El joven Napoleón Bonaparte y algunas señoras mayores

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0:00:00 Hay aquí un relato interesante sobre el joven Napoleón y algunas señoras mayores.
0:00:09 Él te sabe que casarse con una señora mayor en un tiempo
0:00:14 solía hacer la salida económica de muchos jóvenes ambiciosos.
0:00:18 Buscaban una señora más grande pero rica y salvo a ver cantor y todos los guitarristas.
0:00:27 En cierto momento de su carrera, además de numerosos encuentros con muchachas que le gustaban mucho,
0:00:33 Napoleón tuvo citas con damas que sólo podían resultar para su conveniencia económica.
0:00:42 Parece que garanteaba con las hermosas pero también con las millonarias,
0:00:46 tuvieran las características que tuvieran.
0:00:50 En el año 1795 Napoleón andaba por París.
0:00:54 Lo había convocado el ejército para servir así poco después o antes de tal vez,
0:01:01 o en consecuencia de los episodios de la Vendée.
0:01:05 La Vendée, que está aquí mal escrito, es una región al oeste de Francia
0:01:14 donde hubo un brote realista muy fuerte que derivó en acciones armadas, muy considerable.
0:01:26 Y allí está la novela de Vitor Hugo, amigo de este programa que venimos citando en estos días,
0:01:34 que se llama 93.
0:01:36 93 es una novela donde aparecen los episodios de la Vendée.
0:01:43 Y allí está la famosa historia del Marqués del Antenac.
0:01:46 Ah, aquel del barco.
0:01:48 Aquel que comandaba un barco.
0:01:50 Contenido.
0:01:51 No sé si me lo acuerdo, pero...
0:01:53 Me lo acuerdo.
0:01:54 Por ahí es un personaje de Vitor Hugo, no creo que...
0:01:57 El caso de que el Marqués del Antenac comandaba un barco durante estos episodios de la Vendée.
0:02:07 Y resulta que un marinero olvidó atar un cañón y vino una tempestad y el cañón,
0:02:17 Dios mío, empezó a andar de un lado para otro como se apaso en carro,
0:02:20 poniendo en riesgo la vida de los marineros, incluso la estabilidad de la nave misma,
0:02:26 ya que el cañón estaba suelto en cubierta.
0:02:29 Pero el mismo marinero, poniendo en riesgo su propia vida,
0:02:34 alcanzó a sujetar el cañón en una acción heroica y a amarrarlo y salvó de este modo la nave.
0:02:41 Entonces el Marqués del Antenac, una vez que terminó la tormenta,
0:02:45 lo llamó este marinero y lo condecoró primero por su valor
0:02:52 y después lo mandó a fusilar por haber descurrado sus tareas.
0:02:58 Ese era el Marqués del Antenac.
0:03:00 Bueno, pero volvamos a Napoleón.
0:03:02 Napoleón estaba en París y estaba preocupado por su futuro.
0:03:07 Lo que dice Avera, conseguir una señora con fortuna,
0:03:12 capaz de proporcionarle el confort y las buenas relaciones que necesitaba.
0:03:17 Primero pensó en casarse con una prostituta arrepentida,
0:03:22 Madan la Bouchardie, que tenía 54 años.
0:03:26 Era bastante adecuada para irse arrepintiendo.
0:03:36 Es casi un arrepentimiento inevitable por falta de cliente.
0:03:40 Bueno, parece que Madan había juntado mucho dinero,
0:03:44 pero Napoleón la inspeccionó y no alcanzó a entusiasmarse demasiado.
0:03:53 Y muy poco después se interesó por otra señora.
0:03:57 Napoleón solía visitar en aquel tiempo a Barrá, uno de los miembros del directorio,
0:04:01 y se le quejaba.
0:04:03 Decía que un hombre solo no tenía necesidad,
0:04:06 pero que él tenía una familia en córsega muy numerosa,
0:04:09 que la pasaba mal, y Barrá le sugirió que tuviera paciencia.
0:04:14 Pero Napoleón estaba desesperado.
0:04:16 Entonces Barrá le dijo, mire,
0:04:18 el único medio para progresar rápidamente es el matrimonio,
0:04:22 tal como ocurría en el antiguo régimen.
0:04:24 Todos los nobles se arreglaban su ruina,
0:04:27 casándose con nobles de menor apellido, pero más ricos.
0:04:30 Contraían patrimonio.
0:04:32 Exactamente, en ese caso.
0:04:34 Bueno, en el momento en que Barrá le estaba dando estos consejos,
0:04:38 entró a la sala Madan de Montancier.
0:04:41 Madan de Montancier se llamaba en realidad Marguerite de Briné.
0:04:46 Había nacido en 1730.
0:04:49 Incurrimos en esta proligida para decir que tenía entonces 65 años.
0:04:55 Podríamos cantar algo de ella.
