0:06:08 A la noche se nargó una tormenta, mientras se naban, se daban lo que habían casado
0:06:14 en realidad.
0:06:15 Y la isla se inundó.
0:06:18 Entonces se hicieron como las 3 de la mañana antes que apareciera una barca que pudiera
0:06:23 trasladarnos, etc.
0:06:25 Y esa noche, en poco apartados de todos, Sergei y Catalina se amaron por no decir otra cosa.
0:06:36 Y Catalina se enamoró de Sergei Saltikov.
0:06:39 De regreso a la ciudad, la buscaban formas secretas encontrarse, cuentan que salían a
0:06:45 caballo del palacio cada uno por su lado para no dar mala atención y se encontraban en
0:06:50 los bosques ahí.
0:06:51 Shoblokov y la emperatriz Isabel festecaban este primer paso.
0:06:56 Ahora faltaba que Catalina quedara embarazada.
0:06:59 Sergei cumplió con este deber en forma competente y Catalina quedó embarazada.
0:07:04 La primera vez en diciembre de 1752, pero es el parto fracaso y después en junio de
0:07:11 1753 y también.
0:07:14 Algunos dicen que tal vez Sergei era civilítico y esa podía ser la causa de los embarazos
0:07:21 truco.
0:07:22 Si a cual fuera la razón, el plan concedido por la emperatriz Isabel para la asociación
0:07:28 imperial iba a terminarme.
0:07:34 Sin haber podido darle hijos y sin acostumbrarse a estar con una sola mujer, Sergei se cansó
0:07:40 y volvió a andar con todas las bienas que tenía.
0:07:43 No le importaba ir a Catalina, aunque tenía un poco de miedo por la emperatriz Isabel.
0:07:50 Entonces armó su retirada del siguiente modo.
0:07:55 Se presentó a Ensenay, peratriz Isabel, y le contó, le dijo, que el problema de Pedro,
0:08:03 el jefe de Catalina, podía solucionarse con una operación bien sencilla que él podía
0:08:09 hacer.
0:08:10 Bueno, ese es el momento.
0:08:14 Dice modo, si Pedro se recuperaba ya, no iba a ser necesaria su presencia junto a Catalina.
0:08:21 Y la emperatriz Isabel aceptó que Sergei planeara la operación.
0:08:26 Y se hizo una operación poco menos que engañando.
0:08:35 Esta noche lo invitaron a cenar a Pedro, algunos cortesanos.
0:08:39 Estaba Sergei, Santicó, coló ahí, y empezaron a escabiar y se emborracharon todo.
0:08:48 Entonces estaban remamados, empezaron una conversación que consistía en hactancias
0:08:58 acerca de conquista.
0:09:00 Todo eso, eso es una reunión agominal, me viene a decir.
0:09:06 ¿Y todos contados?
0:09:07 Sí, ¿para qué?
0:09:08 Yo, qué sé.
0:09:09 Menos Pedro, que estaba en silencio, estaba un poco molesto, un poco triste.
0:09:14 Entonces alguien me preguntó, ¿sí por qué está Santicé y Pedro le dijo, alá?
0:09:20 Ahora que estoy borracho se lo puedo decir.
0:09:24 La verdad es que tengo algunos problemas.
0:09:28 Entonces, aprovechó Santicó, y como me lo conozco un cirugano, en cinco minutos te arregles
0:09:39 Pues no lo he sido tanto.
0:09:42 Sí, sí, digo, Pedro, que eso es lo que he hecho.
0:09:45 Al principio no, no, no, no lo anunci almondar con un cirugano.
0:09:48 Pero me dijo, sí, bueno, está bien.
0:09:51 Entonces, cuando dijo, sí, bueno, está bien, Santicó dio una señal y salió un médico
0:09:58 que estaba escondido.
0:10:02 Era Abraham K. Boerjave, un holandés profesor de anatomía y fisiología en San Péterburgo.
0:10:09 Lo agarraron entre cuatro o cinco a Pedro, y la operación tuvo lugar.
0:10:14 Y fue chitosa.
0:10:16 Dolorosa, pero chitosa.
0:10:19 Un tiempo más tarde, Pedro hizo valer sus derechos conjugales.
0:10:25 Su esposa Catalina no tuvo más remedio que acceder a los embates de Pedro,
0:10:33 con total aversión, porque lo detestaba.
0:10:36 Y todo homóz tuvo éxito, hubo embarazo, y el futuro emperador Pablo I,
0:10:43 nació en septiembre de 1755.
0:10:46 Como la imperatriz Isabel ya no necesitaba Santicó, en la Corte,
0:10:51 lo mandó en misión diplomática donde Judas perdió el poncho.
0:10:58 Catalina ya no necesitó que le impusieran amantes para embarazarse,
0:11:05 pero empezó a buscarlos en la sola por puro placer.
0:11:09 Pero esa es otra historia.
