Transcripción automática
0:00:00 Bien, tan lo prometido vamos a encarar una pequeña colección de excentricidades de los príncipes.
0:00:10 Así que comencemos ya. Comencemos con Gustavo III de Suecia, un señor que fue asesinado en 1792,
0:00:20 cuando estaba en el Teatro de la Ópera de su capital, de St. Colm,
0:00:26 y en quien se inspiró nada menos que verde, recuerda usted, para escribir un balo y más que era.
0:00:34 Pues bien, Gustavo III era escritor.
0:00:39 En 1786 había escrito la letra de la ópera Gustavo Bassa para enaltecer a su antepasado,
0:00:48 un antepasado, Gustavo Bassa, de la familia, la dinastía Bassa.
0:00:52 Unos años antes había dedicado una obra teatral a enaltecer a otro predecesor en el trono, que era Gustavo Adolfo.
0:01:01 Pero una característica más extraña de Gustavo III fue la siguiente.
0:01:10 Sentía mucho interés por los peligros que podía traer el tomar café.
0:01:17 Ah, ese era el interés. ¿En qué se interesa usted, Magetà?
0:01:21 En los peligros que el café puede ocasionar.
0:01:24 Y entonces investigó largos años sobre eso.
0:01:29 Y para apoyar en bases científicas su aversión al café, obligó a dos criminales, caminantes, no.
0:01:42 A ver, dos caminantes.
0:01:43 No, dos caminantes. Eran dos criminales.
0:01:45 Vamos a ponerles que eran dos criminales, si no parece todo muy arbitra.
0:01:49 Obligó a dos criminales condenados a prisión perpetua, a que tomaran café el primero y té el segundo, durante toda la vida.
0:02:00 Y dispuso dos médicos que los controlaran día y noche para observar cómo progresaba sus alumnos.
0:02:09 Hay que decir, de todos modos, que antes de obtener algún resultado en su investigación,
0:02:16 Gustavo III se apresuró a prohibir el café en todo el reino mientras estuvo en el poder.
0:02:22 No fuera cosa que tuviera razón y se quedara sin prohibir.
0:02:27 Mientras el rey esperaba ver morir pronto al bebedor de café,
0:02:32 el que murió primero fue uno de los médicos.
0:02:39 Luego se murió el otro.
0:02:42 Luego el bebedor de té.
0:02:45 Y después enfermó Gustavo III.
0:02:52 Es un hecho de muerte.
0:02:54 El rey convocó al preso, que había sido obligado a tomar café durante todos los días de su vida,
0:03:00 y por su participación en los experimentos reales le dio la libertad.
0:03:09 Y así termina esta historia.
0:03:11 Y termina. Pareció extraordinaria.
0:03:13 Es buenísima.
0:03:14 Este es solo una de las historias, pero las que vienen no son mejores.
0:03:20 Esta es la mejor de todo.
0:03:22 Viene con moralismo.
0:03:24 Un tipo que examina durante todos los días de su vida a dos tipos,
0:03:28 deseando que uno de ellos muera para tener razón en una teoría, es una historia extraordinaria.
0:03:35 Es una historia de la ciencia, Gali.
0:03:38 Es una historia de toda la ciencia.
0:03:40 La ciencia es así.
0:03:42 La ciencia, diría yo, la filosofía aplicada a la vida es así.
0:03:50 Las personas sueltan un dictamen, y ese dictamen presupone su desdicha.
0:04:01 Por ejemplo, mi mujer me va a hacer desdichado toda la vida.
0:04:04 Esta mujer con la que me voy a casar ahora.
0:04:06 Y los tipos prefieren tener razón.
0:04:08 Antes de que estés feliz.
0:04:09 Antes de que estés feliz, si he equivocado.
0:04:13 Y encima fracasa, porque...
0:04:15 A veces fracasa.
0:04:17 Cada como primero de Inglaterra o otro rey, fue rey a comienzo del siglo XVII,
0:04:22 tenía una gran afición por las telas suntuosas.
0:04:26 Desesperaba por conseguir cortes orientales, finas ceras, etc.
0:04:32 Y en una oportunidad cansada de esperar la llegada de viajantes,
0:04:37 o de esperar a mercaderes renuentes,
0:04:43 Cacu decidió fabricar él mismo su propia seda.
0:04:48 Madis, etc.
0:04:51 Mane usano, Nico.
0:04:53 Y quiso montar en su reino una gran factoría sedera.
0:05:00 Ya se sabe que los ingleses han prosperado, muchos rubros,
0:05:04 pero no en la seda.
0:05:08 Está el famoso gusano de seda, que prefiere vivir en otra.
