Transcripción automática
0:00:00 Bueno, vamos a hablar hoy de un tema Sabú.
0:00:08 No, no es Sabú.
0:00:09 No, Sabú era un cantante.
0:00:11 Ah, cantante era Tabú.
0:00:15 Será que Sabú era Tabú.
0:00:17 Bueno, este es un tema en fascículo cerrado,
0:00:21 así que lo haremos con la mayor dignidad posible.
0:00:24 Hablaremos de la homosexualidad en Grecia y Roma.
0:00:27 En los mitos griegos aparece la homosexualidad
0:00:32 como atributo de muchos personajes,
0:00:34 tanto héroes como reyes o dioses.
0:00:37 Y el primero que nos viene en la cabeza es Tamiris,
0:00:41 que era un músico de gran belleza,
0:00:43 que se destacaba en el arte del canto y de la ligra,
0:00:47 y que había tratado de rivalizar en esas disciplinas con las musas.
0:00:51 Ya se sabe que el que quiere rivalizar con las divinidades
0:00:55 en los mitos griegos tiene un mal fe.
0:01:00 Desafió a las musas a una competencia de canto y ligra,
0:01:05 y solicitó como premio si ganaba el acostarse con las nueve
0:01:13 en forma sucesiva.
0:01:16 Este último inciso revela una cierta humildad después de todo.
0:01:21 El caso es que competieron y naturalmente las musas vencieron en el concurso,
0:01:28 y el hombre como castigo por haber perdido fue privado de su talento y de su vista.
0:01:34 No hay peor cosa para un músico que perder su talento,
0:01:38 es ser tuo perder su vista.
0:01:41 Pero no tanto en un músico porque la música no se ve.
0:01:45 Porque hay una cantidad de músicos no evidentes que teñales, ¿no?
0:01:48 Pero es evidente que la música no se ve y la escultura sí.
0:01:58 Pero una escultura hubiera sido fatal.
0:02:01 Bueno, había pedido, ya lo sabemos,
0:02:05 también es en caso de ganar esta licencia con las musas.
0:02:09 Pero, pasado este episodio,
0:02:14 también se encontró un día con un muchacho de gran belleza llamado Yacinto.
0:02:20 Y se enamoró, lo habrá tanteado, calculo,
0:02:23 porque si era ciego, por más belleza que tuviera este muchacho, no la podía apreciar.
0:02:28 Así que seguramente al tacto advirtió que era muy bello y se enamoró.
0:02:34 Y dice el mito que por amor hay asinto,
0:02:38 también fue el primero que ejerció la homosexualidad.
0:02:42 Sin embargo, hay polémica con eso.
0:02:46 Vire que este Yacinto era muy hermoso,
0:02:50 que hasta el Dios Apolo se había enamorado de él.
0:02:53 Un día en que ambos, Apolo y Yacinto, se entretenían lanzando el disco.
0:03:00 El viento desvió el disco que había lanzado a Apolo,
0:03:04 con tan mala suerte que rebotó contra una roca
0:03:09 y le pegó ahí Yacinto en la cabeza y lo liquido.
0:03:13 Apolo quedó concernado y para inmortalizar el nombre de su amigo,
0:03:18 transformó la sangre que había brotado de su herida en una flor nueva que no existía antes.
0:03:25 Una flor antidarguinana, evidentemente,
0:03:29 ya que en vez de seguir la evolución correspondiente,
0:03:32 era creada de un saque por un decreto apolíneo.
0:03:38 El caso es que esta flor, como todos ustedes habrán adivinado,
0:03:41 es el Yacinto, flor cuyos pétalos eran señales que parecen recordar el lamento de Apolo.
0:03:49 Con respecto a la invención de la homosexualidad,
0:03:53 también se atribuye al rey Minos, el rey de Creta, el famoso rey Minos de Creta.
0:04:00 Conforme a una tradición,
0:04:05 se decía que Minos se había raptado a Ganimedes, el copero de los dioses.
0:04:10 Sin embargo, el mejor criterio de los mitos dice que el que lo raptó fue el propio Zeus.
0:04:15 Recuerde que Ganimedes pasaba por ser el más hermoso entre los mortales
0:04:20 y había provocado, según se dice, el amor de Zeus.
0:04:24 Entonces, Zeus lo raptó y en el olimpo Ganimedes era mozo.
0:04:29 Le gustó a Zeus, el muchacho lo raptó y lo puso de mozo en el Ganimedes.
0:04:34 No es de inmigrante tampoco servir ahí.
0:04:39 Lo que va a ser de inmigrante.
