Transcripción automática
0:00:00 Hablaremos hoy de la Rebellión de los Cairotas.
0:00:04 Sí, señor, ya voy.
0:00:06 En tiempos de Napoleón, es decir, la Rebellión de los Habitantes del Cairo,
0:00:12 cuyo gentilicio es Cairota.
0:00:16 Al-Qairus se llamaba en árabe, que debe querer decir la victoriosa, pero no estoy segura.
0:00:23 Ya saben que la expedición de Napoleón a Egipto fue muy extensa,
0:00:28 anduvo por Alejandría, estuvo en el Cairo, también en Suez.
0:00:33 Y saben también que allí conoció a una de sus llamantes más bonitas y también más pintorescas.
0:00:41 Se llamaba Paulina y era la mujer de un oficial.
0:00:45 Y yo creo recordar que Napoleón para librarse de aquel oficial lo mandó en una expedición supuestamente importante.
0:00:54 Napoleón estaba en el Cairo y lo mandó de vuelta a Inglaterra,
0:00:59 cruzar los mares que estaban patrusados por los ingleses, por unos papeles que no decían nada.
0:01:04 Y él se levantó a la mujer, que se llamaba Paulina.
0:01:08 Pero los ingleses lo atraparon al tipo y se dieron cuenta.
0:01:12 Y sabían, ya tenían información de que Napoleón andaba con la mujer.
0:01:16 Y entonces qué hicieron? Lo mandaron de vuelta.
0:01:19 Lo mandaron de nuevo, lo dejaron libre en Alejandría.
0:01:21 Y el tipo volvió a la casa, entró y lo vio a Napoleón en caso de un sillón, lo primero que vió.
0:01:27 Es extraordinario, ¿no?
0:01:30 Bueno, hoy no hablaremos de eso.
0:01:33 La expedición a Egipto de Napoleón se había planeado para disputarle un lugar a los ingleses.
0:01:42 Pero también debino en la aparición de un interés notable por el arte y la cultura de Egipto.
0:01:49 Dicen que con aquella expedición nació la egiptología.
0:01:54 De hecho, Napoleón estaba acompañado por 160 científicos de distintas especialidades.
0:02:01 Luego de pasar por Alejandría, Napoleón tuvo la idea de presentarse en el Caíro.
0:02:07 Pero amistosamente.
0:02:09 Contrary a lo que había hecho muchos años antes otro francés, Luis Noveno, el famoso San Luis,
0:02:16 que invadió Egipto a la cabeza de una cruzada.
0:02:20 Napoleón se decía admirador de la cultura egipcia.
0:02:24 Su primera proclamación la hizo en árabe.
0:02:28 Redactada por la ayuda de un orientalista, un poco gilastro, pero que hizo los uso.
0:02:36 Napoleón en esta proclama se dijo discípulo del profeta.
0:02:40 Necesitamos a Napoleón.
0:02:43 Aquí está la proclama. Espera, ¿la tenía por acá?
0:02:48 Egipcios.
0:02:52 Os dirán que vengo a destruir vuestra religión.
0:02:57 Somos musulmanes.
0:03:00 Somos en un sentido real.
0:03:02 Es decir, soy musulmán, está diciendo.
0:03:06 ¿No eso no hemos destruido al Papa que instigaba a la guerra contra los musulmanes?
0:03:12 Esto dijo.
0:03:14 Buena parte.
0:03:15 Y más tarde, dirigiéndose a los notables de Egipto, se presentó como el ser superior
0:03:22 esperado en el occidente para continuar la obra del profeta.
0:03:28 Los doctores islámicos de la ley resolvieron que aquel discurso era impío.
0:03:34 Se pidieron que mezclaba algunos principios de la República.
0:03:39 Quiero decir, de la República de la Revolución Francesa, el ser superior, todo eso,
0:03:44 con dogmas islámicos, con groseras faltas de sintaxis y vocabulario.
