Jacobos

Transcripción automática

0:00:00 Hablaremos hoy de la escalera de Jacob.
0:00:03 Hemos hablado ya de algunas escaleras maravillosas, por ejemplo la escalera infinita del templo chino de Chiawwey, la escalera de San Julián y alguna otra.
0:00:16 Vamos a ver qué pasó con Jacob, el patriarca hebreo, hijo de Isaac y Rebeca, y padre de los 12 hijos que representan las 12 tribus de Israel.
0:00:27 La historia comienza cuando Jacob, después del famoso truco de la primogenitura, huía de su hermano Esaú, que quería vengarse por haber pasado a ser segundo.
0:00:41 Recuerdo brevemente este episodio.
0:00:46 Jacob, fingiendo ser su hermano Esaú el colorado, que era en realidad el primogénito, le robó a Isaac,
0:00:56 la bendición. Isaac está ciego y Jacob, con artilugios, que no viene a caso recordar, incluso con la complicidad de Rebeca, la mamá,
0:01:06 te roba la bendición, consigue que el viejo, que está a punto de espichar, lo bendiga y como la bendición era irrevocable, él pasó a ser el primogénito.
0:01:16 Cuando el hermano volvió, Esaú se enteró de esto y lo corrió a Jacob y Jacob naturalmente salió corriendo.
0:01:25 Jacob adelante y Esaú atrás.
0:01:29 En realidad la que le dijo que rajara fue la madre, la vieja le dijo, rajá que va venir tu hermano y te va a bajar.
0:01:34 Y fue corriendo Jacob a casa de otro hermano, Labán, que vivía en Padán Aram y que fue donde la vieja le dijo que se escondiera.
0:01:46 Que anda a casa de tu hermano hasta que a Esaú se le pase la bronca.
0:01:50 Muy bien, ahora le dijo la vieja, ya que vas a Padán Aram, busca esposa entre las hijas de tu tío.
0:01:59 Antes se casaba mucho con las primas, las personas, porque había poca gente, había mucha menos gente que ahora.
0:02:05 Entonces vos íbas a un baile y la tercera mina que encarabas era tu prima.
0:02:10 Ya era tu prima.
0:02:12 Si no te daba bolilla te quedaba tu hermana.
0:02:15 Bueno, la vieja le dijo, andá y conseguiste una novia.
0:02:18 Con esas indicaciones y también con miedo, Jacob abandonó a sus padres.
0:02:23 Por esos días tenía 63 años.
0:02:26 La gente hacía todo lentamente, incluso morirse.
0:02:31 Así que Jacob tenía 63 y fue a conseguir novia.
0:02:36 Cuando Esaú se enteró de que Jacob había rajado, envió a su hijo, él y Fath, para que lo matara.
0:02:44 Era una familia que llevaba muy bien.
0:02:46 Dicían, andá a matarlo y despogalo de todas sus pertenencias.
0:02:50 Elis Fath, que era un célebre arquero, abtenganse de hacer chistes, se hizo acompañar por 10 hombres en la persecución y alcanzó a Jacob allá por Sikém.
0:03:01 Jacob le rogó a Elis Fath, que después de todo era el sobrino, que tomara todas sus pertenencias y le perdonara la vida.
0:03:13 Elis Fath hizo precisamente eso.
0:03:16 Dejó a su tío desnudo, es decir, tomó todas las pertenencias, lo dejó desnudo y se llevó el botín, bueno, el botín, los calzoncillos, todo, ¿no?
0:03:29 Cuando llegó a la casa, Esaú se enojó con el hijo por esa compasión que había tenido y se enfureció más todavía.
0:03:37 Vio cómo era, ¿no?
0:03:39 Jacob calculó también aquel furor sobreviniente de Esaú y decidió apartarse del camino de Sikém.
0:03:47 Y se metió ahí en un lugar desierto para que nadie los viera.
0:03:51 Debido a la desgudez, recordecer que lo había dejado desnudo su sobrino,
0:03:57 Jacob no se atrevió a entrar a ninguna ciudad, sino que se quedó en el desierto y dormió por ahí.
0:04:04 Y como no tenía nada, utilizó una piedra a modo de almohada.
