Transcripción automática
0:00:00 Muy bien, hablaremos hoy de Felipe Augusto y la espera de Ingeburga.
0:00:05 Hemos hablado, no hace tanto, ahora es una semana, una semana y pico, de Felipe Augusto,
0:00:10 y cómo se casó con Isabel, la muerte de su mujer muy joven, por un parto, etcétera, etcétera.
0:00:23 Hoy hablaremos de la segunda mujer de Felipe Augusto.
0:00:29 Vamos al año 1190.
0:00:33 Felipe envió lo como hemos dicho, cuando su esposa Isabel murió en un parto, y decidió casarse de nuevo.
0:00:39 Y pensó en una princesa que su padre pudiera hacerle útil en la lucha que Francia sostenía con Inglaterra.
0:00:46 Es decir, cuando uno se casa, qué es lo primero que piensa.
0:00:49 A ver si el padre de su novia puede ayudarlo en la lucha que uno sostiene con Inglaterra.
0:00:57 El rey danés Knut sexto, Knut es Canuto nada menos, Knut sexto poseía una flota muy equipada,
0:01:07 y podía hacer un buen auxiliar contra los ingleses.
0:01:11 Además Knut tenía una hermana que estaba muy buena.
0:01:15 Felipe mandó entonces embajadores a solicitar la mano, mejor dicho, de la hermana de Knut.
0:01:23 Y el rey autorizó la boda, así que con los embajadores que volvían a Francia, viajó ya directamente la hermosa hermana, que se llamaba Ingeburga.
0:01:33 Felipe esperó a la novia en a mi al.
0:01:37 Cuando la vio llegar quedó maravillado.
0:01:43 Y se hizo entender por medio de una intérprete, y le dijo entonces a Ingeburga,
0:01:50 que a la moda se celebraría sin más trámites porque le estaba con una urgencia muy grande.
0:01:57 Así que se llamaba un prelado de urgencia, no un pelado de urgencia.
0:02:02 Y lo que si hubiéramos llamado a nuestro amigo Pablo, sino a un prelado, a alguien de la iglesia para que pudiera celebrar el casamiento.
0:02:13 Bueno, después de la ceremonia Felipe se llevó a Ingeburga a la cama.
0:02:19 Se acostó con ella muy emocionado, pero al rato se levantó.
0:02:24 Ingeburga miraba sin comprender.
0:02:27 Felipe daba nerviosos paseos por la habitación.
0:02:31 Pensando que era tímido, Ingeburga le lanzó una sonrisa y una señal para que volviera a su lado.
0:02:38 ¿Qué tipo de señal?
0:02:40 Una guiñada de ojos con una apertura de costado de la boca.
0:02:46 Y debe haber puesto los dedos índices de cada mano en paralelo mientras que narcaba las cejas.
0:02:56 Bien, pero no, el rey volvió a acostarse y 10 minutos más tarde estaba de nuevo en pie.
0:03:03 ¿Nerviosos?
0:03:05 Sí, claro, imagínense.
0:03:07 Volvió a la cama tres veces más sin poder realizar lo que la don Celia esperaba de él.
0:03:14 Por fin Felipe gritó,
0:03:16 ¡Estoy embrujado!
0:03:18 Y se acostó al lado de Ingeburga que despertó a la mañana siguiente tan pura como había llegado.
0:03:25 Muy bien, al amanecer, los alquilones de la corte fueron a buscar a los reyes para ir a la catedral,
0:03:35 donde harían la coronación de la nueva reina.
0:03:38 Fueron y hicieron la ceremonia y más tarde Felipe lo agarró al arzobispo
0:03:42 y le confesó en los términos más rudos que había sentido una repentina repulsa por la muchacha.
0:03:50 De golpe le dio asco.
0:03:52 ¿Y los gestos de la cama de ella?
0:03:55 Y le dijo al arzobispo que era necesario devolver a que esa mina de ir a Marca.
0:04:01 ¡De vuelva al Ang!
0:04:03 Como semejante medida no era posible, apenas terminó la coronación,
0:04:08 Ingeburga fue encerrada en un convento.
