Dolina, Stronati, Rolón y Elizabeth Vernaci.
Comentario sobre obra imaginaria de públicos y actores. Saludos. Reflexión sobre la locura en los mitos
Transcripción automática
0:00:00 La dinición era borrosa, en cuanto menos.
0:00:05 Se necesitaba un teatro con entrada por dos calles.
0:00:09 La obra puede llamarse la platea.
0:00:13 O como usted quiera, no importa el nombre de la obra.
0:00:16 Usted, por ejemplo, abrita una entrada por corrientes y otra por la base.
0:00:23 Y pone...
0:00:25 Hay dos plateas, en realidad, no hay escenario.
0:00:28 Pone un telón en el medio.
0:00:31 Algunas personas entran por corrientes y otras por la base.
0:00:35 Dile qué experiencia.
0:00:37 Entonces, a la hora, pues, mirad, se abre el telón.
0:00:41 Para los que han entrado por la base, el espectáculo consiste en ver a los que han entrado por corrientes.
0:00:49 Para los que han entrado por corrientes, el espectáculo consiste en ver a los que han entrado por la base.
0:00:54 Y así se quedan un buen rato, creyendo cada uno ser el público.
0:01:01 Y no ocurre gran cosa al principio, hasta que alguno se levanta.
0:01:08 Hay aplausos.
0:01:12 Pero, en general, no pasa nada.
0:01:14 Y se cierra el telón y salen todos comentando una grande disilusión.
0:01:20 Uno por la base y otro por corrientes, digo yo, señalando al revejo más mi costumbre.
0:01:28 Todos comentan lo mal que han estado los actores, sin saber que a lo mejor ellos mismos eran los actores,
0:01:36 en algún sentido o en todos ellos.
0:01:39 Pero, esto que parece una estupidez es una experiencia.
0:01:44 Sin saberlo, hemos sido actores.
0:01:48 Sin saberlo hemos sido públicos.
0:01:50 O sabiendo lo hemos sido públicos.
0:01:52 Saque de esto las consecuencias poéticas de cinco pesos que quiero que necesite para levantar alguna mina.
0:02:00 Todos somos, en cierto modo, etcétera, etcétera.
0:02:03 El mundo es, y me hace mirar, etcétera, etcétera.
0:02:06 Este mundo es un escenario, etcétera, etcétera.
0:02:10 Las cosas que parecen ingeniosas o profundas, son solamente viejas.
0:02:18 El caso es que en este teatro no sucede lo que se ha dicho antes.
0:02:25 Hay una sola entrada que es la de la calle Corrientes,
0:02:28 y hay un escenario y hay una platea.
0:02:32 Esta es la platea.
0:02:36 ¿Y a qué les heresará?
0:02:53 Y sin embargo, es cierto.
0:02:55 Es cierto.
0:02:57 Más me divierte a mí mirarlos a ustedes, naturalmente, que a Rolón.
0:03:03 Es culpa, pero para mí también es una especie de obra, de teatro, la platea, especialmente algunas falso.
0:03:15 Bueno, vamos, programa adelante.
0:03:18 Estronati, por favor, Elizabeth Bernati, por favor.
0:03:21 La lista de oficiantes que han confiado en nosotros.
0:03:24 No me mire.
0:03:25 La oficina en este programa es una presentación de Aerolíneas Argentina
0:03:32 en promoción de sus vuelos diarios a Europa en Clásico Turista o en nuestra exclusiva Clasgold.
0:03:41 Buenas tardes.
0:03:43 Buenas tardes.
0:03:45 Buenas tardes.
0:03:47 Vamos a saludar a nuestros favorecedores, amigos, a quienes nos han sobornado o amenazado.
0:03:55 Muy bien, Alejandro, yo tengo saludos para Dolores, para Amanda, para Blas, y para Naila, que hoy cumpleaños.
0:04:02 Ah, eso sin nada.
0:04:04 Son tan gran, ni un saludo, ni un amigo.
