David y Betsabé

Transcripción automática

0:00:00 Hablaremos de David y Betshabe.
0:00:05 Betshabe fue una mujer de extrema belleza que vivió allá por el siglo X,
0:00:09 antes de Cristo. Estamos hablando de episodios hebreos.
0:00:16 Y Betshabe participó en un asunto muy escandaloso
0:00:22 que tiene que ver con la vida del rey David.
0:00:25 Sabemos que David fue el segundo rey de Israel después de Judá
0:00:29 y que nació en Belén allá por el año 1114 antes de Cristo.
0:00:33 El Palacio de David estaba construido en la parte superior de una colina en Jerusalén.
0:00:39 Y desde sus terrazas podía verse el paisaje.
0:00:43 El tipo que asomaba la terraza y miraba el paisaje.
0:00:46 Pero también las casas vecinas, los interiores, los patios,
0:00:53 y la que estaban todas situadas a menor altura que la residencia real.
0:00:59 Y a veces David tenía por costumbre descansar en la terraza,
0:01:03 disfrutar del amanecer y bichar para el lado de la vecindad.
0:01:07 Un día David alcanzó a divisar el cuerpo esbelto,
0:01:14 bellísimo de una mujer que junto a un arrozito que pasaba al lado de la casa,
0:01:20 era bañada por su doncella.
0:01:24 ¿Sabes que era una mujer pudiente que se hacía enjuagar por el personal de servicio?
0:01:29 No como uno que se baña en la...
0:01:32 Solo.
0:01:33 Solo, solo, no tengo quien me baña.
0:01:36 Bueno, esta mujer estaba parada sobre una tinaja a la orilla de un arroz,
0:01:42 yo sacaba en agua del arroz, yo la metía en adentro el tacho.
0:01:45 Porque la doncella le tiraba agua perfumada con un jarro o con un tarro.
0:01:53 Creo que es con un jarro.
0:01:55 Seguro parece aquella mujer llamada Bechabé,
0:02:00 conocía la costumbre del rey de asomarse a la terraza
0:02:05 y había decidido seducirlo de esa forma, es decir, bañándose le delante.
0:02:11 Pero vestida.
0:02:12 No, es nuda.
0:02:14 Es una forma de seducción bastante primitiva.
0:02:16 Si se quiere, pero de una indudable eficacia.
0:02:20 Me quiere si usted está parado en la puerta y viene una joven,
0:02:23 está a la de sí misma, en la bebeda, un fuentón y se hace bañar por una amiga.
0:02:29 Usted la ve inmediatamente se enamora o no, pero en todo caso ya no hay mucho más que decir.
0:02:35 Nada de cómo le va, que se yo, le guste el ya, todo eso.
0:02:40 Bueno, en este caso Bechabé enamoró a David y el rey sintió la necesidad de hacer la suya.
0:02:49 No, de hacer la suya, sino de poseerla.
0:02:54 Vamos a utilizar esta espantosa y, a caso machista,
0:02:58 forma de nombrar al acto venéreo.
0:03:03 David, entonces envió un mensajero a la vecina.
0:03:08 También podía haber ido él.
0:03:11 Sí, realmente, a mí se me bañan delante.
0:03:14 Pero él no sabía que se le estaba bañando a propósito.
0:03:17 Y que habrá creído que es una casualidad, que vivo que soy y la sorprendí bañándose.
0:03:23 Yo mando un mensajero, que soy yo,
0:03:26 porque no venís a compartir una noche íntima conmigo, acá en el palacio.
0:03:32 Pero hay un detalle fundamental.
0:03:35 David estaba casada.
0:03:37 Es un detalle, pero son menores.
0:03:41 No, no. Estaba casada con un tal Urias, un fiel general del ejército de David.
0:03:47 Virtuos que Bechabé no compartía, según su énfasis.
0:03:51 Me refiero a la fidelidad.
0:03:53 Y parece que Urias estaba en campaña fuera de Jerusalén.
0:03:57 Muy bien. La cuestión fue que a Bechabé poco le importó su estado con su bala.
0:04:02 Así que, después de recibir el mensajero, se vistió con sus mejores galas,
0:04:08 se presentó una noche en el palacio y aceptó gustosa los abrazos del rey David.
0:04:16 La poligamia del rey, un comentario hebemerista,
0:04:20 puede explicarse por la necesidad de acrecentar la población que existía por esos tiempos en Israel.
0:04:26 La tradición bíblica decía que iba a llegar un día, en el que sería tan escaso el número de hombres,
0:04:32 que cada uno de ellos sería buscado por siete mujeres, etc.
0:04:37 Y el caso es que, con tal de buscar descendencia, muchas veces es que estaban uniones no demasiado lícidas.
0:04:44 Pero el problema acá en este caso era que Bechabé no era libre para entregarse a la Reina Bé.
0:04:51 No importa si el rey tenía cuatro, cinco, seis esposas, qué sé yo.
0:04:55 Bechabé estaba casada, flaco. Así que, bueno, eso era lo ilegal.
0:05:02 Pero para peor, un día pasaron unas cuantas semanas, todas las tardes, balaparazos.
