Impuestos en la Historia

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0:00:00 Hablemos de impuestos en la historia.
0:00:03 El más famoso de los impuestos históricos,
0:00:07 tal vez sea el que impuso el rey Minos de Creta a Atenas.
0:00:12 Androgeo era uno de los hijos de Minos.
0:00:16 Minos era el rey de Creta.
0:00:18 Y había ido a Atenas a participar en algunas competiciones.
0:00:24 Las organizaba los Ateniences,
0:00:29 que estaban un poco envidiosos de las habilidades gimnásticas de Androgeo.
0:00:36 Y lo mandaron a luchar contra el toro de Maratón.
0:00:43 De pura envidia, ¿no?
0:00:45 Y el toro lo mató.
0:00:46 Minos, el papá de Androgeo,
0:00:49 al enterarse de la muerte de su hijo,
0:00:52 atacó a Tena.
0:00:53 Qué buenísimo.
0:00:54 Qué haces.
0:00:55 Como la guerra se prolongaba demasiado,
0:00:57 Minos rogó a Zeus que lo vengara de los Ateniences.
0:01:02 Y en respuesta,
0:01:04 Zeus, que era el príncipe de los dioses,
0:01:07 aceptó y el hambre y la peste se parcieron por la ciudad.
0:01:11 Desesperados entonces los Ateniences
0:01:14 consultaron al oráculo.
0:01:17 Y el oráculo respondió que para que cesara la plaga,
0:01:20 debían dar a Minos lo que pidieron.
0:01:23 Ah, sí, lo más.
0:01:24 Y como ensoa así el famoso tributo que impuso Minos,
0:01:29 exigió que todos los años pagaran con siete jóvenes y siete doncellas sin armas,
0:01:36 y esos chicos eran dados de comer al minotauro.
0:01:41 El minotauro era un monstruo que vivía
0:01:44 en medio del laberinto que Minos tenía en Knoss.
0:01:49 Exactamente, dégalo.
0:01:51 Este tributo se pagó durante años
0:01:54 hasta que Teceo liberó a Atenas del minotauro,
0:01:58 y entonces ya no se pagó más.
0:02:00 Un tributo parecido en sus causas fue el ordenado a los Tebanos.
0:02:14 Un Tebanos llamado Terienes
0:02:17 había matado al padre del Quino durante unos festejos.
0:02:22 Y este reunió un ejército y marchó contra Tebas.
0:02:26 Después de terminar a muchos,
0:02:28 concertó con el rey de la ciudad un impuesto
0:02:31 en el que exigía por el plazo de 20 años la paga de 100 huelles por año.
0:02:36 Como el cobro era excesivo, creonte el rey de Tebas,
0:02:40 le pidió ayuda a Heracles.
0:02:43 Y le decía a Heracles, mirá el impuesto que me han impuesto.
0:02:48 Que me han ido, claro.
0:02:50 Y entonces Heracles interceptó en una ocasión
0:02:56 a los cobradores de impuesto.
0:03:00 Les cortó la nariz y las orejas,
0:03:03 y se la mandó al propio orquino.
0:03:06 Indignado por el ultragé, otra vez,
0:03:09 el quino atacó a Tebas nuevamente,
0:03:13 pero nadie podía con Heracles,
0:03:15 no tiene sé con la fuerza que tenía.
0:03:18 Ganó la batalla e impuso un tributo doble al que el quino quería.
0:03:24 O sea, 200 huelles durante 40 años.
0:03:28 Creonte, agradecido, le dio a Heracles,
0:03:31 a su hija mayor.
0:03:33 Eso es agradecimiento.
0:03:36 Nada de que te den una plaqueta,
0:03:40 como se llama, un diploma, un cual.
0:03:45 La hija mayor, la menor sería preferible.
0:03:49 En la edad media, bajo el régimen feudal,
0:03:52 existían los llamados censos,
0:03:54 que era el nombre que se daba a ciertas cargas anuales,
0:03:57 que los barrios estaban obligados
0:04:01 a ofrecerle todos los meses un canario.
0:04:05 Se trataba más de un gesto simbólico de sumisión
0:04:10 que de un impuesto oneroso.
0:04:13 También estaban las gallinas de censos,
0:04:16 cuyas plumas servían para ser colchones.
0:04:19 Cuando el rey de Francia se alojaba en los distintos pueblos,
0:04:23 el señor del lugar tenía la obligación de proporcionarle
0:04:27 almohadas y colchones
0:04:29 que debían estar confeccionados con plumas de la mejor calidad.
0:04:34 Así cuando el rey llegaba de visita,
0:04:36 el castillo del anfitrión se llenaba de gallinas
0:04:40 que los campesinos se entregaban para hacer almohadones y colchones.
0:04:44 Si ha dicho que Luis VII debió abandonar el castillo del señor de Poitou,
0:04:49 pues había tanto olor a gallinas que no se podía usar.