0:04:07 Ah, pero...
0:04:08 Más sola estoy.
0:04:09 Y yo?
0:04:10 Que también estás solo.
0:04:11 Ah, también, usted no sabe.
0:04:12 Púdeme.
0:04:13 Tan solo.
0:04:14 ¿Por qué?
0:04:15 Porque no me quiere nadie.
0:04:17 No queréis que salgamos.
0:04:18 ¿Cómo que se llama?
0:04:19 Roberto.
0:04:20 Muy bien.
0:04:26 Bueno, Estronachy, sí, como nos.
0:04:28 Saludos a Tommy Marcilio, a Ferminia, a su amigo Eduardo, que andan por allí, y también a Claudia de Ramón Mejía.
0:04:36 Bueno, yo carezco de todo saludo, de manera que podemos ir ya programas adelante, internándonos en el misterioso mundo de la música.
0:04:46 Vamos.
0:04:47 Porque este es un programa antes que nada musical.
0:04:49 Sí, señor.
0:04:50 Estrictamente musical.
0:04:51 Sí.
0:04:52 Pocas palabras y muchas grabaciones.
0:04:54 No.
0:04:55 Estrictamente para bailarines.
0:04:56 Bien.
0:04:57 ¿Cómo me gustan esos programas que empiezan con un adverbio y después en cualquier otra cosa?
0:05:02 Un adverbio extremadamente tarde, simplemente domingo.
0:05:11 Enormemente lunes.
0:05:16 Francamente no.
0:05:20 Bagnato.
0:05:21 Francamente bagnato.
0:05:22 Sí.
0:05:23 De vuelta.
0:05:24 Pero lleve una lucha de ese programa.
0:05:26 Se llaman todos así.
0:05:27 Todos son estos programas.
0:05:28 Sí.
0:05:29 Digo, todos son así los programas.
0:05:30 Y claramente también ayudan a la mente de Clara Marinho.
0:05:35 Claramente se llaman.
0:05:36 Claro.
0:05:37 No le puedo.
0:05:38 Sí, claramente.
0:05:39 Como Gorozinas.
0:05:40 Sí, Claude Golo, de periodista.
0:05:43 Perfecto.
0:05:44 Dolineada.
0:05:46 Dolineada.
0:05:47 Dolineada.
0:05:48 Dolineando.
0:05:49 Dolineando.
0:05:50 ¿Qué ando haciendo?
0:05:54 Dolineando, sin saber.
0:05:56 Bien.
0:05:57 Qué bien hay gente.
0:05:59 Bueno, ya que estamos hoy inspirados, vamos a ver algunos episodios de locura en los mitos clásicos.
0:06:09 En la mitología griega manía es la personificación de la locura.
0:06:14 Pero claro, es una entidad de compromiso.
0:06:17 Es simplemente una fracción, manía.
0:06:22 Pero existe.
0:06:24 Existe una entidad vivina que se llama manía y que personifica la locura.
0:06:29 Pero hay otras más eficaces, como por ejemplo las seríneas.
0:06:34 Manía no tiene casi historia.
0:06:39 No tiene casi historia.
0:06:41 Lo único que se sabe es que precipita a la locura, a las personas que no observan adecuadamente los ritos.
0:06:50 Nada más que eso.
0:06:52 No me gusta.
0:06:54 Muchos más famosos son las heríneas.
0:06:57 Que parece que nacieron, eran tres, de las gotas de sangre con las que se impregnó la tierra cuando urano fue mutilado.
0:07:05 Qué cosa, qué manera de nacer.
0:07:08 No reconocen las heríneas, la autoridad de los dioses, no tienen más ley que la propia.
0:07:14 Incluso Céus, el príncipe del olimpo debe obedecer.
0:07:18 Se las representa como genios salados, con serpientes, no, alados, no, salados.
0:07:24 Con serpientes entreveradas en el marote, como si fuera pelo, y llevan en la mano antorchas y látigos de una porquería.
