Transcripción automática
0:00:00 Bueno, hablaremos de la llegada a la corte de Francia de María Antonieta.
0:00:05 María Antonieta que vino para casarse con el delfín, o sea, con el heredero de la corona, el nieto de Luis XV, quien sería luego Luis XVI.
0:00:15 Pero cuando vino el tiep era el príncipe y reinaba todavía Luis XV.
0:00:22 Luis XV tenía un amante muy famosa que era Madame d'Ivarris.
0:00:27 Y con la llegada de María Antonieta se produjo una enemistad con la d'Ivarris.
0:00:34 Era del año 1770, Luis XV ya estaba viejo y la d'Ivarris, que era la antigua favorita, hacía lo imposible para sostenerse en la corte.
0:00:47 El reino le daba mucha bolilla, todos estaban muy pendientes de la recién llegada de Viena, María Antonieta, que como he dicho se había casado por poderes.
0:00:57 Es decir, se conocieron ya después de casados con el delfín, el futuro Luis XVI.
0:01:04 Ahora bien, en la corte y en el pueblo ya sabían que pronto tendrían nuevos reyes porque como se ha dicho Luis XV, estaba bastante bichoco.
0:01:14 Y también sabían que una nueva mujer iba a tener influencia, que la influencia de Madame d'Ivarris iba a terminar y que María Antonieta iba a ser muy importante en la decisión del reino.
0:01:30 Y entonces la d'Ivarris empezó a conspirar, para ver si podía conseguir que el delfín repudiara a María Antonieta, que el matrimonio fracasara y que finalmente el delfín se casara con alguna otra muchacha,
0:01:48 ante la cual ella pudiera ejercer alguna clase de influencia.
0:01:53 Parece en realidad que después de tres años de vida en común con el delfín, María Antonieta todavía era virgen.
0:02:06 Parece que el príncipe tenía algunas complicaciones que hacían imposible el encuentro amoroso, a no ser que se entregaran unas operaciones a las que el tipo no quería someterse.
0:02:17 Decía que prefería esperar a que la naturaleza lo ayudara por sí sola.
0:02:28 Y el tiempo pasaba. De vez en cuando el delfín se reunía con su esposa, pero siempre regresaba a sus habitaciones, a que vivían cada uno en su pieza, entre pretas regresaba a vergonzado.
0:02:42 Por otra parte, María Antonieta trataba de olvidar el asunto aturdiéndose en fiestas donde se bailaba la noche entera.
0:02:58 En realidad, una fiestonga con elegantes marqueses, bellas amigas, el delfín dormía.
0:03:08 Además, ella había creado un teatrito donde interpretaba comedias, organizaba bailes de máscaras y buscaba afectos.
0:03:18 No tardó en verse rodeada de adoradores respetuosos.
0:03:23 ¡Ay, qué bien!
0:03:24 ¡Respetuosos, pero apremé antes!
0:03:26 Era una situación peligrosa para la futura reina de Francia, déjame lembrar más.
0:03:31 Entre los que la vigilaban para ver si pisaba el palito, por no haber sido otra cosa, estaba Madame de Vanouille a la espera de ver algo digno de ser contado al rey o al delfín.
0:03:44 Así que la controlaban.
0:03:46 No solo se trataba de delatarla, sino también de contarle al pueblo qué es lo que hacía la mina para desacreditarla.
0:03:55 Entre los acompañantes habituales de María Antonieta en los bailongos, había dos caballeros que eran muy notables por su galantería.
0:04:04 Estos dos caballeros eran nada menos que los dos hermanos del delfín.
0:04:08 El Conde de Provenza, que era muy joven, y el Conde de Artois, el futuro Carlos X.
0:04:14 Los tres hermanos eran completamente distintos entre sí.
0:04:19 El delfín era gordo, tímido, fácil de asustar, serio, trabajador, sincero y bueno.
0:04:25 No le gustaban las fiestas.
0:04:28 Se complacía mucho ante la fragua y el yunque que tenían sus aposentos.
0:04:34 Trabajaba, era relojero, mecánico. También le gustaba la banistería.
0:04:40 Y muchas personas sonreían maligiosamente cuando lo veían ocuparse de sillas cuando estaba a punto de ocupar el trono.
0:04:48 El otro hermano, el Conde de Provenza, futuro Luis XVIII, era culto, pero egoísta, malicioso, ambicioso.
0:04:57 Deseaba la corona y odiaba a su hermano mayor.
0:05:03 Y se forzaba por conquistar a María Antonieta, de la que estaba redondamente enamorada.
