Transcripción automática
0:00:00 Bien, hablemos de Ganesha, que es un personaje de la mitología hindú,
0:00:05 es hijo de Siva, uno de los dioses más importantes, junto con Vishnu y Brahamma.
0:00:10 Y es hijo también de Parvati, de Kali, de la negra, aquella diosa que inspiraba a los asesinatos de los Tugs.
0:00:20 Por orcamiento con un hilo de seda.
0:00:22 Así es. Según los mitógrafos, Ganesha es el dios de la sabiduría.
0:00:28 Todos los escritos comenzaban con una invocación al dios.
0:00:33 Así como los griegos invocaban a la musa, canta diosa, la venganza fatal de Aquiles.
0:00:39 Bueno, los libros sáans crípto comenzaban con las palabras salutaciones a Ganesha.
0:00:48 O pido a los santos del cielo que acudan, etc.
0:00:51 Y el dios era invocado en primer lugar por los brahamanes que dirigían los juicios.
0:00:57 Los jueces también invocaban.
0:01:00 El enislante también existe.
0:01:02 Y bueno, en todo lo relacionado con asuntos mundanos, también tenía que ver con este dios,
0:01:09 suele suceder ahora con los que juegan a la quinella.
0:01:12 Colocaba en su imagen en las calles, en las grandes carreteras, al pie de los árboles,
0:01:18 para que personas de todos los rangos pudieran invocar a Ganesha,
0:01:22 antes de cualquier negocio, incluso para que los viajeros lo adoraran antes de emprender cualquier camino.
0:01:29 Los hindúes no construían nunca una casa sin antes haber puesto en los cimientos una imagen de Ganesha.
0:01:37 Así que andá llevando.
0:01:39 Ahora, este dios tenía cabeza de elefante.
0:01:42 Pero ese aspecto elefantino fue producido en realidad por un accidente.
0:01:50 Y no porque el dios hubiera nacido así.
0:01:53 Parece que el niño era normal con cara de persona.
0:01:57 Y para festejar el nacimiento, todos los dioses se acercaron a felicitar a Siva y a Kali.
0:02:04 Y a muchos se les permitió ver a la criatura.
0:02:08 Allí entre todos los mirones estaba Sani, que aunque ansioso de rendir homenaje al niño,
0:02:15 mantenía sus ojos clavados en el piso.
0:02:18 Entonces Kali le preguntó por qué no miraba al niño y Sani, una divinidad, le dijo.
0:02:24 Mirá, yo tengo una maldición espantosa.
0:02:27 Basta que yo mire a alguien para que ese alguien sea perjudicado enormemente.
0:02:31 Es una maldición que me lanzó mi mujer.
0:02:34 Un día le agarró un ataque de celos.
0:02:36 Y en realidad para aplicar a mis amantes esta maldición me la mando a mí.
0:02:43 Kali, ansiosa por mostrar a su hijo, le dio permiso a Sani para que lo mirara igual, a pesar de la maldición.
0:02:50 Sani advirtió varias veces, mirá que lo voy a resercar para todo el viaje.
0:02:55 Pero la madre insistió y finalmente lo miró.
0:03:00 En cuantito lo miró la cabeza del chico, se separó de su cuerpo y voló al cielo y se perdió para siempre.
0:03:07 La mamá y todos los presentes comenzaron a llorar.
0:03:11 Sí, el pibe no.
0:03:12 Sani gritaba que él lo había avisado. Yo te avise, yo te avise.
0:03:17 Pero en medio de la escándala, lo viste actúo velozmente, montó en Garuda aquel pájaro que él usaba como caballadura.
0:03:25 Y que era un pájaro muy docto, que hablaba, no solo hablaba sino que hablaba bien, daba consejos.
0:03:32 Bueno, lo montó y voló hasta un río que se llama Pus Pabadra.
0:03:37 Y allí encontró un elefante durmiendo y le arrancó la cabeza.
0:03:41 En realidad Braham le dijo, andá y sacále la cabeza al primero que encuentra y traela.
0:03:46 Quiso la mala suerte que encontraron un elefante.
0:03:49 Pudo ser peor también.
0:03:51 Volvió bisnú con la cabeza bajo el orazo, la unió al cuerpo de Ganesa.
0:03:57 Y desde entonces ese dios está vinculado con esa singular presencia.
0:04:02 Un detalle más acerca de Ganesa. Tiene un solo colmillo, tiene cuatro manos, pero no cuatro brazos.
0:04:09 Cuatro manos porque al cabo de cada brazo hay dos manos.
0:04:14 Bien, es interesante.
0:04:16 Las potestades de Ganesa han llegado hasta nuestros tiempos.
0:04:21 Supuestas reencarnaciones de Ganesa se produjeron incluso hasta no hace mucho.
0:04:27 Muraba... se llama de otra manera, el tipo.
0:04:33 Muraba Gosejen.
0:04:36 Era un braham de pohona que mediante abstinencias, mortificaciones y resos, pretendía hacerse con la salvación.
0:04:46 Y su piedad fue al fin recompensada.