0:04:09 Según algunos escritos, esa piedra era prodigiosa y fue la que posibilitó la visión de la que hablaremos hoy.
0:04:18 Esa piedra en realidad no era una, sino doce.
0:04:21 Esas doce piedras estaban allí ya en tiempos en los que Adán había erigido un altar.
0:04:28 Abraham también había pasado por allí y cuando Jacob eligió una de ellas para apoyarse,
0:04:35 todas las piedras, las doce, gritaron al unísono,
0:04:39 descansa tu cabeza sobre mí.
0:04:42 Unísono de piedra, por favor.
0:04:44 Descansa tu cabeza sobre mí.
0:04:48 Y entonces milagrosamente se unieron las doce piedras y formaron una,
0:04:54 que Jacob finalmente usó como almohada.
0:04:57 Jacob concilió el sueño con cierta rapidez,
0:05:01 a pesar de los prodigios de los que había sido testigos.
0:05:04 Imagínense, yo desnudo en la afuera de una ciudad,
0:05:07 usando como almohada una piedra que acaba de empezar a los gritos.
0:05:11 No me dormiría tan fácilmente.
0:05:16 Pero este hombre se durmió y soñó, soñó con una escalera,
0:05:20 una escalera apoyada en la tierra y cuya cima tocaba los cielos.
0:05:26 Sí, trataba una escalera considerable.
0:05:29 Jacob vio ángeles que subían y bajaban por aquella escalera.
0:05:35 Algunos se saludaban, otros bajaban con gesto a gustos,
0:05:42 otros sonreían.
0:05:44 En el sueño Jacob escuchó una voz y la voz decía,
0:05:48 Soy el Dios de tu padre, Isaac, y el padre de tu padre, Abraham.
0:05:54 La tierra a la que estás acostado te la doy para ti y tu descendencia.
0:05:59 Te extenderás al poniente y al oriente, al norte y al mediodía.
0:06:04 No te abandonaré hasta haber cumplido lo que he dicho.
0:06:08 Es decir, Dios había elegido a Jacob como fundador de Israel.
0:06:13 Como dijimos al comienzo, los hijos de Jacob gestaron las 12 tribus.
0:06:19 Pero no nos importa eso, sino las conjeturas acerca de aquella escalera soñaba.
0:06:25 Y aquí empieza la brevísima cosa que yo quería contarles.
0:06:29 Jacob se despertó asustado y supo que en aquel lugar no se soñaba un soño cualquiera.
0:06:36 Supo que ahí se soñaba un soño importante y que allí mismo estaba la puerta del cielo.
0:06:42 Tomó la piedra que se había puesto como almohada, la erigió como altar y derramó aceite sobre ella.
0:06:49 Un aceite que no se sabe de dónde habrá sacado.
0:06:52 Todavía es que el sobrino acababa de despojarlo de todos sus bienes.
0:06:55 Le habrá dejado el aceite.
0:06:58 O habrá exprimido, Jacob, alguna cosa.
0:07:04 A partir de entonces aquel lugar se llamó Betel o Casa de Dios.
0:07:08 Se ha dicho que Jacob se equivocó en esa visión soñada o que en realidad soñó otra cosa.
0:07:14 Y algunos aseguran que los ángeles del sueño eran príncipes guardianes de cuatro naciones opresoras.
0:07:22 El príncipe de Babilonia subió 70 peldaños y luego bajó.
0:07:28 El príncipe de los medos subió 52 y descendió.
0:07:33 El príncipe de Grecia ascendió 180 peldaños y bajó.
0:07:38 Pero el príncipe de Edom subió y subió hasta que Jacob lo perdió de vista.
0:07:44 Entonces preguntó angustiado a Dios si aquel ángel no descendería nunca.
0:07:49 Y Dios le respondió que aunque llegara al último pendaño y se sentara a su lado, él lo bajaría.
0:07:55 Luego de aquella aclaración, Dios invitó a Jacob a sube.
0:08:01 Pero Jacob era apocado y no lo hizo.
0:08:04 Dicen que por aquella negativa Dios condenó a Israel a someterse a los cuatro reinos de aquel mundo.