0:04:11 El arzobispo le dijo, mire, devolver a Alemania, Alemania ni siquiera era peor todavía.
0:04:18 Hubiera sido una verdadera ofensa devolver a un país del que no había venido,
0:04:24 fue muy difícil, ¿no?
0:04:26 Pero tampoco podían devolverla de ir a Marca.
0:04:29 Entonces dijo, lo que podemos hacer, el arzobispo se puede encerrarla tranquilamente en un convento
0:04:34 tanto como para que no lo moleste.
0:04:36 Muy bien, el arzobispo.
0:04:38 Un mes más tarde Felipe Agústos fue a visitarla para tratar de hacerla a su mujer nuevamente.
0:04:46 Un tío le había aconsejado que lo intentara.
0:04:49 Sin embargo este tío había agregado a su consejo una frase poco oportuna.
0:04:55 Le dijo, ir, hijo mío, y pensar que todos los ojos de Francia os midan.
0:05:02 Bueno, no es un pensamiento muy adecuado para salir de esa situación.
0:05:06 Horrible, lo cargó de presión.
0:05:08 Llegó el convento, Felipe, y se dirigió a los guardias y les pidió que oraran.
0:05:15 Recen para que me va a dar bien.
0:05:19 Entró a la torre donde estaba Ingeburga lamentándose.
0:05:23 Al rato si abrió la puerta apareció el rey y dijo, no hay nada que hacer, es inútil.
0:05:29 Y regresó al palacio.
0:05:31 Llegó al palacio, Felipe se dispuso a hacer una anulación.
0:05:35 Se reunió un concilio compuesto de esclaseásticos, todos amigos del rey.
0:05:40 A Ingeburga, que había sido transportada para que fuera testigo del concilio,
0:05:44 le tradujeron, porque no entendía el castellano, y menos aún el francés.
0:05:50 Le tradujeron que su matrimonio quedaría nulo.
0:05:54 ¿Qué dijo ella? Que algo entendía.
0:05:57 Ya me parecía, dijo.
0:06:00 No sacaba por bonetica.
0:06:02 Todo se estaba esperando que Ingeburga bajara la cabeza y se resignara.
0:06:09 Pero ella decidió apelar la anulación a Roma.
0:06:16 Por eso la Reina fue enormemente maltratada.
0:06:20 En el convento dejaron de darle de morfar.
0:06:23 No le daban comida.
0:06:25 Para vivir, había tenido que vender hasta sus vestidos.
0:06:29 Lo curioso es que desde lo más escuro de su celda,
0:06:32 Ingeburga, seguía amando al rey.
0:06:37 Y esperaba que algún día él viniera a corresponderla.
0:06:43 Entre tanto, el rey Knut, canuto,
0:06:46 envió al Papa Celestino II a dos embajadores
0:06:49 encargados de denunciar aquella actitud ignominiosa de Felipe.
0:06:54 Celestino II revisó el caso y decidió revocar la sentencia de anulación
0:07:00 y dar por válido el matrimonio nuevamente.
0:07:03 El rey Knut, de Dinamarca y el Papa,
0:07:06 dirigieron entonces a Felipe una protesta común.
0:07:10 Pero Felipe, por toda respuesta, hizo encerrar a Ingeburga
0:07:13 en una presión todavía más incómoda.
0:07:16 Qué mal, la verdad.
0:07:18 Qué malo, eh.
0:07:20 Luego Felipe quiso buscar un medio para hacer que su divorcio fuera irrevocable
0:07:25 y creyó haberlo encontrado.
0:07:29 Pensó en casarse otra vez.
0:07:32 Calculó que de este modo su divorcio quedaría consolidado.
0:07:36 Y se casó nomás con un natal Inés.
0:07:39 Felipe e Inés estuvieron en una luna de miel que maravilló al pueblo.
0:07:47 Felipe pudo amarla, por decirlo así.
0:07:52 Incluso se cuenta que en la primera noche salió de sus aposentos
0:07:57 y gritó, Victoria.
0:08:00 A mí le fue.
0:08:02 Los guardias aplaudieron, en la quinta también.
