Juan Hus

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0:00:00 Hablaremos hoy de Juan José.
0:00:04 Ya vamos a ver quién era.
0:00:06 Estamos en los Alvores de siglo XV.
0:00:09 La Iglesia Católica presentaba un cuadro bastante lamentable.
0:00:14 Proceguía todavía el conflicto eclesiástico por el cual había dos papas.
0:00:18 Recuerden ustedes, uno en Avion y otro en Roma.
0:00:21 Y entre los dos se libraba una lucha furiosa.
0:00:25 Hasta que en 1409 el Concilio de Pisa quitó la tiara a los papas.
0:00:32 Benedicto XIII, que era el que estaba en Avion, y Gregorio XII, que era el que estaba en Roma.
0:00:37 Y eligió en sustitución a Alejandro V.
0:00:40 Pero los papas derrocados no reconocieron la resolución del Concilio.
0:00:46 Ana tematizaron a todos los participantes y la situación se agravó muchísimo.
0:00:53 Ya que tres papas aspiraban al título.
0:00:59 Hasta que finalmente Alejandro V. murió en 1410.
0:01:03 Y le sucedió bajo el nombre de Juan XXIII, un antiguo pirata llamado Baltazar Cosa.
0:01:11 Baltazar Cosa.
0:01:13 ¿Qué hace Cosa?
0:01:15 Quiere un hombre de muy mala reputación.
0:01:17 La culera, los piratas siempre suelen tener bastante mala reputación.
0:01:22 Decían que era sínico, perverso, y que se daba alujurias antinaturales que no sé cuáles eran.
0:01:30 Muchos consideraban ilegal la instalación de Cosa en la Santa Sere.
0:01:35 Hay que decir que en la lista oficial de la Iglesia Cosa no figura.
0:01:40 Juan XXIII figura como antipapa.
0:01:43 Y usted recordará que el carnal Roncali tomó ese nombre, Juan XXIII, y no Juan XXIV.
0:01:50 Porque Cosa no estaba considerado como un papá por la Iglesia.
0:01:54 O sea, Juan XXIII fue un papá bastante reciente.
0:01:59 El caso es que este muchacho Cosa fue derrotado en una guerra con el rey de Napoles.
0:02:06 Y se tuvo que piantar a Florencia.
0:02:09 Pero la contienda por el papado fue tan solo uno de los aspectos de las crisis que afectaban a la Iglesia.
0:02:15 Porque pese a las hogueras de la inquisición y a las persecuciones,
0:02:20 en el ceno de la Iglesia iba aumentando la oposición a las jerarquías eclesiásticas.
0:02:26 En todas partes exigía que se la privase de sus colosales riquezas y de sus enormes propiedades territoriales.
0:02:35 A principios del siglo XIV la Iglesia tenía algo así como la tercera parte de Europa.
0:02:41 Toda esa oposición a principios del siglo XV estaba centrada en la región de Bohemia.
0:02:48 Y a la cabeza de aquel movimiento estaba un clérigo llamado Juan Huss,
0:02:53 que era continuador de la causa de un clérigo inglés llamado Juan Wycliff,
0:03:01 que fue un sacerdote revolucionario que tradujo la Biblia del Latín al inglés
0:03:07 con el objeto de que sus compatriotas pudieran leerla e interpretarla por su cuenta
0:03:14 en vez de contentarse con la interpretación que de ella sí a la Iglesia.
0:03:20 También en Pugno Wycliff el principio era de la infalibilidad de los papas.
0:03:27 Rechazó el comercio de las indulgencias, ¿sabes cómo era aquello?
0:03:31 Era para recaudar guista y se hizo muy usual cuando empezaron a construir la Iglesia San Pedro,
0:03:40 la Nueve Iglesia San Pedro, que es la que se ve ahora en Roma.
0:03:46 Como le faltaba guista para esa construcción vendían indulgencias.
0:03:51 ¿Eso es un pequeño padre?
0:03:53 Claro, dame 10 pesos y te perdón los pecados.
0:03:58 Indulgencias por 200 días, indulgencias por 20 días,
0:04:02 dame unos mangos y te perdón los pecados.
0:04:05 A todo esto se oponía a Wycliff y Huss fue uno de sus continuadores.
0:04:12 La Iglesia condenó inmediatamente a Wycliff como erético,
0:04:17 pero protegido por el rey de Inglaterra evitó la hoguera
0:04:22 y quedó al frente de este movimiento en cambio otro tipo que era este Huss.
