Encontrá todos los archivos de audio en MP3 del programa de radio La Venganza Será Terrible de Alejandro Dolina

18 de Diciembre de 2007

François Villon, un poeta que vivió entre libros y ladrones

Transcripción automática

0:00:00 Hablaremos hoy de François Billon, que era un gran poeta francés, el último poeta de la Edad Media,
0:00:10 que prefigura la literatura de la Edad Moderna. François de Loche, llamado Billon.
0:00:20 Vamos a obligarnos para conocerlo en París, al principio del siglo XV.
0:00:26 Es algo que nos gusta mucho. Si estuviéramos realmente allí, veríamos una ciudad de porquería,
0:00:35 una ciudad que vivía llena de penubias a causa de la guerra de los 100 años, los estudiantes mendigaban por las calles...
0:00:44 ¿Qué se llama? Los estudiantes, no, los mendigo, me digaban por las calles.
0:00:49 Me gustaría que los estudiantes me ligaban por las calles, incluso hasta los propietarios de inmuebles me ligaban por las calles.
0:00:56 París era una porquería en un solo año, la peste bubónica llevó a la tumba 50.000 personas.
0:01:03 Los suburbios se veían asaltados por lobos hambrientos en el suburbio de París que devoraban a hombres y mujeres.
0:01:13 ¿Se queja que le asaltan la estación de servicio? Lobos, te comían los lobos, te comían.
0:01:19 Bueno, en aquel lugar, por esos tiempos, nació François de Montcordier, con B, conocido como el más célebre baladista y poeta del siglo XV.
0:01:29 Era el año 1431. Sus padres eran muy pobres, todos eran pobres.
0:01:35 Para poder alimentarse, François había empezado, antes de cumplir los 10 años, a afanar en los comercios vecinos.
0:01:42 Iba y afanaba. El padre de Francisco se murió cuando el chico tenía 12 años.
0:01:49 La madre desesperada lo dejó en la casa de un pariente lejano, un parroco que era Cappellan de Sembenoire.
0:01:58 Se llamaba Guillermo de Vilion y fue este parroco el que le dio el apecigo a François.
0:02:05 Incluso se lo dio con la esperanza de hacer locura a François. Lo anotó en la escuela de París.
0:02:11 La enseñanza si era religiosa y si recibió de bachiller y maestro.
0:02:17 Y dejó estos estudios, hecho un erudito de primer orden.
0:02:22 Se había muchísimas cosas y era ya un gran escritor.
0:02:26 Pero la verdad es que Vilion pasaba sus días entre los libros y los chorros. Se había hecho amigo de los chorros.
0:02:34 Sus mejores amigos eran Colén de Caldie y Ranie de Montigny. Eran chorros.
0:02:42 Es de Montigny. Acá le falta una R. Eran chorros.
0:02:49 El primero, Colén de Caldie, era hijo de un cerrajero y había heredado la habilidad del padre.
0:02:58 Pero no tanto para arreglar cerraduras sino para abrirlas por la fuerza.
0:03:03 Y el otro era ratero, asesino, profanador de iglesias y chorro de altares.
0:03:11 Y de esa vecindad con los chorros, Vilion aprendió el idioma de los coquiliados.
0:03:19 Era como una especie de linfa. Y escribía las que se llamaban baladas en jerga.
0:03:26 Y no se entiende nada como si esto escribiera en linfado.
0:03:31 Como los sanitos reos. Así es.
0:03:34 Y escribía versos de esa hémnole.
0:03:37 Aquellas amistades, aquellos dos que hemos mencionado, no le duraron mucho a François.
0:03:44 No por desamor o por haberse apartado sino porque los ahorcaron.
0:03:48 Que fueron a chorear a las Orbonas.
0:03:51 Y François no participó porque no le avisaron.
0:03:56 Según el biógrafo que hemos consultado, Vilion tenía el siguiente aspecto.
0:04:02 Era esquelético, muy alto, nervioso, escurridizo, seco y negro.
0:04:11 Parece.
0:04:15 Bueno, quiero decir lo que parece.
0:04:17 Dividía, nuestro amigo François, el día en tres etapas.
