Transcripción automática
0:00:00 Bien, vamos a pasar un asunto que tiene que ver con nuestra subcomisión de ciencia.
0:00:07 La generación espontánea.
0:00:11 Durante muchos siglos, muchos genios de la ciencia, creyeron en la generación espontánea de los seres vivos.
0:00:20 Y otros no. Otros sostenían que todo ser vivo proviene de algún otro ser vivo.
0:00:27 Pero hasta el siglo pasado, la mayoría decía que no, que en algún punto se producía la generación espontánea.
0:00:36 Aristóteles, no en el siglo pasado, ciertamente.
0:00:39 Cuando digo siglo pasado, debo estar diciendo siglo XIX.
0:00:43 Estamos manejando textos del año 1990.
0:00:49 Aristóteles, no dudaba en admitir el surgimiento de la generación espontánea de diversos animales.
0:00:57 En general, estos animales, que se generaban espontáneamente, se caracterizaban por ser de poco tamaño y relevancia.
0:01:07 Eran bichos de poca monta.
0:01:11 Eran seres de rango misio.
0:01:14 Bueno, no, es un ser.
0:01:16 Pero un hombre académico.
0:01:17 Seres vivos rantes.
0:01:19 Bien, bichos provenientes del agua, de la arena, del barro.
0:01:26 Sobre los cuales se pensaban que por ahí actuaba el sol o el calor y les infundía vida a moléculas que antes se estaban inanimadas.
0:01:36 Y Aristóteles decía, muy suelto del cuerpo.
0:01:40 Todo el cuerpo seco que se vuelva húmedo.
0:01:44 Que bien que le salga vivo.
0:01:45 O cualquier cuerpo húmedo que se vuelva seco produce animales mientras los pueda alimentar.
0:01:53 Decía esto creyendo que cualquier frase dicha en forma de vaibén es verdadera.
0:02:05 Bien, todo esto dijo Aristóteles, ¿no?
0:02:16 En sus tratados, historia de los animales y de la generación de los animales, Aristóteles predicaba con cierto tono poético que algunos insectos procedían del rocío que caía sobre las hojas.
0:02:32 También decía lo siguiente, en la lana se forman animalitos, las polillas, por ejemplo, que se forman sobre todo cuando se encierra allí una araña.
0:02:43 O sea que la lana no es que se llena de polillas, directamente la genera.
0:02:49 Todo lo que existe lleva en sí mismo el gen de su destrucción.
0:02:52 O sea que la lana genera polillas.
0:02:55 El hombre genera la referencia.
0:02:58 Los ciclos políticos de polibio eran él.
0:03:02 Plinio y los naturalistas antiguos estaban de acuerdo con estas enseñanzas aristotélicas y los medievales también y los modernos también.
0:03:12 Y transmitieron estas enseñanzas a la posteridad con buenos resultados.
0:03:16 La teoría de la generación espontánea sobrevivió durante 24 siglos.
0:03:20 Durante todo ese tiempo, digo yo al borde del santo, durante todo ese tiempo tuvo algunos adeptos que llevaron adelante algunos preceptos bastante curiosos.
0:03:32 Hablaré de Amroal Paré, un hombre que vivió en el siglo XVI.
0:03:40 Era cirujano.
0:03:41 Fueron pacientes suyos.
0:03:43 Francisco I, el hijo Francisco I, Enrique II.
0:03:47 El hijo Enrique II, Carlos IX.
0:03:49 El hermano Carlos IX, Enrique III.
0:03:52 En realidad lo atendió al pobre Enrique II el día de su muerte.
0:03:57 Estaban en un torneo de eso que viene uno de cada punta.
0:04:03 Al alanza caballo y le acertaron un lanzazo a Enrique II justo en el agujero que el yermo tiene para que uno mire.
0:04:12 Parece que es tensor.
0:04:13 Hay que tener puntería.
0:04:15 Bueno, se lo ensartaron, entró por un ojo y no le fue muy bien.
0:04:20 Ese es el médico Amroal Paré y decía que en una finca suya un día, mientras partía enormes rocas que no tenían apertura exterior,
0:04:31 encontró dentro de una de ellas un sapo grande vivo.
0:04:37 Esto le pasó.
0:04:39 Hay que ser muy genial para que te pasee.
0:04:42 Entonces, maravillado este médico ante el crecimiento y la formación del animal,
0:04:47 se puso a estudiarlo y llegó a la siguiente conclusión.
0:04:52 Estas cosas pasan muchas veces.
0:04:55 A esto le llamaba conclusión.
0:04:59 Estos animales están engendrados por alguna sustancia húmeda de las piedras,
0:05:06 cuya resultante putrefacta produce tales bestias.