0:07:33 Cuando se apoden de una víctima, la enloquen y la torturan de mil maneras.
0:07:39 Por lo general, cumplen una especie de función policial, porque suelen enloquecer a las personas que han cometido algún delito grave,
0:07:47 particularmente si han matado al culo.
0:07:49 Que ahí aparecen las heríneas y tenloquece.
0:07:53 Viven en los infiernos y castigan también el exceso.
0:07:59 O sea, la híbris, lo contrario de la sofrocine, lo que más temían los griegos, la desmesura.
0:08:08 La híbris que tiende a hacer olvidar al hombre su condición de mortal.
0:08:13 Lo que es demasiado es la híbris.
0:08:16 Además, las heríneas prohíben a los adivinos y profetas revelar con excesiva precisión el futuro.
0:08:24 Y está bien.
0:08:26 Por eso los adivinos hablan en un lenguaje poético.
0:08:31 Por eso, y además para evitar equivocarse.
0:08:35 Porque cuando uno es demasiado preciso, los errores son postensibles.
0:08:41 En cambio, si uno dice en este campeonato mundial de fútbol habrá una sorpresa,
0:08:48 es casi seguro que acertará.
0:08:52 Bien.
0:08:54 No hay forma de que no exista una sorpresa.
0:08:58 Más habiendo como hay tanta gente que ejerce ese pajueranismo intelectual
0:09:03 que consiste en sorprenderse de cualquier cosa.
0:09:06 O por cualquier cosa.
0:09:13 Las heríneas enloquecen al asesino y para curarse de la locura el asesino deberá purificarse a otra ciudad.
0:09:24 Bueno, esos son las heríneas.
0:09:26 Otras divinidades que vuelven locos a los tipos son las linfas.
0:09:29 Me gustan mucho las linfas.
0:09:31 Estas diosas castigan con la locura al que las mira.
0:09:36 Fíjese qué diferencia.
0:09:38 Para que las heríneas te vuelvan locos tenés que cometer un delito gravísimo
0:09:43 y para que las linfas te vuelvan locos basta con mirarlas.
0:09:47 No se falta decir qué clase de divinidad me simpatizan más.
0:09:52 Fueron identificadas con las náyades, una especie de ninfas, del agua.
0:09:58 Y que también premeaban o castigaban con la locura a quienes las miraban.
0:10:06 Hablemos ahora de algunos personajes que fueron víctimas de las heríneas, de las linfas, de las náyades o de los mismos dioses.
0:10:14 Algunos locos famosos de la mitología.
0:10:18 A mí me gusta Biblis, que era nieta de Minos.
0:10:21 Se acuerda de Minos el decreta que se hizo construir el laberinto.
0:10:25 Tenía un hermano gemelo llamado Kauno.
0:10:28 Tú me gusta el nombre Kauno, para un hermano gemelo.
0:10:32 Y parece que Biblis amó a su hermano Kauno con un amor culpable, que es el único posible.
0:10:41 Déjenme de amor, amor inocente no es amor.
0:10:44 Bien, le dijo a su hermano.
0:10:47 Y lo horrorizado de su hermana, no de la sucia, Rolón, lo falsería entendible.
0:10:54 Digo de su hermana Biblis, y lo había amado con amor culpable y todo.
0:11:00 Kauno huyó de Mileto, donde le hacían espantosas ritmas.
0:11:05 Y fundó la ciudad de Kauno, justamente, la ciudad que llevaba a su hermano.
0:11:10 Increativo.
0:11:11 Pero, ¿qué hizo la hermana Biblis?
0:11:14 Y el dolor la enloqueció.
0:11:16 Se volvió loca porque su hermano la había abandonado.
0:11:19 Y anduvo dando vuelta por todo el Asia menor.
0:11:23 Y en un momento totalmente fuera de sí,
0:11:26 quiso precipitarse desde lo alto de un peñaco para terminar con sus penas.