0:05:13 Las moreras del oriente.
0:05:15 En el oriente. Muy bien.
0:05:19 Este tipo de roo y se compró 10.000 moreras.
0:05:26 Porque había oído que el gusano de la seda,
0:05:30 si comía las hojas de las moreras, muy bien, de 10.000,
0:05:33 y las plantó en un terreno donde años después
0:05:37 se iba a edificar el Palacio del Boqueno.
0:05:43 Jacobo, entonces, pobló estas moreras que se había comprado
0:05:48 en los gusanos pertinentes, no de cualquier gusano,
0:05:52 y no de gusanos de seda.
0:05:54 Tiene gusanos de seda, sí. Muy bien.
0:05:56 Puso los gusanos ahí y se sentó.
0:06:00 Y no les fue bien.
0:06:02 Desgraciadamente, el rey no sabía que había dos clases de morera.
0:06:07 La blanca y la negra me informan aquí.
0:06:15 La blanca y la negra.
0:06:17 La blanca es la que da hojas que comen los gusanos.
0:06:20 Y la negra es la que da las moras que todos conocemos,
0:06:23 que son apreciadas como frutas,
0:06:25 pero a las cuales el gusano no le da ni la hora.
0:06:30 Apenas hace falta decir que el rey Jacobo había plantado
0:06:33 los árboles equivocados
0:06:35 y que los gusanos no colaboraron en su proyecto.
0:06:39 Jacobo había esperado seis años.
0:06:42 La finca se convirtió en un jardín de paseo
0:06:45 del duque de Boquengan,
0:06:48 y luego fue Palacio Real.
0:06:51 Y en un rincóncito del jardín del Palacio, ahí en Londres,
0:06:56 todavía hoy hay una de las moreras
0:07:00 que plantó equivocadamente el rey Jacobo.
0:07:06 Algunos poderosos tuvieron enorme afición por el vino
0:07:10 y emprendieron acciones notables para conseguirlo.
0:07:15 El sultan turco Selim I,
0:07:18 allá, a mediados del siglo XVI,
0:07:21 estaba permanentemente borracho.
0:07:24 Pero aún así, borracho,
0:07:27 y todo se mostraba exigente y exquisito
0:07:30 con los licores que demandaban nada
0:07:34 de rizinos ni de trabrí.
0:07:37 Principalmente pedía vino de chipre.
0:07:41 Dice, no me puedo sostener en pie,
0:07:44 pero traiga una botella de vino de chipre.
0:07:48 En cierto momento se dio cuenta de que sus bodegas
0:07:51 mostraban escasez de aquel vino.
0:07:54 O majestad, le dijeron los esbirros,
0:07:57 hay poco vino de chipre.
0:08:00 Bueno, como chipre estaba en mano de los venezianos,
0:08:04 determinó apoderarse de esa isla
0:08:07 para lo cual tuvo que emprender una difícil
0:08:10 y sanguinaria guerra.
0:08:12 En el curso de esa campaña se registró la matanza
0:08:16 de 30.000 habitantes de Nicosia
0:08:19 y el laborioso acedio de la Plaza de Famagusta
0:08:22 defendía heroicamente durante dos años.
0:08:25 Selim resolvió sus carencias de vino
0:08:29 por aquel sistema tan violento,
0:08:32 pero no se lo pudo beber en paz
0:08:35 porque Venecia, España y el Vaticano
0:08:37 se unieron para hacerle frente.
0:08:39 Y tuvo lugar una batalla
0:08:42 que nos dará pie para...
0:08:45 nos era mano también,
0:08:47 para nombrar a un gran escritor
0:08:49 aquí en la feria de Libro por segunda vez.
0:08:52 Fue la batalla de Lepanto.
0:08:55 Y aún así, el sultán no paró de beber.
0:08:59 Una tarde en el Palacio Top Capy
0:09:03 Selim primero,
0:09:05 disfrutaba en el baño
0:09:07 una de sus botellas de vino chipriota.
0:09:10 Resvaló,
0:09:12 dio con la cabeza en el piso y se murió.
0:09:17 Terminó la historia.
0:09:20 La moral hecha
0:09:22 debía ser la que ustedes ya imaginan.
0:09:27 Cristian IV de Dinamarca
0:09:30 fue el primer jugador de la vida
0:09:33 en el barco de Dinamarca.
0:09:36 También tiene que ver con el vino esto.
0:09:39 Que gobernó hasta 1648.
0:09:41 Una vez por mes
0:09:43 se tomaba unos 30 o 40 vasos de vino en una noche.