0:11:13 Así que esta fue la historia con el Santicó.
0:11:18 La historia en realidad es la historia de una operación forzada.
0:11:24 Me emborracharon a Pedro, le llevaron a una reunión,
0:11:29 tenían un médico escondido y lo operaron ahí nomás.
0:11:33 Esto puede incluso ser edificante para algunos de nuestros oyentes,
0:11:38 que tenemos ganas de dejar una moralidad.
0:11:43 No ir a reuniones de amigos porque en una de ese uno uno vuelve a operar.
0:11:52 O revisar, a ver si no hay algún cirujano escondido.
0:11:56 Siempre hay un cirujano escondido.
0:11:57 Siempre, en todas partes hay un cirujano escondido.
0:12:00 Incluso debajo de esta misma mesa, ¿roló?
0:12:02 No me doy nada suerte.
0:12:04 Hay un cirujano.
0:12:05 Está del lado sucio, ¿roló?
0:12:07 ¿A quién quiere dedicar esto usted?
0:12:09 A Catalina.
0:12:10 A el cirujano.
0:12:11 Sí, a todos los cirujanos.
0:12:13 A todos los cirujanos que escutan este programa.
0:12:15 Oíste el día del cirujano.
0:12:16 Oíste el día del cirujano.
0:12:18 Oíste el día del cirujano.
0:12:19 Oíste el día, todos los días son el día del cirujano.
0:12:21 Todos los días no tenemos que esperar a que sea el día del cirujano
0:12:25 para homerajearlos, para llevarles una flor,
0:12:28 un presente, un paciente.
0:12:31 Un paciente.
0:12:32 Sí, se lo van a agradecer más que las flores.
0:12:35 Sí, todos los días son el día del cirujano.
0:12:38 Yo creo que después de la madre lo más importante del mundo
0:12:43 es el cirujano.
0:12:45 Más que la hermana de vosotros.
0:12:48 No, tanto carino tiene usted por favor.
0:12:51 No, ninguno, pero hoy estamos hablando de cirujanos.
0:12:54 Mañana agaremos de bomberos y diremos lo mismo.
0:12:57 Esto es la radio.
0:12:59 Oíste todo.
0:13:03 Es una sarta de lojes y alagos y le caen llena a cualquier.
0:13:10 Hemos sudo a la discoteca y le hemos contado esta historia
0:13:13 a la discoteca, y enseguida me dijo el tango esta noche me emborracho.
0:13:17 Es lo que habrá dicho Pedro antes de que lo operaran
0:13:21 porque si no, que de ahí esta noche me operaron.
0:13:26 Y también lo habrá dicho después de haber tenido éxito.
0:13:30 Sí, también lo habrá dicho.
0:13:31 Pero eso no es el tango que escribió el século.
0:13:34 Es el século.
0:13:36 Escucharemos la estupenda versión del século que tiene Hugo.
0:13:40 Así que adelante por favor con esta no se me emborracho
0:13:43 el tema escrito por Enrique Santo Dicecolo
0:13:45 pensando seguramente en Pedro III.
0:14:02 Ocas manes descangadas, la bienza madrugada alir mi cabare.
0:14:11 Las dos cuartas de cogo, segunas, alias del coque,
0:14:17 y bajo la novia, lluega la vestida de su bebé,
0:14:23 la ceñida y coqueteando, un obeluque.
0:14:29 Cuál es el hígado de un tromao,
0:14:32 ostento al cofadrón, el pueblo frico fiel,
0:14:37 y lo que se cuesta no cuanta, al ver la filtra que es barlón.
0:14:45 Y pensá que hace diez años,
0:14:52 fue mi locura,
0:14:56 que llegué hasta la fe y se ha oído por su hermosura.
0:15:05 Cuéltos que hoy es un cascado, fue la misma etubura
0:15:10 donde no perdieron oro.
0:15:14 Que si la oforco bebé salga y se va a la vida,
0:15:19 me interviste ya.
0:15:23 Que si una pido,
0:15:27 que vive, vive, va la fe.
0:15:31 Emezco poder ratirla sin por ales un mensivo,
0:15:37 cuando se cuene.
0:15:42 Nunca soñé que el dade iría a ver un requiezo
0:15:48 en el valle tan nuevo, volvelo.
0:15:52 Ella si no es pa' suiciderse,
0:15:55 que es por aquí que activarte,
0:15:58 es a lo que so'
0:16:00 y ella venga el salado al tiempo,
0:16:04 que ella se ve de cero,
0:16:06 es lo que lo hago.
0:16:09 Este cuenco no es lo planso mar,
0:16:12 que ha sido fiel,
0:16:14 lo más el mío esvelelado.
0:16:17 Y es a lo que me corre,
0:16:19 no tiene que me mando fiel,
0:16:23 mado por su persona.
0:16:33 Ha cantado Hugo del Carril,
0:16:35 de dice Polo,
0:16:37 que se anotan en Borracha.
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