Incubos y sucubos

Transcripción automática

0:00:00 y toñas curiosas de íncubos y súcubos. Tomás Giacchino se preocupó por los problemas
0:00:07 sexuales.
0:00:08 Explicaba que el matrimonio suele recuchó lo era recomendable por dos razones. La
0:00:17 primera naturalmente, porque era la única forma de que los hijos pudieran ser concebidos
0:00:23 sin pecado. La segunda, porque apartaba a los hombres de otras locuras sensuales. Estas
0:00:33 eran la sofilia, el vestualismo, la sodomía, el deserto, el adulterio, etcétera. Los
0:00:44 besos, las caricias atrevidas constituían pecado cuando eran motivados por la lujudia.
0:00:52 Por qué otra cosa va a uno a andar besando y acariciando?
0:00:59 Porque explíquemos que es un cuaralista.
0:01:01 No parece ser que el vínculo matrimonial se generaba por otra cosa.
0:01:06 Bueno, pero fuera del vínculo matrimonial uno acaricia solamente por legítima lujudia.
0:01:14 Esta reverencia a los pensamientos lascivos era muy interesante en un contexto medieval
0:01:20 lleno de íncubos y súcubos, es decir, demonios masculinos y femeninos que invadían los lechos
0:01:28 de las personas. A los masculinos se los llamaban íncubos y a los femeninos súcubos. Fue
0:01:36 en el siglo XII cuando los íncubos dieron motivo para que las crónicas los citara.
0:01:42 San Bernardo se encontró con un caso particularmente árbol. El de una mujer que desde hace seis
0:01:49 años recibía cada noche la visita de un demonio sin despertar ni una sola vez a su
0:01:56 marido. Ni las solaciones ni las peregrinaciones habían producido efecto alguno.
0:02:03 Bernardo, es decir, el santo, le entregó a la mujer su callado pastoral para que lo
0:02:10 metiese en la cama y según dice el íncubo no se atrevió a ingresar en aquel lecho y
0:02:18 se quedó tras la puerta lanzando espantosas imprecaciones.
0:02:28 Hay un simpático baile de tango como podrán oír. Los amigos de radio continental, de radio
0:02:35 espectador de Montevideo, de Córdoba, de Golbaí. Escuchan en España por internet,
0:02:43 el suelo de la bián. Un detalle curioso. Existieron para algunas dama de alcurnia
0:02:49 íncubos corteses precisamente en tiempo del amor cortés, es decir, no, 12 y 13. Eran
0:02:57 demonios que se presentaban en sueños con toda galanura y no reclamaban más que favores
0:03:03 espirituales. Normalmente los demonios usuales se presentan bajo la forma más que los ciegas
0:03:11 y perentorias, existiendo rápidamente las satisfacciones mal desaforadas.
0:03:20 Y estos no, estos no se presentaban desde el modo más recatado. Hasta ese punto llegaban
0:03:28 la represión de aquellas dama que se arsenaban la lujuria incluso en sus sueños. Toma de
0:03:36 alquino decía que los demonios no eran capaces de tener deseos sexuales, sino que su motivo
0:03:41 para las millones era sólo en que las mujeres cometieran pecados abominables. La verdad es que
0:03:48 la mayoría de los demonólogos seguía otro criterio, el de Mecael Célos, un erudito que
0:03:57 aseguraba que los demonios eran dueños de una intensa voluptuosidad que sí sentían deseos.
0:04:03 Nada de inducción al pecado, los demonios eran seres deseantes que presentían el frenesí
0:04:09 erótico más contundente, como cualquiera. Cuenta el ázmode rosa, ¿vam? que había incubos celosos.
0:04:20 La amante de un incubo inició una vez una relación con el hijo de un panadero. Cuando el demonio
0:04:28 descubrió la relación, se enojó tanto que provocó un incendio y arrasó todo el pueblo,
0:04:35 incluso al panadero. Me lo hizo al hijo del panadero. Bueno, pero también, ¿no?