0:04:27 Se juntó con unos campesinos checos con la pequeña nobleza de Bohemia,
0:04:33 con algunos plebillos y continuaron atacando la Iglesia y todo eso.
0:04:39 A fin de contrarrestarlo el Papa, este Baltazar Cosa, Juan 23,
0:04:45 convocó a los señores feudales alemanes y con el emperador Sejimundo a la cabeza
0:04:52 y convocaron a otro concilio en Constanza, que fue el 16º concilio ecuménico.
0:05:00 Fue un concilio de enorme concurrencia.
0:05:03 Tengo aquí la lista.
0:05:05 Había tres patriarcas, 29 cardenales, 35 orzobispos, 150 orzobispos,
0:05:13 124 avades, 578 doctores en teología, 18.000 sirvientes, 3.000 nobles,
0:05:22 1.400 flautistas y 5.000 prostitutas.
0:05:26 Así que como se ve, había mucha gente.
0:05:29 ¿Cuánto flautistas?
0:05:34 El orden del Día del Concilio incluía tres puntos fundamentales.
0:05:38 Lucha contra la Elegía, restablecimiento de la Unidad de la Iglesia y reformas eclesiásticas.
0:05:45 Duró tres años el concilio.
0:05:47 El Papa Gregorio XII de Roma, que era uno de los papas que se obraba,
0:05:52 renunció sin chistar.
0:05:54 Benedicto XIII, que era el otro, lea Vinión, quiso enfrentar al concilio,
0:05:59 pero ante tanto poder, escapó, se asiló en España y ahí quedó marginado.
0:06:05 Al otro, a baltasar cosas, Juan XXIII, lo acusaron de un sinfín de delictos.
0:06:11 Lujuria, enriquecimiento, traición, yo qué sé, se escapó.
0:06:16 Después fue apresado por los soldados de Xiximundo y quedó recluido en un castillo.
0:06:21 Y el concilio nombró como único Papa a Martín V.
0:06:25 Pero según los cronistas, el suceso más dramático, inmemorable del foro de Constanza
0:06:31 fue la vista de la causa del pensador Juan José.
0:06:35 Si bien este ya había sido excomulgado y anatematizado, la población en general lo apoyaba.
0:06:44 La Iglesia decidió entonces invitarlo para que fuera a explicar sus doctrinas ante el Papa.
0:06:51 Le dieron un salvoconducto firmado por el emperador Xiximundo, donde se le garantizaba inmunidad.
0:06:59 Y el tipo fue porque un negativo hubiera sido un acto de cobardía, pensaba él,
0:07:05 y también reconocerse culpable de acciones heréticas.
0:07:09 José consideraba que él era un cristiano auténtico.
0:07:12 Ni bien llegó a Constanza, lo metieron en carne.
0:07:16 Le habían tendido una trampa.
0:07:19 Lo encerraron en un convento dominico, al lado de una letrina.
0:07:24 Sí, era verdad que...
0:07:26 Totalmente superfluo. Por ahí hasta era una comodidad si bien se mira.
0:07:30 No hicieron caso alguno del salvoconducto, y tampoco le dieron explicaciones,
0:07:36 porque figuraba entre las prerrogativas del emperador el incumplir promesas
0:07:43 si de este modo se beneficiaba al imperio y al Papa.
0:07:46 O sea que el tipo cumplía las promesas cuando le convenía y le gustaba.
0:07:51 Lo empezaron a interrogar y a apretar al pobre José.
0:07:54 Duraron varios meses los interrogatorios, y parece que los llevaban de un lado a otro,
0:08:00 del monasterio dominico al castillo por ahí, lo tenían sujetado contra la pared.
0:08:06 José insistía en su inocencia.
0:08:10 Pero para los eclesiásticos se comportaba como un hereje recalcitrante.
0:08:16 Ante sus argumentos, un cardenal veneziano decía que los herejes agregaban una porción de verdad
0:08:24 a sus doctrinas falsas para engañar a la gente simple.
0:08:28 Pero aún recluyro en constanza siguió escribiendo.
0:08:31 Si había hecho amigo de los carceleros, escribía sobre diversos aspectos de las doctrinas eclesiásticas.
0:08:37 Y cada página nueva que escribía, proveía a sus enemigos de nuevos argumentos para acusarlo de herejía.
0:08:44 Hay una frase famosa de uno de aquellos inquisidores.
0:08:47 La frase es, démme una o dos líneas de un autor y lo haré condenar.
