Transcripción automática
0:00:00 Hablamos entonces de la rebelión Taipei, ubiquémonos en China, pero no en la China milenaria,
0:00:21 sino en una China contemporánea, reciente, la China del siglo XIX.
0:00:28 Una dinastía gobernante era la dinastía Xing. Recuerden que estos tipos no eran chinos, como tantas
0:00:36 dinastías chinas no eran chinos. Eran Manchures, de si provenían de Manchuria. Habían depuesto
0:00:45 a la dinastía Ming en 1644. Se mantuvieron en el poder por más de 250 años. Durante
0:00:53 el episodio que contaremos, el emperador se llamaba Xian Feng. Parece que el gobierno
0:01:02 de Xian Feng no andaba bien. El tesoro público estaba mal administrado. Según las crónicas,
0:01:09 la enfermedad de la miseria era constante en China. En Pekín, a modo de ejemplo, los
0:01:16 censos daban cuenta de 100.000 mendigos. Qué senso tan minufioso. Sí, pero sí, claro que sí.
0:01:24 Los chinos eran maestros en los censos, ya lo hemos explicado. Miles de ellos acampaban,
0:01:30 me refiero a los mendigos, no a los chinos. Acampaban junto al palacio, pidiendo limosna,
0:01:38 y a veces amenazando a los funcionarios que se acercaban a la sede del imperio. Si les
0:01:43 daba eso sí, paja para dormir, arroz y algo de carbón para calentarse. Los viejos, que
0:01:50 siempre fueron cuidados en la China, recibían vestidos en invierno y un abanico en verano.
0:01:56 La situación de los negocios por China es eso. Muy bien.
0:01:59 La titanería.
0:02:00 Claro, claro. Totalmente titanería.
0:02:02 Bien. Ahora bien, en el año 1814 nació un hombre llamado Hong Xiu Xiguan. Era oriundo
0:02:11 de hacke en el centro mismo de la China. Dicen que Hong tuvo una visión, una visión
0:02:18 en la que era ascendido hasta el cielo. Y según dijo, allí fue nombrado Hijo Celeste.
0:02:28 Ahora hay que decir que Hong era cristiano. Había sido instruido por misioneros. Luego
0:02:35 de la visión que había tenido, decidió llevar el mismo, el mensaje del cristianismo,
0:02:39 por todo el imperio. Al principio, no eran pocos los que lo seguían, solamente sus
0:02:47 parientes y amigos, pero poco después sus discípulos fueron centenares. Hong se creía,
0:02:55 hermano de Cristo, decía que tenía un padre y una madre celestiales. Se propuso como
0:03:01 regla primera, él aniquilar a los demonios y de paso a todo aquel que no cumpliera con
0:03:07 la religión y los mandatos de Dios. Se llamaba así mismo, emperador celeste de la paz universal.
0:03:15 Y ahí procede el nombre de su secta, Tai Ping, que como todos sabemos significa emperador
0:03:21 celeste de la paz universal, porque así de fácil es el idioma chino. En un principio
0:03:29 el emperador, Hong, me refiero al emperador, allá en Pequín, no tomó en cuenta la nueva
0:03:35 secta. Pensaba que era un grupete religioso y nada más. En 1848 los discípulos de Hong
0:03:47 eran dos mil, pero dos años más tarde eran 40 mil. Ah bueno, de seguir así habrá pensado
0:03:58 el emperador celeste de la paz. En dos años más serán 800 mil y luego 16 millones y
0:04:07 luego 320 millones. Y así 6400. Claro, en menos de 10 años no habrá una persona en
0:04:14 el mundo que no pertenezca a Tai Ping. Bueno, el caso es que seguían a este hombre, Hong,
0:04:25 me refiero, hombres de algunas antiguas estirpes dinásticas que se oponían al gobierno de
0:04:31 esta dinastía, que como hemos dicho era Manchu. Entonces había muchos resentidos, ya de los
0:04:39 que habían perdido. Los que habían perdido los 1644, que habían perdido sus privilegios,
0:04:42 etcétera. Pronto se formó un ejército, según los cronistas, con el valor y el odio suficiente
0:04:49 como para derrocar al régimen imperial. Los Tai Ping comenzaron su marcha sobre China,
0:04:57 conquistaron una ciudad tras otra, pero no las arrasaban ni mataban a sus habitantes,
0:05:03 sino que predicaban los dogmas cristianos y así lograron que miles de chinos aceptaran
0:05:09 las órdenes de Hong. En dos años los rebeldes se adueñaron de cinco provincias. En 1853,
0:05:18 en que la Argentina dictaba su constitución, Hong proclamó su propia dinastía cristiana,
0:05:27 lijo de Pekín, es cierto, pero cerca de la segunda ciudad más importante, que era Nanking. Nanking
0:05:35 queda exactamente en la Santipa. Pruebe si caváramos un pozo en Palermo. Si caváramos un pozo ahora,
0:05:39 apareceríamos tarde o temprano en Nanking. Bueno, se formó entonces un estado dentro del estado.