0:08:12 Cuenta Robert Graves que los escalones por los que ascendían los ángeles
0:08:16 representaban el número de años que sus naciones dominaron a Israel.
0:08:21 A saber 70 años de desierro babilómico desde la caída del primer templo en 586 a.C.
0:08:30 Hasta la conclusión del segundo en 516.
0:08:33 Después 52 años de dependencia de los medos
0:08:37 cuyo fin coincidió con el regreso de desterrados que encabezó Esraaz en el reinado de Ciro.
0:08:44 180 años de gobierno elenístico desde la conquista de Palestina por Alejandro de Macedonia.
0:08:52 Hasta el restablecimiento de un reino judío por los macabreos.
0:08:56 Como se ve esta escalera tenía símbolos anteriores pero más que era posteriores.
0:09:04 Era un símbolo del futuro.
0:09:08 Ahora bien la ascensión ininterrumpida de Edom se refería al dominio de los romanos
0:09:14 y evidentemente esta leyenda midrácica que cuenta el sueño de Jacob
0:09:19 se escribió en tiempos de la dominación romana.
0:09:23 Todavía no había dejado de ascender el príncipe de Edom que era Roma
0:09:27 y sin embargo preveían que algún día iba a bajar.
0:09:30 Últimos detalles eruditos, digo unos que no saben nada,
0:09:35 dijimos hace un momento que Dios impediría la llegada del príncipe de Edom
0:09:40 hasta su diestra por más que subiera y subiera.
0:09:45 En este caso el ascenso prohibido es por aquella escalera
0:09:48 y otros dioses han prohibido que se le acercaran aún por otros métodos.
0:09:53 Recordemos a Belero Fonte que en los mitos clásicos quiso subir montado en el caballo Pegasso al olimpo
0:10:00 y fue tombado para no hablar de Ícaro aunque su desgracia fue el sol
0:10:08 pero también fue desbarrancado al derretirsele las alas.
0:10:13 Bueno, yo recuerdo otras asañas también contadas por Robert Graves
0:10:18 que como estas son más poéticas que rigurosamente mitológicas
0:10:24 y recuerdo, aquí lo hemos contado más de una vez,
0:10:28 la explicación del número de la bestia, la explicación del 6666,
0:10:34 que hemos dado aquí después de convertir el número de todas las letras que componían el nombre de Nerón.
0:10:43 Si quiere, la vamos a recordar.
0:10:45 En principio, se había pensado que aquel número tenía una traducción en letras,
0:10:58 toda vez que muchas lenguas usaban letras para escribir números,
0:11:06 por ejemplo, la lengua aramea o hebrea o la lengua hebrea.
0:11:14 Alguien, yo no recuerdo ahora quién, fue el primero que pensó que la anticristo, la bestia, era Nerón
0:11:22 y utilizaron las letras hebreas, NUN, que sirve para escribir 50.
0:11:32 R, RESH, que sirve para escribir 200.
0:11:39 VAV, que representa el 6 y NUN, que es el 50 otra vez.
0:11:46 N, R, U, N, forma Nerón.
0:11:51 La lengua hebrea como que saben no usa vocales.
0:11:59 Y después, la KOF que vale 100, Samedz 60 y otra vez RESH 200, escriben K, SR, Késar.
0:12:10 No es exacto, pero está bien, Nerón Késar.
0:12:13 Pero Grave tuve una visión mejor, pensó número Román.
0:12:19 Y pensó una D, una C, una L, una X, una B y una I, que es la forma de escribir 666.
0:12:28 Y vio las siguientes iniciales.
0:12:33 Domingues Késar, Legatos Christi, Wiliter Interferkit.
0:12:41 Qué quería decir, Domingues Késar a los enviados de Cristo, vilmente mató.
0:12:54 Y no aceptaba saber por qué Domingues Késar, hasta que recordó que el nombre original de Nerón, era Domingues,
0:13:04 el nombre de familia, era el segundo nombre de su padre, Gnaeo Domingues, un asesino de lo peor
0:13:12 que fue su padre mientras que Gripina, Gripinila, no fue su madre.