0:04:21 La mañana para dormir, las tardes para escribir y las noches para fanar y divertirse.
0:04:27 Solía visitar lugares como la taberna de la mula o la espada de madera.
0:04:33 Y así disfrutaba del vino y de las mujeres.
0:04:36 En vano su tutor, el pobre Guillermo de Vilion, el párroco de Sembenoie,
0:04:42 que lo anotó en la universidad, le imploraba que pusiera fin a aquella vida disoluta.
0:04:49 O, pon fin a tu vida disoluta, decía el párroco.
0:04:56 La noche del 5 de junio 1455, durante la celebración de la Fiesta del Corpus Cristi,
0:05:02 Vilion, en un lastimoso intento por salvaza del infierno,
0:05:08 pensó en emendarse, en dejar el choreo y la farra para dedicarse por entero a la escritura.
0:05:15 Pero no pudo.
0:05:17 Yo creo que le pasó.
0:05:19 Tomó la decisión de cambiar de vida cuando terminó la fiesta, aunque es cuando uno no al empezar, al terminar la milonga.
0:05:26 Que es donde uno toma de ese estilo.
0:05:28 Ya, se veía cambiar de vida, ¿no?
0:05:30 Y salió de la taberna de la mula y se sentó al otro lado de la calle.
0:05:36 Al rato apareció una chica hermosa y un cura.
0:05:39 Y el cura empezó a recriminarle, a Vilion, el haber llevado a la muchacha a la lujuria.
0:05:46 Y se ha andado con él la mina.
0:05:48 El cura empezó a discutir, se halló, se armó una pelea.
0:05:53 Y al rato el cura se hacía casi muerto, herido de una punialada.
0:05:57 Y Vilion quedó desfigurado porque el cura le partió el labio superior con una cuchilla.
0:06:04 Afortunadamente, para él pudo escapar a la orca.
0:06:08 Porque el cura, mori-bundo, murió el cura, ¿no?
0:06:11 Y al respirar lo libró y lo perdonó.
0:06:14 Que era como funcionaba el derecho en esos tiempos.
0:06:17 Tu víctima te perdonaba y vos te salvabas.
0:06:21 Pero París ya no era un lugar seguro para Vilion, así que se las tomó para las afueras.
0:06:27 Ya en el campo, Vilion se convirtió en miembro y jefe de una banda de hermoso nombre.
0:06:33 La banda de los caballeros del Punial.
0:06:37 Eran unos asesinos, pero por lo menos tenían la delicadeza de ponerse un nombre.
0:06:42 Y además un nombre tan bello.
0:06:45 Quiere decir que no debían ser tan malos.
0:06:49 Al menos eran un poco inteligentes.
0:06:54 Uno calcula esto, ¿no? Si estos asesinos tuvieron esa delicadeza, por ahí no eran tan malos o no tan estúpidos.
0:07:04 Yo ya he dicho hoy por dos veces que le tengo mucho miedo o se estupido.
0:07:08 Tengo que me ataque un estupido.
0:07:11 Ahora, un tipo que tiene una banda que se llama la banda de los caballeros del Punial, pero ahí no es tan estúpido.
0:07:18 Es malvado, pero no estúpido.
0:07:20 Ahí un paso digno se adelanta.
0:07:23 El caso es que Vilion se convirtió en jefe de esa banda.
0:07:27 Cuando ahorcaban algunos de los miembros, cosa que ocurría, Vilion, caro tanto,
0:07:32 Vilion era encargado de las plegarias con que saludaban al fallecido.
0:07:38 La vida de estos caballeros era muy aventurera y tenían muchos trabajos de distinto tenor.
0:07:45 Forzaban cerraduras, vendían perlas falsas, trampeaban con los náipes, asaltaban viajeros en los bosques,
0:07:53 alegraban el camino de los campesinos con sus canciones y de paso seducían a sus mujeres.
0:07:59 ¡Ah, Dios! Dale a mi patria unos chorros como éstos.
0:08:04 ¡Coordinadio!
0:08:07 Gracias a la diplomacia de su padre adoptivo, Vilion, pudo volver a París.
0:08:13 Él se enamoró de Catalina, era una muchacha de ojos penetrantes y lengua caustica.
