Catálogo de objetos maravillosos

Transcripción automática

0:00:00 Señores, tengo un catálogo de objetos maravillosos, objetos maravillosos, ponerle ahí que se
0:00:07 llaman mates, pero vamos a ver cuáles. Y empezamos con algo nórdico también, el héroe de Irlanda,
0:00:17 Cuchulain, tenía una arma llamada Galadborg, una de las historias de Cuchulain, cuenta
0:00:24 todas las peripesias que tuvo que sortear para conseguir la mano de la hermosa Hémeth.
0:00:30 Parece que en el momento en que la conoció, los ojos del héroe descendieron y se detuvieron en el
0:00:38 escoote de la dama, y sus palabras brotaron incontenibles.
0:00:45 Mía será esa dulce y mágica llanura que conduce al valle de la doble esclavitud.
0:00:52 ¿Qué es lo que dice uno cuando observa una dama que escootea bismal, sino mía será esa dulce
0:01:02 y mágica llanura que conduce al valle de la doble esclavitud?
0:01:06 Y la muchacha respondió, nadie llega a esta llanura sin antes haber cumplido sus deberes.
0:01:14 Ante aquella palabra Cuchulain se preparó para la lucha.
0:01:18 La mano de Hémeth sería suya, solo si soportaba los peligros a los que lo sometía Godgrad y el padre de Hémeth,
0:01:27 que era un viejo sinvergüenza.
0:01:29 Para superar los Cuchulain debió obtener un arma, el arma más poderosa, la Galadborg.
0:01:37 Pero esa arma estaba en poder de Sataj, una mujer guerrera que vivía en la isla de las sombras
0:01:43 y enseñaba a los que lograban llegar hasta ella las artes de la guerra.
0:01:48 La Galadborg era una especie de sentella ígnea.
0:01:53 En gaélico quiere decir eso.
0:01:58 Galadborg quiere decir sentella ígnea.
0:02:01 El gaélico es muy fácil.
0:02:03 Sentella ígnea se dice Galadborg y todo por el estreno.
0:02:10 Era una arma creada por un ruido y fue fabricada por Sataj, esta mena.
0:02:19 Consistía en una especie de arco que largaba agujas en vez de flechas,
0:02:23 pero eran las agujas incandescentes que nunca fallaban en el blanco.
0:02:27 Penetraban en el cuerpo y lograban encenderse cuando estaban adentro y te quemaba.
0:02:34 Te quemaba al enemigo desde las entrañas.
0:02:38 En las sidencias.
0:02:40 Cúchulaín para conseguir el arma, debía cruzar el puente llamado Infranqueable.
0:02:47 Quien ponía un pie sobre ese puente y avanzaba sobre él,
0:02:50 era devuelto violentamente a la orilla como escupida de músico.
0:02:56 El que intentaba saltar a la otra margen,
0:03:01 era sacudido por el puente y caía en las fauces de unos monstruos
0:03:05 que esperaban debajo con la boca abierta.
0:03:08 Y Cúchulaín saltó.
0:03:10 Sataj, la mujer, lo recibió sorprendida,
0:03:13 le entregó inmediatamente el arma maravillosa a la Galadborg
0:03:17 y le enseñó su uso, cosa que le llevó exactamente un año y un día.
0:03:22 Un año y un día es un plazo mágico.
0:03:26 Porque un año y un día duraban, por ejemplo,
0:03:29 los reyes con sortes en el viejo sistema material cal.
0:03:33 Duraban un año y un día.
0:03:35 ¿Y por qué un año y un día?
0:03:36 Significaba un año.
0:03:38 En realidad, los contratos por un año se celebraban por un año y un día.
0:03:43 Era una manera de decir un año.
0:03:46 Como mil y una noche es una manera de decir mil.
0:03:50 O mejor todavía es una manera de decir muchas.
0:03:53 Bien, el caso es que ahí estuvo enseñándole
0:03:58 y luego Cúchulaín consiguió gracias al arma
0:04:02 la mano de la hermosa M.
0:04:04 Se presentó en la casa con la Galadborg,
0:04:07 tiró unas cuantas agujas y la mina dijo,
0:04:12 tuya será la dulce y mágica llanura
0:04:17 que conduce al valle de la doble esclavitud.
0:04:21 Me gusta mucho esa forma de decir superior
0:04:24 incluso al paso de Uspallata.
0:04:27 Es una manera de designar al escote de algunas largas.
0:04:35 Segundo objeto maravilloso, las botas de siete lenguas.
0:04:41 Breve, se le pude...
0:04:43 Botas de siete lenguas.