0:04:50 Y mismísimo dios Ganesa se le apareció una noche, una visión nocturna,
0:04:56 y le prometió que una parte suya, una parte del propio dios, residía en él, residiría en él.
0:05:04 En Muraba Gosejen.
0:05:07 Y también en sus descendientes hasta la séptima generación.
0:05:11 Esto sucedió en el año 1640.
0:05:14 Así que se supone que Muraba Gosejen y sus descendientes se hicieron dueños del poder de hacer milagros.
0:05:21 Milagros tales como curar enfermedades o predecir el futuro.
0:05:26 Dicen que el descendiente de la tercera generación realizó un trabajo maravilloso.
0:05:31 Parece que el ejército musulmán de Jire Dabad invadió el país de Maharastra
0:05:38 y tras saquear y quemar la ciudad de Pohona...
0:05:42 Bueno, parece que una partida de invasores fue hasta la casa de Gosejen para ponerla bajo contribución.
0:05:50 El que llevaba encanado dentro de sí a Ganesa, o sea, el tal Gosejen, sin igual someterse al llugo.
0:06:03 Y yo adentro tengo un dios, así que no les voy a ceder mi casa.
0:06:08 Yo confiando en que la influencia, imagínate, si vos tenés dentro de ti aún dios, no cualquiera te va a llevar por delante.
0:06:17 Bueno, le dijo todo esto y los musulmanes se burlaron de esta superstición
0:06:23 y para hacer lo que dará un ridículo le hicieron un regalo a quien se decía contenedor de Ganesa.
0:06:31 La leyenda fue aceptada, pero en verdad los musulmanes le enviaron carne de vaca,
0:06:35 que era una abominación ante los ojos de una hinduista.
0:06:39 Pero para sorpresa de los musulmanes, Gosejen transformó la carne de las bandejas
0:06:49 en las flores más finas y sagradas para los hindúes.
0:06:53 Los musulmanes entonces reconocieron el milagro y le concedieron unas tierras, no específicas,
0:06:59 pero no se lo contó.
0:07:01 ¿Quién es su terrolón?
0:07:03 Durante años y hasta hace poco las acciones del sucesor y portador de Ganesa
0:07:09 eran observadas cuidadosamente por considerarse proféticas.
0:07:14 Así que si una noche determinada del año este hombre tenía un sueño pacífico,
0:07:19 se predecía paz nacional.
0:07:21 Si se despertaba agitado, se preveían calamidades generales y todo por el estilo.
0:07:26 El combinar es muy fácil, como se ve.
0:07:29 Durante siete generaciones se mantuvo esta creencia.
0:07:33 Después de la muerte del séptimo descendiente no se sabe dónde podrán dar el espíritu del dios Ganesa
0:07:41 o si es que lo encarna a alguien.
0:07:44 De todos modos, alguna vez en este mismo programa nosotros hemos glossado la decadencia de los Gosejen
0:07:53 de algunos datos acerca del último portador.
0:07:59 Hay un dato acerca de tiempos recientes.
0:08:03 El capitán Mur, en el siglo XX, hizo una visita al sexto descendiente.
0:08:17 Parece que no era un tipo muy poderoso que digamos.
0:08:28 Sin embargo, lo atendió como pudo y nada más.
0:08:37 Todo los años hacía una cena para beneficiar a los que creían en él.
0:08:48 Iban muy pocas personas y recibían beneficios bastante modestos.
0:08:58 Tal vez por eso iban pocos.
0:09:00 Parece que el grado de intervención del dios en las generaciones de esta familia iba decasiendo en cada generación.
0:09:13 Además, siete generaciones, yo no lo recuerdo bien el año que dijo, pero en el año 240, y si fuera el siglo XX, el capitán Mur,
0:09:19 alguien lo engañó a Mur.
0:09:21 ¿Le esbanda por ahí?
0:09:23 Es muy probable que se lo engañara a Mur.
0:09:26 Es más fácil engañar a un capitán inglés con una leyenda como esta, que tener dentro de uno al dios Ganesha.
0:09:38 Es decir, ¿cómo hacemos para hacerle creer a capitán Mur que vos Barton tenés adentro a Ganesha?
0:09:46 Lo engañamos.
0:09:49 Vamos a buscar al verdadero descendiente, hacemos una investigación histórica, le decimos que eso vos, y durante una hora sostenemos el engaño.
0:09:58 Lo engañaron, amor.
0:10:00 ¿Habrás puesto un asado?
0:10:02 La respuesta a la mayoría, de hoy, es el 93% de los misterios que pretenden no tener solución.
0:10:10 Un misterio que todavía no engrupieron.
0:10:14 No era uno cualquiera, y aunque fuera el séptimo descendiente, y tampoco lo tenía adentro al dios.
0:10:21 Pero yo creo que no era el séptimo descendiente, era el tipo cualquiera.
0:10:26 Este, le dije, el tipo estaba comiendo un sangue.
0:10:29 Ni siquiera el supuesto José Llan estaba advertido de eso.
0:10:35 Pese a este, el tipo estaba yegeno a todos.
0:10:38 Este es el sector descendiente de los José Llan, aquellos que en bla bla bla.
0:10:45 Y el tipo miró y ya se dio cuenta de cuál era su papel.
