Repetición 08-07-2010 El banquete de Samarkanda del que participo Alejandro Magno

Transcripción automática

0:00:00 El legendario banquete de San Marcanda, de el que participó Alejandro Magno.
0:00:13 Así que vamos al otoño del año 326. Alejandro estaba en San Marcanda, una antigua provincia
0:00:20 perza en un descanso de la guerra. San Marcanda por ahí pertenece hoy a una República Soviética
0:00:29 o a lo que fue hasta hace poco una República Soviética, que puede ser que sea el Ovequistago,
0:00:34 uno de esos lugares. Bueno, en un descanso de la guerra y armó una gran cacería, o
0:00:40 mejor todavía una gran cacería, durante la cual enfrentó a un león y le dio muerte.
0:00:47 Otra diversión, si se puede llamar diversión, enfrentarse con leones fue un banquete al
0:00:53 cual Alejandro invitó a sus macedonios más queridos. Era una buena ocasión para que
0:01:00 el rey y sus amiguetes conversaran y me dieran vino. Se efectecaban dos cosas. Era el día
0:01:07 macedónico, consagrado al dios Dioniso, y además Alejandro quería compartir la llegada
0:01:13 de un envío de manzanas, de manzanas de Iraqaña, que eran de primera calidad. Mira qué humildad
0:01:20 hay de aquellos hombres, los poderosos festejaban el envío de fruta fresca. Era una sociedad
0:01:29 más sencilla, al menos la macedónica. Sí, la macedónica era bastante espartana como
0:01:35 corrupción de azúcar. Bueno, el caso quisieron un banquete, un banquete
0:01:39 sin mujeres. ¿Cómo sucedía? Por otra parte, en casi todos los banquetes de inspiración
0:01:43 elénica, uno de los invitados más distinguidos era Cleito, un general que una vez había salvado
0:01:51 la vida de Alejandro en una batalla. La amistad entre los dos era antigua. La hermana de Cleito
0:01:59 había servido como nodriza de Alejandro, pero el banquete empezó mal. Por razones
0:02:08 que se ignoran, digo, por razones que se ignoran, Alejandro consagró el festín, lo dedicó,
0:02:15 a Cástor y a Pólux, los diósculos, en lugar de hacer las libaciones pertinentes a Dioniso,
0:02:22 cuya fecha se celebraba. Se equivocó de Dios, se equivocó de Ventaní, ese nombre.
0:02:29 Cleito había iniciado en su casa un sacrificio privado a Dioniso, pero oyó el trompetazo
0:02:36 que anunciaba la comida. Bueno, a medio rancia la comida. Interrumpió la ceremonia y marchó
0:02:51 al banquete de Alejandro. Y las dos ovejas que estaba a punto de sacrificar a la salud
0:02:59 de Dioniso lo siguieron al trompetazo. Claro, apareció el banquete con dos ovejas atrás.
0:03:08 No es una buena forma de entrar a la entrega de los martinfiados. Pero si no hay chicas
0:03:13 en el banquete. Y Alejandro consideró que esa escolta era de mal agüero. Le ordenó
0:03:19 a los sacerdotes que pidieran a los dioses por la seguridad de Cleito. El banquete empezó
0:03:24 entonces con Alejandro dedicando sus libaciones a dioses equivocados y con Cleito habiendo
0:03:30 interrumpido las suyas. Por si fuera poco y esto era lo más grave, todos los asistentes
0:03:35 vivieron vino puro. Y esto estaba absolutamente prohibido en la hela de donde solo se tomaba
0:03:43 un vino muy rebajado. El vino griego era muy fuerte, tenía un efecto muy poderoso y solo
0:03:49 se permitía beberlo reducido por lo menos a la mitad y más todavía. La pena por tomar
0:03:56 vino puro era la muerte. Bueno, todos los asistentes a aquel banquete habían tomado vino puro.
0:04:04 En determinado momento alguien entonó una canción satídica sobre los comandantes que
0:04:10 no habían podido liberar la ciudad en otros tiempos. Era una broma pero de mal gusto porque
0:04:16 los comandantes que no habían podido liberar a la ciudad habían muerto. Sin embargo esa
0:04:20 broma fue aposada por Alejandro que había triunfado a si donde otros habían caído.
0:04:26 El caso es que los sentimientos se desbordaron y como todos estaban borrachos, el debate
0:04:33 se volvió pendenciero y agresivo. Alejandro alentó a que el cantante satírico continuara
0:04:42 con sus chances a los viejos generales. ¡Sí, que me encantó!