0:13:19 Y que había dicho cuando nació, cuando lo felicitaron por el nacimiento de ese chico,
0:13:28 nada bueno traerá a este niño a Roma.
0:13:33 Pero más tarde, nuestro amigo Claudio, el emperador Claudio, lo adoptó y le cambió el nombre.
0:13:42 Y entonces ya pasó a llamarse Nerón y otros muchos otros nombres que no recuerdan.
0:13:46 Entonces casó en la cuenta Graves de que Domingues Késar no era otro que Nerón.
0:13:52 Y que Domingues Késar, Legatos Christi, Wiliter Interferkit, quería decir eso.
0:13:59 Después cambió Wiliter por Violenter.
0:14:04 Pero bueno, esos son otros detalles.
0:14:06 De aquello que según Graves, él vio en un sueño y que lo tomó como una revelación,
0:14:14 no mística ni religiosa sino poética.
0:14:18 La revelación poética del número de la bestia 666.
0:14:25 Bueno, eso es todo lo que teníamos que decir.
0:14:28 Esta noche acerca de dos historias que no están por ahí en los libros clásicos,
0:14:37 sino que provienen de literaturas medierásicas una, literaturas posteriores a los libros sagrados
0:14:44 de judaísmo, y de Robert Graves la otra.
0:14:49 ¿A quién quiere dedicar esta charla?
0:14:53 A los nórdicos, en primer lugar Alejandro, que también pensaban de algún modo poético
0:14:58 unas especies de escaleras.
0:14:59 Una de ellas era el arcoíris, recuerda usted, un puente que llevaba hasta el asgar.
0:15:05 Y otra vez era ese gigantesco árbol, cuya copa llegaba al asgar y cuyas raíces llegaban a estar en freno.
0:15:11 El infierno aglásil.
0:15:12 Exactamente, que hasta la custodiaban al árbol, para que no se subiera nadie por ahí hasta sus dominios.
0:15:19 Y después, a que de piedras hemos hablado, permítame dedicar esto al amigo Simón,
0:15:24 ya que sobre esas piedras se ha edificado una gran iglesia.
0:15:27 Estaba el profeta, Mahoma, que sí subió.
0:15:30 A él sí le apareció una soga en una escalera, y él subió, subió por la soga.
0:15:36 Probablemente en el mismo lugar, me parece.
0:15:41 Tiene que ser en el mismo lugar.
0:15:44 Bien, hemos ido a la discoteca, y cuando le hablamos de escaleras y de sogas,
0:15:53 y de artefactos que sirven para ascender o descender,
0:15:57 el discotecario que es muy hospitalario, con la metáfora...
0:16:04 Y en realidad lo que quiere es encajarnos cualquier disco.
0:16:10 Sí, que nos pasamos rápido.
0:16:11 Nos dijo que una barranca también era una especie de escalera,
0:16:14 y nos dio el tango a la barranca, que por lo menos es precioso.
0:16:18 Y así que escucharemos la barranca, un tango interpretado por Charlo.
0:16:27 Estoy pensando que generalmente se usa la barranca como metáfora para descender.
0:16:34 Pero aquí no.
0:16:35 Se le sirva arranca abajo, ¿no?
0:16:36 Sí, porque esta barranca es una barranca que hay que remontar con un carro.
0:16:41 Es una barranca hacia arriba.
0:16:44 Así que escucharemos el bello tango, la barranca en la versión de Charlo,
0:16:49 en alusión a la escalera que Jacob se negó a subir y que conducía al cielo.
0:18:06 Su pena de compadre viene canteando su dada.
0:18:14 Te lo cura por la madre, por ella tan solo la va a perdonar.
0:18:22 También su vida es barranca que es total con el sincor.
0:18:33 Levo a una pena de lanza y un triste recuerdo que lo hace aflojar.
0:18:41 Y con más dice que le tiene poca es el rameño mejor.
0:18:51 Deja sus penas el tiempo y al grito de Charlo, parte al dolor.
0:18:59 La barranca de Patricio viene en ti, me rozada.
0:19:10 Donde se ha quedado clavada tu triste y negra mirada como quien mira de vídeo.
0:19:18 Mierd su pena de compadre viene canteando su dada.