0:03:49 Entonces, sin quedar demasiado convencido los notables, instaron a Napoleón,
0:03:54 si es que quería más crédito, a que directamente se convirtiera al islam,
0:03:59 con todos sus soldados.
0:04:01 Y se produjo una disputa muy curiosa.
0:04:03 Napoleón respondió que sí, que eso podía suceder si se evitaba una práctica que era un poco engorrosa.
0:04:12 Era poco conveniente sin cursidad a 35.000 hombres.
0:04:17 Y era imposible impedir que el ejército francés bebiera vino.
0:04:22 Una cosa del chiquito, otra cosa de grande.
0:04:25 Entonces, los señores del islam se reunieron y tuvieron de acuerdo
0:04:30 en aceptar a las tropas francesas como conversos, concediendo estas dos alvedades.
0:04:36 Podían no circuncidarse y podían beber vino.
0:04:40 Pero le dijeron, mire, disculpeme, pero los convertidos en este régimen,
0:04:46 llegado el caso, no podrían gozar de toda la felicidad del paraíso.
0:04:51 Les dejarían unas dependencias paradisíacas de goce menor.
0:04:55 Está bien, el Napoleón.
0:04:58 Creo que en realidad no contestó nada y no volvió a hablar nunca más de convertirse.
0:05:04 Pero para su orgullo aceptó ser llamado por el pueblo el kebir, el gran sultano.
0:05:11 Además, mandó que le hicieran un vestido turco y lo llevaban todas partes.
0:05:18 A todos lados le iba vestido y frasado del turco.
0:05:23 En realidad, solamente...
0:05:25 ¿Puedes decirme, por qué tiempo estuvo?
0:05:27 Poco tiempo.
0:05:30 Solamente el general Jacques Menis, que era un soldado enamorado de una musulmana,
0:05:34 fue el único que ese tipo ese que se convirtió verdaderamente al islamismo
0:05:38 y pasó a llamarse Abdallah.
0:05:41 Pero más allá de estas demostraciones amistosas de Napoleón,
0:05:44 no pudo impedir que muchas de las características occidentales de la cultura
0:05:50 se instalaran así y empezaran a causar inconvenientes.
0:05:53 El Cairo empezó a modificarse.
0:05:56 Un par de franceses abrieron allí unos borichunes.
0:06:02 Se instaló una timba inspirada en el Tibolí Parisíno.
0:06:07 Después había baños europeos, salones, se colaseaba.
0:06:12 Y en aquel lugar de placeres fue donde Napoleón conoció a esta Paulina,
0:06:16 de la que hablábamos.
0:06:18 Compañías de aficionados venían y montaban obras teatrales,
0:06:22 una práctica que el islam casi no ha conocido en su historia.
0:06:26 Se organizaban bailongos públicos, eran frecuentes las orquestas militares.
0:06:31 A petición de Napoleón todos los días delante de los hospitales
0:06:34 se tocaban melodías para alegrar a los enfermos.
0:06:38 Bueno, al ver la música, el escolaso, el teatro y los bailongos,
0:06:42 los notables del Cairo empezaron a enojarse.
0:06:46 Pero había algo peor.
0:06:49 La falta de mujeres europeas era padesida por los soldados,
0:06:53 las que habían llegado con la expedición eran 350.
0:06:57 Y los hombres casi 40.000.
0:07:01 No empuje.
0:07:03 Ahora bien, no se podía recurrir a las damas locales
0:07:09 por un inconveniente.
0:07:11 Estas chicas, en caso de relacionarse con los infieles,
0:07:14 eran condenadas a muerte por ahogamiento.
0:07:18 Ay, qué feo, la peor muerte.
0:07:20 A muchos no les importaba a los soldados,
0:07:23 no les importaba comprometer a las chicas
0:07:25 y las abordaban sin más trámites.