0:05:10 El tercero, el Conde de Artois, era un muchacho seductor, frívolo, muy elegante, de gran inteligencia.
0:05:17 Y a él, María Antonieta, lo eligió como su camarada, su amigo.
0:05:21 En cambio, al Conde de Provenza, al otro lo rechazó.
0:05:25 Y el Conde nunca le perdonaría eso a María Antonieta.
0:05:29 Entonces María Antonieta y el Conde de Artois andaban siempre juntos, representaban comedia,
0:05:35 corrían por el parque del palacio, se perdían en los bosques, paseaban montados en burro.
0:05:44 Uno de los entretenimientos preferidos de María Antonieta era caerse del burro.
0:05:52 Y como excusa, revelar al Conde de Artois algunas partes de su cuerpo.
0:05:58 Y que esas partes que quedan al descubierto cuando no se cae del burro.
0:06:03 Con todas esas ropas que se iba a onar.
0:06:05 A ver si que quedaría una pantorrilla.
0:06:07 No crea, no crea, usaban unos escotes por el ombligo.
0:06:11 Una noche, la diva Ruy, muerta de celos, le dijo al viejo rey overlapping 15,
0:06:18 que María Antonieta tenía un capricho y que ese capricho era el Conde de Artois.
0:06:24 Y el rey no le creyó.
0:06:27 La diva Ruy entonces hizo correr esta misma bolilla entre los escritores de folletinas de París.
0:06:35 Hablaré 30 segundos de esto.
0:06:39 Siempre existió en París la costumbre de editar unos relatos, unas noblitas baratas,
0:06:47 incluso que venían conversos sobre la actualidad política.
0:06:53 Y donde aparecían personajes haciendo confesiones metidos en historias escabrosas reales.
0:07:01 Muchas veces reales.
0:07:03 O que al menos tenían pretensiones de tal.
0:07:07 Pretensiones de realidad, quiero decir.
0:07:11 Y entonces hizo correr la bolilla y la diva Ruy.
0:07:15 Para que todos se enteraran de que María Antonieta andaba con Artois.
0:07:20 Y algunos autores de folletos llegaron a acusar a María Antonieta
0:07:27 de querer envenenar al delfín para reclamar luego el trono junto con Artois.
0:07:32 Salió también un poema satírico titulado Los Amores de Charlotte y de Tonieta.
0:07:39 También apareció una falsa confesión secreta del Conde de Artois
0:07:45 en la que el autor hacía decir al de Artois todo lo que hacía con María Antonieta en los bosques.
0:07:51 Con lujo de detalles.
0:07:53 Toda esta literatura de él irá a enteras a aceptar por la gente sin discusión.
0:07:58 Y esto hizo mucho daño, como ya veremos a María Antonieta.
0:08:05 Bueno, seguían las fiestas y los bailongos con el Conde de Artois.
0:08:14 El Conde le contaba a María Antonieta anécdotas obscenas, que parece que le gustaba mucho.
0:08:20 La verdad es que nunca se supo si verdaderamente el Conde tuvo algún encuentro verdaderamente amoroso con María Antonieta.
0:08:29 Pero eso fue ya que no.
0:08:33 Pronto, Madame de Ibarri tuvo otro pretexto para desprestigiarla.
0:08:37 En una fiesta, María conoció al embajador de Suecia, nada menos que Axel Fersen.
0:08:45 Después iba a tener mucha importancia en la historia de esto.
0:08:49 La futura reina quedó deslumbrada cuando lo vio, ¿no?
0:08:53 Después, no se dijeron nada, no fueron presentados, pero en un baile de máscaras, Fersen,
0:09:01 inició una conversación galante con una muchacha.
0:09:05 Muchos de las madras las quiso arrastrar a un pasillo, pero pronto se dio cuenta de que había un círculo de hombres alrededor de la chica.
0:09:14 Todos esperaban con aspecto ceremonioso que ella dejara de hablar con él.
0:09:20 Fersen muy preocupado, se fue, se alejó, la joven nos saludó con la cabeza y se alejó hacia el primer piso.
0:09:29 Y al rato apareció en el paico real.
0:09:32 O sea, se había estado conversando a la futura reina de Francia, el tipo que quería que era una menacuera que se le iba a levantar.
0:09:39 Entonces Fersen se asustó y se fue, se fue, se fue al extranjero, no volvió hasta un tiempo después.
0:09:47 Pero este episodio casi casual llegó a oídos de la Diva Reef que una vez más difundió ese chisme.