0:08:04 Pero no se ha quedado como salida de Aguete.
0:08:07 Mientras tanto, la infeliz Ingeburga había sido notificada del nuevo casamiento.
0:08:12 Quería saber que tu marido se casó con otra.
0:08:15 Mientras ellos sabían en su encierro, la corte de Dina Marca no permanecía inactiva.
0:08:21 El Papa Celestino había muerto.
0:08:24 Su sucesor, Inocencio III, tomó la defensa de Ingeburga.
0:08:28 Ordenó al rey que se divorciara de su nueva esposa
0:08:31 y reemprendiera la vida en común con la respudiada.
0:08:35 Pero Felipe rompió la carta del Papa y le saltó encima.
0:08:39 Esa es la grecia.
0:08:41 Ah, me apreció una énfasis.
0:08:43 No contestó la carta.
0:08:44 Inocencio, antes de irse, no se sabe dónde estaba.
0:08:47 Pero le dijo a Felipe que podía esperar lo peor.
0:08:50 Le escomunió.
0:08:52 En un concilio que tuvo lugar en 1199,
0:08:56 se pronunció lo que se ha dado por llamar entredicho,
0:09:00 que era una especie de momento de espera
0:09:04 durante el cual no podía oficiarse ninguna potestad cristiana
0:09:08 en un reino de dudosa condición al respecto.
0:09:12 Mientras el rey no enmendar a su error,
0:09:16 Francia quedaba fuera de la iglesia.
0:09:19 No solo él como rey, sino el país todo.
0:09:22 Francia quedó excluida de la cristianidad.
0:09:25 En aquellos años una cuestión espiritual,
0:09:27 sin una cuestión jurídica de impresionante potencia,
0:09:31 que dar fuera de la iglesia significaba
0:09:33 que no podían celebrarse matrimonios,
0:09:36 ni sepultar a los muertos, etc.
0:09:39 Los cadáveres se hacían en cualquier parte.
0:09:42 No había servicios religiosos ni se daban los sacramentos.
0:09:45 Pero liberaba la peste, al estar, imagínese, los cadáveres expuestos.
0:09:51 En septiembre del 1200, al cabo de ocho meses del entredicho,
0:09:55 el pueblo se mostraba amenazador.
0:09:58 Ante el creciente enojo Felipe debió rendirse.
0:10:01 Envió misarios al papa para que le levantaran la pena
0:10:06 y pidió que consideraran bien su asunto.
0:10:10 Pero además sucedió algo terrible.
0:10:12 La nueva mujer Inés murió en Esofía.
0:10:16 Poco para ayudar.
0:10:21 Felipe hizo recaer la culpa de la muerte de Inés
0:10:24 sobre Ingeburga.
0:10:27 Y ordenó que se la tratara con mayor rigor.
0:10:31 Creía que haciéndole la vida más imposible aún.
0:10:35 Ella misma pediría el divorcio.
0:10:37 Pero Ingeburga fue la mujer más obstinada de la historia de Francia.
0:10:41 Soportó sin una queja los peores tormentos
0:10:45 y esperó y lo consiguió.
0:10:48 Llegó el momento en que Felipe tuvo que enfrentar en Graterra
0:10:53 y necesitaba una flota.
0:10:56 Se acordó de una marca que poseía una flota importante
0:11:00 y devolvió a Ingeburga su verdadero rango.
0:11:05 Felipe un día se acercó a la celda.
0:11:10 ¿Qué crees?
0:11:12 ¡Levanta, señora!
0:11:14 Pues vengo en vuestra busca.
0:11:16 A causa de un mal impulso,
0:11:18 os he sometido a maldad de eso.
0:11:21 Perdonadme.
0:11:23 Habían pasado 20 años.
0:11:26 Perdonadme y dame la flota, que dijo.
0:11:29 Ingeburga lloró, tomó las manos de Felipe
0:11:32 y fue con él al Palacio de Lubre.
0:11:35 Esa noche, después de 20 años, se amaron por primera vez.
0:11:39 Bien, viene el rey.
0:11:41 Bien, el rey.