0:07:27 Antoine Galón, uno de los expedicionarios,
0:07:30 les preocupaba otra cosa, decía lo siguiente.
0:07:33 Leo a Antoine Galón.
0:07:37 Las egipcias son ardientes y libidinosas.
0:07:41 No conocen detalles ni preludios encantadores
0:07:47 que les prenden magia y multiplican los goces entre los amantes.
0:07:52 Con ellas hay que ir enseguida al asunto.
0:07:57 Pueran más bruta.
0:07:58 Pueran empezado por ahí.
0:08:01 Bueno, en otra orden de cosas había soldados
0:08:05 que organizaban carreras de burros,
0:08:07 no de caballo, burros, burros hechos y derechos.
0:08:10 Por lo demás, las pocas mujeres francesas que había
0:08:13 salían a la calle con la cara descubierta
0:08:16 y andaban a caballo
0:08:18 y las mujeres locales empezaban a imitarlas
0:08:21 y esto sintió a los doctores del Islam.
0:08:23 Otra cosa tiene que ver con la higiene,
0:08:28 como estaba prohibido,
0:08:31 no, no, estaba prohibido,
0:08:33 inhumar los restos de los muertos dentro de la ciudad.
0:08:36 Entonces hacían controles en las casas
0:08:38 para verificar que se estaban tomando disposiciones
0:08:41 contra la peste.
0:08:43 Y para los musulmanes,
0:08:45 esto era una violación inadmisible de la vida familiar.
0:08:48 Las medidas de seguridad eran todavía peor recibidas,
0:08:51 pues a veces los soldados rompían las puertas de los barrios,
0:08:55 obligaban a las familias a mudarse,
0:08:57 para encarar obras de fortificación,
0:09:00 etc. de la información cultural.
0:09:03 Los infieles organizaban la fiesta
0:09:06 del nacimiento del profeta,
0:09:08 pero eso se veía mal.
0:09:10 Claro, usted me dirá, esto al lado de lo que hace Bush en Irak,
0:09:13 es una tontería, pero bueno.
0:09:15 El 21 de octubre de 1798 se armó el tole tole.
0:09:19 Los ulemas incitaron a la población
0:09:24 a sublevarse contra los infieles.
0:09:27 Una multitud atacó las casas
0:09:31 de los franceses y de los cristianos.
0:09:33 Al grito de
0:09:35 inmundicia sobre la habilidad de los perros en circuncisos.
0:09:39 Ah, bueno, yo creí que...
0:09:42 Esto lo inventé yo, pero...
0:09:44 Sonaba bien igual.
0:09:46 Muchos de los que cayeron fueron los sabios
0:09:48 y artistas que no pudieron defenderse.
0:09:50 Bueno, aparte, entonces le salió el indio de adentro
0:09:53 y ordenó que dispararan contra los insurrectos.
0:09:57 Más fácil, no, más fácil no.
0:09:59 Más tarde, los franceses irrumpieron en una mezquita,
0:10:03 la mezquita de El Azar,
0:10:05 a caballo y rompieron todo.
0:10:08 Estaban borrachos y rompían la botella de vino contra la pared.
0:10:14 La rebelión provocó 300 muertos de lado francés
0:10:17 y 3.000 del lado egipcio.
0:10:19 Durante los días siguientes,
0:10:21 la represión continuó decapitaron a los principales agitadores
0:10:27 y arrojaron sus cuerpos al nilo.
0:10:30 Prudentemente, algunos habitantes se pasaron a la divisa tricolor.
0:10:36 Una semana después, Napoleón reunió a todos los cairotas en la plaza
0:10:40 y les habló, le dijo que quien se levantara contra él
0:10:43 encarnaba una pervención del espíritu
0:10:46 y se postuló nuevamente como un defensor de la islam.
0:10:50 Por un tiempo y un poco de orden,
0:10:53 en la navidad de 1798, Napoleón se fue del Cairo
0:10:57 y viajó a Suez, a Suez,
0:11:00 para investigar la posibilidad de abrir un canal,
0:11:03 pero esta es ya otra historia.