0:08:57 El acta acusatoria contra José estaba salpicada de citas de las propias obras de José.
0:09:03 Los enemigos de este hombre tenían más de 100 cuadernos suyos, y de ahí sacaban sus argumentos.
0:09:13 En vano trataron de conseguir que José reconociera sus errores demoníacos y asquerosos, como ellos decían.
0:09:20 El caso es que la meta principal del proceso era que el tipo se declarara culpable.
0:09:28 Bueno, a comienzos de junio de 1415 terminada la formación de la causa, lo trasladaron encadenado al monasterio franciscano de Constanza.
0:09:40 Así deliberaba el concilio.
0:09:42 El 6 de junio, José, compareció ante los padres conciliares.
0:09:47 El informe fiscal estuvo a cargo de la obis por Lodi.
0:09:50 Todas las tentativas del acusado por probar las inconsistencias de las acusaciones fueron rechazadas brutalmente por los jueces.
0:10:00 No lo dejaban hablar, le gritaban, no escupían.
0:10:04 Los padres conciliares clamaban que era peor que un solomita.
0:10:08 Los trataban de caín, Judas, interrumpían sus discursos con pataleos y gritos, y hacían rimas con la última palabra de cada inciso.
0:10:19 Esto se lo hagas ahí.
0:10:21 Lo trataban mal, quiero decir.
0:10:24 Pero el tipo no aflojaba.
0:10:26 Todos trataban de que se arrepintiera en público para asestar un golpe a todos sus seguidores.
0:10:32 Pero el teólogo Checo rechazó todo acuerdo.
0:10:36 Prefería soportar el suplicio de las llamas antes que renegar de sus convicciones.
0:10:42 Y al final el concilio lo declaró Ereje impenitente.
0:10:45 Fue destituido de su dignidad sacerdotal y condenado a la hoguera.
0:10:52 José negó en voz alta su culpabilidad.
0:10:55 Para qué la va a negar en voz baja nadie lo ve.
0:10:59 Se fijó la fecha de su ejecución, 6 de julio de 1415.
0:11:05 Y aquel día tuvo lugar el acto de fea, así se llamaban las quemazones,
0:11:10 más solemne de cuántos registra la historia de la inquisición.
0:11:15 Estuvieron presentes todos los padres conciliares, el emperador, nadie se lo quería perder.
0:11:22 Jules gritaba su inocencia, lo hacieron callar.
0:11:25 Siete obispos le quitaron sus trajes sacerdotal.
0:11:29 Jules declaró que no podía confesar errores que no había cometido.
0:11:33 Se ligó una viada porque parece que lo bajaron.
0:11:37 Le cortaron las uñas, el pelo, le pusieron un sombrero de payaso y lo quemaron.
0:11:43 Muy feo.
0:11:44 Antes de prenderle fuego se le aproximó un delegado del emperador.
0:11:49 Estaba también el hijo del emperador Ruperto.
0:11:52 Y le dijeron, dale confesar, así salvás tu vida.
0:11:56 Y el hijo, la intención principal de mi prédica fue únicamente ayudar a mis padres.
0:12:02 Quiero gustosamente morir hoy.
0:12:06 Los verdugos le prendieron fuego, el humo envolvió su cuerpo y murió.
0:12:11 Después juntaron las cenillas y las tiraron al río.
0:12:15 Pero la ejecución provocó una oleada de ira en Bohemia.
0:12:21 Y el concilio no pudo terminar con la obra de Jules,
0:12:25 que fue continuada por Jerónimo de Praga, otro señor, que propagó y defendió esta sida.
0:12:31 Hay que decir que también lo quemaron, aquí se armó Jerónimo de Praga,
0:12:35 pero en otra ocasión, en otro programa.
0:12:38 Entre 1420 y 1431, Martin V y Seguizmundo, emperador,
0:12:47 se mandaron cinco cruzadas contra los juzitas, que eran los seguidores de Júz.
0:12:51 Pero no lograron imponerseles.
0:12:54 El papa y el emperador tuvieron que hacer algunas concesiones
0:13:00 y finalmente sí pudieron derrotar, al menos a la más radical de los juzitas,
0:13:05 eran los campesinos y prevejos.
0:13:08 Pero la muerte de Júz generó las llamadas guerras juzitas.
0:13:12 Y uno de los principales epixodios fue la que se llama disfrenestración de Praga,
0:13:19 en la que los juzitas arrojaron de los balcones de un edificio al burgo maestre y a 30 senadores.
