Transcripción automática
0:00:00 el misterio del trueno y las tormentas, es la misma signo.
0:00:06 Vamos a contar algunas características de las divinidades chinas que manejaban asuntos meteorológicos.
0:00:15 Así que vamos a describir a los dueños del rayo, el trueno y los vientos.
0:00:20 En China no era como en estos tiempos de superpulsión, a hacer psicológica.
0:00:27 La gente era superficiosa, exactamente superficiosa, creía que cuando tronaba era por obra de una dignidad encarcada.
0:00:38 No como ahora que se creó el control de diferencias de potencial, de corriente chalecino, que se establezca en un sentido, un acto.
0:00:48 En lugar en el que se ubicaba las divinidades, tenía la misma estructura jerálquica del imperio chino.
0:00:59 Cada divinidad pertenecía a una oficina o a un ministerio muy parecido a los que se corgaban en la tierra.
0:01:06 Existía, por ejemplo, el ministerio del trueno y de las tormentas.
0:01:10 Estaba compuesto por un gran número de funcionarios, algunos dicen que 25.
0:01:16 Los principales de estos funcionarios, funcionarios, eran Lei Tzu, presidente del ministerio,
0:01:22 Lei Kung, que era duque del trueno, Feng Po, dueño del viento y Yu Shi, el señor de las lluvias.
0:01:30 Cada uno de estos funcionarios principales tenía su cargo un séquito de criados y arcausiles corredores libres y alquilones de poca monta.
0:01:42 El presidente de aquel ministerio, Lei Tzu, tenía tres ojos por falta de uno.
0:01:48 Montaba un unicornio negro y era el déjame sort plen potencialio de las leyes que gobernaban la distribución de las nubes y las lluvias.
0:01:56 Sus apariciones no eran muy frecuentes, estaba encargado de la administración y en general hacía laburar a otros funcionarios.
0:02:05 El organizador se quedaba en la casa.
0:02:08 El que se encargaba en verdad de manejar el trueno era Lei Kung,
0:02:12 que era representado por un demonio fero negro y con alas amursiélagos, con garras, cabeza de mono y chico de águila.
0:02:20 Lei Kung sujetaba en una mano un cincel de acero y en la otra un artizo con el que golpeaba los numerosos tambores que llevaba atados a la cintura.
0:02:31 Y el razon lo manejaba como una lanza.
0:02:34 Cuentan que Lei Kung era un poco torpe y a veces se equivocaba y mandaba rayos donde no era.
0:02:41 En una oportunidad, parece que a una pobre anciana que vivían que han sido, un razo le partió, un razo le partió.
0:02:49 Inmediatamente se escuchó una voz desde el cielo que decía,
0:02:52 Disculpe, he cometido un error.
0:02:57 Poco más tarde cayó del cielo una botilla y volvió a escucharse la voz.
0:03:01 Aplique su contenido en la región afectada y se curará la anciana señora sin crucciones y el brazo se le compusto.
0:03:10 Pero los aldeanos, considerando al contenido de la botella la medicina divina,
0:03:16 quisieron afanarse la anciana y esconderla para uso futuro.
0:03:20 Pero ni aún varios de ellos juntos podían levantar aquella botella del cielo.
0:03:25 Un rato más tarde la botella divina se elevó sola en el aire y desapareció en las regiones celestes.
0:03:34 En una oportunidad, Lei Kung, el duque del trueno, hizo una aparición en la tierra y se quedó enredado en las ramas de un árbol por accidente.
0:03:44 Un muchacho llamado Yeh-Cien-Chao lo encontró atrapado.
0:03:48 La civilidad volvió a hablar.
0:03:50 Yo le echo, si me libero te recompensaré generosamente.
0:03:56 Yeh-Cien-Chao cortó ramas en Sanchón de Iduras y liberó al Dios.
0:04:03 Al día siguiente el ministro recibió un libro mágico.
0:04:06 Consultada esa obra, podía provocarse el trueno y la lluvia, pero también curar en formidades y aliviar penas.
0:04:13 En verdad habían colaborado otras divinidades, las de la lluvia y la de la pena, para que Lei Kung pudiera agradecer al muchacho.
0:04:23 Cuentan que un día, Yeh-Cien-Chao, este muchacho, se emborrachó y se durmió en un templo.
0:04:30 Un magistrado quiso de temerlo.
0:04:33 Entonces el muchacho diseñó una lluvia particular sobre el magistrado.
0:04:38 Yo vi a sólo sobre el...
0:04:40 La lluvia estaba acompañada de truenos generales.
0:04:44 El juez muerto de nieve, mojado hasta la pera, dio por terminado el caso sin castigar al acusado.
0:04:52 Yo escribo algunas cosas sobre lluvias particulares.
0:04:55 Sobre casos de lluvias particulares.
0:04:58 Casas sobre las que siempre llueve, un pirata que siempre llevaba sobre sí una especie de tormenta personal.
0:05:06 Y este seguramente va a engrosar la lista.
