Transcripción automática
0:00:00 Hablaremos hoy de la blasfemia. Atención, nos llaman muchos sozentes y blasfeman por
0:00:09 teléfono. Hoy nos ocuparemos justamente de ese asunto, de la blasfemia y de las sanciones
0:00:17 que a través de la historia la blasfemia ha merecido.
0:00:21 Blasfemia, dice Volter, es una palabra griega que significa ataque a la reputación. Según
0:00:27 Volter ya se encuentra esta palabra en las obras de Demó. Así como el juramento es
0:00:35 un homenaje tributado a Dios, la blasfemia, por el contrario, es una interpelación a
0:00:40 la Divinidad, esa con una idea de ultraje, de maldición o de odio.
0:00:45 Y agrega Volter, entre los gregos se trataba de una injuria hacia los dioses. Eso me gustó,
0:00:52 una injuria hacia los dioses. También se la denominaba juramento ruín, es decir, un
0:00:58 juramento que se prestaba contra la voluntad de Dios. En antiguas legislaciones la blasfemia
0:01:05 era considerada como merecedora de los mayores captivos y incluso en algún caso que la asimilaba
0:01:12 al crimen capital. Así de verdad, a ver, a la suerte.
0:01:17 La represión a las ancianas fueron más bendigas, pero veamos, entre los hebreos la blasfemia
0:01:27 redondamente se capturaba con la lapidación. Era culpable de ese delito y se lapiraban.
0:01:35 Esto empezaba a tirar piedras hasta que morías bajo ellas. Pues bien, al culpable entre los
0:01:41 hebreos lo lapiraban, pero fuera de la ciudad. No van a estar llenando de piedras el distrito
0:01:47 federal. Primeramente se sacaban de la ciudad y antes de la lapidación los que te habían
0:01:55 oído mal decir a Dios iban a poner tus manos sobre tu cabeza para certificar con ese ritual
0:02:01 que había sido castigo. Después se ven en el castigo y hay que decir que la pena se
0:02:06 aplicaba no solamente a los hebreos de nacimiento sino también a los gentiles. Es decir, a
0:02:11 la vez que el extranjero blasfemo también se lo lapidaba.
0:02:17 Otro detalle. Los hebreos solían dejar sus vestiduras cuando oían palabras blasfemas.
0:02:22 Era porque tales escándalos se trataban también con la causa de la niebla, de enorme tristeza.
0:02:29 En Roma el culpable de la blasfemia sucundía bajo el alcha del lictor. El insulto a Dios
0:02:39 dice en algunos cronistas en los que no creo, traía consigo la pena de muer. A mí por
0:02:45 ese que no. Me atrevo a oponer, me atrevo a argumentar que los romanos no emplearon
0:02:51 nunca la palabra en cuestión blasfemia porque no creían que pudiese ofenderse el honor de
0:02:58 un Dios como se ofende y el honor de los hombres. Yo creo que hay algunas razones para no castigar
0:03:05 en este mundo la blasfemia. Si trata de un crimen contra Dios, ya se encargará Dios de
0:03:10 castigar. Eso puede ser un argumento. En el medio debo las cosas fueron realmente
0:03:16 bravas para el blasfemo profesional. Durante el reinado de nuestro amigo San Luis, de Luis
0:03:23 IX de San Antonio, el culpable de la blasfemia debía ser marcado con un hierro candente.
0:03:31 Lo marcaban en la frente y en caso de reincidencia iba atravesado el labio con un hierro al rojo
0:03:38 que probablemente era el mismo hierro utilizado la primera vez. Podría ser. Por ahí era
0:03:47 otro, pero al mejor no tenían un solo hierro, los avanzando para marcarte en la frente la
0:03:52 primera vez como para atravesarte el labio la segunda. En todo caso haremos de convenir
0:03:57 que se trata de un detalle no muy importante. El Papa Inocenso IV intervino en algún momento
0:04:08 durante el reinado de San Luis, de Luis IX, para tratar de amainar un poco estos castillos,
0:04:13 el hierro candente o los doblos. Pero el rey Luis persistió en mandar aplicar los más
0:04:22 duros castillos. Entonces el Papa Inocenso envió un ultimatum al rey en 1265 para que su primera
0:04:30 cuente menos las mutilaciones. En realidad el poder civil se mostraba menos indulgente,
0:04:38 menos tolerante que el mismo Jefe de Iglesia aún tratándose del honor de Dios como se
0:04:42 decía entonces. En fin, eran cuestiones que uno supone que deberían ser delivales. Pero
0:04:50 San Luis, el rey, al final se dio a las amonestaciones de Roma y modificó las legislaciones por medio
0:04:57 de una ordenanza que limitaba a la multa y a la prisión el castigo para aquellos que hubieran
0:05:02 preferido palabras horribles. O sea, vos decíamos las palabras y las sacados, rebarata, porque apenas
0:05:08 si te multaban, vos te mandaban preso. Las cosas cambiaron por un tiempo porque después
0:05:14 Felipe II, o Felipe II, rey de Francia, no confundir con Felipe II de Afurgo, sentía tal horror
0:05:24 por la Blasphemia. Pero en realidad Felipe II, rey de Francia, era anterior. ¿Qué me está diciendo?