0:13:26 Y la palabra defenestración empieza a usarse allí.
0:13:31 Tiene fundamento porque su raíz alude a ventana en varios idiomas.
0:13:37 Defenestrar quiere decir tirar por la ventana, aunque ahora se usa...
0:13:41 Sí, para decir...
0:13:43 ...por la presencia aún como alguien que se destituyó o más que nada despreciado y a la mal de él.
0:13:50 Pero viene de fenestra, evidentemente.
0:13:54 Bueno, entre las cosas de las que habían acusado a Júz,
0:13:58 figuraban el creer en la papisa juana.
0:14:01 Cosa en la que estaba equivocado, ya que parece que la papisa juana no existió.
0:14:06 Pero fue un hombre que prefirió morir dignamente, antes que sostener una mentira con tal de salvar su vida.
0:14:13 Era terrible aquello juicio, ¿no?
0:14:15 El acorralar a una persona sin dejarle la mínima posibilidad de defenderse
0:14:21 y convirtiendo sus argumentos más cabales en su propia acusación.
0:14:26 Especialmente sucedía esto en los juicios contra las brujas, ¿no?
0:14:30 Vos te defendías bien y era porque te asistía el demonio.
0:14:35 Te defendías mal y era porque eras también, porque eras bruja.
0:14:39 Si por ahí te hacían recitar, los vies mandamientos.
0:14:42 Si no lo sabías, era porque eras bruja, porque no lo podías decir.
0:14:46 ¿Y si lo sabías?
0:14:47 Era porque el diablo te ayudaba.
0:14:49 No la daba nunca.
0:14:51 Entonces todo el mundo compensaba, con lo cual se ganaba algo
0:14:56 y con las confesiones la gente creía cada vez más en eso.
0:15:00 O sea, más en las brujas, ¿no?
0:15:04 Es un procedimiento de épocas oscuras en donde las personas eran tan estúpidas
0:15:12 como para creer que alguien podía hacer un pacto con el demonio para mejorar su suerte.
0:15:16 Por suerte estas épocas han pasado y vivimos en un mundo en donde reina
0:15:23 no solo la razón, que no sería nada, sino también la bondad y la benevolencia.
0:15:30 Así que vamos a dedicar esta charla a los que vivimos en esta época maravillosa,
0:15:35 pero también a Juan Jus, que era tan inocente como yo.
0:15:39 Es decir, era culpable.
0:15:44 Al seguidor, a Jerónimo de Praga, a John Proctor,
0:15:48 el personaje de Arthur Miller en la bruja de Salem,
0:15:52 y bueno, todo eso.
0:15:54 ¿Se lo hemos ido a la discoteca?
0:15:57 Me parece que mi historia es muy sofisticada para la discoteca.
0:16:01 No, él dijo que él sí creía en las brujas,
0:16:05 y que justamente había ido una bruja para preguntar por una mina.
0:16:10 No, bueno, pero eso es otra cosa.
0:16:13 Una mina que él la había visto con otro.
0:16:17 Pero fue a la bruja, le preguntó, y ahora estaba muy contento,
0:16:20 y me parece que la bruja la había dicho que,
0:16:22 si bien la mina se revocaba con el otro, siempre pensaba en él.
0:16:26 El tipo estaba loco de contento.
0:16:32 ¿Y la mina va a terminar con él? Le dijo la bruja.
0:16:35 No, no, no, no, le dijo.
0:16:37 Con un tipo en costa norte, dice, pero...
0:16:40 ¿Qué parecisión?
0:16:42 En el fondo lo quiere a usted.
0:16:44 Yo personalmente siempre prefiero estar yo con la mina en costa norte,
0:16:48 aunque en el fondo la mina quiera a cualquiera, que me importa.
0:16:51 Quien quiere en el fondo.
0:16:54 Casi está preferible que en el fondo quiera otra cosa,
0:16:58 que el tipo sea el que pague los créditos.
0:17:05 El caso es que, habiéndole atendido a una trampa,
0:17:08 a la gente del Concilio de Constanza, a Lohus,
0:17:11 el discotecario me dio un lindo,
0:17:15 una linda milonguita que se llama la Trampera,
0:17:18 que evidentemente fue compuesta pensando en esa tradición, en ese episodio,
0:17:24 y que escucharemos en la versión de Aníbal Troilo y Roberto Aguela.
0:20:15 Era Aníbal Troilo, Roberto Aguela y su cuarteto típico.
0:20:22 En la venganza será terrible la Trampera.