0:08:20 Casi lo leo al revés.
0:08:23 Pero no le fue bien al pobre Francois.
0:08:26 Ella se entregó a sus brazos, gozó de su literatura y después lo dejó por un amante más rico que no sabía escribir nada.
0:08:34 Dicen que esta desgracia de Vilion fue la comidilia de Lampa Parísina.
0:08:41 Todos se reían de él y él decidió abandonar nuevamente París.
0:08:47 En la cena de despedida, en la cena que le hacía en sus amigos en la taberna de la mula, terminó mal.
0:08:56 Parece que con las cabezas saturadas de alcohol, los muchachos tramaron algo como fin de fiesta.
0:09:03 Pronto se vieron cinco sombras silenciosas que se alejaban en dirección del colegio, habían decidido asaltarlo.
0:09:10 Así fue, saltaron los muros, ingresaron en los aposentos del rector y a fuerza de espada se llevaron de así cuánta reliquia y oro encontraron.
0:09:19 Luego se dividieron las... el botín se separaron y Vilion se fue anju.
0:09:25 Temeroso de la Guardia Real durmió casi un año en los graneros abandonados.
0:09:31 A veces se perdían entre los labradores y los divertía con satíricos versos.
0:09:38 Parece que Vilion cantaba maravillosamente bien.
0:09:42 En esa época ya la poesía empieza a abandonar la música.
0:09:49 En el Meio Evo se acostumbraba muchísimo a que toda la poesía fuera musical.
0:09:54 Pero Vilion ya pertenece a una época, aunque cantara maravillosamente bien, en que la poesía camina sola.
0:10:03 Muy bien. Recuerde que se le ocurría a la policía por aquel chorero en el colegio, que así siguió de pueblo en pueblo.
0:10:10 Cada tanto lleva preso, pero por pequeños hurtos que cometían pueblos donde nadie lo conocía.
0:10:16 Entonces, y lo largaban.
0:10:18 Pero de tanto andar en celdas, en la humedad, se enfermó de tuberculosis.
0:10:28 En 1461 los llevaron en Cana, ¿sabe por qué?
0:10:32 Por irse sin pagar de una taberna.
0:10:35 Y esta vez no tuvo suerte, porque justo en la comisería lo conocían y lo trasladaron a París.
0:10:43 Allí quedó encerrado hasta que se dictara la sentencia.
0:10:47 Y en la cárcel, Vilion escribió sus obras más importantes.
0:10:52 Escribió el Pequeño Testamento y el Gran Testamento.
0:10:56 En realidad son obras en las que el finge que se está yendo de París y le deja a los amigos algunos regalos.
0:11:05 Me hace acordar mucho a lo punto que me usted, señor escribano, ha sido un legado satírico.
0:11:14 Pertenencias y porquerías a los amigos y de paso los insulta también a los amigos.
0:11:23 Era un poeta muy amargo, muy áspero, que muchas veces escribía con amarguísima ironía.
0:11:33 Y el tema de él era la muerte.
0:11:36 Le gustaba solasarse con la descripción de cuerpos muertos y compararlos con la belleza de algunas jóvenes.
0:11:45 Pensar, decía, que estas chicas les esperaron.
0:11:51 Participó, sin embargo, de algunas formas más refinadas.
0:11:54 Hay un tipo, que así me sacó el ojo, que se llamaba Charles Dolein, un poeta anterior, muy refinado,
0:12:02 que tenía en Blois una especie de corte literaria.
0:12:08 Y le gustaba hacer concurso a Charles Dolein.
0:12:13 Y parece, se guardan algunas copias de los concurso.
0:12:18 Hay un concurso cuya consiga era muero de ser junto a la fuente.
0:12:28 Muero de ser junto a la fuente.
0:12:34 Y uno de los tipos que participó en ese concurso fue François Villon y no ganó.
0:12:40 Porque no era lo de él.
0:12:42 La descripción de su propia secedad, de su propia mortalidad,
0:12:48 la sensación de que todos íbamos a morir, estaba aterrado el tipo por eso.
0:12:54 Entonces, imagínense, no le fue muy bien en el concurso como era?
0:12:58 A muero de ser junto a la fuente.
0:13:01 Es un lindo concurso.