0:05:30 Hay cáncer que el Felipe II, rey de Francia sentía, o sea, antes o después de San Luis sentía horror
0:05:37 por la Blasphemia y cuando la oíla de boca de algún soldado, mandaba inmediatamente a que este
0:05:43 soldado fuera arrocado al río. En este procedimiento, según él, aseguraba que una persona se actuiera de
0:05:50 hablar ruinamente. Es verdad, en el fondo del río uno no dice malas palabras. Felipe VI,
0:05:58 un rey que sigue el José Jorah San Luis, vito unas ordenanzas según las cuales el individuo culpable,
0:06:08 juramento ruin, era atado a la picota. La picota es una palabra que forma parte de las
0:06:15 que merecería alguna pena. Cuando un chico dice picota lo mando a lavar la boca con jabón.
0:06:25 Es una feo. ¿Es picota una mala palabra? No, pero suena feo.
0:06:33 Es una feo. Es una palabra.
0:06:35 No, es una feo. Yo traigo con mi novia, le voy a decir picota. Y más...
0:06:42 Picotita mía.
0:06:44 No, no, pero robo.
0:06:45 Bien rodeada es una mala palabra, lo preo. No me entiendes.
0:06:49 Se tenga una picota.
0:06:52 Fue Felipe VI, en tal caso, ataba a la picota lo que mal decían y lo sometía a una lluno
0:07:05 a pan y agua durante dos meses entero. En caso de reincidencia, el siguiente que salía
0:07:13 producirse generalmente durante esos dos meses.
0:07:18 ¿Se le partió el labio inferior con un hierro candente que quizá era el mismo que hablábamos
0:07:24 anteriormente? O quizá no, ¿no?
0:07:27 Esto se le hacía...
0:07:30 ¿Qué pasa esto?
0:07:32 Hasta que los dientes quedaban al descubierto. ¿Cómo me gusta hacer algo?
0:07:36 Hasta que los dientes de alguien quedan al descubierto.
0:07:42 A la tercera vez que se lo hacían, ¿eh?
0:07:45 ¿Los dientes?
0:07:47 Si le partía el labio superior de tanta felicidad.
0:07:53 A la cuarta te cortaban los labios y a la quinta te cortaban la lengua, ¿verdad?
0:07:58 También el tipo, ¿no?
0:07:59 Era por fíado, ¿cuál es?
0:08:01 Cuento el dioso.
0:08:02 Mira, pero todas estas cosas a veces pasaban el mismo día, ¿verdad?
0:08:07 Había también penas accesorias.
0:08:09 Qué lindas son las penas accesorias, ¿no?
0:08:12 Que usted tiene una gran pena y que fue alguna pena accesoria.
0:08:16 Yo era por una mina que se amó mucho, ¿vaya?
0:08:19 La gran pena.
0:08:21 Tú tiene penas accesorias, ¿no?
0:08:23 Que se...
0:08:24 Acaso por minas que se amó menos.
0:08:27 O que no nos abandonamos, pero no pueden venir hoy.
0:08:31 O por ahí si no tienen la misma mina, pero son complementarias.
0:08:34 La pena grande es que la mina lo dejó.
0:08:37 Penas accesorias que se seman 50 pesos.
0:08:47 Bueno, en todo caso, del punto de vista jurídico,
0:08:51 la picota, la escalera, la exposición pública de los asfremos eran penas accesorias,
0:08:57 de aquellas que consistían, por ejemplo, en el corte de la lengua del tipo, ¿no?
0:09:01 Según las ordenanzas, el pueblo estaba autorizado a arrojar barro, basura y excrementos al culpable expuesto,
0:09:09 Pero estaban prohibidas las piedras.
0:09:10 Ah, momento.
0:09:12 Esto no es una piedra y se lo pudo tirar.
0:09:15 A mí me dice, pero parece, pero parece.