0:05:49 Hong, en su reino, reino de cinco provincias, dictaminó que los alimentos y las propiedades
0:05:57 debían ser repartidas en partes iguales, obligó a sus soldados a ser voto de castidad. En realidad,
0:06:04 el único que podía tener esposa era él, una esposa celeste además de las famosas concubinas.
0:06:10 Suprimió eso sí de su corte a los eunucos y los sustituyó por mujeres que se encargaban
0:06:16 del gobierno del palacio. Un detalle, Hong también liberó a las mujeres de llevar los pies vendados.
0:06:23 Recuerde que para los chinos la mujer hermosa debía tener los labios gruesos, el cabello
0:06:28 liso largo y de un negro intenso como yo. Pero ante todo, la mujer china debía tener los pies
0:06:36 pequeños. Así, a una niña cuando nacía, se le comprimían las patas empleando una gruesa
0:06:42 venda para que, además de los pies pequeños, tuvieran un andar gracioso y tamboroso.
0:06:48 Ocilante, claro.
0:06:49 Una de las crueldades más tremendas de la historia.
0:06:54 Pero además del gobierno de su palacio, Hong formó un ejército de tres mil mujeres, comandado
0:07:00 también por algunas muchachas. Mandó a todos los hombres a cortarse la coleta, que era
0:07:06 un signo de la dominación Manchu y los obligó a dejarse crecer el pelo. Impuso, además,
0:07:14 ciertos mandamientos de la moral cristiana. Condenao al adulterio, se prohibían los vicios
0:07:19 y los robos. Ahora eso sí, los crímenes se castigaban de forma poco piadosa. Bueno,
0:07:28 en este modo, seguían con la tradición de los Manchus que también eran crueldades. Por
0:07:34 ejemplo, el adultero podía ser colgado, el ladrón era apaleado hasta morir y el asesino,
0:07:40 antes de la decapitación, era entregado a los peores suplicios. En cuanto al adulterio,
0:07:48 debe recordarse que Hong tenía a su esposa celeste y había aumentado el número de concubinas
0:07:53 de setenta, número que correspondía por ley a los emperadores chinos, a cien.
0:08:01 Seguí, setenta mujeres tienen un maravilloso aspecto.
0:08:03 Ese aspecto excesivo.
0:08:04 Seguí.
0:08:05 Seguí.
0:08:06 Seguenta no está mal.
0:08:08 Bueno, establecidas algunas de estas reglas, Hong quiso tomar finalmente en Anquín, aquella
0:08:14 segunda ciudad del imperio. Sucedió que los habitantes y los gobernantes de Anquín
0:08:20 se mantuvieron fieres al emperador, al emperador de Pequín, y no hicieron caso de las prédicas
0:08:27 de los Taipei. Fue entonces cuando la secta decidió utilizar su ejército. Y la lucha
0:08:34 fue terrible, la actuación de Hong poco tuvo que ver con el nombre que había dado a su
0:08:39 dominio el reino celeste de la paz.
0:08:42 Mucha vez, Hong decía a las personas antes de caer muestras. Fue una gran matanza. Miles
0:08:49 de mujeres y niños de Anquín fueron asesinados por los atacantes. Los que habían refugiado
0:08:55 en los cuarteles murieron entre las llamas. Dos días después de tomar la ciudad, los
0:09:00 Taipei descubrieron algunos sobrevivientes, los sacaron de la ciudad, los estrangularon
0:09:05 a orillas de un canal y los tiraron al agua.
0:09:08 Bueno, saquearon Anquín, ordenaron a los sobrevivientes un acto de sumisión al nuevo
0:09:16 gobierno y obligaron a rendir culto al padre celestial. La ciudad se transformó en el
0:09:21 refugio de la secta. Hong mantuvo una administración organizada exactamente igual que la de Pequín.
0:09:31 Tiempo más tarde Hong quiso conquistar Pequín, la capital del imperio. Pero la expedición
0:09:36 fracasó por el frío. Las tropas fueron diezmadas por la enfermedad sin haber presentado batalla.
0:09:44 Sin haber presentado batalla sospecho de la palabra diezmada. Y ya fue peor que eso.
0:09:50 Y es uno de cada diez, claro.
0:09:54 Para entonces el emperador de Pequín, Hien Fung, estaba aterrorizado. Porque además
0:10:02 de los Taipei había otros que querían apoderarse del imperio. Había una secta llamada la Sociedad
0:10:08 del Pequeño Cuchillo, que había tomado Shanghai, ha implementado las leyes de los Taipei.
0:10:16 Pero las jueces imperiales con la ayuda de ingleses y franceses atacaron Shanghai y mataron
0:10:23 al jefe de los pequeños cuchillos. Y el imperio rebelde de Anquín duró, duró once años.
0:10:30 En 1864 la secta de los Taipei y su reino celeste de la paz universal cayó.
0:10:38 Las misiones extranjeras durante esos once años fueron bien recibidas allí. El comercio
0:10:45 exterior era floreciente. Se pagaban impuestos bajos y no había carestía de alimentos,
0:10:53 pero la guerra era continua. Y la vida de las personas no importaba nada. Y esto hizo
0:10:58 tan balear a aquel imperio rebelde.