0:05:09 Aquel magistrado, aquí en el joven Yeh-Cien-Chao, para defenderse de un adresto, le impuso una lluvia particular.
0:05:19 Algunos de nosotros también tenemos razones particulares.
0:05:24 Algunos de nosotros siempre están ulados.
0:05:27 Y siempre hay algunas nubes de tristeza que llevamos a todas partes.
0:05:37 ¿Por qué está bien?
0:05:39 Te dirá que como...
0:05:43 ...un membro de una secta supersticiosa...
0:05:47 Conforme la cual todo lo crea uno, te dirá que en realidad no son condiciones meteorológicas individuales,
0:05:53 sino que uno desde dentro de sí mismo, dentro de su psique, produce unas sensaciones que le hacen pensar que está nublado,
0:06:00 cuando por ahí no lo está.
0:06:02 Bueno, eso es una forma superpeticioso.
0:06:05 La otra es que efectivamente hay una tormenta de dos metros de lado que está lista para nosotros solos.
0:06:14 El caso este de muchacho Yeh-Cien-Chao fue después un benefactor que, gracias al libro recibido,
0:06:23 salvó de la anglia muchas acciones trayendo lluvias a tiempo.
0:06:28 ¿Quién manejaba los bienzos?
0:06:30 Era como dijimos al comienzo, Fengpo.
0:06:32 Era un anciano que en las alturas tenía aspecto de mandarín.
0:06:36 No de mandarina, sino de mandarín, es decir, de hombre de reciénada cultura.
0:06:42 Los mandarines se parecen justamente a esta figura que algunos recuerden en el café que se llamaba así.
0:06:51 No se llamaba los mandarines del café, sino a los mandarines.
0:06:55 Siempre me llamó la atención, ese comienzo más propio de un complemento indirecto.
0:07:00 Hay una café, te diga, pero la marca del café era a los mandarines.
0:07:06 Creo que no existe ya ese café, ¿no?
0:07:08 Yo he visto en algunos.
0:07:10 Igual, a los mandarines, dejaros tranquilo.
0:07:13 Sí, completar algo, otra cosa.
0:07:15 Bueno, ese aspecto tiene un mandarín, es decir, un equipo como...
0:07:21 Como Ronald Kalman en La Posada de la Sexta Felicidad.
0:07:26 Bien, el caso es que este Fengpo usaba dos abanicos para crear viento ligero.
0:07:32 Hay una explicación del viento mucho más razonable que la diferencia de priorización entre un centro ciclónico y un centro anticyclónico.
0:07:44 No, hay una divinidad con unos abanicos.
0:07:48 Y que sea China, esta divinidad conviene a esta relación que hay entre los abanicos y los chinos.
0:07:57 Más entre los abanicos es las pantallas que se regalan en las cintas verías.
0:08:02 Y como todos sabemos, no son atendidas por japoneses, que si bien se mira son especies del chino.
0:08:08 Es decir, comprobar entonces si la verdadidad, y esto seguimos adelante.
0:08:20 Fengpo usaba dos abanicos para crear el viento, pero los vientos fuertes los acabo de hacer dentro de un saco de cuero.
0:08:28 Pero tenía como el mismo modo que volo y no hubo comunicación de curos en la civilización china,
0:08:35 en la civilización rida, sino hasta que ya fuemos a los tardes.
0:08:39 Es decir, cuando ya hubo otra civilización, escortaba en el vacalado.
0:08:43 Y sin embargo, también los chinos creían que había una divinidad que tenían cerrada los vientos en sacos de cuero.
0:08:52 ¿Qué significa esto? Que hubo comunicación entre ambas civilizaciones.
0:08:57 No, realmente, no es una idea tan loca como para que no se le pueda ocurrir a cualquiera.
0:09:02 Un viento lo tenga uno encerrado en una bota de cuello.
0:09:05 A poco que no entiese a pensar cosas poéticas sobre el viento, la quinta o sexta que se lo ocurrirá es que el viento está encerrado en una bota de cuello.
0:09:15 No es necesario que haya en secos de iglesia hasta la china,
0:09:22 y al revés para que esa idea empiece a abundir.
0:09:27 Esto ha pasado con la curiosa palabra griega, teo, no curiosa, la palabra que quiere decir Dios.
0:09:34 Lo curioso es que cuando llegaron los españoles de América,
0:09:39 advirtieron que en la Guatu, también en el idioma de los aztecas, creo,
0:09:46 también este vocabulo, teo, quería decir Dios.
0:09:50 Chau, dijeron, no los españoles que no dijeron nada en realidad.
0:09:53 Los españoles se limitaron a escribir inusualmente en los chiflán,
0:09:57 pero después de esos tipos que escriban los tribus,
0:10:01 yo no, porque seguro que fueron los griegos.
0:10:04 ¿A qué van a ir los griegos?
0:10:06 Esa es la única cosa que hay acá, es una palabra que se dice igual.
0:10:09 Se llama casualidad.