0:05:11 Nunca nadie le dio bolilla, ni siquiera nosotros, que alcune.
0:05:16 Del mismo parecer fue el prestigioso naturalista, dibujante, jesuita y amigo de este programa,
0:05:23 a Tanácio Kirchner.
0:05:25 En su libro, en su libro no, en su libro.
0:05:28 Sí, libro.
0:05:30 Mundos subterráneos, cuya lectura recomiendo.
0:05:34 Habla de una especie de insecto encontrado en una cueva,
0:05:39 al cual considera engendrado por la pudrición de una planta.
0:05:44 Incluso Kirchner tiene un libro sobre el arca de nueve,
0:05:48 donde está la descripción animal por animal,
0:05:52 y divide la naturaleza en animales buenos y malos.
0:05:57 Lo parece absolutamente lógico.
0:06:00 Y con toda naturalidad declara que algunos animales nacen de la podre d'umbre de las plantas,
0:06:05 o de algún fenómeno raro.
0:06:07 De manera que no fue necesario poner esos animales en el arca.
0:06:11 ¿Para qué poner una serpiente, por ejemplo, si como dice Kirchner,
0:06:15 la misma surge de la mezcla, de no sé qué cosa cuando se pudre y el calor de no sé qué otra?
0:06:21 Entonces, ¿para qué gastar usted lugar del arca de nueve?
0:06:27 El científico flambénco Jean-Baptiste Fan-Helmonde,
0:06:31 que vivió entre los siglos XVI y XVII,
0:06:34 entendió que se podía fabricar animales.
0:06:39 Y lo intentó, eh, hay un hombre industrioso.
0:06:42 Quería fabricar animales a base de cosas.
0:06:45 Tenía una receta para ser ratas.
0:06:47 Me conozco.
0:06:48 Mira la siguiente, atención.
0:06:50 Lápiz y papel, amigas.
0:06:52 Debo tomarse una camisa prefermente sucia.
0:06:57 Y ponerla dentro de una vasija con granos de trigo.
0:07:01 Si se dejaba 21 días a la sombra,
0:07:03 que es el tiempo de gestación de la rata,
0:07:05 los granos de cereal se convertirían en pequeños ratoncillos.
0:07:11 No se sabe muy bien con qué beneficio eso sí.
0:07:13 Ya que la humanidad por lo general trata de no hacer más ratas,
0:07:17 sino más bien de matarlas.
0:07:20 Helmonde también dio instrucciones para hacer insectos y ranas
0:07:24 por medios parecidos.
0:07:26 La, eh...
0:07:28 Derivado del maíz, o sea, la rata.
0:07:31 La posteridad indica que Helmonde vio ser víctima
0:07:33 de la broma de alguien o padecer de algún tipo de locura pasajera,
0:07:38 porque el resto de sus tesi fueron realmente muy útiles.
0:07:42 Por ejemplo, la fabricación de Chanjo.
0:07:44 Claro, con maíz.
0:07:48 Bueno, no, Helmonde en 1648
0:07:51 concibió la digestión humana como una fermentación
0:07:55 y estudió como método para intervenir en este proceso
0:08:01 la ingesta de alcalinos para reducir los ácidos.
0:08:05 Un genio.
0:08:06 Un genio, un genio.
0:08:07 Cada alical que nos tomamos...
0:08:09 Cada alcal...
0:08:10 Es un homenaje que le hacemos a este hombre, el Fongelmonde.
0:08:15 Eh... Bien.
0:08:17 Algunos desafiaban aquellas opiniones favorables a la generación espontánea.
0:08:22 El amigo William Harvey fue el autor de la frase
0:08:26 Todo ser vivo, ha de proceder de otro ser vivo.
0:08:30 Este amigo Harvey es el mismo que inventó la circulación de la sangre.
0:08:36 Antes de Harvey...
0:08:37 No circulaba.
0:08:38 La sangre no circulaba.
0:08:40 Y ahí andaba la gente...
0:08:41 ¿Cogulada?
0:08:43 Todo el tiempo coagulada, efectivamente.
0:08:47 Miguel Cervet era, creo que un catalán que también...
0:08:51 Un compañero, sí.
0:08:52 Tuvo más o menos en la misma época la misma idea
0:08:55 que la sangre circulaba.
0:08:57 Fue una inquisición además, Cervet.
0:08:59 Sí, ambos creo, eh, que fueron quemados por el semejante blasfemia.
0:09:04 Un discípulo de Galileo, Francesco Reddy,
0:09:07 tomó la teoría de Harvey acerca de la generación de los animales
0:09:10 y la corroboró con una sencilla demostración.