0:11:43 El rey consiguió no más la ayuda de Dinamarca.
0:11:46 Los ingleses fueron derrotados, vivieron felices
0:11:49 y nunca la reina pronunció ni una frase
0:11:52 que hiciese referencia a su cautiverio.
0:11:54 Nada de vos que hablás que me tuviste encerrada a 20 años.
0:11:59 Mejor que te calles.
0:12:01 No se lo facturo.
0:12:05 En julio de 1203, el rey,
0:12:08 que se había agarrado un paludismo durante las cruzadas,
0:12:11 fue la cruzada.
0:12:13 El rey no solo se agarró un paludismo,
0:12:15 sino que también, como hemos dicho el otro día, quedó canoso,
0:12:18 mitad del susto.
0:12:20 Se agarró un paludismo, se agarró,
0:12:22 llamó a su hijo Luis
0:12:24 y le pidió que cuidara de Ingeburga
0:12:26 y después se murió.
0:12:28 La reina Ingeburga lo sobrevivió 13 años.
0:12:31 Vivió casi escondida en una mansión.
0:12:34 Y esta es la historia de Felipe Augusto
0:12:38 y su segunda mujer, Ingeburga.
0:12:41 Yo creo que hay que dedicarle
0:12:44 a la pobre Ingeburga a charla,
0:12:48 a esa mezcla de Valentina
0:12:51 y a ese patetismo de su espera.
0:12:56 Y el otro, el otro que he degenerado.
0:13:01 Un hombre que antes, la menor falta,
0:13:04 buscaba externalizar su culpa.
0:13:07 Que estaba embrujado,
0:13:10 que la otra mujer se había muerto por culpa de Ingeburga.
0:13:16 Después le dijo a la Rosovis,
0:13:19 porque la esposa le daba asco.
0:13:21 ¡Bucaná ya!
0:13:23 Sí, pero después volvió.
0:13:25 Después volvió, tardó un poco.
0:13:29 ¿Le volvió para buscar la flota de Dinamarca?
0:13:32 Sí, solo me está haciendo mi.
0:13:34 Yo no quería saberlo, pero...
0:13:36 A mí me parece que no volvió por ella.
0:13:39 Volvió por la flota Canuto.
0:13:44 y el discotecario nos dio una canción
0:13:46 que lleva por título a las palabras que le dijo
0:13:49 Felipe Augusto al Arzo Vispo.
0:13:52 No la quiero más.
0:13:54 No la quiero más es una bella canción
0:13:56 que Alberto Mastra, un músico a quien conocerá
0:13:59 los orientales presentes esta noche.
0:14:01 Y la escucharemos en la versión de El Mundo Rivero.
0:14:26 Si la vida
0:14:31 Me diera de nuevo
0:14:35 La opor de tu vida
0:14:40 Te volverá a vivirla otra vez
0:14:46 No la quiero más
0:14:50 Son tan malos
0:14:53 Todos los recuerdos que ya me dejó
0:14:57 Que si debo volver a vivirla
0:15:01 Le digo que no
0:15:08 Cada vez que le supe pedir
0:15:12 Algo me negó
0:15:18 Siendo que para serme feliz
0:15:22 Poco ansia bajó
0:15:27 Si hoy la vida
0:15:30 Me diera de nuevo
0:15:33 Otra vida
0:15:35 Y la oportunidad
0:15:39 De volver a vivirla otra vez
0:15:43 No la quiero más
0:15:52 Son tan malos
0:15:55 Todos los recuerdos que ya me dejó
0:16:00 Que si debo volver a vivirla
0:16:04 Le digo que no
0:16:13 Cada vez que le supe pedir
0:16:18 Algo me negó
0:16:23 Siendo que para serme feliz
0:16:27 Poco ansia bajó
0:16:32 Si hoy la vida
0:16:35 Me diera de nuevo
0:16:38 Otra vida
0:16:40 Y la oportunidad
0:16:44 De volver a vivirla otra vez
0:16:49 No la quiero más
0:17:14 En Mundo Rivero en la venganza será terrible, no la quiero más.
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