0:10:12 Se llama casualidad, si, si, si, y montar toda una teoría sobre una casualidad o material peligroso.
0:10:19 Sí, la única que hay por otra parte.
0:10:22 Y bueno, digo todo esto mientras Fempo sigue agitando abanicos y pantallas
0:10:28 y sigue además sacando la tapa de los cobres de cuero
0:10:32 en lo que, igual que el viejo Eolo, guardaba los vientos juastres.
0:10:37 Algunos dicen que en realidad el viejo Fempo se retiró a algunos sitios
0:10:41 y fue sustituido por Fem y opó una dama que anda por el cielo sobre el lomo de un tigre,
0:10:49 que creo menos, y según la velocidad de su desplazamiento se producen vientos más o menos fuertes.
0:10:55 Ella pasa y levanta bien, como quien levanta por la veta.
0:11:00 A él eso no creo, eh. Es como por eso una superstición tardía.
0:11:08 Yushi era el señor de la lluvia. Su trabajo no era demasiado poético.
0:11:14 Sentado en una nube echaba agua sobre la tierra con un bidón.
0:11:22 Sin embargo, Yushi tenía una especie de melancolía porque a él,
0:11:26 que se tomó el alcance superior y en mis obras de la lluvia, la lluvia no lo mojó.
0:11:31 Como era de aquellas personas tiernas que gustan de caminar bajo la lluvia,
0:11:36 esa clase de personas caminan bajo la lluvia, andan de ropa,
0:11:40 le ponen a sus niños nombres poéupicos que piensan en un amigo y el amigo las llama por teléfono
0:11:46 y que creen que si uno desea mucho, una cosa, esta cosa sucede.
0:11:50 Esta dignidad y Ushin era esa clase de personas, pero lamentaba no poder,
0:11:55 por lo menos mojarse bajo la lluvia. A lo mejor podía pensar en un amigo y lograr que se los llamara.
0:12:01 Pero mojarse bajo la lluvia no, ciertamente.
0:12:05 Bueno, pienso en otra, en la forma griega de la lluvia.
0:12:14 En un principio pensaban que los vioces orinaban sobre la tierra,
0:12:21 que era la explicación de la lluvia, podría ser, podría ser.
0:12:28 Y como hemos dicho alguna vez, el nombre que distingue al cielo,
0:12:33 en el Lidio Magriero, que parecen 8, al nombre que distingue al tengra,
0:12:41 al norinal o a todo lo que tenga que ver con los Coríos, con gan.
0:12:52 Pero también con el Lidio Magriero.
0:12:57 Ahora prueba de eso, como usted sabe, la evaporación de la agua.
0:13:08 Hemos dicho de algunas semanas que el páscaro Shang y Ang, en una pata sola,
0:13:12 era para algunos el páscaro mágico que provocaba la lluvia,
0:13:15 y lo hacía bebiendo agua y vertiendo la de las alturas.
0:13:19 Un gato más sobre el Shang y Ang, podía beber los mares hasta secarlos,
0:13:24 y luego lanzar esas aguas nuevamente hacia la tierra.
0:13:27 Y ahí puede haber nacido la superstición, según la cual el agua de la lluvia
0:13:32 proviene de la evaporación de los mares.
0:13:36 La verdad es que ese páscaro, el que absorbe el agua de los mares,
0:13:43 pero la gente, en su afán de explicar todo conmigros, inventó esto de la evaporación.
0:13:49 Que es evidentemente mucho más poético.
0:13:51 Un agua que se vuelve que cambia de estado, y del líquido se torna gaseoso,
0:13:56 y que asciende hacia arriba, y se transforma en nubes,
0:13:59 y es una idea mucho más poética que un pájaro que toma.
0:14:09 Esto es toda acerca del Ministerio del Trenes de las Tormentas,
0:14:13 parte de la burocracia celestial china.
0:14:17 A Leico, Alejandro.
0:14:19 Por dos motivos.
0:14:21 Primero porque me gusta esta idea de lo que reconoce sus errores,
0:14:26 que tiene culpa y que trata de sus carácteros.
0:14:29 Y después porque me gusta mucho esto a todos,
0:14:31 y me parece el cantante del trueno.
0:14:34 El duque del trueno.
0:14:35 Escucharemos ahora el eixum, el duque del trueno,
0:14:39 en la interpretación del valse que se llama gota de lluvia.
0:14:42 Claro, me gusto.
0:14:44 Alguna vez tenemos escrito nosotros acerca de las equivocaciones de los dioses,
0:14:51 y sus consecuencias venturosas.
0:15:00 Ahora tenemos que buscar canciones con lluvia,
0:15:05 que hemos encontrado un tango de mal tiempo que se llama ventarrón,
0:15:11 que cantará inmediatamente Don Carlos Jález.
0:15:26 La canva de los maledos, el del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del
0:15:56 del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del
0:16:26 del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del
0:16:56 del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del del
0:17:26 neo
No hay comentarios. ¡Podés ser el primero en comentar!