0:09:47 Le decía que no había nada tan bueno
0:09:49 para un hombre como emborracharse
0:09:51 totalmente una vez por mes.
0:09:53 Práctica que según ella aseguraba.
0:09:55 Purgar los humores malignos.
0:09:59 El rey Cristian estaba tan orgulloso
0:10:01 de su firmeza en tales rutinas
0:10:03 que las apuntaba en su diario.
0:10:06 Y ahí anotaba una cruz
0:10:08 el día en que tenía que ser llevado
0:10:10 entre varios a la cama
0:10:12 y dos cruces cuando podía regresar solo.
0:10:19 no terminó mal.
0:10:24 Ahora están todos esperando
0:10:26 que le pase algo.
0:10:28 No le pasó nada.
0:10:30 Llegó hasta sus altos días.
0:10:32 Se murió de viejo
0:10:34 y se siguió emborrachando una vez por mes.
0:10:36 Así que tenía razón, loco.
0:10:39 Y sí, tenía razón.
0:10:41 Sopechábamos.
0:10:43 Último caso.
0:10:47 El príncipe Cristian de Holstein
0:10:50 era el gerno
0:10:52 de la reina Victoria.
0:10:55 Había quedado tuerto en una casería.
0:10:57 Gerno había quedado en un casamiento.
0:11:00 Son dos accidentes distintos.
0:11:10 El duque de Cónab,
0:11:13 una vez en vez de acertar a un pájaro
0:11:16 que volaba,
0:11:18 se le encajó en el ojo a su pariente
0:11:21 y se lo sacó.
0:11:23 Cristian no se limitó a ponerse un ojo de cristal.
0:11:26 Sino que tuvo el siguiente berretin.
0:11:29 Encargó un repertorio de ojos de vidrio
0:11:32 de distintos colores y modalidades.
0:11:35 Usaba uno, por ejemplo, enrojecido
0:11:38 cuando estaba refriado
0:11:40 para que la irritación fuera simétrica.
0:11:43 Cristian de Holstein
0:11:46 llevaba la serie siempre consigo
0:11:48 en una cajita especial.
0:11:50 Y estaba tan orgulloso de esta caja de ojos
0:11:53 que a menudo la sacaba
0:11:56 y la mostraba la concurrencia,
0:11:58 me refiero a la caja de ojos,
0:12:00 en senas de padácio.
0:12:02 No era raro que según su humor
0:12:05 en plena comelona
0:12:07 el príncipe se cambiara
0:12:09 un ojo por otro.
0:12:13 Ojo por ojo.
0:12:15 Ese es un hombre legante, ¿no?
0:12:17 ¿A quién podemos dedicar
0:12:19 esta colección de amables
0:12:21 excentricidades?
0:12:23 Alguna de ellas es cruelísima.
0:12:26 Cruelísima si se tiene en cuenta su banalidad.
0:12:29 Claro, pero es que ahí, Alejandro,
0:12:32 donde radica esta cuestión
0:12:34 de los príncipes y de los poderosos,
0:12:36 esto que lo lleva a lo largo de las generaciones
0:12:39 a una especie de ceguera
0:12:41 que les impide ver que cierto tipo de prácticas
0:12:44 solo deben hacerse una vez cada tanto,
0:12:46 igual que la fiesta.
0:12:48 ¿La ceguera es una ceguera?
0:12:50 ¿La ceguera es una ceguera?
0:12:52 Sí, me dirán, a los 16 años.
0:12:54 Después, digamos, tiene que,
0:12:56 cada exceso, cada capricho,
0:12:58 tiene que tener un lugar singular en la vía.
0:13:00 Pensaba, por ejemplo, alguien aquí,
0:13:02 el nombre de usted, el magistral Bernadotte,
0:13:04 que anduvo por ahí por Suecia.
0:13:06 Él también perteneció
0:13:08 a una dinastía de Suecia,
0:13:10 casualmente la que gobierna ahora.
0:13:12 Bernadotte lo...
0:13:14 Lo enalteció en Apolión.
0:13:16 ¿Qué fue el siguiente servicio?
0:13:18 Quedarse con una novia que había sido de él,
0:13:20 probablemente ella no quería más.
0:13:22 Fue nada menos que la famosa de Cirebe.
0:13:24 La famosa de Cirebe, sí, sí, más, pero usada, decía en Apolión.
0:13:28 Y lo mandó y lo puso.
0:13:30 Fue de general francés, de segundo orden.
0:13:32 Amarical lo mandó de rey después.
0:13:34 Y después mandó de rey de Suecia.