0:04:45 Las famosas botas de siete lenguas que aparecen, creo, en Pulgarcito.
0:04:49 Permitían estas botas avanzar a su portador
0:04:52 33.69 kilómetros a cada paso.
0:04:57 Es decir, siete lenguas.
0:04:59 Y es poco más lo que se sabe de este calzado
0:05:02 excepto que se amoldan a la medida de quien sea que se las robe.
0:05:07 No se puede decir, las botas de siete lenguas me quedan grandes
0:05:11 porque se amoldan a la medida del ladrón.
0:05:14 Ahora, qué difícil calcular el destino, ¿no?
0:05:17 Es muy difícil porque cada paso de siete lenguas
0:05:20 conoce el rijo de pasarte.
0:05:22 El primer dueño de las botas fue un ogro, Fabián.
0:05:27 Otra, otro.
0:05:29 Habitaba en los bosques franceses.
0:05:32 Y Pulgarcito, el hijo menor de un leñador,
0:05:36 consiguió robarse esas botas mientras el ogro dormía.
0:05:40 Un inconveniente para ese de las botas era que te cansaban.
0:05:45 Te cansaban.
0:05:47 Y a cada paso de siete lenguas un poco te tenés que cansar también.
0:05:51 Desempeñaron estas botas un importante papel
0:05:55 en la posterior carrera de Pulgarcito como mensajero oficial
0:05:59 y correo de edad, más como todos saben.
0:06:02 Otro objeto interesante es el cuerno de la abundancia,
0:06:06 la cornucopia.
0:06:09 Estamos siempre dibujadas en las piserías.
0:06:13 El cuerno de la abundancia y adentro hay una serie de manjares
0:06:17 y alimentos y de productos de la tierra y de frutos especialmente.
0:06:23 Era en realidad uno de los cuernos de la cabra amaltea.
0:06:27 Amaltea fue la cabra que amamantó a Zeus cuando el Dios era un bebé.
0:06:32 Zeus, el príncipe del olimpo.
0:06:34 Sería muy príncipe del olimpo,
0:06:38 pero la que le daba el pecho era una cabra.
0:06:43 Zeus quedó tan agradecido que la instaló en los cielos
0:06:47 como la constelación de Capricornio.
0:06:49 Cuando uno ve la constelación de Capricornio,
0:06:51 en realidad es la cabra amaltea que amamantaba a Zeus.
0:06:56 También le quitó uno de sus cuernos para regalárselos,
0:07:00 regalárselo en este caso, a las ninfas.
0:07:03 Zeus dedicaba gran parte de su tiempo a la persecución de mujeres
0:07:07 como fines amorosos
0:07:09 y parece que utilizó la cornucopia
0:07:13 como regalo para vencer la resistencia de las ninfas.
0:07:16 Les dijo que siempre que desearan algo de morfar o descabiar,
0:07:20 no tenían más que pedir y celó al cuerno,
0:07:23 del que surgirían todas las viandas necesarias.
0:07:27 Un cuerno 100 gramos de jamón crudo.
0:07:32 Las ninfas comprobaron que la promesa se cumplía,
0:07:35 porque cada vez que pedían a la cornucopia frutas, granos, vinos
0:07:39 o cualquier alimento, el cuerno respondía generosamente,
0:07:43 incluso con sapa.
0:07:45 Como sabemos, eso es todo lo que tengo que decir
0:07:49 respecto al cuerno de la abundancia.
0:07:54 Aquí hay una serie de objeto.
0:07:57 Fíjese, Jariplo era una ninfa, madre de Tiresias,
0:08:02 el más célebre de los adivinos,
0:08:06 de los mitos griegos, y es que uno se olvida de calcante.
0:08:09 Pero en cualquier caso era un adivino ciego.
0:08:12 Jariplo, la mamá, era una de las compañeras preferidas
0:08:15 de Atenea, la diosa de la sabiduría.
0:08:18 Y tan amigas eran que a veces Atenea le dejaba montar su carro.
0:08:24 Un día las dos se estaban bañando en la fuente del Hippocrén.
0:08:28 Y Tiresias pasó por ahí y la vio Atenea, la diosa de Enoda.
0:08:34 Lomo, árbano.
0:08:36 Sí, lomo.
0:08:38 Y Atenea lo cegó inmediatamente.
0:08:41 Jariplo, la mamá de Tiresias, dolo herida,
0:08:44 reprochó a la diosa tanta crueldad.
0:08:46 Pero Atenea le explicó que todo mortal,
0:08:49 que viera desnudo a un inmortal,
0:08:51 debía perder la vista.
0:08:53 Sin embargo, para consolarla,
0:08:55 concedió a Tiresias virtudes maravillosas.