0:04:47 Entonces surgió una disputa entre los hombres de más edad que juzgaban más importantes
0:04:51 los logros de los hombres antiguos, incluso de Filippo de Macedonia, el papá de Alejandro,
0:04:56 mientras que los más jóvenes alababan a Alejandro y lo pusieron al mismo nivel que
0:05:02 el divino Heracles. Cleito, que era mayor que Alejandro y que estaba tremendamente
0:05:08 borracho, se burló de Alejandro. ¡Eh! le dijo. Y también de sus pretensiones de
0:05:15 ser el hijo de Amón. ¡Eh! ¿cuál me va a decirle? Entonces de Alejandro ante esa
0:05:21 burla le arrojó una de esas manzanas de las que hablábamos y le encajó un manzana sobre
0:05:27 Marote que casi lo duerme. Como los insultos de Cleito continuaban, Alejandro trató de
0:05:33 tomar un arma, pero sus amigos lo detuvieron por la fuerza mientras que Alejandro de Macedonia
0:05:39 forció. ¡Ah! ¡Jame que lo mato! Un tal tolomeo. Había muchos tolomeos en aquel ejército.
0:05:47 Algunos de ellos tuvieron la precaución de fundar una dinastía que vino a desembocar
0:05:53 en Cleopatra. Un tal tolomeo se llevó a Cleito fuera del bailón. Me dijo. Tranquilizada
0:05:59 Cleito. Un corneta hizo sonar un alarma y entre varios lo sacaron a la calle, lo sacaron.
0:06:11 Cuando se quedó solo, Cleito apenas podía sostenerse. Pero volvió, yo como son los
0:06:16 curos. Volvió y enfrentó a su amigo Alejandro con más insulto. ¿Qué te pensaba? Le dijo.
0:06:23 Alejandro, que también le había dado al vino como pa cuatro, redondamente se lanzó
0:06:28 sobre Cleito. ¿Qué tanto ni qué tanto? Y esta vez lo atravesó con su espada y Cleito
0:06:34 cayó final. El propio Alejandro se juzgó severamente. Además de matar a un amigo, había matado
0:06:46 también a un invitado. Bueno, esa era una circunstancia tremenda e imperdonable en aquella
0:06:51 civilización. Durante unos días Alejandro se consideró indigno. Plutarco cuenta que
0:06:57 varios tuvieron que sujetarlo para que no se matara con la misma lanza que había extraído
0:07:02 del cuerpo de Cleito. Por tres días no probó bebida ni bocado hasta que se temió por su
0:07:08 salud y por su cordura. Diversas personas entraban en sus aposentos solo para observarlo
0:07:15 e impedir que se suicidara. Pues entonces cuando varios personajes cercanos a Alejandro desplegaron
0:07:21 diferentes recursos para sacarlo de su estado. Alarmados por el estado del rey, los soldados
0:07:30 macedoños convocaron a una asamblea y en ella condenaron a Cleito por traidor y mandaron
0:07:36 decir a Alejandro que su acto ya estaba legalizado. Pero por muy tranquilizador que fuera el perdón
0:07:42 de los soldados, Alejandro no se perdonó. Otros condenaron al vino, le hicieron saber
0:07:48 que su crimen era hijo natural de la ingesta de esa bebida, pero Alejandro no encontró
0:07:54 en esa excusa tranquilidad y echó a los consejeros que trataban de aliviarlo de ese modo. Siguió
0:08:00 lamentándose y debilitándose sin comer y decidió a perder la vida e incluso el imperio
0:08:05 para pagar su crimen. Finalmente se presentó el sacerdote de Dioniso, aquel Dios que no
0:08:12 había sido agasacado, y le prestó los obsidios más eficaces. Le explicó que cada Dios tenía
0:08:19 su arma de castigo, Zeus escrime a rayos, posidón olas y terremotos, afrodita pasiones
0:08:26 trágicas y el arma de Dioniso era la locura. Dijo que Alejandro se había olvidado de
0:08:35 Dioniso en su día y había hecho sacrificios a favor de otras deidades por lo que Dioniso
0:08:40 se había ofendido. Por esa ofensa, Alejandro había tenido su castigo que era precisamente
0:08:45 la locura. Estas palabras sirvieron de consuelo a Alejandro, pero los aceptó, las aceptó
0:08:52 porque vivía en una cultura que creía que los hombres no eran otra cosa que instrumentó
0:08:57 los dioses, más que nada, las aceptó porque les convenía aceptar. Estaba esperando que
0:09:02 alguien le dijera unas palabras tales que lo sacaran de aquella situación.