0:04:40 Ser mozo es una profesión, pero en el olimpo es una maravilla.
0:04:45 El mozo del olimpo.
0:04:47 El fantástico.
0:04:48 Pero, sin embargo, como acabo de decir,
0:04:52 algunos dicen que fue Minos, el rey de Creta, el que raptó a Ganimedes.
0:04:58 De Minos hablamos muchísimo.
0:05:03 Siempre contamos que era Minos, era un hombre muy enamoradizo.
0:05:08 Estaba casado con una señora un poco bruja, pasifaje.
0:05:13 Y le había hecho un hechizo a su marido.
0:05:18 Y por culpa de ese hechizo,
0:05:20 este hombre cada vez que se acostaba con una mujer,
0:05:24 tenía la siguiente desgracia.
0:05:28 Le salían del cuerpo unos escorpiones,
0:05:33 insectos y bichos venenosos que picaban enseguida
0:05:37 en la mujer que estaba con él.
0:05:39 Esto le creó una cierta mala fama.
0:05:46 Pero finalmente alguien lo curó, no bien, al caso como.
0:05:51 Pasifaje, la mujer del tipo es aquella que se enamoró de un toro
0:05:56 y que se hizo construir por deda una vaca.
0:06:01 Donde se metía adentro.
0:06:03 Y coco, coco, coco, cuando aparecía el toro.
0:06:07 En Grecia, volvemos al tema central de este asunto.
0:06:12 En Grecia, jóvenes y viejos, se exhibían desnudos en la palestra o en los gimnasios.
0:06:17 Y a veces era muy frecuente en realidad, no solo a veces.
0:06:23 Que un hombre maduro se fijara en un adolescente y lo persiguiera.
0:06:28 Si el adolescente aceptaba y se unía a él,
0:06:31 se creaba entre ellos una intimidad muy particular.
0:06:34 La diferencia de edad era un detalle fundamental para estas relaciones.
0:06:39 El enesta y amigo de este programa, Jacob Burhard,
0:06:44 considera que esta costumbre provenía esencialmente de la situación social de las mujeres.
0:06:51 Las mujeres en Grecia, por mucho que cacarearan su espíritu democrático,
0:06:59 eran excluidas de lo más alto que había en la vida griega.
0:07:03 ¿Y qué es lo más alto que había en la vida griega?
0:07:06 El espíritu agonal, o sea, todo lo que tiene relación con la competencia.
0:07:11 Y la mujer no solo estaba excluida porque no podía competir,
0:07:15 sino que ni siquiera podía asistir allí donde se competía.
0:07:19 No podía asistir, por ejemplo, a los Juegos Olímpicos.
0:07:24 No podía participar, pero tampoco podía ver.
0:07:27 Y tampoco podía asistir a otras competencias que eran de la mente,
0:07:33 como, por ejemplo, los Juegos Florales o, pienso, en ese imposio,
0:07:38 aquella institución que consistía en reunirse los hombres para discutir mientras tomaban digno.
0:07:46 Algo parecido a lo que se hace ahora, pero por lo menos le daban un nombre.
0:07:50 Bueno, las mujeres no podían competir ni asistir.
0:07:54 Y toda esta exclusión de las mujeres, dice Burhan,
0:07:59 provoca la aparición de este desarrollo del amor entre los hombres.
0:08:04 En muchos gimnasios se veía la estatua de Héroes y Dios del Amor,
0:08:09 que es una divinidad menor entre Hermes y Herácter.
0:08:14 Ninguna depravación existía en estos romances.
0:08:23 Era amor concebido como irremplazable, sin comparación con ningún otro, decían ellos.
0:08:29 Y estaba fundado en la admiración recíproca entre el hombre mayor y el más joven.
0:08:34 El hombre mayor admiraba la juventud y tenía la tarea de proteger al amado,
0:08:38 de formar su espíritu y de consagrarle lo mejor de su pensamiento.
0:08:42 Habían establecido una edad ideal.
0:08:45 La del hombre mayor parece que era de 45 años.
0:08:50 Y el héroe, debía ser un adolescente entre 13 y 18.
0:08:56 Un detalle.
0:08:57 Estos adultos que buscaban un joven como amante y como discípulo,
0:09:01 estaban casados, casados con hijos.
0:09:06 Si estaba un poco mal visto, era el homosexual travespido.
0:09:13 En Atenas, en realidad lo único que se castigaba era la violencia en el amor.
0:09:20 Y también se atacaba al que se vendía con ánimo de lucro.
0:09:26 Solo entonces, mediando el dinero y la violencia,
0:09:30 la pederastia adquiría entre esos hombres un carácter vergonzoso.