0:11:32 Y entonces las ninfas, apiadadas, la transformaron en una fuente inagotable,
0:11:38 como las lágrimas que lloraba.
0:11:43 Hay de los que son víctimas de la piedad de las ninfas.
0:11:49 ¿Qué clase de beneficio es transformarse uno en una fuente inagotable?
0:11:55 ¿Qué hace uno transformado en fuente?
0:12:00 Por empezar, uno no es consciente de que ha sido transformado en fuente.
0:12:04 ¿Por qué razón?
0:12:05 Porque si sos cabalmente una fuente, no tenés conciencia de serlo.
0:12:09 Y si no te han transformado mal.
0:12:11 A ver si soy claro.
0:12:13 Y cito con esta idea, si a vos, Rolón, Dios no lo permita.
0:12:18 Te transforman en fuente inagotable.
0:12:22 Lo de inagotable es una énfasis innecesaria.
0:12:24 Te transforman en fuente.
0:12:26 Bueno, si te transforman del todo, vos no sabes que sos una fuente.
0:12:31 Porque una fuente no sabe que lo es.
0:12:34 Sí, hay una previa de conciencia.
0:12:36 Entonces, no te han hecho ningún favor.
0:12:40 Te han aniquilado, ríos.
0:12:43 Y yo no sé si es preferible penar que ser transformado en fuente
0:12:47 y ni siquiera saberlo, ni siquiera disfrutar con el propio carácter de inagotable.
0:12:53 Ser inagotable está bien si uno es un caballero, un señor, una dama.
0:12:59 Entonces uno siente que es inagotable.
0:13:02 Y nosotros vamos a los boli niches siempre.
0:13:05 Inagotablemente dolinan.
0:13:08 Inagotablemente dolinan, como dice él.
0:13:11 Pero ser una fuente inagotable es no ser nada, le garanto.
0:13:17 Bueno, otro episodio de locos, fue el de las Prétides,
0:13:21 que eran hijas del rey de Tirinto, amigo de este programa, el rey Pretto.
0:13:25 ¿Lo conocí a Pretto?
0:13:27 Sí, buscaba el lado del Vario Pretto.
0:13:29 De Pretto y de esta enevea.
0:13:31 Esta enevea que famosamente se lo quiso levantar a Belero del Aerofonte.
0:13:36 Bueno, tenían creo que tres hijas.
0:13:39 Y estas chicas, las hijas de Pretto, cometieron un error enorme.
0:13:44 Cuando llegaron a cierta edad, se haxtaron de ser más bellas que la diosa era.
0:13:52 Hay otras versiones que dicen que se burlaron del templo de era,
0:13:56 porque, según parece, el palacio de Pretto tenía más riqueza.
0:14:00 Bueno, en fin, el caso es que eras en ojo y enloqueció a las muchachas.
0:14:05 E hizo que se creyeran vacas, repito.
0:14:09 E hizo que las hijas de Pretto se creyeran vacas.
0:14:14 Ya venían a medio creer de todos modos.
0:14:17 Y bueno, ¿existieron estas chicas?
0:14:21 Uyeron al campo y llevaron una vida errante.
0:14:25 Uyeron al campo y llevaron una vida errante hasta por ahí.
0:14:28 No hay mucho vacas que lleven una vida errante,
0:14:31 más allá del recorreo que va desde un alambrado a López.
0:14:36 Y entonces Pretto, imagínense tener tres hijas que se creían vacas,
0:14:42 que ser pantosas, especialmente a la hora de comer y eso.
0:14:47 El adivino melampo,
0:14:51 recuerdan a Melampo, aquel que hablaba con los pájaros,
0:14:55 el pie negro, le ofreció a Pretto curarlas
0:15:01 a cambio de la tercera parte de su reino.
0:15:04 Y dice, Pretto, yo te voy a curar las pibas,
0:15:06 pero vamos a dar la tercera parte de tu reino.