0:11:01 Además, desde Pequín se habían mandado espías que lograron introducirse en la corte y en
0:11:08 la capital información a ser que dejó sus movimientos y ya se sabe cómo es. Las tropas
0:11:14 imperiales arrasaron Anquín y las otras ciudades que ya formaban aquel reino, fue tal la matanza
0:11:21 que se produjo en la ciudad que muy pocas personas quedaron con vida. Tampoco pudo hacerlo
0:11:27 Hong. Fue apresado y finalmente pasado a De Huello.
0:11:33 Entonces la historia de esta rebelión, Taipei en nombre del cristianismo, muchas historias
0:11:42 hay donde los cristianos parecían finalmente hacer pie en China y siempre sucedió.
0:11:49 Nunca lo lograron.
0:11:51 Pero de hecho primero fueron los misioneros.
0:11:53 Lo que suita, claro.
0:11:55 Lo que apunta a la inteligencia, trataron de seducir a los emperadores chinos y lo consiguió.
0:12:01 Y no solamente respetaron las costumbres locales sino que hicieron una exportación
0:12:07 lógica, una importación hacia Europa lógica de algunas cosas que todavía hoy siguen
0:12:10 produciendo beneficios como el Hinseng o las artes marciales o incluso hay un Jesuita
0:12:15 que ha sido el electo Papa. Esto demuestra que esa funciona.
0:12:19 Decía que es curioso como la historia de China. Alejandro, hay esos grandes períodos de
0:12:24 prosperidad, de irastrías, aunque cambien incluso de pueblos y que llegado el siglo XIX
0:12:29 se van acortando y a Chicago tendremos el poder cierto que usted narra la Revolución
0:12:34 Boxer, esas invasiones de ideas y vueltas y finalmente ya en los años 40 en la supresión
0:12:39 del imperio y la llegada del régimen comunista.
0:12:41 Y hasta ese momento todo lo que llegaba en China viene deformado en un accidente.
0:12:45 Fíjese que para los chinos, digamos, los romanos, hacíamos la República formada en
0:12:49 un imperio y el tipo al que el emperador al final era divino.
0:12:52 En China empezaron por hacer divino al emperador y punto y no evolucionamos así otra cosa.
0:12:57 Estaba pensando también en la forma en que se nos contó que eran chinas cosas que no
0:13:02 eran chinas. Cuba y Can, que él quiere.
0:13:04 No era chino.
0:13:05 Marcopolo.
0:13:06 Era de Mongol.
0:13:07 Era de Mongol. Y de la misma manera pasará con estos otros y todo así.
0:13:11 Y estaba pensando en las extrañas afinidades entre Argentina y China.
0:13:15 Fíjese, el corte de Coleta nos remite, obviamente, el botín de las trenzas de los patricios.
0:13:20 Los tumbres de una punta a la otra del mundo que, sin embargo, no consiguen deformar la
0:13:26 esencia de esto.
0:13:27 Lo mismo, el arroz, digo como alimento esencial en China y el maíz en América.
0:13:32 Porque finalmente el poder en China se ha centrado en esa misma voluntad que tienen
0:13:35 algunos liderazgos aquí en la patria y que tiene que ver con ser abigarrados como los
0:13:39 granos de una masorca.
0:13:40 Y esto es lo único que garantiza la soberanía popular.
0:13:43 Y en ese caso, cuando a uno le hablen de restauración, porque todas las revoluciones chinas tendrían
0:13:48 a restaurar, si le dicen que lo que hay es una China y que el pueblo está detrás abigarrados
0:13:54 como los granos de un choclo, seguramente le está hablando de una China de la masorca.
0:13:58 Y con todo esto solamente pretendemos justificar el disco que vamos a poner ahora.
0:14:04 ¿Tú también?
0:14:05 Que es nada menos que China de la masorca.
0:14:07 Todos ustedes preguntarán lo que habrán tenido que caminar para encontrar este disco.
0:14:11 Todo es la clave de esta huradora.
0:14:15 No teníamos sino el disco.
0:14:16 Se hace camino al narrar.
0:14:19 Canta Ignacio Corsini, China de la masorca.
0:14:24 China de la masorca, todos la llaman restauradoras porque ya lleva prendida el peyo.
0:14:42 La flor de sangre de la divisa de buenos aires.
0:14:48 Viva Rosas, tira santa.
0:14:51 cantaba ante corazón y en los barrios los candombes repetían la canción
0:14:58 la china de la mazorca, linda y arisca como ninguna, mala y hermosa por ella ría
0:15:27 Todos de celos allá en la plaza de los troperos
0:15:32 Al frente de una partida se la veía pasar
0:15:37 Y en la esquina de la patria se escuchaba este cantar
0:15:51 China de la masorca todos la llaman restauradora
0:15:56 Porque ya lleva prendida el bello
0:16:01 La flor de sangre de la divisa de buenos aires
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