0:09:35 Un ejemplo de esto es el pleito entre dos hombres llamados esquines y timarco.
0:09:42 Esquines benostaba a timarco, un joven que a los 13 años se vendía por una moneda.
0:09:48 Y decía, yo no critico los amores honestos, sino que condeno como condena la ley los amores mercenarios.
0:09:55 Bueno, luego citaba una serie de parejas de antiguos amantes.
0:09:59 Y recordaba a los jueces los nombres de algunos muchachos conocidos que eran respetados justamente,
0:10:05 porque debido a su gran belleza y sus virtudes habían sido bien amados.
0:10:11 Según esquines, timarco era esclavo de las pasiones más despreciables, más desmesuradas.
0:10:17 Timarco, esquines era el otro.
0:10:20 Timarco, decía él, tenía cientos de amantes y los tuvo hasta que perdió su belleza y su juventud.
0:10:26 Parece que murió en un teuturio, en fama, que sí.
0:10:29 Y fíjese la idea, yo cuento esto para ella, para desarrollar un poquito esta idea.
0:10:35 Aparece la palabra esclavo aquí, en la descripción de una pasión o de un vicio.
0:10:42 Y los griegos no tenían mucha idea del pecado, pero sí tenían idea de la esclavitud.
0:10:48 Decían, el que es esclavo de sus pasiones es vicioso, porque no es libre.
0:10:54 Y se la idea central.
0:10:56 Sería bueno examinarla cada tanto, para entender las confusiones que se generan en nuestro tiempo,
0:11:03 digo, desde la intolerancia hasta la jactancia injustificada.
0:11:07 Bueno, la homosexualidad griega exigía igualdad social de los amantes.
0:11:16 Pero en general es un dato que se da mayoritariamente.
0:11:19 En Grecia era necesario que el muchacho fuera de condición libre,
0:11:23 para que la relación pudiera desarrollarse en reciprocidad y en comunión intelectual.
0:11:30 Es decir, que no sean esclavos ni objetos de pupilaje.
0:11:34 Todo esto sucedía en Grecia.
0:11:36 En Roma no.
0:11:38 Los romanos preferían comprar su placer.
0:11:41 La aristocracia romana más entregaba a la pederastia como exhibición de elegancia y disquicción.
0:11:48 Los grandes señores se creían obligados a tener en su casa arenes de adolescentes,
0:11:57 a los que ponían nombres cariñosos, como por ejemplo, delicadipuery.
0:12:02 Estos mansevos formaban parte del lujo de la casa.
0:12:06 Se los compraba.
0:12:08 Estos los compraban a precios muy altos.
0:12:11 Se los exhibía como con orgullo.
0:12:14 En general se trataba de esclavos nacidos en la casa del amo,
0:12:18 o sino de extranjeros importados por los mercaderes para ser vendidos a los aficionados,
0:12:25 mercados esclavistas.
0:12:28 Los ponían a los muchachos ahí en un estrado, entre otros productos,
0:12:32 y eran obligados a fingir maneras delicadas, a pronunciar unas palabras que aprendía de memoria,
0:12:39 incluso a hacer bromas preparadas de antemano por el mercader para hacer gracia a los clientes.
0:12:46 Llegaban generalmente de la África.
0:12:49 Parece que los mercaderes los compraban abajo precios orillas del milo, en Etiopía, o sino también en Siria.
0:12:56 Los alejandrinos eran los más buscados.
0:12:59 Se pagaban precios elevados que variaban en función de la edad, de la belleza o de las habilidades.
0:13:06 Y no sólo servían para satisfacer la sexualidad de su amo, sino también para servir los banquetes,
0:13:13 lavar los pies y las manos de los invitados, ausentar las moscas.
0:13:18 He comprado un muchacho de 14 años que me ausenta las moscas.
0:13:22 También para cantar y bailar naturalmente.
0:13:26 Gran diferencia entonces existía entre el eraspe griego y el amador mayor,
0:13:33 que se ocupaba también de moldear el espíritu del amado, mientras que el amor romano era como acabamos de describir.
0:13:42 O sea, en los griegos aparece una actitud generosa, y en los romanos la insolencia y la vulgaridad,
0:13:50 como han visto en el que florecían esas relaciones.
0:13:53 Era costumbre en las familias patricias de Roma que cuando un hijo entraba en la pubertad,
0:13:58 le entregaban un esclavo, también adolescente, que compartía su lecho y se prestaba a los primeros impulsos voluctuosos.
0:14:07 Y estas relaciones eran admitidas a condición de que no se prolongaran pasada la pubertad.