0:09:20 Y durante muchísimos años, asistieron más a las ejecuciones capitales,
0:09:25 y se lo que costumbre que pasinaba la gente.
0:09:28 Bueno, uno no asisten más.
0:09:30 Uno asiste en forma particular.
0:09:34 Muchas asistentes lo forman una masa, ¿no?
0:09:38 Ahí en París, por ejemplo, los suplicios tenían en lugar en la isla de San Luis,
0:09:43 entonces, ahí se la chiquita, ahí pegada, en la isla la asisté.
0:09:48 Y ahí quemaban a los neantos.
0:09:50 Ahí atormentaron de un modo imposible de salir aquí por respecto a las damas.
0:09:55 A los amantes Margarita y Blanca, que eran las mujeres,
0:09:58 respectivamente, de los hijos de Felipe la Hermosa.
0:10:04 Creo que era Luis, que fue Rey, y el décimo, me parece.
0:10:07 El otro era Carlos, pero yo no sé si Carlos era hijo de Felipe la Hermosa.
0:10:12 Bueno, Margarita y Blanca se llamaban.
0:10:14 Que tenían de novios a dos escuderos.
0:10:17 Y había una tercera, que era la mujer de otro hijo de Felipe la Hermosa,
0:10:23 de Felipe la Hermosa, Margarita y Felipe el hijo.
0:10:26 Pero ella no participaba, sino que hacía de campaneras.
0:10:31 Bueno, el caso es que las casaron a dos meras con dos escuderos.
0:10:35 El Pichy y el hijo.
0:10:42 Y a los que atormentaron fue a las escuderas.
0:10:45 Pero las meras la mataron por eso.
0:10:47 Ahí en la isla de San Luis.
0:10:49 Pero ahí también me parece, me parece,
0:10:52 que aquel, ¿cómo se llama aquel que quiso asesinar a Luis XV?
0:10:58 También lo martirizaron aquí.
0:11:00 En Barcelona, por ejemplo, al loco, al llamado loco Cañamas,
0:11:04 que había atencado contra la vida de Fernando Católico.
0:11:08 Y que después ya prohírio los peores insultos contra la iglesia.
0:11:12 Bueno, antes de ejecutarlo, le cortaron una mano, la lengua,
0:11:15 y las partes cortadas se las colegaron del cuello,
0:11:18 y fue lo pasearon por entre la gente para escarmiento de los espectadores.
0:11:22 En realidad para regocijos de los espectadores.
0:11:25 Después también estaba el blasfemo y Erej de Miguel Cerbec,
0:11:28 cuya Erejía consistió en descubrir la circulación de las ángeles.
0:11:33 Se le condenó a hacer quemado vivo,
0:11:36 y se procuró que la leña fuera verde para que el suplicio durase más.
0:11:41 Entre otros castigos terribles,
0:11:45 después del abogado Mateo Vergíe,
0:11:49 de Río, reniego de Dios, lo arrastraron, llevaban a la mano,
0:11:54 un siglo de estira encendido de dos kilos de peso.
0:11:57 Bueno, es muy difícil que no se te caiga el siglo
0:12:01 cuando te están arrastrando.
0:12:03 Creo que no importa.
0:12:05 Casi curioso que hemos contado aquí el siguiente,
0:12:08 en una ejecución pública,
0:12:10 que se cuenta ya como Casanova,
0:12:13 no, ya como Casanova,
0:12:16 ya como Casanova,
0:12:20 ya como Casanova,
0:12:22 nombre de una persona,
0:12:24 en un libro de memorias.
0:12:27 Y que se cuenta que la visión de un tormento público
0:12:32 solía enfermarse algunas ramas,
0:12:35 de suerte que algunos tenían por costumbre,
0:12:37 de la misma mucha humbre,
0:12:39 prosolera beneficiar a la dama
0:12:42 mientras atormentaban al tipo.
0:12:45 Y él cuenta que él mismo le demostró su estimación,
0:12:50 no me acuerdo qué marquista,
0:12:52 mientras estaba un alacronismo,
0:12:57 bueno, no se,
0:12:59 atormentando un gasto.
0:13:02 Y él estaba...
0:13:04 y yo a minas para...
0:13:07 amarlas ahí.
0:13:10 Porque resultaba a las mujeres existentes.
0:13:12 Sí, sí, que vaya gente a ver,
0:13:14 eso ya es malo.
0:13:17 Que además se usen como...
0:13:20 Como quien pone una película pornógrafica,
0:13:23 es mucho peor.
0:13:25 A vos te van a cortar la cabeza y ve que está el tipo ahí mirándote.