0:04:42 Andar con un demonio, con un sed infernal y además con el hijo de un panadero es una
0:04:49 dualidad inasoptable de lo de la amante. Otro caso explica que un incubo consideraba como suya
0:04:56 a una muchacha con la que había tenido comercio carnal. Pero ella se casó. En venganza este
0:05:04 demonio hizo un potente amarillo, anda llevando, pero había otros incubos que parecieron serviendo
0:05:13 dosos. Habrá por el siglo XVI en la localidad de Sientas, cerca del triburgo, vivía una doncilla
0:05:23 que era con frecuencia visitada por alguien durante las noches. El padre de la doncilla
0:05:31 había escuchado algunas expresiones nocturnas inconvenientes a la doncilla de su hija y pues
0:05:39 estaba poligando y de la pieza de la hija se dijo, ay, qué se dio.
0:05:45 No malo, 20 centavos.
0:05:52 Increpada por el padre, la muchacha dijo que era abordada por un incubo. El padre dijo,
0:05:59 ché, qué son esos gritos. Y la chica dijo, ay, bueno, sabés, papá, viene un incubo,
0:06:08 todas las noches. Los casos más generales que se han considerado en la historia demuestran
0:06:14 que el demonio era inspirado por varios religiosos y heredictos que se escondían
0:06:20 para hacerle frente en el momento en que quisiera irrumpir en los aposentos de la mujer,
0:06:25 es decir, denunciado a un demonio como, efectuando acto recurrente de presencia, los clínicos,
0:06:36 los religiosos, que escondían ahí en las cortinas para ver si le hacían frente al incubo.
0:06:42 Si el incubo era verdadero, probablemente no se presentaba. Pero si era un enamorado que se
0:06:48 hacía pasar por incubo, probablemente podía caer en una trampa. Con la dulcida de ciltar,
0:06:56 recién inventada, sucedió lo que sigue. Ya se ha dicho que el padre había ruido de la pieza
0:07:04 que le interrogó y que le dijo que venía un incubo, que venía. Bueno, mientras el padre,
0:07:09 la memcura y dos amigos armados escondidos en la habitación de la muchacha esperaban con
0:07:15 toda seguridad que se presentaron en impostor, ella, la chica que se hacía en la dormida,
0:07:21 empezó a profeír señales de que estaba siendo amada, por decirlo así. Los presentes un poco
0:07:32 avergonzados, no? Bueno, la chica otra vez dijo, ah, qué se lo... andá llevando. Los presentes un poco
0:07:43 avergonzados crecieron efectivamente en la presencia de un incubo y sometieron a la joven a confesiones
0:07:49 y baños en agua vendida por algunos días. Después la dejaron tranquila. La actuación de la dulcida
0:07:57 había funcionado a la perfección. Poco tiempo después, un muchacho de afecido Jake, volvió a entrar
0:08:04 por la ventana casi todas las noches y amó a Cris la novia, pero eso sí con mayor decreción.
0:08:11 El último caso es mejor. En la localidad francesa del Villon vivía, allá por el año 1435,
0:08:19 una dama casada que se llamaba Louise de Coulombier. Era hermosa y tenía muchos pretendientes.
0:08:29 Eran pretendientes que, de modo más inmediato, ingresaban a una nueva jerarquía y se transformaban
0:08:37 en sinlamaceros inconvenientes, en amantes. Louise disfrutaba de cierto instinto gregario
0:08:45 y reunía a sus caballeros amantes para hacerse amar multitudinariamente.
0:08:51 Eran tiempos de enorme despliegue en la creencia cerca de presencia de monías.
0:08:58 En determinado momento el esposo de Louise tuvo la mala suerte de presentarse en su pieza
0:09:05 y descubrir a su esposa con siete caballeros, ni uno menos. Cuenta la crónica.