0:14:14 Desde el momento en que el mancebo esclavo abandonaba la adolescencia,
0:14:20 ya no se podía tener relaciones con él o era indigno tenerlas.
0:14:30 En Roma, a falta de ejemplos... No, a falta de ejemplos de submetología,
0:14:35 porque después de todos los mitos griegos fueron adaptados por los romanos, así que los ejemplos eran los mismos.
0:14:41 Pero podemos poner ejemplos reales, de la historia romana, que personajes homosexuales.
0:14:50 Julio César, por ejemplo, era bisexual y él mismo se hacía llamar el marido de todas las mujeres y la mujer de todos los maridos.
0:15:00 Se ha anunciado así. Ha llegado el César, Julio César, el marido de todas las mujeres y la mujer de todos los maridos.
0:15:10 O sea que era bisexual con mucho entusiasmo.
0:15:14 Y la única manera de serlo. Cualquier cosa que uno sea de mala gana ya...
0:15:21 Durante la campaña de Vitínea entró en relaciones con el rey de Vitínea, Nicómedes.
0:15:28 Y mientras celebraban el triunfo, los soldados gritaban, César ha vencido a la galia y Nicómedes ha vencido a César.
0:15:40 Todos conocemos también las costumbres de Calígula, de Adriano y su amado Antinó.
0:15:46 A la muerte de Antinó, el emperador Adriano hizo que le levantaran estátuas y templos a su gloria.
0:15:54 Y si tenemos para terminar Anerón, que se atrevió a casarse solemnemente con un libertó amigo de él, llamado Pitágoras, casualmente.
0:16:04 Pero no era de los números, era otro.
0:16:08 Y se hizo conducir al altar cubierto con los velos característicos de las novedades romanas.
0:16:14 Él era hombre, ¿no?
0:16:16 Después también, al revés, se casó con otro con libertó esporo que ha hizo de hombre.
0:16:24 Y se casó, hizo unas fiestas nupciales al cabo de las cuales nombró emperatriz al libertó esporo.
0:16:33 Bueno, esto es un caso particular, igual que no hace a las costumbres que hemos detallado en Grecia y Roma.
0:16:39 Igual parece bastante más digna la actitud que los griegos tenían ante el amor general.
0:16:46 ¿Es avanzada, incluso comparándola con la actualidad?
0:16:49 Sí, claro, imagínense.
0:16:53 Bueno, a quien dedicar esta charla de la homosexualidad en Grecia y Roma,
0:16:58 quizás es un error que está en juntas las charlas porque son distintas.
0:17:07 A los que no hacen alarde de su preferencia sexual.
0:17:10 La preferencia sexual para mí no amerita ni castigo ni orgullo, ninguna cosa.
0:17:20 Yo no creo en la tolerancia como virtud militante.
0:17:25 Para mí la tolerancia debe ser inconsciente y natural, no debe ser esforzada.
0:17:32 Cuando uno dice yo soy el más tolerante de esta población, ya está indicando un sentido competitivo.
0:17:40 Mire, qué tolerante eso, que hasta a usted lo tolero, oí, que esas cosas.
0:17:48 Es preferible aceptarlo todo sin tolerancia.
0:17:51 La tolerancia presupone que uno ya tiene una visión negativa.
0:17:56 Si hay algo que requiere un esfuerzo para soportarlo, es porque ese algo, de algún modo, es visto negativamente.
0:18:06 Yo se lo dedicaría a los que no hacen alarde, que no se abriguenzan de ello,
0:18:11 o tienen esta idea de la tolerancia, que no surge de un esfuerzo.
0:18:17 Bien. También al pobre y asinto, que era tan hermoso y estaba ahí jugando al disco con Apolo
0:18:26 y le metieron un discayo en el Mar Oste.
0:18:29 Esto era casi previsible en los mitos griegos, porque cuando uno es demasiado lindo,
0:18:33 cuando uno tiene una virtud demasiado señalada, cuando uno es hermoso,
0:18:38 demasiado inteligente o tiene mucha suerte, nunca falta de alguien que le mete un martillazo en el mate.
0:18:45 Aparése el destino para equilibrar los tantos, odiaban la desmesura a los griegos y lo odiaban incluso en la virtud.
0:18:51 Si uno era desmesuradamente envicioso, te castigaban.
0:18:56 Pero si eras desmesuradamente virtuoso, también merecies un castillo.
0:19:01 No es que lo merecieras.
0:19:03 Te venía el destino, que era incluso superior a los dioses, y emparejaba a los tantos.