0:04:58 Había viajado a América, había sido actriz del Teatro Frances,
0:05:03 una amante le había puesto una pequeña sala de espectáculos en Versález.
0:05:09 Había sido detenida durante la revolución
0:05:13 y a punto de ser ejecutada, consiguió la libertad.
0:05:17 Bueno, muy coqueta, Madan de Montancier llegó a lo de Barrá,
0:05:21 mientras como dijimos, el Barrá estaba conversando con Napoleón.
0:05:26 Madan se quejó un poco de la inseguridad que reinaba en París
0:05:31 y dijo, vosotros sois hombres y militares, saldréis sanos de esto.
0:05:38 Pero cuál será nuestra suerte, mujeres solas y sin apoyo, dijo la vieja.
0:05:44 Y cuando decía esto, le dirigí unas miradas a Napoleón.
0:05:49 Napoleón tenía 29 por aquel entonces.
0:05:52 Y un aporte preguntó, no, dice, la señora no tiene un marido.
0:05:59 No habrá preguntado así porque parece película argentina.
0:06:04 La señora no dijo la vieja, yo qué sé.
0:06:09 Y por ahí Napoleón dijo, podésseis, está segura de que no os faltarán unos brazos que os defiendan,
0:06:16 dijo Napoleón, me está postulándose mitad por cumplido.
0:06:22 Barrá interrumpió la conversación y dio algunos datos acerca de Madan de Montancier.
0:06:28 Dijo que no tenía esposo, que tenía una buena fortuna, etcétera.
0:06:32 Y Napoleón se empezó a entusiasmar con la idea de conseguir la mano de Madan de Montancier.
0:06:40 Cuando la señora abandonó la casa barba, le dijo a Napoleón que ya tenía todo cocinado para que se casara.
0:06:47 Para que Napoleón se casara con la vieja.
0:06:50 Sólo le recomendó que economizara a lagos y esperara.
0:06:55 Y una parte esperó.
0:06:57 De Barrá fue a lo de Madan de Montancier, le preguntó si quería casarse
0:07:03 y la respuesta de la dama fue que no quería ninguna otra cosa.
0:07:08 Deseaba terminar su vida casada y tener un protector, dijo la vieja.
0:07:15 Muy bien, inmediatamente Barrá dijo, os he encontrado lo que necesitáis.
0:07:21 Se trata de aquí el joven militar al que visteis en mi casa y que se fijó mucho en vos.
0:07:28 Os encontró encantadora y está dispuesto a demostraroslo.
0:07:33 La respuesta de Madan fue un poco de compromiso.
0:07:38 Ay, pero sí podría ser su madre.
0:07:42 Barrá minimizó el hecho y dijo que aquel muchacho tenía una mentalidad
0:07:49 que sobrepasaba a sus 29 años.
0:07:52 Así que Barrá armó una cena para que los futuros esposos se encontraran.
0:07:58 La comida fue muy alegre.
0:08:00 Durante el postre se hicieron proyectos para el porvenir.
0:08:04 Buena parte hablaba de su familia a la que esperaba hacer conocer a Madan de Montancier.
0:08:11 Se despidieron con la idea de casarse en Reims.
0:08:15 Pero vino a suceder algo.
0:08:18 Apolió su puso ingenuamente que la unión con una dama de esas características con una edad tan adelantada
0:08:28 implicaría solo unos años de no leicasto acompañamiento.
0:08:34 Pero se equivocó.
0:08:37 Sistemos al cronista.
0:08:42 La noche siguiente a la cena, en la de Barrá,
0:08:46 Madan de Montancier invitó a una parte a su casa.
0:08:53 Cuando una parte llegó, se encontró con la señora apenas vestida.
0:09:01 Lo esperaba entre paredes decoradas con escenas campestres
0:09:06 en las que unos pastores rendían vigorosos homenajes a extaciadas pastoras.
0:09:14 Con toda clase de ademanes voluptuosos, Madan invitó a Napoleón a la cama.
0:09:27 Y, buena parte, usó.
0:09:34 Salió rajando.
0:09:39 Dijo que las jornadas de la bandre lo llamaban a la gloria
0:09:45 y que debía incorporarse al ejército del oeste para reprimir aquella revuelta realista, etc.
0:09:51 Ya cuando dijo esto estaba en la esquena.
0:09:58 Y ya que estaba corriendo siguió y llegó a la carrera a la casa de Barrá
0:10:05 y le dijo, ciudadano representante, mi matrimonio exige una reflexión y ya la hice.
0:10:12 Quédese usted, comandante de Montancier, si quiere.
0:10:18 Sin embargo, tiempo más tarde, como bien sabemos, otro intento de Barrá dio resultado.
0:10:27 Porque justamente Barrá el que le presentó a José Trina.
0:10:33 Que andaba con él por otra parte.
0:10:36 Con Barrá.
0:10:37 Andaba con Barrá.
0:10:38 Me dio que le quería sacar de sí.