0:13:36 Y el rey que gobierna hoy Suecia,
0:13:38 si usted y alguno no lo cree,
0:13:40 puede llamar.
0:13:42 Señor, ahora mismo.
0:13:44 ¿Le hablo con Suecia?
0:13:48 El rey tiene el número 12,
0:13:50 como la baraja.
0:13:52 Carlos Gustavo XII.
0:13:54 Hay una rima también.
0:13:56 Y hay una cosa simpática en Bernadotte,
0:13:58 además de las muchas cosas.
0:14:00 Un soldado que llega a rey de otro país
0:14:02 y que se la banca, no está mal.
0:14:04 Y que se lleva a la novia.
0:14:06 Bernadotte tenía una excentricidad
0:14:08 que nadie comprendió hasta el último día de su vida.
0:14:10 Era jamás aparecer con el torso desnudo
0:14:12 y se ha creado.
0:14:14 A los reyes los metieron y metieron los creados.
0:14:16 Porque Bernadotte, cuando abraza la causa
0:14:18 de la revolución francesa,
0:14:20 se hace tatuar en el pecho,
0:14:22 Mojtojua, muerte a los reyes.
0:14:24 Y el tipo terminó siendo rey.
0:14:26 Y si a otra que excentricía,
0:14:28 hermano, me llegan a ver.
0:14:30 Si por ahí salían canciones de las aéreas,
0:14:32 no veía a un tipo ese.
0:14:36 Aquí estamos jugando.
0:14:38 ¿Y qué empieza ahí la revolución francesa?
0:14:42 Estaba pensando que otro dedicando posible
0:14:44 es este muchacho Cajetán,
0:14:46 el que compuso la marcha de San Lorenzo.
0:14:48 ¿Por qué me dirá?
0:14:50 Porque en el preio de las moreras
0:14:52 donde se levanta hoy el Palacio de Vatingham
0:14:54 una vez por día por lo menos suena
0:14:56 nuestra marcha de San Lorenzo
0:14:58 para el cambio de guardia.
0:15:00 Eso dicen.
0:15:02 Yo lo he visto.
0:15:04 Pero yo he tenido más suerte que yo.
0:15:06 Una semana tú.
0:15:08 En este mismo programa
0:15:10 me hizo caminar 200 cuadras de gusto.
0:15:14 es que tiene que pedirle...
0:15:16 Es como la música.
0:15:18 Nunca la tocaba.
0:15:20 No, una vez por semana la tocaba.
0:15:22 Pero el dedicando más importante quizás
0:15:24 es aquel muchacho que participa
0:15:26 en la batalla ahí en torno de Cipre
0:15:28 que es Miguel de Cervantes a Védera, cuya casa
0:15:30 fue tapada por otras.
0:15:32 Y que solía decir, hasta el final de sus días
0:15:34 un hombre que murió 70 y pico de años
0:15:36 y que el momento cumbre de la civilización
0:15:38 había sido la batalla del Lepanto
0:15:40 porque ahí se había detenido la barbarie
0:15:42 y entonces los santos varones como él
0:15:44 habían parado las costumbres del infiel.
0:15:46 Entre las costumbres del infiel estaba justamente
0:15:48 la de tomar el vino este chipriota
0:15:50 que sabe que...
0:15:52 ¿De dónde viene esto de estar
0:15:54 perdido como turco en la neblina?
0:15:56 El vino se tomaba mezclado con agua
0:15:58 porque si no, te volvía loco.
0:16:00 Entonces el vino...
0:16:02 No sé en total que entre los griegos había la pena
0:16:04 pero era la muerte.
0:16:06 Así nomás.
0:16:08 La tensión, la comisería.
0:16:10 Te encontraba...
0:16:12 Mamá no te combinó puro, ya no,
0:16:14 pero de muerte, nada, de 2 horas presos.
0:16:16 La España Cervantina,
0:16:18 qué hace, dice, piensa, ver, el vino puro
0:16:20 es el que no está mezclado con agua,
0:16:22 el que no estaba autizado.
0:16:24 Luego ese vino se llama turco,
0:16:26 la borrachera se llama turca
0:16:28 y entonces no hay nada más confuso
0:16:30 que andar como turco en la neblina,
0:16:32 pero antes...
0:16:34 Digo, el hecho decía que
0:16:36 los turcos venían
0:16:38 a vender su mercancía
0:16:40 a los pueblos de la Pampa húmeda
0:16:42 y cuando...
0:16:44 cuando hablaban de a pie
0:16:46 solían ser
0:16:48 cosa que ocurría casi siempre, ¿no?
0:16:50 Solían ser atacados
0:16:52 por los perros y marrones, ¿no?