0:19:08 Pensaban que había como una especie de simetría y hasta temblaban cuando les iba demasiado bien,
0:19:13 porque sospechaban que el destino iba a intervenir.
0:19:17 Una cuestión casi de preservación del sistema ecológico.
0:19:25 Y a la gente que como yacinto, es tan hermosa, gente que tiene demasiada belleza,
0:19:33 entonces tiene problemas de circulación.
0:19:36 Que viene uno, le mete un disco entre ese que diceja, o que viene el jefe y te acosa, o que te tienen en menos.
0:19:47 Las ramas demasiado bellas que hay en estas salas, que son casi todas, por no decir que todas, saben eso.
0:19:57 No pueden entrar seriamente a ninguna parte.
0:20:01 Pero es complicada.
0:20:04 Bueno, a todas esas personas le dedicamos esta charla.
0:20:09 Hemos sido...
0:20:13 Estaban pensando que a veces la sociedad no acepta la demasiada belleza.
0:20:19 No acepta.
0:20:20 Hay como un automático rechazo social,
0:20:24 rechazo social que en nuestros pagos es casi imposible de eludir.
0:20:32 Proce rechazo social por todo.
0:20:34 Otras 114 cosas por la belleza.
0:20:40 Una intolerancia a la vez.
0:20:41 Automáticamente es tonto el que ve.
0:20:43 Sí, sí, si viene una mina linda, es que no, está estúpida.
0:20:48 ¿Cómo puede ser que toda la linda sea estúpida?
0:20:54 Y lo peor que no es verdad.
0:20:57 Lo peor que no es verdad.
0:20:58 Quiere una demostración. A mí no me dan bolillas.
0:21:00 Las lindas.
0:21:01 Así que estúpidas no son.
0:21:12 Hemos sido a la discoteca.
0:21:15 Esta historia es bárbara para el discotecario.
0:21:17 Sí, tiene mucho.
0:21:18 Él me contó.
0:21:21 Y lo que le puedo haber contado en este tema el discotecario,
0:21:24 mejor reservéselo y vayamos directo a...
0:21:27 Aparte, porque siempre tiene que ser protagonista el discotecario,
0:21:30 que es una vida mediócrita.
0:21:32 Lo tengo que decir.
0:21:33 Bueno, por favor, el discotecario también será una bestia,
0:21:37 pero es un ser humano, prácticamente.
0:21:39 ¿Vio, no?
0:21:40 Ya dentro y hace alarma que tiene una vida...
0:21:42 Bueno, el caso es que, recordando,
0:21:45 esas relaciones de adolescentes entre los romanos,
0:21:48 aquellos que en la pubertad compartían el lecho con un amigo,
0:21:56 un esclavo,
0:21:58 me dio el disco Amores de Estudiantes.
0:22:01 Yo pensé siempre que se refería a una relación heterosexual,
0:22:07 pero no.
0:22:08 No, ahora me doy cuenta que perfectamente es aplicable
0:22:12 a una relación homos...
0:22:15 Sí, no sé si fue compuesto en ese sentido, pero...
0:22:18 No lo sabemos.
0:22:20 En este caso vamos a escucharlo por un trío,
0:22:24 si me permite la intromisión.
0:22:27 Y qué es el trío Irustas, jugador de mares,
0:22:34 que cantan para nosotros Amores de Estudiantes.
0:22:38 ¡Adiós!
0:22:39 ¡Vale, valia, valia!
0:22:42 ¡Vale, valia, valia!
0:22:44 ¡Vale, valia, valia!
0:22:47 Hoy un juramento, mañana una traición,
0:22:55 Amores de Estudiantes lo ven día a día.
0:23:03 En unos labios ardientes dejar una promesa apasionadamente,
0:23:12 Quiero calmar los enojos de aquellos lindos ojos,
0:23:21 Siempre vintiendo amor.
0:23:29 Por un mirar que rueda perder la tietud,
0:23:37 Números son rientes que juran virtud,
0:23:43 Es una locada la que hoy me provoca.
0:23:49 Hoy un collar de Amores en mi juventud.
0:23:59 Anta más el pasado, perfume de ayer,
0:24:06 Rebuscaré doliente, platienda a mi sien,
0:24:12 Vandada de recuerdo de un tiempo querido,
0:24:17 Lefano y Florino, que dolmín ayer.
0:24:48 Hoy un juramento, mañana una traición,
0:25:01 Amores de Estudiantes lo ven día a día.
0:25:18 Era el legendario trío argentino en la venganza,
0:25:22 Será terrible, Amores de Estudiantes.
No hay comentarios. ¡Podés ser el primero en comentar!