0:05:06 Che, que esto, qué sé yo. Un día le dice, che, dice David, estoy embarazada, le dice.
0:05:14 Entonces, David, imagínense, se preocupó.
0:05:20 Había posibilidades de que fuera a él el bebé?
0:05:23 Era a él.
0:05:24 De acuerdo.
0:05:25 Hubrías, hemos dicho que estaba en campaña.
0:05:27 Ah, qué razón.
0:05:28 Y David quiso salvar la vida de Bechabé, porque el adultero estaba prohibido para las mujeres y se lo castigaba con la muerte.
0:05:35 El varón por ahí podía ser infiel, pero la mujer no.
0:05:39 Además, la metodología para acusar a una dama por adultelio era la siguiente.
0:05:45 Sólo el marido la podía acusar.
0:05:48 No al vecino, ni a un juez.
0:05:50 Después se no podían actuar de oficio.
0:05:53 No a un maestrimento, tampoco.
0:05:56 El marido tenía que presentarse a la comisería y denunciar a la mujer.
0:05:59 Y yo, señor, mi mujer anda con uno. Muy bien.
0:06:02 Para que esto no ocurriera, David pensó lo siguiente.
0:06:06 No puedo.
0:06:08 Mando a llamar a Uriás, el marido de Bechabé, que estaba en campaña, y le concedió una licencia para que pasara algunos días en Jerusalén, junto a Bechabé, como premio de sus provezas en el campo de Batalla.
0:06:24 Ya veo cómo es la estrategia.
0:06:26 Lo mandó a llamar, recuerde que estaba lejos, Uriás.
0:06:29 Él dijo, mirá, eres tan valiente, oh querido Uriás, que te voy a dar unos días de licencia para que te quede con tu mujer acá, paseando.
0:06:39 Claro, el verdadero sentido de aquel plan, consistían que, Benzabé, usara todos sus recursos para seducir a su esposo y de este modo llevarlo al lecho matrimonial.
0:06:52 Y, en fin, establecer un antecedente que justificara el embarazo, y aunque el parto por ahí pareciera después un poco anticipado, por eso ya hablaría.
0:07:01 A la semana siguiente.
0:07:03 Ahora, un inconveniente. Uriás era muy ilegal y honrado por aquella distinción recibida de David, decidió no debilitar sus fuerzas en el lecho de Bechabé y reservar sus energías para la batalla.
0:07:22 La peor respuesta.
0:07:23 En aquel tiempo se creía que todas las energías eran del mismo orden.
0:07:27 El caso que Uriás, para mantenerse en mejor estado, se fue a dormir solo a un establo. Se concentró, digamos.
0:07:35 Ahí entre el ganado.
0:07:39 Bueno, aquella era una circunstancia muy complicada porque, como se ha dicho, el rey podía tener docenas de mujeres pero soltiras.
0:07:48 Y desear a la mujer del prójimo no era cosa recomendable en Israel y menos todavía para el rey.
0:07:54 O obtener los favores de una mujer ajena implicaba un delito de robo a la propiedad de otro hombre, lo cual nos parece mal a nosotros, pero era así.
0:08:04 Y eso no se podía realizar sin castigo.
0:08:07 Más preocupado todavía, por la actitud de Uriás, David pensó otro plan.
0:08:13 Hizo llamar a un general de los ejércitos que era un poco inescrupuloso. Se llamaba Joab.
0:08:20 Y le encargó que asignara a Uriás una misión peligrosa en el frente de batalla.
0:08:25 Mandarlo una misión peligrosa.
0:08:28 Se trataba de que Uriás muriese.
0:08:32 Y de este modo, David iba a tener la libertad de quedarse con Bechabé y ella se iba a salvar de la piración.
0:08:40 Bueno, muy bien. Y el plan se llevó adelante. Uriás murió en batalla.
0:08:45 Menos mal, ¿no?
0:08:48 Pero vivía en Jerusalén un profeta llamado Natán, que era el único personaje del reino que no le tenía miedo a David
0:08:57 y le hacía tomar conciencia de sus errores.
0:09:00 Natán sabía de la intriga que había llevado adelante el rey David, no sé cómo se había enterado,
0:09:06 y se entrevistó con él, le contó algunas historias alegóricas, lo aconsejó,
0:09:12 y finalmente, hecho el rey se arrepintió, lloró, pidió perdón a Dios.
0:09:16 Bechabé dio a Albus un niño que nació enfermo y que murió al poco tiempo.
0:09:20 Nos quieren decir con eso que era por el pecado de sus padres.
0:09:24 De todos modos, David y Bechabé tuvieron otros cuatro hijos.
0:09:28 O sea que se arrepintió, pero...
0:09:32 Pero ya estaba muerto, yo.
0:09:38 Simá, Simá, Zobab, Natán y Salomón.
0:09:43 Simá, Zobab, Natán y Salomón fueron los cuatro hijos de David con Bechabé.
0:09:48 Ninguno de estos hijos debía supuestamente gobernar,
0:09:51 en tanto que David había tenido otros hijos con sus antiguas esposas.