0:10:39 Le quería sacar de sí más exactamente.
0:10:41 Y se la presentó a Napoleón para ver si el tipo picaba y la mena lo dejaba un poco tranquila.
0:10:50 Y resultó.
0:10:52 Era como resultó.
0:10:55 Así que esta es la historia de Napoleón y Madame de Montancier.
0:10:59 Y también la breve y pequeña historia de la prostituuta repentida Madame de la Bouchardie.
0:11:09 ¿A quién dedicar estas historias de juventud de Napoleón?
0:11:14 Bueno, los que se arrepienten a tiempo, Alejandro,
0:11:17 cuando el arrepentimiento tiene algún sentido.
0:11:20 Vamos a arrepentirse de ciertas cosas tan tarde cuando uno ya casi está excluido de ciertas situaciones no tiene tanto valor.
0:11:27 Claro, qué vivo.
0:11:28 Entonces, claro, los que renuncian cuando...
0:11:30 Claro, pues no, incluso renunciar a lo que uno no quiere.
0:11:35 Se llama más fácil de las renuncias.
0:11:39 Renunciar que se dole a imperial ruso y lo detectas.
0:11:43 Bueno, pues se digo, a los que renuncian a tiempo y a aquellos que quieren.
0:11:48 Esta vez hemos ido a la discoteca.
0:11:51 ¿Qué contamos? El discoteca haría esta historia.
0:11:55 Napoleón y algunas damas.
0:11:57 ¿Qué sí? No es, ¿no? Cuando la vio a la señora entre medio de esas paredes que incitaban a los placeres venerios.
0:12:08 A medio vestir la señora Grande.
0:12:10 La vieja dice con ademanes.
0:12:12 Con ademanes voluctuoso lo invirtió a la cama.
0:12:14 ¿Andá a saber qué ademán le haría?
0:12:16 Era los de la cancha, le haría.
0:12:19 No, para mí era el visaje de la cara.
0:12:24 Guiñar un ojo y abrir un cacho a la boca.
0:12:26 Girar la catrera y cabecar.
0:12:28 Girar la catrera.
0:12:30 Digo yo, ¿no?
0:12:32 Bueno, le explicamos todo esto al discotecario.
0:12:35 Fuimos cuidadosos en la exposición.
0:12:38 Bueno, meticulosos.
0:12:39 Napoleón, su relación con señoras de cierta edad.
0:12:43 Y nos dio una chacarera que se llama la vieja.
0:12:46 Muy bien elegida.
0:12:48 Seguramente por eso.
0:12:50 Y es la versión de los juancahuá.
0:12:53 Así que inmediatamente en honor a Madame de Montanciega,
0:12:57 a Madame de la Bouchardie,
0:12:59 escucharemos la vieja adelante.
0:13:13 Ahora ha sido ensalavina.
0:13:16 Se fríao en la guitarra de coco y calcino.
0:13:20 Girar la cacarera.
0:13:22 Girar la cacarera.
0:13:24 Girar la cacarera.
0:13:32 En guitarra y bandón.
0:13:34 Mano el guitarra.
0:13:36 Bongo el guitarra.
0:13:40 она
0:13:46 eleind according to the
0:13:54 but
0:13:56 Chacadela, chacadela, trumba, fiesta, cadela, cruta
0:14:01 Por ahí, para ver que os dí, den, peben, sana, vina, nunca
0:14:07 Tu-un, tu-un, tu-un, tu-un, tu-un, tu-un, tu-un, tu-un, tu-un, tu-un, tu-un, tu-un, tu-un, tu-un, tu-un, tu-un, tu-un, tu-un
0:14:16 Tu-un, tu-un, tu-un, tu-un, tu-un, tu-un, tu-un, tu-un, tu-un
0:14:22 Hoy vidito, ahí con lagruntas,
0:14:25 Medio brava, amor de más
0:14:27 Aunque arriscas y cruzadas,
0:14:29 Sur Rodrigo, para bailar
0:14:32 Ai-pu-i-chi-ta-ra, ta-ta-ra-ri-ta
0:14:35 Si para, para ganar el pulso
0:14:38 Si para, si traerá
0:14:40 Si te dice algún amigo
0:14:42 Paca menor a Tunkita
0:14:45 Va a ser escuchar la vieja oral
0:14:48 Mai bien sensitiva
0:14:50 ¡Una vieja, yo, una vieja!
0:15:00 ¡Una vieja, yo, una vieja!
0:15:03 ¡Si la vieja, yo, no está venga!
0:15:06 ¡Ven, ven, ven, ven!
0:15:08 ¡Ya caerá, ya caerá!
0:15:10 ¡Una vieja, ya caerá!
0:15:13 ¡Por ahí está, ve, yo, dime, ven!
0:15:16 ¡Ya la vina nunca!
0:15:21 En la venganza será terrible hemos escuchado
0:15:23 los huancahuá interpretando la vieja