0:13:31 Y vos lo ves en la cara al vivo y le haces la graja.
0:13:35 La cosa, ahí se me está en la cara.
0:13:41 Bueno, en vista de los castigos excesivos
0:13:43 de la legislación contra la latrina,
0:13:45 la gente empezó a disimular las fórmulas penadas
0:13:49 mediante un frenismo para no ser alcanzada por la ley.
0:13:53 En Francia la palabra llé, Dios,
0:13:55 fue sustituida por la palabra ble.
0:14:01 Y una especie de dialecto callejero,
0:14:03 más o menos como quien dice,
0:14:05 me calles el día, o la punta de los meliscos,
0:14:07 o me caigo y me levanto,
0:14:09 o la conferencia de cinemas.
0:14:12 Y cosas que uno dice,
0:14:15 por ejemplo, en una embajada...
0:14:18 ¿Para qué da bien?
0:14:21 ¡Ah, señor embajador!
0:14:23 Y ese, no...
0:14:25 El monstruo que le saldico un poquito,
0:14:27 y nos ha hablado que el embajador
0:14:29 tiene un poquito de hilo,
0:14:31 y nos dice,
0:14:33 ¡Ah, con el tengo al brazo!
0:14:35 No sé, no sé, claro.
0:14:41 Todas estas sustitucciones nos causan,
0:14:44 verdad, mucha gracia, ¿no?
0:14:46 Todos nos reímos muchísimo menos en la televisión
0:14:49 donde es necesario decirlas por completo,
0:14:52 para justificar que se está ante un episodio realista.
0:14:57 Sin embargo, este sur terburo deliente,
0:14:59 decirme, me calles y me levanto,
0:15:01 fue condenado y combatido
0:15:04 por distintas ordenadas.
0:15:06 Felipe Agusto, aquel que fue a las cruzadas,
0:15:09 y aquel que justamente en tierra salta
0:15:11 se le puso el pelo blanco de un momento para otro,
0:15:14 mandaba la cárcel al que proferiera expresiones
0:15:18 aunque fueran con variantes,
0:15:20 aunque fueran como ligeras valiasas, ¿no?
0:15:23 Pues decía, me calles y me levanto,
0:15:25 y venía Felipe Agusto y te la tianca.
0:15:27 Entendido.
0:15:29 Bueno, en tiempos de luz 14 el rey sol
0:15:31 todavía se practicaba la mutilación a los que hacemos,
0:15:35 pero recién al séptimo el traje,
0:15:39 y si vos podías sin pena alguna
0:15:43 bajar seis cantos del cielo,
0:15:46 al séptimo que haya la carne y te mutilaba.
0:15:51 El delator, el que elaptaba a un blasfemo,
0:15:56 tenía derecho al tercio de la multa impuesta,
0:15:59 que se le cobraba a multa.
0:16:01 Así que habrá habido, digo yo, el tiempo de luz 14,
0:16:04 númerosísimos cicofantas que denunciaban
0:16:07 a lo que decían Malafalda.
0:16:09 Ya se sabe lo que sucede con él.
0:16:12 Empiezan las falsas delaciones.
0:16:15 Empieza a gente a delaptar a quien realmente
0:16:18 no ha dicho nada,
0:16:20 hasta que alguno descubre que esas delaciones
0:16:22 son falsas y entonces se condena
0:16:24 a los falsos delatores,
0:16:26 para la cual hay que delatarlo primero.
0:16:29 Entonces se impule un premio al que
0:16:30 elate a los falsos delatores,
0:16:33 hasta que se comprueba que estas delaciones
0:16:35 son muchas veces falsas.
0:16:38 Digamos para terminar que la revolución
0:16:40 francesa, a volir la región de Estado,
0:16:44 suprimeo al mismo tiempo las penas
0:16:46 contra las femias y esa gente.
0:16:49 Cuando en 1801 se restituyó el catorisismo,
0:16:52 se volvieron a castigar las blasfemias,
0:16:54 pero ya exclusivamente, dentro del ámbito de la iglesia.
0:16:58 Hoy en día no se tema con ninguna sanción,
0:17:04 lo cual me parece bien, pero
0:17:07 hay que decir que está permitido decirme
0:17:10 las palabras en los medios de comunicación
0:17:12 y por suerte también no tiene la posibilidad
0:17:15 de no decirlas.
0:17:17 Por ahora solo está permitido decirme las palabras,
0:17:20 quiero decir que no es obligatorio,
0:17:23 aunque preciento que en algunos canales
0:17:25 hay que dedicar esta charla,
0:17:30 querido Rolón.