0:09:12 Son incubos, dijo ella.
0:09:18 Somos incubos, dijeron los hombres amenazantes que eran siete sinambas.
0:09:26 El marido los miró resignado, dijo creer, pidió perdón por la interrupción y el día
0:09:33 siguiente, sólo para seguir las formas, hizo que un cura bendigiera la casa para que ningún ser
0:09:40 diabólico se volviera a presentarse.
0:09:43 ¿Se ven así?
0:09:45 ¿Para mí eran los incubos?
0:09:49 ¿Usted qué? ¿Qué eran siete amigos de la dama?
0:09:54 Este momento pensaba que era.
0:09:57 Pero si usted dice...
0:10:01 Sí, más fácil ser mal pensado que su particio.
0:10:06 Bueno, ¿qué es que era una vez fue abordado por algún sucubo?
0:10:12 No que eso sepa, pero era mejor si.
0:10:18 Si, cuéntanos a saber.
0:10:20 Si te quiere que lo conteste de un modo poético, porque le diré que nunca hubiera
0:10:24 abordado por otra clase de cien.
0:10:26 Hay algo de demoníaco en las personas que me gustan.
0:10:36 Así que no tengo más de medio que cada tanto
0:10:44 darme medios besos con sucubos.
0:10:48 Bien, ¿a quién quiere dedicar esto?
0:10:50 Bueno, ya que es de sueño reprimido si sexualidad hemos hablado, déjame que se
0:10:54 le dedique a mi amigo Tignum Infroi.
0:10:56 Ahí está, que no se estará escuchando.
0:10:59 Y relamiéndose.
0:11:03 Bueno, hemos buscado un tema con alguna dificultad, porque no podíamos escuchar
0:11:17 discos, pero hemos encontrado uno que se lo dedico, pero a lo le va a gustar mucho.
0:11:21 Es soñar y nada más.
0:11:23 Y eso es lo que me gusta mucho.
0:11:27 Muchísimas.
0:11:29 Y lo escucharemos en la versión extraordinaria de Libertad la Másica.
0:11:53 No descierte, cuyo sueño hasta morir, ni hermosa, ni amar, ni soñar.
0:12:01 Desperta, excedra, irucione, y allá le descongras la barra verdad.
0:12:09 No descierte, si vives soñando, y en tu mente incorrente, que en tu sueño te entiendes
0:12:20 de su sueño, suete certa y acallando.
0:12:30 Soñar y nada más.
0:12:32 Con un doce híjido.
0:12:34 Soñar y nada más con un ser el arrojador.
0:12:38 Soñar que tu deseo iré para ti.
0:12:42 Soñar quien se soñar, que el senten que el amor es triste de perder.
0:12:49 Soñar y nada más.
0:12:53 Con un doce híjido.
0:12:55 En serio se hagan cantando amor y beatitude.
0:12:59 Volen a la estrella de los rechangores.
0:13:03 Y en esa eternidad, seguir un ideal, soñar y nada más.
0:13:09 No descierte, si vives soñando, y en tu mente incorrente, que en tu mente incorrente,
0:13:18 que en tu mente se descierte y en tu alma y luz de tejuras,
0:13:22 verás bien hasta que el mundo seguí.
0:13:26 Descerta, desmatar, despedar, y enfrentar a la crueldad.
0:13:34 Es por eso que quiero que suene.
0:13:40 Soñar y nada más con un doce híjido.
0:13:44 Soñar y nada más con un ser el arrojador.
0:13:48 Soñar que tu deseo iré para ti.
0:13:52 Soñar quien se soñar, que el senten que el amor es triste de perder.
0:13:58 Soñar y nada más con un doce híjido.
0:14:02 Soñar y nada más con un ser el arrojador.
0:14:15 Soñ diferente de tu heroca mesura.
0:14:25 en este eterno ganchillo de un ideal, soñar en nada más.