0:13:06 Vamos a notar.
0:13:08 Pero sin cantar, porque ya no era... Este no era cantado.
0:13:11 Me muero de ser junto a la fuente.
0:13:17 Y ya no es la primera vez.
0:13:21 Porque una vez me fui a Baraja cuando tenía 33.
0:13:29 ¿Me gustó?
0:13:30 Una vez me fui a Baraja, me gustó, sí.
0:13:33 Porque morirse de ser junto a la fuente es como irse a Baraja sobrando con 33.
0:13:37 Está muy bien, me parece esa ocurrencia.
0:13:40 No sé la casualidad de la rima, pero tiene sentido.
0:13:44 Estar junto a una fuente sin beber es un gesto de landismo.
0:13:49 Es un gesto de contención.
0:13:52 Es una renuncia.
0:13:54 Para que él renuncie a voluntaria, para que sepa el mundo como me las gasto.
0:13:58 Irse a Baraja con 33, la famosa frase de Ceredorio Flores,
0:14:04 es también esta.
0:14:06 Tengo, me sobra, tengo una fuente y no verbo.
0:14:09 Y me voy a Baraja.
0:14:13 Norman Mailer, en los ejércitos de la noche,
0:14:17 cuenta que él lo había llevado en cana por participar
0:14:23 de aquellos famosos actos de Washington en protesta contra la guerra de Vietnam.
0:14:29 Y lo llevaron en cana, como por ahí nos han llevado en cana muchos de nosotros.
0:14:34 Y lo metieron en un galpón, junto con otros tantos.
0:14:38 Y los llevaron en cana en una manifestación,
0:14:40 los llevaron en la comisaría.
0:14:42 Por ahí te meten en un galpón y te atienden a él.
0:14:45 Estaban todos en un galpón.
0:14:47 Entonces Mailer resuelve no beber.
0:14:51 No beber.
0:14:53 Sin que nadie lo sepa y sin que sirviera para nada este gesto de renunciamiento.
0:14:57 Le dio sed y había un dispenser, vamos a llamarlo así,
0:15:01 un beberero.
0:15:04 Y todos iban y tomaban como aquello.
0:15:07 Todos iban con lo vacito y tomaban agua, que eso es lo fenómeno.
0:15:10 Y él tomó la decisión de no beber.
0:15:13 Estuvo toda la noche en cana y no fue a beber.
0:15:16 ¿Alguien se dio cuenta?
0:15:18 No, él se dio cuenta.
0:15:20 Pero mire lo que hizo después, como lo pinta el cuerpo entero.
0:15:23 En algún momento dice, bueno, voy a beber.
0:15:27 Entonces bebió 200 vasos de agua.
0:15:31 Porque solo era capaz de la abstinencia y del descontrobar.
0:15:37 No tenía en su registro la mesura.
0:15:42 Tenía dos velocidades, nada y muchísimo.
0:15:47 No sé porque me acordé Mailer.
0:15:49 Bueno, porque también se...
0:15:51 El horror de los viegos, Alejandro, sería este hombre.
0:15:54 Bueno, no sé por dónde iba.
0:16:00 Ah, por el testamento.
0:16:02 Escribió, no hay vida sin sufrimiento.
0:16:06 Los hombres ricos, pobres o mendigos, corren toda la misma pena.
0:16:10 ¿Qué es la muerte?
0:16:12 O sea, esa es la poesía de Billion.
0:16:15 También escribió la balada de las damas de ayer.
0:16:22 Y decía, tu cuerpo de mujer tan suave, tan eterno, tan precioso y blando.
0:16:27 También debes cumplir destino tan terrible.
0:16:30 Es decir, miraba la belleza de la mujer e imaginaba lo que la muerte podía hacer.
0:16:34 Pantoso, ¿no? Es pantoso.
0:16:37 Bueno, en 1463, después de estar casi dos años en Cana,
0:16:46 los sentenciaron a muerte.
0:16:48 Pero justo apareció otra vez el cura.
0:16:52 El cura que le había dado el apellido, Guillermo de Cerriguillo.
0:16:55 El pargo de San Benito.
0:16:58 Y la pena de muerte fue conmutada por 10 años de exilio.