0:15:08 Pretto no quiso aceptar, empezó a regatear, a pichulear.
0:15:14 Y entonces Melampo hizo que las chicas, en lo que seran el doble,
0:15:18 no se cómo se logra.
0:15:20 Usted que es psicólogo, por ahí lo sabrá,
0:15:22 pero qué sentido tiene aplicar la matemática para medir un grado de locura.
0:15:26 No, ninguno.
0:15:27 Pero, Juan, está el doble de loco que es Pedro.
0:15:29 ¿Qué quiere decir?
0:15:30 ¿Dijoroba el doble del tiempo?
0:15:34 No, no, no tiene razón usted, no tiene sentido alguno.
0:15:36 O que se cree dos vacas en vez de una.
0:15:38 Y eso es estar mucho más loco, porque, mire, creer que una vaca es...
0:15:48 No le digo que sencillo, pero es acedero.
0:15:52 Puedo imaginar una amiga, una chica o algo que se crea una vaca
0:15:56 y tengo una existencia vacuna, por decirlo así.
0:16:00 Si me permite la expresión.
0:16:03 Pero, alguien que se crea dos vacas, ya es difícil.
0:16:07 Si se cree una vaca es quiso frenica, lo mejor.
0:16:10 Ya es creerse.
0:16:12 Es una locura de cuadras.
0:16:14 De ahí viene la vaca loca famosa, ¿no?
0:16:16 La famosa vaca loca.
0:16:17 No le puedes comer la carne.
0:16:19 Claro.
0:16:20 Pero crees de dos vacas, ¿no?
0:16:23 Mire, ya ir en busca de un toro cada vez que necesitan un novio,
0:16:26 o sea, algo, en busca de dos.
0:16:29 Pero usted sabe cómo son los toros de promiscuos.
0:16:31 Sí, sí, sí.
0:16:32 Bueno, pero es el más objeto de esta chapa.
0:16:34 La hija de Preto estaba cada vez más loca.
0:16:36 Entonces, Preto accedió a pagar el precio que pedían el ampo para desenloquecerlas.
0:16:42 La tercera parte de su reto.
0:16:44 Entonces, se la divino, consiguió a los jóvenes más vigorosos de Argos
0:16:50 y empezó a perseguir a las muchachas por las montañas,
0:16:54 lanzando grandes gritos y entregándose a violentas danzas.
0:16:58 Debió ser algo digno de Verso.
0:17:00 ¡Dijo!
0:17:01 Y durante la persecución, la mayor de las hermanas, y fino,
0:17:06 murió de agotamiento.
0:17:12 Pero las otras dos fueron purificadas por medio de un tecito que les hizo el ampo.
0:17:20 Le mezcló unas hierbas en la fuente donde ellas iban a beber.
0:17:24 ¿Qué es eso?
0:17:25 Bueno, eso es lo que le dijo el ampo a Preto cuando le fue a cobrar.
0:17:30 Muy bien.
0:17:31 Otro caso de locura fue el de Cleómedes.
0:17:35 Era un héroe de los Juegos Olímpicos.
0:17:38 Vivía en Astipalea y pues había ido a las Olimpíadas.
0:17:44 Esto es algo importante que era en la antigua Grecia conseguir participar en la Olimpíada.
0:17:52 Si no, ganar el triunfo olímpico.
0:17:54 Era lo mejor que te podía ocurrir en la vida.
0:17:58 Y este tipo Cleómedes era poquilista.
0:18:01 Era boseador.
0:18:03 Que había matado a su adversario, Hico de Pidauro, de una piña en la pera.
0:18:10 Se soltó una piña lo líquido, pero no.
0:18:13 ¿Qué es esto?
0:18:14 Gané.
0:18:15 No.
0:18:16 Seguí contando.
0:18:17 Los jueces no lo declararon vencedor porque había luchado de modo desleal, dijeron.