0:09:13 Tomó dos pedazos de carne, estos que tengo acá.
0:09:18 Los puso debajo de una campana de cristal.
0:09:22 Ah, a uno, un pedazo de carne.
0:09:24 Y el otro, este, lo dejó al aire libre.
0:09:28 A la semana volvió, me imagino que se habrá ido.
0:09:32 Primero se fue y a la semana volvió.
0:09:35 El pedazo descubierto, disculpe la expresión.
0:09:40 Si llenó de podres dumbres, moscas y gusanos.
0:09:45 Y el pedazo protegido, que es un buen nombre para una película.
0:09:48 Qué lindo, el pedazo protegido.
0:09:50 No te la pierdas.
0:09:52 Permanoció libre de todo gusano.
0:09:54 Entonces quedó claro que los factores de putrefacción
0:09:57 no procedían de la carne sino de los fermentos.
0:10:00 Tiene un buen obstateo.
0:10:01 Nunca comenzó mucha gente ni siquiera nosotros.
0:10:04 Y la procedencia de los fermentos nunca se pudo averiguar.
0:10:07 Le recomendaron a Francesco Redi
0:10:10 que lejera a Aristóteles e hiciera menos experimento.
0:10:15 Y además lo metieron preso por robarle al carnicero.
0:10:18 Porque parece que no había pagado ninguno de los dos pedazos de carne que utiliza.
0:10:24 Uno le revolvió, por lo menos.
0:10:27 Un inglés, John Tarverville, que era un sacerdote
0:10:31 que vivió a mediados del siglo XVIII,
0:10:33 decidió dar fundamento y corregir los experimentos de Francesco Redi.
0:10:39 En aquel tiempo ya estaba bastante avanzado el microscopio.
0:10:42 Habían hecho por la mitad.
0:10:45 Y el hombre examinó un caldo de carne con el microscopio.
0:10:49 Gente que no tenía mucho que hacer.
0:10:51 Y las universidades inglesas, ¿o les?
0:10:53 Lo calentó al microscopio, me imagino.
0:10:57 ¿Y este picado gordito?
0:10:58 Lo tapó al caldo.
0:11:00 Y al cabo de unos días, vio millones de seres vivos minúsculos.
0:11:05 El hombre aseguró entonces que no cabía dudar de su generación espontánea.
0:11:11 El cóndez Luis de Buffon, que andaba escribiendo los 44 tomos de su historia natural.
0:11:17 El hombre su estilo de carne.
0:11:19 Creyó en la teoría de Tarverville.
0:11:22 Agregó incluso que esto probaba que la teoría espontánea podía ser el origen de animales incluso de mayor tamaño.
0:11:28 Pero correspondió al italiano Lázaro Spalanzani.
0:11:33 Y más tarde a nuestro querido Luis Paster.
0:11:37 Refutar estas teorías.
0:11:39 Con calor más intenso y frascos mejor cerrados,
0:11:42 Spalanzani obtuvo resultados muy distintos.
0:11:45 De hecho, no se vio ser viviente alguno.
0:11:48 A tomar.
0:11:50 Chupate esta, gritó Spalanzani.
0:11:54 Cuesta.
0:11:56 Paster estaba ilusionado con la idea de generar sustancia orgánica.
0:12:02 ¿Quién no tiene esa ilusión?
0:12:04 ¿Y cuánto lo logra?
0:12:07 De esa ilusión provenimos no solo.
0:12:10 Estamos seguros.
0:12:13 Trató para ello numerosos elementos.
0:12:16 Las distintas luces poderosas con imanes,
0:12:19 con rayos de sol, máquinas,
0:12:22 que llenaron su laboratorio y su cabeza también.
0:12:25 Y al mismo tiempo estudió la fermentación,
0:12:27 en alimentos y en alcoholes.
0:12:30 Y pronto descubrió que eran unos organismos diminutos
0:12:33 que en absoluto provenían de una generación espontánea.
0:12:38 Aquellos cuerpos entraban con el aire
0:12:41 y dependían de él.
0:12:53 Les contaré para terminar la historia del señor Poulet,
0:13:00 que era contra de Paster,
0:13:03 odiaba a Paster.
0:13:05 Estaba desesperado por refutar la teoría de Paster.
0:13:08 Escaló 3.000 metros hasta la cima de los Pirineos
0:13:11 con ocho recipientes sellados
0:13:14 que contenían eno esterilizado.
0:13:17 Al tiempo Poulet exhibió gustoso
0:13:19 que se habían generado organismos por símemos.
0:13:22 Licto, terminó el debate.