0:04:53 Algunos impuestos excepcionales
0:04:56 consistían en cosas de escaso valor,
0:04:59 pero difíciles de encontrar.
0:05:02 Había señores que no exigían más que un conejo
0:05:05 que debía tener, por ejemplo, la oreja derecha blanca y la otra negra.
0:05:09 Algunos basayos tenían a los conejos
0:05:13 para poder pagar el impuesto,
0:05:15 pero a veces eran descubiertos y multados, puertemente.
0:05:20 El señor de Roan requería cabellos de mujer
0:05:24 que debían ser entregados por la propietaria
0:05:28 en el castillo feudal.
0:05:31 En periodos prósperos, el señor de Roan
0:05:34 exigía que sus basayos músicos viniesen a tocar
0:05:40 y a los artesanos también les hacía entregar el producto de sus habilidades.
0:05:46 En muchos casos había espectáculos de migrantes.
0:05:51 En el señorío de Gandieu,
0:05:53 aquellos a quienes se les otorgaba el derecho de pesca,
0:05:57 estaban obligados a bailar un paso que todavía nadie conociera,
0:06:01 a cantar una romanza que no se hubiese oído
0:06:04 con una letra que no fuese copiada.
0:06:07 Bueno, un estímulo verdaderamente para los pescadores.
0:06:11 Para terminar por los pescadores y empezar con otra.
0:06:15 Michel D. refiere que los basayos de la borgoña
0:06:19 tenían por obligación imitar a un borracho,
0:06:23 bailar al modo de los labriegos
0:06:26 o cantar ante la esposa de un señor dominante.
0:06:31 Los juglares que entraban a París en los tiempos de Luis Noveno,
0:06:34 San Luis, se eximían de los impuestos cantando coplas.
0:06:39 Qué extraordinario ir uno a la FIP
0:06:43 y que no me subió un pino verde.
0:06:48 Hacia la misma época, los altimbankis que entraban en París
0:06:52 obtenían la remisión del tributo
0:06:55 con la condición de que hicieran bailar a sus monos
0:06:58 delante del recaudador de impuestos.
0:07:01 Las mujeres en Poitou, si no podían entregar sus cosechas,
0:07:06 estaban obligadas a golpear
0:07:09 y arrojar piedras en los fosos del castillo del señor.
0:07:12 Esto, que parece absurdo, tenía una razón.
0:07:16 Había en aquellos lugares agua alrededor del castillo
0:07:20 y allí cundían unos batracios indescriptibles
0:07:25 y una fecundidad desesperante
0:07:28 y durante la noche cantaban intolerablemente
0:07:33 para utilizar ya todos los adverbios de este mundo.
0:07:37 Cualquier cosa que se hiciera entonces
0:07:40 para fastidiar a esos sapos
0:07:42 estaba bien vista por el señor.
0:07:44 También se cuenta que cierto vasallo de guisán
0:07:48 por haberse retrasado en las pagas
0:07:51 tenía todos los días la obligación de ir a la casa de su señor
0:07:55 pero para recorrer ese trayecto
0:07:58 era preciso que retrocediera un paso después de dar dos.
0:08:02 Un lerinista, ¿vale?
0:08:04 Sí, es una cosa.
0:08:06 Bueno, hay unas crónicas del siglo XIII
0:08:08 que hacen mención a un viaje a Palestina
0:08:10 realizado de ese mismo modo.
0:08:14 No es lo mismo ir a la casa de tu señor
0:08:16 que a Palestina salvo
0:08:18 en el caso que tu señor vivas precisamente en Palestina.
0:08:21 O esté de paso por ahí como Ricardo, nuestro amigo.
0:08:24 En momentos de crisis los impuestos o tributos feudales
0:08:28 consistían la principal renta del señor.
0:08:34 Al revés, la principal renta del señor
0:08:37 consistía en los tributos feudales.
0:08:40 Quien se hacía entregar los muebles
0:08:42 incluso alimentos de los vasallos, digo el señor,
0:08:49 cuando no le podían agarpar.
0:08:51 Claro, obviamente.
0:08:53 En 1202 en París existió un impuesto pagado en vino.
0:08:59 Las religiosas de Santa Genoveva,
0:09:01 casualmente la patrona de París,
0:09:03 estaba obligada a entregar a los señores
0:09:06 la mitad de los vinos que producían.
0:09:09 Pero este tributo fue abolido por el Papa Inocencio III
0:09:13 porque cada vez que el Edgar Pavan aparecían los señores
0:09:17 con unas esbornias de padre y señor nuestro.
0:09:21 En las antiguas costumbres de la universidad
0:09:24 se pagaba un impuesto al rector y a los profesores, señor.
0:09:29 Los estudiantes ofrecieron a sus maestros guantes,
0:09:32 virretes y panes de azúcar.
0:09:35 Tome, señor, este guante, este virrete
0:09:39 y este pan de azúcar es para usted.