0:08:59 La diosa le dio un bastón,
0:09:01 y este es un objeto maravilloso,
0:09:03 con el cual podía dirigir sus pasos
0:09:05 con igual facilidad que si tuviera visión.
0:09:08 Aquel bastón, dicen los sabios,
0:09:10 guiaba con precisión al ciego, en el camino,
0:09:13 y eludía cualquier escolio.
0:09:15 Otro que consiguió,
0:09:18 que es decir, que Tiresias también fue
0:09:21 convertido en mujer.
0:09:24 También por meterse donde no lo llamaba.
0:09:27 O por no.
0:09:30 ¿Sabes por qué?
0:09:32 Vio a dos serpientes copulando.
0:09:35 Es muy difícil ver a dos serpientes copulando.
0:09:39 Más que nada, porque uno no se dan cuenta.
0:09:42 No, parece que están abrazadas.
0:09:44 Parece que están ahí enrocadas.
0:09:46 Es una trenza.
0:09:48 Y además, como le ponen, tampoco ha onda.
0:09:56 Parece que el que ve copular serpientes
0:10:00 se transforma en mujer si es hombre
0:10:03 y en hombre si es mujer.
0:10:05 Y en cierto caso,
0:10:07 hubo una discusión entre Zeus,
0:10:09 justamente, y su mujer era,
0:10:11 para saber si era la mujer o el hombre
0:10:15 el que más disfrutaba en la relación amorosa.
0:10:18 Entonces, resolvieron preguntárselo a Tiresias,
0:10:21 que había sido hombre y mujer,
0:10:23 y que ya era hombre de nuevo,
0:10:25 porque había vuelto a ver serpientes copulando.
0:10:28 Y, por cierto,
0:10:30 no se ha hecho nada.
0:10:32 Y, por cierto, porque había vuelto a ver serpientes copulando.
0:10:36 Y se había vuelto a convertir en un tipo.
0:10:40 Ya era un vicio.
0:10:42 Iba a ver todas las serpientes.
0:10:44 No podía parar.
0:10:45 Después, como le quitaron la vista, ya no vio más.
0:10:48 Y él contestó,
0:10:50 si de nueve partes se compone el goce amoroso,
0:10:53 si de diez partes se compone el goce amoroso,
0:10:56 nueve son para la mujer y una para el hombre.
0:11:00 Y era, se enojó muchísimo,
0:11:03 y lo privó otra vez de la visión.
0:11:08 Bueno, ésta era Tiresias.
0:11:11 Otro que consiguió objetos maravillosos fue Perseo.
0:11:15 Perseo, como saben ustedes,
0:11:18 tenía que conseguir la cabeza de Medusa,
0:11:21 y Hermes, el dios de pies al lado,
0:11:26 y Atenea le dieron algunas indicaciones.
0:11:29 Y siguiendo el Consejo de los Dioses,
0:11:31 Perseo fue hasta la casa de estas tres viejas
0:11:34 que tenían entre las tres un ojo y un diente,
0:11:36 que se lo prestaban, las tres gradas.
0:11:39 Perseo confiscó el ojo y el diente y las chantajó.
0:11:43 Dijo, si no me dicen dónde están ciertas cosas que necesito,
0:11:47 no les devuelvo el ojo ni el diente.
0:11:50 Y las viejas le dijeron
0:11:54 donde estaban unas ninjas
0:11:56 que poseían los siguientes objetos mágicos.
0:11:58 Unas sandalias para volar.
0:12:02 También, la otra cosa maravillosa,
0:12:06 era el casco de Hades,
0:12:08 que hacía invisible a su poseedor.
0:12:11 El que se ponía ese casco se tornaba invisible.
0:12:16 Un casco que reapareció después,
0:12:18 nada menos que en el Quijote,
0:12:20 más con la forma del gelmo de Mambrinos,
0:12:23 que era un gelmo que si vos te lo ponías,
0:12:25 que hacía invisible.
0:12:30 no sé si prefiero el casco o la sandalias voladoras.
0:12:33 Sandalias voladoras.
0:12:35 Qué me importa, que no me vean.
0:12:37 Me anuncio.
0:12:38 Sí, yo prefiero el casco, a mí de mi casco.
0:12:40 Qué bolleo.
0:12:42 Si que está invisible entre las agencias.
0:12:44 Había una película donde había un hombre que era invisible,
0:12:46 pero solo cuando nadie lo veía.
0:12:48 No, pues sí.
0:12:54 Bueno, y otro objeto maravilloso era el martillo de Thor.
0:13:00 Thor era uno de los dioses del Panteón Escandinavo.