0:16:54 Pero también
0:16:56 se perdían en la nebla
0:16:58 de la Pampa
0:17:00 y era frecuente
0:17:02 verlos tanteando el camino
0:17:04 con sus vultos, preguntando
0:17:06 y haber dónde estaba este
0:17:08 o a cuál pueblo, de ahí el de hecho
0:17:10 como turco en la neblina.
0:17:12 Sieren ambos y de todos modos
0:17:14 quería rescatar a Cervantes como dedicando final
0:17:16 porque tal como hablábamos el otro día
0:17:18 fue un hombre que conoció la pobreza
0:17:20 como pucca otra gente de su época
0:17:22 teniendo a su vez encima
0:17:24 ese enorme talento, esa sabiduría
0:17:26 y esa capacidad de mirar al mundo
0:17:28 como si fuera un rey pero desde abajo
0:17:30 quizás él es el que mejor comprendía
0:17:32 Alejandro que esas
0:17:34 excentricidades de los reyes, esa capacidad
0:17:36 de repetir el lujo día tras día
0:17:38 tras día sólo produce agotamiento
0:17:40 y que en cambio el pobre
0:17:42 el que trabaja, el que va forjando
0:17:44 su destino con el esfuerzo, con el sudor
0:17:46 de cada día, sabe que cuando tiene
0:17:48 la oportunidad de un festejo
0:17:50 tiene que hacerlo como si fuera el final
0:17:52 disfrutarlo como si fuera esa alivación
0:17:54 la última curda.
0:17:56 Y la última curda es el tango
0:17:58 que vamos a escuchar
0:18:00 en la versión de Edmundo Rivero.
0:18:26 La estima abandoneo
0:18:28 mi corazón
0:18:30 Tu ropa
0:18:32 Valdición
0:18:34 Malíz
0:18:36 Tu lágrima de ropa
0:18:38 Que llega
0:18:40 A sido en lo bajo fondo
0:18:42 Donde el barro
0:18:44 Se siente
0:18:46 La estima abandoneo
0:18:48 Mi corazón
0:18:50 Tu ropa
0:18:52 Valdición malíz
0:18:54 Tu la fonda donde el barro se subleva
0:18:56 Ya si
0:18:58 No me digas
0:19:00 Tenés razón
0:19:02 Y tu la vida
0:19:04 Que es una herida absurda
0:19:06 Y es todo, todo
0:19:08 Tan fugaz
0:19:10 Que es una curda
0:19:12 Nada más
0:19:14 Y con tu suerte
0:19:18 Contame
0:19:20 Tu condena
0:19:22 Decime
0:19:24 Tu acaso no de la pena que te vienes
0:19:28 Y hablame
0:19:30 Sinplenente
0:19:32 Vea que el amor ausente
0:19:34 Tras un retazo de los niños
0:19:38 Ya sé que me hace daño
0:19:40 Yo sé que te la digo
0:19:42 Llorando
0:19:44 Y se enjodo de mí
0:19:46 Pero es el viejo amor
0:19:48 Que siempre va a tener
0:19:50 Y vos que en un licor te adorga
0:19:54 La curda que al final
0:19:56 Termine la función
0:19:58 Corriéndole un pelo al corazón
0:20:04 Un poco de recuerdo
0:20:06 Y sin sabor
0:20:10 O te atresó
0:20:12 Voler
0:20:14 Maria tu licor
0:20:16 Y arrea la tropilla
0:20:18 Verasurda
0:20:20 Al volcarla un quima curda
0:20:24 Cerrarme tal al que queme el sol
0:20:28 Soler
0:20:30 Tocar a col de sueño
0:20:34 Un mes que vengo de un país
0:20:36 Que está de olvido
0:20:38 Siempre gris
0:20:40 Tras el amor
0:20:44 Contame
0:20:46 Tu condena
0:20:48 Decime
0:20:50 Tu que a caso no ve
0:20:52 La pena que me venido
0:20:56 Y hablame sinplenente
0:20:58 Vea que el amor ausente
0:21:00 Tras un retazo de los niños
0:21:06 Ya sé que me hace daño
0:21:08 Yo sé que te la digo
0:21:10 Llorando
0:21:12 Y se enjodo de mí
0:21:14 Pero es el viejo amor
0:21:16 Que tiene la bandoneón
0:21:18 Y lo que no digo es que acuerda
0:21:20 La curda que al final
0:21:22 Termine la función
0:21:24 Corriéndole un pelo
0:21:26 Al corazón
0:21:44 Y por ribero en la venganza
0:21:46 Será terrible la última curda
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