0:13:24 No, no, Pérez.
0:13:26 Ya que viene Paster.
0:13:28 Tenemos razón nosotros.
0:13:30 Más tarde se enteró de que estos seres
0:13:33 ya estaban en el eno
0:13:35 y que habían resistido todas las esterilizaciones.
0:13:39 Poulet, entonces, dejó la ciencia.
0:13:42 Un amigo de él, Andrew Cross,
0:13:45 que vivía en una casa campestre en Inglaterra,
0:13:50 tenía tiempo y dinero, experimentaba con electricidad,
0:13:54 un hombre honrado, temeroso de Dios e ignorante,
0:13:58 incluso de lo escrito por otros hombres de ciencia,
0:14:02 lo que lo obligaba a inventar el mismo el microscopio.
0:14:08 Y eso es el precio de la ignorancia.
0:14:10 Uno tiene que descubrir la rueda, la armonía,
0:14:12 la relación entre el violeta y el amarillo, todo.
0:14:15 Como no conocí lo que otros ya inventaron,
0:14:18 esto le pasa a los directores de cine
0:14:20 que insisten en no ver ninguna película
0:14:22 para no contaminarse con ideas ajenas
0:14:25 y tienen que inventar el raconto.
0:14:28 Bueno, Cross, que quería producir minerales artificiales
0:14:38 haciendo pasar corriente eléctrica por unas soluciones químicas,
0:14:42 vio que aparecieron unos milúsculos insectos
0:14:46 que terminaban volando en el laboratorio.
0:14:49 Bueno, a finales de 1837,
0:14:52 Cross era conocido en toda Inglaterra como un blasfemo,
0:14:55 como el diablo mismo, una especie de Frank Stein.
0:14:58 La acusación que contra él se levantaba era la de tratar
0:15:01 de crear seres vivos por medio de un proceso eléctrico
0:15:05 a partir de materia muerta.
0:15:07 Y tal acusación no era en vano, ya que eso había hecho,
0:15:11 había producido vida de manera artificial,
0:15:14 aunque le aseguró que había sido por casualidad.
0:15:17 A partir de su descubrimiento,
0:15:19 no recibió más que dificultades e impedimentos.
0:15:23 Se impidió que publicara y que jamás le comunicara a nadie del tema.
0:15:27 Lo curioso es que el mismo Cross era incapaz de formular
0:15:30 una teoría acerca de lo que había ocurrido.
0:15:33 Y dijo, trató de refutar en su propia teoría.
0:15:36 Dijo que por ahí eran insectos descendientes de los ácaros,
0:15:39 que habían nacido de huevos,
0:15:41 depositados en la atmósfera, que se yo.
0:15:44 La verdad es que Cross había logrado crearlos
0:15:48 en lugares perfectamente cerrados e impenetrables.
0:15:51 Hasta Faraday se pronunció en contra de los principios de Cross,
0:15:54 diciendo que se trataba de una simple revificación.
0:15:58 Revivificación.
0:16:02 Bueno, en sus últimos años el pobre Cross vivió apartado de la sociedad,
0:16:05 iba al cementerio, desenterraba hombres,
0:16:08 y aplicaba corrientes eléctricas para resucitarlos.
0:16:12 Lo empezaron a llamar el hombre del radio y del trueno,
0:16:15 nadie se acercaba a su casa, salvo un discípulo llamado Wex.
0:16:19 Se le atribuía una leyenda, según la cual,
0:16:21 se veían bailar sobre los alambres que rodeaban sus tierras,
0:16:24 unos diablos atestados,
0:16:27 rasos que le salían por ahí.
0:16:29 Murió este pobre hombre a los 70 años,
0:16:31 y dejó a su discípulo Wex la orden de que experimentara con su cuerpo.
0:16:36 No se sabe si Wex lo hizo, por ahí lo hizo de un modo particular.
0:16:40 Paraí, claro.
0:16:42 Y aquí termina este catálogo sobre los pensamientos
0:16:46 acerca de la generación espontánea.
0:16:48 Hoy sabemos dos cosas,
0:16:50 que efectivamente todo ser vivo desciende de otro ser vivo,
0:16:54 pero también sabemos que en determinadas condiciones de laboratorio
0:16:58 es posible concebir vida.
0:17:01 Lo sabemos desde hace muy poco,
0:17:04 se lo dedicamos a Aristóteles,
0:17:07 que sostenía que la mosca tenía cuatro patas,
0:17:10 porque lo había escrito él, no se iba a detener a contar de las patas.
0:17:15 La culpa era que tienen los ayudantes de Aristóteles,
0:17:19 que se encargarían de tal esta área.