0:13:04 Yo leí en tu simpático, pero un poco tosco.
0:13:08 Pero que tenía un martillo
0:13:11 que, este, ha arrojado, daba siempre en el blanco,
0:13:15 pero además que volvía.
0:13:17 Un martillo volvedor.
0:13:20 Y el martillo, no sé si sabe si en por mi inmediata o a la noche,
0:13:26 o después de infinitas perifesias, pero el martillo volvía.
0:13:33 Yo conocí también algunas cosas, algunos objetos volvedores,
0:13:41 que son casi siempre de mala sombra.
0:13:44 Objetos maldictos que uno quiere tirar,
0:13:48 pero que no puede desprenderse de ellos.
0:13:50 Está lleno de leyendas de objetos que producen desgracia.
0:13:54 Pongamos por caso un medallón.
0:13:56 Y usted quiere desprenderse y lo tira al fondo del mar,
0:13:59 pero el objeto siempre vuelve de alguna manera.
0:14:02 En general, los objetos volvedores no traen muy buena suerte.
0:14:09 Aunque sí traen buena suerte los carros volvedores
0:14:13 o los caballos, que son siempre volvedores.
0:14:16 Los caballos son volvedores,
0:14:18 porque aunque uno no quiera, regresan a la querencia,
0:14:22 a decir al lugar donde está.
0:14:24 Y un caballo en ese sentido es un objeto maravilloso.
0:14:27 Me digan que es un animal.
0:14:29 Sí, casi se lo puedo afirmar.
0:14:32 Casi estaríamos en condiciones.
0:14:34 Sería bueno tener algún objeto volvedor.
0:14:37 Yo le conté otra vez,
0:14:39 hacer que hay un perro de yeso que yo regalaba siempre a distintos amigos,
0:14:43 y me volvía también en distintas celebraciones.
0:14:48 En mi cumpleaños, en la vida,
0:14:50 regalado por otras personas, por terceras o quintas personas,
0:14:53 pero volvía ese perro de yeso.
0:15:01 Hemos ido a la discoteca y el hombre se asustó.
0:15:06 Sí, este más objeto no es para cualquiera.
0:15:11 Y atribuirle este tipo de propiedades.
0:15:14 No, mira, es supersticiosa.
0:15:16 Con eso no me quiero meter, con ningún objeto maravilloso,
0:15:19 y si se puede después, si se puede la puerta y si se puede dormir.
0:15:22 Entonces he traído una canción que grabamos nosotros
0:15:25 con Carlitos Zoria, con Carlitos Salmone,
0:15:28 y con Gabriel Rolo.
0:15:33 Un trío de guitarras.
0:15:35 Y hemos grabado una canción criolla que se llama Querencia,
0:15:38 que es el lugar a donde vuelven los martillos, los caballos
0:15:42 y las damas que nos abandonan.
0:15:44 Así que escucharemos esta bellísima canción,
0:15:47 creo ya en una versión donde las guitarras están muy bien
0:15:50 y no va a ser lo que pueda.
0:15:52 Querencia, conmemoración de este catálogo de objetos maravillosos.
0:16:09 Pero linda osalachita,
0:16:13 mi era bonito mi pago,
0:16:17 y era linda que se oblita,
0:16:22 vividas y entre sus brazos.
0:16:26 Pero las hebras a vivo,
0:16:29 tienen en el cuerpo el diablo,
0:16:32 y el diablo se vino un día,
0:16:35 contando un cabazo salto.
0:16:41 Y mi chila compañero,
0:16:45 un sojo de mi pobre rancho.
0:16:50 Yo le copié el pereceguirito,
0:17:05 a ver la pata de pisarito,
0:17:09 y el aparado de a pesar sierra,
0:17:14 le di alcance a los palbados,
0:17:18 cuchillo contra cuchillo,
0:17:21 y los barrios se abrazaron,
0:17:24 observaban varias veces,
0:17:27 venuando que va del brazo,
0:17:32 se ve fue la vista en sangre,
0:17:36 y así quedé entre los palos.
0:17:49 Y ahora le digo a parecido,
0:17:56 que me tiran la creencia,
0:18:01 no lo puedo dir al pago,
0:18:06 porque ya me da vergüenza,
0:18:11 ando cuidando como perro,
0:18:13 relaviendo con la fera,
0:18:16 y tanto de palpa el cuchillo,
0:18:20 y perdí a esa pelea,
0:18:26 pero usted no sabe, amigo,
0:18:31 cómo tiras la creencia.
0:18:40 Era Alejandro Dolina,
0:18:44 la venganza será terrible,
0:18:47 cerencia.