0:17:03 Y le dieron tres días de plazo para saludar y rajar del país.
0:17:07 En enero de ese año, frío,
0:17:10 arrastrando su magra y solitaria figura,
0:17:13 atravesó la puerta y se perdió en una nevada.
0:17:17 Unos días después lo encontraron muertos en medio de la nieve.
0:17:20 Tenía 32 años.
0:17:23 ¿Qué jóvenes morían?
0:17:26 ¿Recuerda el caravallo?
0:17:28 37, creo.
0:17:30 Y hoy este muchacho 32.
0:17:32 Hay que hacer algo.
0:17:36 Pero no importa qué hacer algo con la edad media, ¿no?
0:17:39 Sí, a volirlo, por ejemplo, ahora.
0:17:42 Hay que declarar que apresurarse para que termine de una vez.
0:17:47 ¿Cuánto falta para que termine la edad media?
0:17:50 Esperemos que poco.
0:17:53 Bueno, yo voy a saludar a todos los poetas de la edad media,
0:17:58 a Charles Dordian,
0:18:00 a los de las Baladas,
0:18:02 los Rondó,
0:18:04 a los poetas provenciales,
0:18:09 como Joffre Lidl,
0:18:12 poetas que dieron nacimiento a una idea del amor,
0:18:16 que es la idea actual
0:18:21 del amor relacionado con la poesía.
0:18:26 Lo que vulgarmente podrías llamarse el romanticismo,
0:18:29 si estás en otra clase de tarde.
0:18:33 ¿Usted a quién se lo quiere dedicar?
0:18:35 Porque el tipo este, a ver, será chorro, pero es cantor.
0:18:40 Pensaba como alguno de estos,
0:18:42 como el autor de los honetos nubres, Alejandro Francois,
0:18:45 que siempre liga la muerte en las despadas, ¿no?
0:18:48 Y, en su pensamiento obsesivo, casi.
0:18:51 Y yo lo voy a dedicar a los curas de esta historia.
0:18:54 Al parroco Guillermo de Vilión,
0:18:56 que le dio el apellido,
0:18:59 que eso es algo muy fuerte para alguien, ¿no?
0:19:02 Le salvó la vida.
0:19:04 Y al otro que también le salvó la vida,
0:19:06 cuando en una disputa entre hombres
0:19:08 perdió y dijo, bueno, yo te perdono, ya estás a cabo.
0:19:10 Perdiste, perdona la vida.
0:19:12 Yo te perdono, peche, al daño que me hace.
0:19:15 ¿Y ahora lo curas de esta historia, Alejandro?
0:19:17 Escucharemos para amueblar esta triste historia.
0:19:21 Sí, por esto voy a final por elito.
0:19:24 La milonga que lleva por título,
0:19:27 la puñalada,
0:19:29 que viene a señalar,
0:19:31 que una puñalada señala,
0:19:33 no está mal,
0:19:35 la pelea en que
0:19:38 lo acuchillaron a Vilión
0:19:41 y también la otra en que el...
0:19:44 le parte en el labio.
0:19:46 Le dejó tipo un feite ahí en el...
0:19:50 en el escracho.
0:19:52 Aparte para estos caballeros de la orden del puñal,
0:19:55 estamos bien la puñalada.
0:19:57 Y a los caballeros del puñal también le podemos dedicar a algo.
0:19:59 Y la puñalada viene así.
0:20:01 La puñalada es una milonga que oiremos
0:20:03 en la versión del nuevo Quinteto Real
0:20:05 con Don Horacio Salazar.
0:20:44 La muestra de la muestra de Don Horacio Salazar
0:20:47 es una muestra de Don Horacio Salazar.
0:20:50 La muestra de Don Horacio Salazar
0:20:53 es una muestra de Don Horacio Salazar.
0:20:56 La muestra de Don Horacio Salazar
0:20:59 es una muestra de Don Horacio Salazar.
0:21:02 La muestra de Don Horacio Salazar
0:23:26 De la venganza

Comentarios (0)

No hay comentarios. ¡Podés ser el primero en comentar!


Tenés que Iniciar sesión para comentar.
Podés darle estilo y formato al texto utilizando Markdown