0:09:55 Pero fueron sucediéndose una serie de intrigas
0:09:58 que permitieron al fin que uno de los hijos de Bechabé fuera el rey de Israel.
0:10:02 El heredero natural de David hubiera sido su hijo Amnon,
0:10:06 pero el muchacho había tenido la pésimo ocurrencia de violar a su media hermana Tamar,
0:10:13 y Absalón, el hijo que seguía en la línea hereditaria,
0:10:17 no pudo soportar la falta de su hermano y lo mató.
0:10:21 Pero el asesinato del heredero del trono era su vez algo grave.
0:10:25 Por ese motivo, dicen que David mandó Absalón al exilio.
0:10:29 Absalón preparó una revolución contra su padre.
0:10:32 Mira qué familia.
0:10:34 Casi tuvo éxito.
0:10:36 Alcanza a entrar en Jerusalén violó a las concubinas de su padre en una terraza, justamente.
0:10:43 Miren qué va tarde.
0:10:44 Dicen, a la vista de la población.
0:10:46 Esa es un error óptico, porque si hemos dicho que David vivía en unas terrazas que eran muy altas
0:10:52 y esas violaciones tuvieron lugar allí, la población que estaba en los lugares ínfimos
0:10:57 mal pudo haber asistido a esos procedimientos,
0:11:01 mejor hubieran visto si el palacio hubiera estado en el sector más bajo.
0:11:08 Pero bueno, no importa.
0:11:10 ¿Puede escuchar a un...
0:11:11 El caso es que la población festejaba la Probeza con gritos de toda índole.
0:11:16 De todos modos, más tarde Absalón fue muerto y ya no quedaron herederos varones,
0:11:21 salvo por supuesto los hijos de Bélzade.
0:11:23 Tan triste estaba David por estas cosas de sus hijos que envejeció prematuramente.
0:11:30 Bélzade hizo campaña a favor de Salomón y logró al final que David, en su lecho de muerte,
0:11:37 lo eligiera como su sucesor.
0:11:40 También sabemos David pasó sus últimos días postrados y se hizo traer una doncella,
0:11:45 la famosa Abhisag, la tsunamita, que se acostaba desnuda a su lado para darle calor al cuerpo de David,
0:11:53 cada tanto una que otra caricia.
0:11:56 Dicen que David tenía 80 años, así que tan prematuramente no había envejecido.
0:12:02 Pero murió a esa edad en el 970 a.C.
0:12:07 Y el Xabé junto al profeta Natan fue una especie de regente,
0:12:11 hasta que Salomón tuvo la edad suficiente para reinar y ese fue el origen del rey Salomón.
0:12:17 La grandeza ya hemos festejado en este programa más de una vez.
0:12:21 Fue también la historia del pobre Uriás, alguien que pagó su demasiada fidelidad con la vida.
0:12:27 Y después hay de todos hijos violadores, fratricidas, una historia espantosa verdaderamente,
0:12:33 que me la no sé qué haber contado.
0:12:37 Tiene todos los condimentos para hacer un éxito.
0:12:41 Sí, sí hubo una película también, una película con Robert Taylor, Jean-Gin Seimon, creo, una de esas o algo así.
0:12:51 Bueno, a mí el que me gustó fue Uriás, el marido, todo fenómeno.
0:12:55 Y yo, al momento, mañana tengo que entrar en batalla, después, qué sé, yo...
0:12:59 Se fue al estado y lo echaba.
0:13:02 Y a Salomón que después fue un rey sabio y piadoso.
0:13:07 Y al profeta Natán, que no le tenía miedo a David, y lo retaba.
0:13:13 Qué sé eso.
0:13:15 Fui a la...
0:13:17 A la discoteca.
0:13:19 A la discoteca le conté esta historia.
0:13:24 Es muy linda historia.
0:13:26 Para el discoteca era por más bruto que sea.
0:13:29 Y él dijo que él espiaba una vecina que también se bañaba en un fuentón.
0:13:35 ¿Y quién tiene que ver con la historia con la dioba?
0:13:38 Él me contó que se bañaba en un fuentón y se que no cabía en el fuentón.
0:13:43 Pero él me lo dijo como una virtud positiva, se tenía que ver.
0:13:47 Y se metía en el fuentón y no cabía, me dijo.
0:13:50 A mí me gustan así, me dijo, que no quepan en un fuentón.
0:13:56 Y así con la cabeza.
0:13:58 Como decía.
0:14:00 El discotecario es un poco vulgar.
0:14:02 Es que escuchó el principio de la historia y después no escuchó más.
0:14:05 No escuchó.
0:14:06 A él le gustó como bechabes se bañaban en el arrozito.
0:14:10 Y ahí enseguida me dio un tango que se llama el arrozito.
0:14:13 Y que vamos a escuchar en la versión de uno de los guitarristas de cabecera de este programa,
0:14:19 que es Juanjo Dominguez.
0:14:56 Y ahí se escuchó el principio de la historia.
0:14:59 Y ahí se escuchó el principio de la historia.
0:15:02 Y ahí se escuchó el principio de la historia.
0:15:50 2019
0:16:01 Era Juanjo Dominguez en la venganza.
0:16:04 Será terrible el arro��.