0:09:42 Los doctores en medicina debían tributar a sus profesores
0:09:46 pastelitos, que rico.
0:10:00 Si lo quedaba para él.
0:10:02 Bueno, esto proveía al rey un alto grado de seguridad
0:10:05 en el cobro de los impuestos, pero, imagínese,
0:10:09 entre tantos recobradores cabe recordar a Mateo,
0:10:13 En el apóstolo.
0:10:14 ¿Qué era cobrador de impuestos?
0:10:16 Un trabajo que le ganó el repudio de los muchachos
0:10:20 hasta que después dejó ese laburo,
0:10:23 si su apóstolo.
0:10:25 Bueno, más precioso para el...
0:10:28 Pero justamente los muchachos, los apóstoles,
0:10:32 que era gente humilde,
0:10:35 que no pertenecía a la mejor parte,
0:10:38 o a la parte más decente o más considerada de la población.
0:10:42 Decente principal de la ciudad.
0:10:44 La gente muy bien eso.
0:10:46 Ciglos más tarde, mientras hervantes lamentaba sus fracasos
0:10:49 y pensaban en las andanzas del Quijote,
0:10:52 eran verdad odiados por sus vecinos porque era también recaudador.
0:10:56 Luis XIV se creó en Francia
0:11:01 la que consistía en el 10% de todas las rentas del Reino francés,
0:11:09 ¿Quién no sé cuál era?
0:11:13 Bueno, no se sabe que habrá querido escribir aquí el tipo este.
0:11:16 En 1765, el Parlamento británico sancionó la Ley del Timbre,
0:11:22 que establecía un impuesto sobre documentos legales,
0:11:28 esto todavía se paga, diarios, folletos, maso de cartas,
0:11:33 y también de cartas de tantillitas.
0:11:36 Este impuesto tenía vigencia, no solo en Inglaterra, sino en las colonias.
0:11:42 Pero algunos colonos se gritaron mucho con esa ley
0:11:46 y, por ejemplo, destruían el té que estaba grabado por este impuesto.
0:11:51 Se metían de indio, primero, y después se tiraban al agua.
0:11:54 Sí, lo sucedió en Boston, y allí comenzó la guerra de la independencia de los Estados Unidos.
0:11:59 A Benjamin Franklin no le gustaba nada los impuestos.
0:12:03 Decía, solo hay dos cosas en la vida del hombre que son inevitables,
0:12:06 la muerte y el vencimiento de los impuestos.
0:12:10 Ví todos modos, al americano, republicano, no le gustan los impuestos.
0:12:20 En realidad los impuestos, los saltos, y especialmente los impuestos a los que más tienen,
0:12:29 son propios de los regímenes más populares.
0:12:32 Más democráticos, más justos.
0:12:34 Porque cuando hay muy bajos impuestos, generalmente se trata de gobiernos liberales.
0:12:40 Es el de sepacer.
0:12:43 Entonces impera la ley de Brasil.
0:12:47 Si no hay impuestos, pero tampoco hay regulación, entonces se prospera sin límite.
0:12:55 El alto impuesto preocupa, especialmente los Estados democráticos, a los ricos mexicanos pobres.
0:13:04 Naturalmente, de hecho, si pensamos en la institución,
0:13:09 el impuesto es una institución que tiende a poner en práctica algo que se supone que sabemos todos.
0:13:16 El territorio de un país nos pertenece a todos los que somos ciudadanos de ese país, supuestamente.
0:13:20 En modo que la quiesa riqueza que hacha debajo del subsuelo, por ejemplo,
0:13:24 o encima del suelo, deberían tener un tipo de respuesta para todos los miembros de ese estado nacional.
0:13:29 Cuando además ocurre un estado nacional, tiene una especie de ventaja, una renta agraria diferencial,
0:13:35 pongamos por ejemplo, por caso, esa renta agraria ni siquiera es un impuesto, es una retención.
0:13:40 Hay algunos que todavía no lo entienden.
0:13:42 125 los que quedan por ahí.
0:13:46 De todos modos, en extinsos períodos históricos, los impuestos más grabosos eran para los más pobres.
0:13:56 Incluso uno de los privilegios de la nobleza era la exención de impuestos.
0:14:01 Así que algo se ha avanzado en la historia.
0:14:05 Bueno, señores, vamos a escuchar el desalojo, un tema que tiene naturalmente que ver,
0:14:15 porque se cree que lo desalojaron.
0:14:18 Así que es una milonga que va a cantar el mundo rivero.
0:14:21 ¡Aglaro!
0:14:35 El juzgado con el aviso me la dio por la cabeza, nunca esperé tal sorpresa.
0:14:42 Mi suerte en grata lo quiso.
0:14:46 Me dice en un entrepiso yo me encontraba confiado,
0:14:50 al ver si está el encargado, saludar con alegría.
0:14:56 Pero hoy, en los buenos días, al encontrarme me ha dado.
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