0:18:22 Y Cleómedes, que había prometido a su ciudad el triunfo, se volvió loco.
0:18:27 ¿Cómo que no me dan el triunfo?
0:18:29 No.
0:18:30 ¿Qué va a hacer?
0:18:32 Esto se regresó a su patria, a Astipalea, derribó la columna que sustentaba el techo de una escuela.
0:18:38 No, no, no escántalo.
0:18:40 Se refugió finalmente perseguido por todos los habitantes en el templo de Atenea.
0:18:46 Y después no lo vieron más, desapareció de ahí.
0:18:50 Yo no sé dónde habrá ahí.
0:18:51 Pero bueno, ese era otro loco.
0:18:53 La más linda locura es la adicción.
0:18:56 No, la adicción, la de ixión.
0:18:59 I-X-I-O-N, ixión.
0:19:02 Era un tesadio, rey de los lapitas.
0:19:06 Y parece que a Ixión se quería casar con Día.
0:19:09 Qué linda una mujer que se llama Día.
0:19:12 ¿Eh?
0:19:14 Día.
0:19:16 Bueno.
0:19:18 Era hija del rey de Ioneo.
0:19:21 Y fue a pedir ixión la mano de Día.
0:19:24 No Día.
0:19:26 No Día se ha pedido.
0:19:28 Le fue a pedir la mano de Día, no de noche.
0:19:30 No, no, no, no.
0:19:32 Se llamaba la mina.
0:19:34 Bueno, está volviendo loco.
0:19:36 Y le hizo grandes promesas al padre.
0:19:39 Y se mire, si usted me da la mano de su hija Día,
0:19:44 yo le voy a regalar esto y aquello,
0:19:46 y tantas vacas, y tantos terneros, ¿qué es eso?
0:19:49 El caso que se casó.
0:19:51 Y después de la boda, el padre le fue a pedir a ixión
0:19:55 lo que le había prometido.
0:19:57 E ixión lo arrojó un foso lleno de brazos ardientes.
0:19:59 Dice, más qué regalos, qué regalos.
0:20:01 ¡Va! Y lo tiró a las brazos.
0:20:04 Se había hecho culpables no solo de perjurios,
0:20:06 sino también de asesinatos.
0:20:08 Y los dioses lo enloquecieron.
0:20:10 El horror suscitado por ese crimen fue tal
0:20:13 que nadie consintió purificarlo.
0:20:16 Zeus se apiadó, sin embargo, y lo libró de la locura.
0:20:21 Pero ixión era malísimo.
0:20:24 Y fue tan desagradecido que quiso enamorar nada
0:20:28 menos que era a la germo de Zeus.
0:20:32 Y entonces Zeus lo vio.
0:20:36 Porque Zeus era perro viejo en eso.
0:20:39 Y lo vio ixión que andaba ahí, vio, haciéndose el vivo.
0:20:42 Hacía el lindo.
0:20:43 Sí, haciéndose el lindo.
0:20:45 Y entonces ahí todo junto con una vez.
0:20:48 Y formó una nube exactamente igual a su mujer era.
0:20:55 Una nube, para eso era el príncipe de los dioses.
0:20:58 Así que te gusta mi mujer muy bien.
0:21:00 He hizo una nube y la puso en el fin a la nube.
0:21:04 Y salió igualita a era.
0:21:06 Y vino ixión, vio la nube y dijo era.
0:21:09 Y lo que te he dicho es.
0:21:12 Porque estaba ahí.
0:21:15 Y bueno, ahí arremetió contra la nube.
0:21:17 Veo que hay tipo que...
0:21:19 No le haces nada.
0:21:20 No le haces nada, tanto un cirrus, un cúmulos, mimbus, cualquiera.
0:21:25 Te lo hubo los timbres.
0:21:27 Muy bien.
0:21:29 Se unió a ese fantasma ixión.
0:21:32 Y desde relación nació Centauros, el padre de los Centauros.
0:21:36 O sea que no fue...