0:17:22 Le llevo el informe y dice, la mosca tiene cuatro patas, muy bé.
0:17:26 Andá, dice, Luis.
0:17:30 Andá, dice, contarle las patas a una mosca que estoy escribiendo acá.
0:17:35 Y Luis, cuatro.
0:17:39 La mosca tiene cuatro patas.
0:17:41 Así se trabajaba, porque los grigos no trabajaban con la mano.
0:17:46 El trabajo banáusico, el trabajo de la mosca, era despreciado.
0:17:50 Entonces el tipo mandaba otro, y ese tiene la culpa.
0:17:56 No lo busqué.
0:17:59 Bueno, a quién quiere dedicar esta charla?
0:18:03 Yo sigo creyendo.
0:18:06 La creación de Omúnculos mediante una presión.
0:18:10 Iba a referirme a eso, Alejandro, porque Aristóteles contó a su sapiencia,
0:18:14 sapiencia que recuperamos gracias a los amigos árabes,
0:18:17 porque los textos de los clásicos quedaron así perdidos por Damasco, por Siria,
0:18:21 cuando nosotros, los católicos occidentales, quemamos todos.
0:18:24 Pero bueno, digo, Omúnculos, porque Aristóteles creía que el hombre,
0:18:29 el hombre cualquiera, digo, no solo usted, nació tal como iba a ser después,
0:18:33 que había un pequeño bichito en el vientre de las mujeres,
0:18:36 y que este pequeño hombre, Omúnculo, después crecía y se expandía,
0:18:39 como si uno le diera bomba, no a la mujer, sino al hombrecito, y le echara agua.
0:18:43 Digo, ideas de Aristóteles que alguna vez la Iglesia Católica creció reconciliarse
0:18:47 con la ciencia recuperando esas ideas.
0:18:50 Como los Simónquis.
0:18:52 Así nos va.
0:18:54 De ahí viene el conilismo de la Iglesia Católica.
0:18:56 Entonces digo, a ver, pensaba que a Aristóteles lo tenemos que dejar fuera,
0:18:59 pero sí estaba pensando en un amigo Móngel, como su amigo Médel,
0:19:03 aquel que con unas pequeñas semillas pudo generar cosas.
0:19:07 Pensaba en dos amigos de este programa, Gente de los Años 50,
0:19:10 el Pino de Watson, el Chico Crick, que alguna vez se dedicaron a explicarnos
0:19:14 qué era eso de ADN, no una coalición política,
0:19:17 y en general de aquellas personas que creen que el conocimiento del hombre,
0:19:21 el conocimiento de la especie humana, el general sirve,
0:19:24 no solo para desterrar mitologías, sino para hacernos una vida un poco más grande,
0:19:28 sino para hacernos una vida un poco mejor.
0:19:30 Quiero decir, un suponer, un fin de semana, un alije entre la generación espontánea
0:19:34 de la rural y el tecnópolis, y se va tecnópolis, digo.
0:19:39 Espera, espera, digo.
0:19:41 No hagamos populismo a Plaudan cuando venga el tema.
0:19:43 Quiero decir que es una cuestión que va más allá del partidismo político,
0:19:46 que tiene que ver simplemente con aquel fulano promete que alguna vez
0:19:50 le robó el fuego a los dioses para hacernos como dioses,
0:19:53 y en esa tarea todavía seguimos trabajando, y así nos va a también, bastante mal.
0:19:57 En cualquier caso, digo, dejemos que la generación espontánea
0:20:00 sea una generación que en vez de mirar para atrás, digo,
0:20:03 nuestra juventud puede crear su propia cosa, que es espontánea de eso,
0:20:06 y pensemos que entonces todo el riesgo del mundo está para disfrutar.
0:20:10 Aquí, donde tenemos algún amor, Sol y lluvia.
0:20:13 Sol y lluvia, una buena receta para construir vida.
0:20:18 Sol y lluvia se llama esta canción que cantará inmediatamente el mundo rivero.
0:20:59 No es toda pena vitalitar de a su alivio.
0:21:10 No puede calmar un punto, vitalitar mi martirio.
0:21:21 Porque mi querer más solo, vitalitar que no lo olvido.
0:21:34 Vida, y penas en vial, vitalitar, viven un mundo.
0:21:59 Vida, y penas en vial, vitalitar, viven juntas, así bajo el mismo cielo.
0:22:13 Vida, y tal, se colpura, se lajes y no arrones.
0:22:22 Vida, y tal, Sol y lluvia.
0:22:43 Era el mundo rivero en la venganza, será terrible, Sol y lluvia.
No hay comentarios. ¡Podés ser el primero en comentar!