0:11:05 El canal se abrió mucho después,
0:11:07 para la gloria del otro Napoleón, del más chico.
0:11:11 Pero esta rebelión de los cairotas a todos nosotros
0:11:14 no suena conocida.
0:11:17 Esta irrupción napoleónica,
0:11:20 incluso con sus sabios, con su cultura occidental,
0:11:24 también no suena familiar.
0:11:26 Las naciones poderosas,
0:11:29 las naciones comerciantes,
0:11:31 han entrado muchas veces
0:11:35 a pueblos indefensos,
0:11:37 siempre en nombre de unos asuntos generales,
0:11:40 en nombre de la libertad,
0:11:42 de la cultura, de la ciencia, etcétera.
0:11:45 También lo hizo Napoleón.
0:11:47 Y también, como suele ocurrir en estos callos,
0:11:51 algunos de ese pueblo se prendieron
0:11:54 la divisa tricolor en la solapa,
0:11:58 pero también hubo revuelta,
0:12:02 como ha ocurrido otras veces.
0:12:04 Los bárbaros,
0:12:06 los supuestos bárbaros,
0:12:08 se revelaron contra los supuestos civilizados.
0:12:11 Y si ustedes me permiten,
0:12:13 me traigo de la discoteca una canción criosa
0:12:16 que también se refiere a una pequeña resistencia
0:12:20 que un pueblo no muy fuerte en aquel entonces
0:12:24 hizo a una de las naciones más poderosas del mundo.
0:12:28 Casualmente, esta misma nación francesa de la que hablamos,
0:12:32 y casualmente ese pueblo era este mismo pueblo argentino.
0:12:37 Así que escucharemos el triunfo que se llama
0:12:40 La Vuelta de Obligado,
0:12:42 donde también había un río que no era el Milo,
0:12:44 pero era el Paraná,
0:12:46 y había hombres que venían en nombre de unos principios generales.
0:12:50 Escuchamos a Alberto Merlo,
0:12:52 en el triunfo que se va por título,
0:12:55 La Vuelta de Obligado, dedicada a todos aquellos
0:13:01 que en el Cairo o en Obligado
0:13:04 se resisten contra alguna clase de imáxiles.
0:13:11 Los hermanos se han unido porque esa es la ley primera.
0:13:17 Vengan unión verdadera en cualquier tiempo que sea,
0:13:23 porque si entre ellos pelean los devoran los de afuera.
0:13:31 Venta buque mercados,
0:13:33 veinte de guerra, veinte de guerra.
0:13:40 Viene empechando arriba las aguas nuestras, las aguas nuestras.
0:14:04 Veinte de guerra vienen con sus banderas,
0:14:09 con sus banderas.
0:14:20 La fucha con los ingleses,
0:14:23 quién los pudiera, quién los pudiera,
0:14:28 que los igualos gringos unirán siete,
0:14:34 navegar tantos mares,
0:14:37 venirse al cuete, que digo venirse al cuete.
0:14:48 Y dejo correr la bola que algún día de parar,
0:14:52 tiene el gaucho que aguantar hasta que lo trague el hoyo,
0:14:57 o hasta que venga algún criollo en esta tierra mandada.
0:15:03 A ver, chepajuale chao, gobernadores, gobernadores.
0:15:20 Que no pasen los franceses,
0:15:23 paran al norte, paran al norte.
0:15:33 Con gotura del quebracho,
0:15:39 de aquí no pasa, de aquí no pasa.
0:15:45 Viene empechando arriba las aguas nuestras,
0:15:53 quién los pudiera, quién los pudiera,
0:16:00 que los igualos gringos unirán siete,
0:16:08 navegar tantos mares,
0:16:10 Ven y se alcoete, que digo ven y se alcoete.
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