0:21:38 Esta unión con la nube no fue vana.
0:21:42 Al gimnasio de ahí.
0:21:44 Pero la nube no era, era.
0:21:47 La verdadera era.
0:21:49 Se andaba por ahí.
0:21:51 No estaba limpiando la cocina, supongamos.
0:21:54 Este...
0:21:56 Ante este nuevo sacrilegio, digo,
0:21:58 el de pretender nada menos que a la mujer del príncipe del olimpo,
0:22:02 Zeus decidió castigar a ixión.
0:22:04 Y se lo...
0:22:05 Así me revolvés.
0:22:07 Lo ató a una rueda encendida que giraba sin cesar
0:22:10 y lo lanzó por los aires.
0:22:13 Y como para polificarlo le había dado antes a comer ambrosía
0:22:17 que garantizaba la inmortalidad, resulta que este suplicio no cesa nunca.
0:22:22 Ahí debía andar ixión dando vuelta como si fuera un fuego artificial.
0:22:26 Todo por haberse unido a una nube.
0:22:33 Últimos locos.
0:22:38 A ver.
0:22:40 Me gusta este.
0:22:41 Síquiro.
0:22:43 Había una doncella llamada Antipe.
0:22:47 Estaba de novia con un tipo.
0:22:50 Y un día los dos enamorados
0:22:53 estaban en un bosquecito que era un bosque sagrado
0:22:56 escondido ahí entre los yufs.
0:22:58 Y en aquel bosque,
0:23:00 Síquiro, que era hijo del rey de la región,
0:23:03 estaba persiguiendo una pantera
0:23:05 que había jurado atrapar de decía mucho tiempo.
0:23:08 Vio la gente juraba cosas.
0:23:09 Juro que voy a atrapar esta pantera, giles.
0:23:13 Y de pronto Síquiro vio que el follaje se movía.
0:23:18 Vio que los yusos se movían.
0:23:21 Y dijo la pantera.
0:23:24 Pensó allá.
0:23:26 Oficionado por el juramento que había hecho
0:23:29 no veía otra cosa que panteras.
0:23:31 Vio que los yusos se movían.
0:23:33 Ay, juna la pantera.
0:23:35 Y tiró.
0:23:36 Y tiró un flechazo o algo así.
0:23:38 Y se le encajó a Antipe, a la muchacha esta,
0:23:44 en el medio del pecho.
0:23:47 Cuando se acercó y vio el crimen
0:23:50 que acababa de cometerlo,
0:23:51 primero que dijo,
0:23:52 pues esta no es una pantera.
0:23:54 Y se volvió loco.
0:23:58 Montó a caballo.
0:24:01 Y al galoppe tendido se escrachó contra unas rocas.
0:24:06 Hay que decir que el caballo también tenía que estar un poco loco.
0:24:10 ULTIMA LOCURA
0:24:19 Última locura.
0:24:21 Pinen los dioses porque pavada te volvían loco.
0:24:25 Alcinoe, alcinoe, casaba con polivo.
0:24:29 Parece que la diosa Tennea se había enojado.
0:24:31 ¿Sabe por qué?
0:24:32 Porque la chica, alcinoe, había contratado una irlandera.
0:24:37 Y una vez terminada la labor de la señora,
0:24:41 se negó a pagarle el salario estipulado.
0:24:45 Entonces la irlandera empezó a los gritos.
0:24:47 Ateneas enteró y la volvió loca alcinoe.
0:24:51 ¿Por qué era protectora de las irlanderas?
0:24:53 A diosa Tennea.
0:24:56 Y igual.
0:25:00 ¿En qué consistió la locura de alcinoe?
0:25:03 Se enamoró de un viajero cualquiera.
0:25:06 Y lo empezó a perseguir por todas partes.
0:25:10 Por todas partes.
0:25:12 Abandonó su casa, era casada, tenía hijos.
0:25:15 Y pasó uno.