0:09:06 Bien, Alejandro entonces admitió que había cometido el crimen estando invadido por una
0:09:13 locura que había sido insuflada por un dios enojado y se consoló. Premió al sabio
0:09:20 Aristrando que era el que le había contado esta macana y comenzó a recuperarse poco
0:09:26 a poco y así vivió un par de años más creyendo que el crimen había sido una orden divina.
0:09:32 De todos modos esa era ciertamente una idea de los griegos que no éramos sino instrumentos
0:09:39 de locura. Incluso lo creían con las buenas obras. Los artistas y especialmente los artistas
0:09:46 manuales eran despreciados porque pensaban que era el dios el que los poseía y el que
0:09:53 hacía la sobra. Bueno, canta diosa la venganza de Attile Aquiles de Peleo, no es la invocación
0:10:00 a la diosa que se hacía antes de cualquier obra, no era otra cosa que la exteriorización
0:10:06 de esa creencia, el artista era instrumento de los dioses y entonces antes de ponerse
0:10:11 a cantar al compadre de la mi abuela pedía a los dioses del olimpo y después a los santos
0:10:18 del sien que lo ayudaran, que lo poseyeran, que escribieran la obra por él.
0:10:23 Y que lo consolaran de ese modo cuando cumplía, cuando cometía un crimen.
0:10:29 Que dijera, no, hemos sido nosotros.
0:10:32 Viejas paradojas del determinismo. He cometido este crimen, señor juez, porque ya estaba
0:10:45 escrito que podía ser yo y el juez contesta, te condermo a muerte porque ya está escrito
0:10:50 que puedo hacer yo.
0:10:53 Muy bien, hemos sido...
0:10:55 En literatura, ¿no?
0:10:57 Porque hay de medios a dos.
0:10:59 Hemos ido a la discoteca, hemos contado esta historia y al discotecario que me contó
0:11:05 que él tenía un cuñado que estaba poseído, no se acuerda por quién, no se acordaba por quién.
0:11:13 Pero en todo caso nos dijo que el vino era lo peor que podía hacerse.
0:11:21 Sí, ¿sabes qué usted hablaba del vino griego?
0:11:23 Ese vino, con el correr de los años y los siglos, empezó a llamarse vino turco y ahí viene esto
0:11:28 de perdido como turco en la neblina, porque el vino turco no se podía tomar puro dado
0:11:32 que conducía la locura y entonces que se nacía, se le echaba agua.
0:11:35 Al echarse de agua que se lograba bautizarlo.
0:11:38 Acá él que no estaba bautizado era un infiel, es decir, un turco y lo que seguramente se agarraba
0:11:42 con las borrachetas era una turca y ahí lo de perdido como turco en la neblina.
0:11:47 Yo creía que los turcos venían a los pueblos de la provincia de Buenos Aires, de a pie,
0:11:52 con unos vultos a vender y como venían de a pie, se perdían en la neblina, ya que no contaban
0:11:58 con el auxilio sabio de un equino.
0:12:01 Si no se hubieran llevado un vaso de vino y entonces se hubiera sido poseído por los
0:12:04 dioses que saben dónde queda tapalque, por ejemplo.
0:12:07 Bueno, como quiera que sea entre curda se llama, mejor dicho, ni siquiera se llama entre curda.
0:12:13 Es una milonga que se llama duelo curda, una de las milongas de Jorge Vidal,
0:12:17 y evidentemente es una milonga que demuestra cuánto mal puede hacer el vino.
0:12:23 Y los duelos.
0:12:27 Bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno
0:12:57 bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno
0:13:27 bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno, bueno
0:13:57 las esponjas más famosas hicieron acto de presencia y llegaron con dolencias de san juan chile y mendosa la parentela zvanosa
0:14:13 conociendo a los muchachos con vida vacón quebracho se enllon blanco y clarete como pibesal chupete se prendieron al minacho
0:14:29 cerquita de la mañana el estadio hizo su efecto y la falta de respeto ya fue propia una macana el llanto se hizo jarana y la pena fue un gol góridos el río fue tan notorio que saliendo se te lejonca el fina utiro la bronca y se fue potorovelorio
0:14:59 era jorge vidal en la venganza será terrible duelo curda