0:10:49 Lo cierto, urano, muraba.
0:10:53 Ese tipo, chino, comiendo un sangue.
0:10:56 Y Mur escribió un libro así grueso.
0:11:00 Era más fácil comer el sangue.
0:11:03 Es un detalle, detalle que no tiene que ver con la acción general,
0:11:10 por una parte la puesta en escena.
0:11:12 Pero son lindas las deidades hindúes, ¿eh?
0:11:15 Uno que me entendió.
0:11:19 Totalmente un director en el escenario.
0:11:22 Bueno, son lindas qué?
0:11:24 Las deidades del hinduismo, así todas llenas de flores y cosas.
0:11:28 Lenas de manos en general, sí.
0:11:30 Y colores de vicisitudes.
0:11:33 Como vicisitud, en realidad la palabra vicisitud, se la debemos a vicisitud.
0:11:39 Vicisitud quiere decir también, abatar.
0:11:43 Una abatar es una de las formas que adopta vicino.
0:11:47 Y por extensión se dice vicisitud también a un episodio, a una aventura, etcétera.
0:11:54 Peripecia.
0:11:56 Bien, queridos amigos, hemos ido a ver a Jorge Doryo,
0:12:00 a ver qué podía decir de estos dioses como Avalokitesvara,
0:12:04 como Visnu, como Parvati, la negra, como Kali, la mamá, justamente,
0:12:09 este elefanteásico ganada.
0:12:12 Está bien, con muchas manos revoliándolas.
0:12:14 Y el pájaro Garuda.
0:12:16 Mi padre no podría evitar intervenir aquí y decir algo,
0:12:21 una rima que a él le gustaba mucho.
0:12:23 Garuda, soy triste por la cerda, mi corazón tranquilo de dos.
0:12:26 Garuda, que era un pájaro que vos te lo podías montar.
0:12:30 Y mientras te llevaba volando a tu destino, te iba dando consejos y hablando de filosofía.
0:12:35 Eso son pájaros y no los estúpidos canarios que tenemos en otra cosilla.
0:12:45 Estaba pensando, Alejandro Quim, los elefantes, a los que Aristóteles miró con curiosidad,
0:12:51 sostenía de una manera medio pavota que durante el tiempo de preñés de una elefante,
0:12:57 que es de unos 660 días más o menos, el elefante macho conservaba su castidad,
0:13:03 porque respetaba el embarazo del elefante.
0:13:05 Ah, sí, el elefante respetuoso.
0:13:08 Lo cual me explica por qué un tipo con cabeza de elefante es el símbolo de alegría,
0:13:12 si tiene que esperar tanto tiempo para divertirse.
0:13:15 Pero de todos modos, yo creo que esta leyenda esconde más que nada advertencias
0:13:19 para las madres que toda costa insisten en mostrar a sus rectores,
0:13:22 escondiendo los alperigros de, por ejemplo, la pareja de la cabeza de la mañanina.
0:13:26 De más de uno de esos tipos que cortan la mayonesa con la mirada.
0:13:30 También es una especie de advertencia para los alquilinos o los dueños de propiedades
0:13:34 que insisten en desalojar a alguien sin saber si no es un descendiente de gocellén bendecido por gané.
0:13:43 Y les puede convertir la carne en flores.
0:13:45 Bueno, díselo y quería hablar, pero va a ser mejor en su capítulo.
0:13:48 Con lo cual, todos sabemos lo difícil o lo fácil o lo bella que puede ser la vida por una cabeza.
0:13:54 Por una cabeza, canta Carlos Gardel, dedicado a Ganesha, el Dios con cabeza de elefante.
0:14:16 Por una cabeza de un noble potrillo que justo en la raza afloja al llegar y que al regresar pares y decir
0:14:28 no olvides ser hermanos, no sabés lo hay que burar.
0:14:32 Por una cabeza, me tejón de un día de apesa, coqueta y resueña a mujer.
0:14:40 Y al curar sorriendo del amor que está mintiendo que mai no uno verá todo con mi querer.
0:14:49 Por una cabeza, canta Carlos Gardel, dedicado a Ganesha, dedicado a Ganesha, dedicado a Ganesha,
0:15:00 borra la tristeza, calma la margura.
0:15:06 Por una cabeza, y el Dios me olvida, no importa perderme mil veces la vida para que vivir cuanto desenganio.
0:15:23 Por una cabeza, yo pure mil veces no vuelvo a insistir, pero si un mirar me llenaría al bajar.
0:15:33 Tu goja de fuego, con cara de tiro a entrar, basta de carreras.
0:15:39 Y acabo la pimba, un final rellido, yo no vuelvo a ver.
0:15:45 Pero si algún pinto llega a ser fita el domingo, ya me juego entero, ¿qué le voy a hacer?
0:15:54 Por una cabeza, coja la locura.
0:16:03 Tu goja que bella, borra la tristeza, calma la margura.
0:16:11 Por una cabeza, y el Dios me olvida, no importa perderme mil veces la vida para que vivir.
0:16:29 Era Carlos Gardel en la venganza, será terrible, por una cabeza.
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