0:17:32 Bueno, en primer lugar, Alejandro, ya que
0:17:34 la atidación, como se ha hablado,
0:17:36 permítame dedicarse al Cristo que algo
0:17:38 tuvo que decir en algún momento
0:17:40 acergar las latidaciones,
0:17:42 también a Donald Satterland,
0:17:44 que personificara a Casanova
0:17:46 la película de Celíni,
0:17:47 justamente la película antiesa
0:17:49 con esto usted ha narrado,
0:17:51 con la persona que de Casanova,
0:17:53 a ti no le daba una dama
0:17:55 cuando estaba castigando a alguien,
0:17:57 y por último déjame, ya que la gente iba tanto
0:18:00 a disfrutar de este horror
0:18:02 y se anticipaba,
0:18:04 a aquellos que no participan,
0:18:06 digamos, con su mirada,
0:18:08 de este tipo de actitudes
0:18:10 y todo eso a aquel pueblo,
0:18:12 que usted recordará mejor que yo, Alejandro,
0:18:14 que ante el paso impuesto de la mujer
0:18:16 de snuga, caballos, cerrado en sus cermas,
0:18:18 cerrado en la vuelta para
0:18:20 losendar la costumbrada.
0:18:23 Y también yo,
0:18:24 yo lo dedico al pobre Cervés,
0:18:26 el que descubrió...
0:18:28 La circulación de las ambles.
0:18:30 La circulación de las ambles junto con
0:18:32 otro señor Javi, ¿no?
0:18:34 No hay que la sangre no ha circulado, imagínense.
0:18:36 Estaba detenida en el cuerpo
0:18:38 con los inconvenientes que todos ustedes deben presentar.
0:18:41 Nosotros te cortábamos y no pasaba nada,
0:18:43 ya que yo no presento ninguna clase de inconvenientes,
0:18:45 pero a ustedes seguramente sí.
0:18:47 Yo quiero decir que esto sucedía,
0:18:50 no solamente en el mundo del catolicismo,
0:18:53 sino también en el mundo del protestantismo.
0:18:58 A los dos escuberos de blanca y margarita...
0:19:09 Usted se preguntará, Rolón, con qué tango
0:19:14 vamos a ilustrar.
0:19:16 No, con una mirada, una mirad.
0:19:18 A ver, si me digas.
0:19:19 Ya que se trata de algo que conviene no decir,
0:19:26 me parece que nunca le dije nada,
0:19:28 que es un buen título y salgo,
0:19:30 que probablemente hayan contestado
0:19:32 ante la policía,
0:19:34 muchos sospechosos de las penas.
0:19:36 Ustedes que le dijo, no, yo nunca le dije nada.
0:19:39 Y nunca le dije nada, es una bella,
0:19:41 mi laonga de laonga, Mar Moreno Paracio,
0:19:43 que escucharemos en la versión del alto.
0:19:48 Un rosa color bien,
0:19:50 con esta besón supo llena.
0:19:56 Yo te di al día de un maler
0:20:00 y fue mi razón.
0:20:02 Y no me dices nada,
0:20:04 no me dices nada,
0:20:06 no me dices nada,
0:20:08 no me dices nada,
0:20:16 y fue mi mayor panel,
0:20:20 el perfume de chiquero,
0:20:24 y tu cariña panillada,
0:20:27 el grudor de tu mirada,
0:20:30 la tristeza de tu llanto,
0:20:32 pensarme que hice tanto
0:20:34 y nunca le dije nada.
0:20:46 Y no me dices nada,
0:20:52 capaz de montar mi ruedo
0:20:54 con un coro,
0:20:56 de cien horas,
0:20:59 o dormir con cien cuerdas,
0:21:02 sin que le me llevé,
0:21:06 mi sangre no se le salió,
0:21:09 pa' cualquiera propesar,
0:21:13 hago pa' nada ni cazura,
0:21:16 al diablo más extraño
0:21:18 de lo que cuitan el corazón,
0:21:20 y nunca te dije nada.
0:21:37 Está en aquel otro mundo,
0:21:39 ya hay a mis nombres,
0:21:42 seré,
0:21:45 un nago que condena de mi,
0:21:51 yo soy baril,
0:21:54 venido a mi falcacia,
0:21:58 por la trácepa no desea,
0:22:01 si así canta una encordada,
0:22:04 y un triste canto me llega,
0:22:06 rechala mi tanto pega,
0:22:09 y nunca te dije nada.
0:22:21 Ha cantado Omar Moreno Palacios,
0:22:25 nunca le dije nada.
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