0:25:17 Uno pasó. ¿Vas a imaginar?
0:25:19 Uno cualquiera.
0:25:21 Pasó por la calle y la tipo, ¡pum!
0:25:23 Lo siguió.
0:25:25 El marido, los hijos, ¿dónde va?
0:25:27 ¡Uuuuh!
0:25:31 Y esa fue su locura.
0:25:33 Y estuvo años detrás del tipo que tenia que estar medio loco también,
0:25:37 porque nada, el tipo nada.
0:25:39 Ni enterado.
0:25:41 Y un día se desenloqueció de golpe.
0:25:45 Y comprendiendo que había dejado años atrás a su esposo y a sus hijos,
0:25:50 pues también se suicidó.
0:25:52 Estas son, y todo porque por no pagarles a una irlandera por Tennea,
0:25:56 era protectora del sindicato de irlanderas.
0:26:01 Ahora bien.
0:26:03 ¿Qué locura me gusta más de todas estas?
0:26:06 La de icio.
0:26:09 No el crimen.
0:26:11 Me gusta lo que le pasó.
0:26:15 Resulta ser que se enamoró de quien sino de la más alta de las mujeres,
0:26:23 de la que salía con el príncipe del olimpo, con Zeus, que menos.
0:26:27 Una diosa.
0:26:30 Y resulta que se encontró en la esquina con una nube que era igual.
0:26:35 Con una nube que era igual.
0:26:37 Ojo.
0:26:39 Me parece que Zeus no le hizo ningún mal presentándole una nube igual a era.
0:26:47 No se dio cuenta, isión.
0:26:51 ¿Dónde está la diferencia?
0:26:55 Usted, si ha leído a algunos amigos,
0:26:59 sabrá que no es muy diferente de la locura que todos tenemos
0:27:04 cuando nos enamoramos lo que le pasó a era.
0:27:08 Y seguramente los sabían los griegos también.
0:27:11 No encontremos significados ocultos después de 2500 años.
0:27:16 Ya lo sabían ellos también.
0:27:18 Ya sabía que aquello que vemos en la mujer que amamos,
0:27:23 a lo mejor es una nube, a lo mejor no existe realmente,
0:27:28 pero que nos importa.
0:27:31 Ser es ser percibido, dijo mucho después nuestro amigo Bérkele.
0:27:36 Si yo percibo que eso es era,
0:27:39 yo percibo que esa es la princesa del Olimpo,
0:27:43 y yo percibo que esa me quiere,
0:27:46 ¿qué me importa que sea una nube?
0:27:49 ¿Qué me importa que no me quiera?
0:27:51 ¿Qué me importa que la verdadera esté limpiando la cocina?
0:27:56 Como se ha dicho.
0:27:59 Me gustó mucho lo que le pasó a isión,
0:28:03 y creo que sucede todo el tiempo.
0:28:07 Tanto creo en esto que me atrevería a desearles a ustedes
0:28:11 como gestos de simpatía
0:28:13 que se encontraran muchas veces con muchas nubes hospitalarias.
0:28:20 Y pido para mí, pido para la primer resta de vida,
0:28:25 que algunas nubes entrañables vengan a buscarme,
0:28:29 aunque la princesa del Olimpo esté limpiando la cocina.
0:28:33 ¡Bien!
0:28:39 Bueno...
0:28:50 Parece que se están volando.
0:28:54 Bueno, y con qué podemos ilustrar este pequeño catálogo de locuras,
0:28:59 aquí tenemos un tango maravilloso que tocan por A.S. Salgan,
0:29:03 y Ubaldo de Lío, que se llama justamente...
0:29:07 Risa loca. Adelante.
¡Otro audio maravilloso! ¡Qué hermoso ese sonido AM y qué hermosa la voz de Stronati! La venganza era la voz de Stronati también ¡ Cómo lo extraño!
Hermosa charla sobre la locura en los mitos. Y hermosa la Vernaci