0:09:54 El viejo rey, Luis XV, también la escuchó otra vez, pero no le importó.
0:09:59 Llena de odio entonces la Diva Reef inició una nueva campaña de calumnias.
0:10:04 Esta vez deseaba que el delfín repudiara a su esposa, pero no tuvo tiempo, porque el rey Luis XV cayó enfermo de viruela.
0:10:11 La guerrera de una viruela que en cuatro días se murió.
0:10:14 Luis XVI y María Antonieta lloraban abrumados por la carga que les caería sobre su espalda, que se le aguantó.
0:10:24 Pero la primera medida de gobierno fue esta.
0:10:27 A pedido de María Antonieta, Luis XVI echó de la corte a Madame de Barre. Primera acto de gobierno.
0:10:34 Derrotada para siempre entonces, la antigua favorita se despidió del palacio, se refugió en un lugar lejano y vivió,
0:10:42 incluso hasta que la revolución la vio luchando en el seno de los grupos monárquicos.
0:10:49 Sin embargo, cuando ella se fue, las riendas del grupo de calumniadores pasaron al Conde de Provencia,
0:10:57 al hermano del rey, que siguió lanzando acusaciones terribles sobre María Antonieta, compuso canciones obscenas,
0:11:06 pero ella pensó que todo se apaciguaría con el tiempo, continúe viviendo como antaño,
0:11:16 y así siguieron las cosas. Ella pudo acostarse finalmente con el rey, que se sometió a la operación correspondiente,
0:11:25 y pudo cumplir con sus obligaciones de marido, con cierta solvencia.
0:11:32 Pero cuando después vino la revolución y ambos fueron condenados a, fueron llevados al cadacho, a la guillotina,
0:11:43 el pueblo insultaba a Luis XVI por sus actos políticos, pero a ella la insultaban y le echaban en cara
0:11:55 justamente lo que no había hecho, sus amores con el Duque de Provencia, todo lo que decían los Pajquines.
0:12:07 Y Axel Fersen, aquel suerco que se escapó, volvió a última hora, tampoco se sabe si tuvo un romance con ella,
0:12:16 pero arriesgó su vida para organizar la huida del matrimonio real, una huida que como saben ustedes fracasó
0:12:28 y los amigos fueron interceptados en Barén. Esa fue la reparación de Fersen, pero ella, segundos antes de morir,
0:12:42 seguía escuchando prostituta, prostituta, que ha sido el amante del Duque de Provencia, todo lo que decían los Pajquines.
0:12:53 ¿Eso Pajquines que acompañaron la historia política de Francia? Siempre, siempre.
0:13:02 Hemos ido a la discoteca, le contamos esta historia. Se comovió la discoteca.
0:13:08 Ni se movió, ni se movió, ni se movió, ni a cómo, ni a cómo.
0:13:11 Él incluso dijo para mí que tenía razón los típulos Pajquines,
0:13:14 y también a mí no me digan que no andaba con el Duque de Provencia y con el de Arctua, etcétera, etcétera.
0:13:22 Y me dio una milonga que se llama el Conventillo, justamente trata de todos estos chismes,
0:13:32 de cosas que yo la vi, al otro, que sí que sé yo, que sí fulano, que sí me engano,
0:13:38 todas estas cosas que hacen tanto daño. Así que escucharemos el mundo rivero en el Conventillo.
0:14:16 Cuando quise alzar el vuelo piante del barro la falso,
0:14:33 piante del barro la falso, pretendí volar tan alto que casi me vengo al suelo, como el zorro perdí el pelo,
0:14:42 pero agarré la manía, pero pierd la cilería y al primer punto volví a ir con algún barro estudiado, dejarlo en pan pílalea.
0:14:53 Una vez un teloyola, me enboros fue un guayfulero, me enboros fue un guayfulero,
0:15:06 papira, poronca, hasta quiero celular, piaba y gallola, mi concierto de piadola,
0:15:14 me enboros fue un guayfulero, y aunque me llaman el feo, no es mi fotografía, donde está la galería de los ases del choreo.
0:15:26 Hoy que estoy en los 40, en el bebe de la villa, ya veo una mina raíra que tiene más de las cuentas,
0:15:36 ante un auto polenta diciendo menochiría, sin mandar la gilería, quien esté tiriendo el ferillo,
0:15:46 que nací en un Conventillo de la calle con la barrilla.
0:15:56 Era el mundo rivero, en la venganza, será terrible el Conventillo.
No hay comentarios. ¡Podés ser el primero en comentar!