Transcripción automática
0:00:00 Hablaremos esta noche de la revolución de la guisotina.
0:00:05 Durante el antiguo régimen, es decir,
0:00:11 el régimen anterior a la revolución francesa,
0:00:15 las autoridades trataban de conseguir la obediencia
0:00:20 a la ley y al rey a cualquier precio.
0:00:25 Para ello recurrían a una justicia ejemplarizante
0:00:31 pensada para atemorizar y escarmentar en carne ajena a la población.
0:00:37 Un elemento fundamental de este sistema era la pena de muerte
0:00:42 que se aplicaba de forma habitual
0:00:45 y además iba precedida de horribles suplicios para el reo,
0:00:51 pero ese es con el pretesto de arrancarle una confesión, a veces no,
0:00:55 a veces simplemente por venganza,
0:01:03 por deseo de infligirle un sufrimiento parecido al que ellos habían causado.
0:01:09 Se trataban naturalmente de un castigo desigual,
0:01:13 porque por un lado los aristócratas estaban exentos de la tortura
0:01:19 de maltrato físico o psíquico y cuando eran condenados a muerte
0:01:24 sufrían decapitación, que era un método rápido y aparentemente indoloro,
0:01:30 especialmente si lo realizaba una mano experta,
0:01:33 para no hablar tampoco de la culpabilización del pobre
0:01:43 y la exoneración casi automática de los poderosos en el caso de algunos delitos.
0:01:55 No hace falta que yo me extienda sobre esto.
0:02:00 Pero los hombres y mujeres del pueblo eran ejecutados mediante métodos brutales,
0:02:05 como la orca, el descuartizamiento o la hoguera.
0:02:11 Estas ejecutiones solían ir precedidas por las torturas que el juez estimase necesarias,
0:02:17 como acabo de decir, y que se llevaban a cabo en público,
0:02:21 iban desde la fragilación, el tormento de la rueda,
0:02:25 hasta la ruptura de todos los huesos del cuerpo, los huesos largos al menos,
0:02:30 o arrancarle trozos de carne de diversas partes del cuerpo,
0:02:36 con unas tenazas, etcétera.
0:02:39 Estos espectáculos eran presenciados por un público compuesto por naturalmente
0:02:48 psicóticos de toda la asa.
0:02:51 Durante el siglo XVIII, con el triunfo de la ilustración,
0:02:54 muchos juristas y hombres de letra denunciaron la tortura,
0:03:03 las penas de proporción hadas y los privilegios de la aristocracia.
0:03:08 Y algunos llegaron a pedir la abolición de la pena de muerte.
0:03:13 En este sentido, podemos nombrar a Volter,
0:03:18 con su tratado sobre la tolerancia, de los delitos y las penas de Chesa Lebecaría.
0:03:25 Los ellos fueron inspiradores en la acción de la Revolución Francesa en 1789.
0:03:33 Una de las primeras tareas que emprendió la Asamblea Nacional Constituyente
0:03:38 fue la elaboración de un código penal acorde con los principios del derecho natural
0:03:44 y fue en ese contexto en el que se planteó el debate sobre la pena de muerte.
0:03:50 El 10 de octubre de 1789, un médico de 50 años llamado Joseph Guillotine
0:04:00 presentó una propuesta para establecer la igualdad ante la ley,
0:04:07 incluso en los asuntos de derechos penales.
0:04:10 Los delitos del mismo género se castigarán con el mismo género de pena,
0:04:15 sea cual enfueren el rango o condición del culpable.
0:04:19 Esto lo escribió Guillotine.
0:04:22 Este principio que apareció en la Mas Natural del Mundo
0:04:26 era revolucionario en Francia y tardó años en ser aprobado en el resto de los países.
0:04:33 Guillotine no ponía en cuestión la pena capital.
0:04:37 Su propuesta consistía en igualar las penas y humanizar su aplicación.
0:04:43 Para ello propuso extender el método de la decapitación,
0:04:49 que hasta entonces era un privilegio de la aristocracia,
0:04:53 a los reos de todas las clases sociales.
0:04:57 Al mismo tiempo, a fin de evitar los inconvenientes y errores que a menudo cometían los verdugos,
0:05:05 digo en el uso del hacha, del pabre y por ahí que apuntaban mal,
0:05:09 proponía emplear un aparato cuya mecanismo cortara la cabeza en un abrir y cerrar de ojos.
0:05:18 La referencia de Guillotine a este mecanismo dio enseguida mucho que hablar,
0:05:25 pero es errónea la creencia común de que este señor Guillotine fue el inventor
0:05:34 de lo que hoy conocemos como Guillotine.
0:05:38 En realidad desde al menos el siglo XVI se utilizaban algunos aparatos parecidos en algunos países de Europa.
0:05:47 Si bien no parece que fueran muy habituales y en todo caso estaban reservados a los reos de clase alta.
0:05:55 Guillotine pensaba seguramente en la posibilidad de perfeccionar alguno de estos aparatos,
0:06:01 tarea que finalmente recayó en otro personaje.
0:06:05 En el marco de los debates sobre el nuevo código penal, el 30 de mayo 1791 el diputado Luis Michel de Pelethier de Saint-Ferre-Gault
0:06:17 dio un paso más allá y propuso sin más la evolución de la pena de muerte.
0:06:24 Y su amigo Robespierre fue de los pocos, de los muy pocos que apoyaron esa medida humanitaria.
0:06:34 Pero el esfuerzo de ambos fue inútil.
0:06:37 El 1 de junio de 1791 la inmensa mayoría de los diputados de la Asamblea votó por la pena capital.
0:06:45 Entonces, el Le Pelethier de Saint-Ferre-Gault no se desanimó y dos días más tarde
0:06:54 propuso la adopción del principio de igualdad también ante la pena capital.
0:06:59 A todo condenado a muerte se le cortará la cabeza.
0:07:03 La redacción final del código dice en sus artículos 2 y 3.
0:07:10 La pena de muerte consistirá en la simple privación de la vida sin que nunca se puede ejercer ninguna tortura hacia los condenados.
0:07:21 Y el 3 dice, a todo condenado se le cortará el cuello.
0:07:26 De este modo la igualdad ante la ley se extendía también a la cuestión penal.
0:07:31 En marzo 1792 la Asamblea, en cumplimiento del nuevo código penal, encargó a un médico cirujano,
0:07:41 el doctor Antoine Louis secretario de la Academia de Cirugía, la elaboración definitiva del nuevo aparato para realizar las ejecución.
0:07:51 Entonces Antoine Louis y su colaborador Tobias Schmidt, que era un fabricante de arpas alemán,
0:07:59 crearon un artilugio que se inspiraba en otros aparatos similarios que habían funcionado en otros países.
0:08:07 Pero bueno, habían mejorado su diseño, su funcionalidad, con el objetivo de adminorar al máximo el dolor.
0:08:15 La aportación principal de Louis fue el modelo de hoja con filo oblicuo,
0:08:21 decía él para que cortara limpiamente y alcanzara su objetivo.
0:08:26 Sin embargo, tanto Louis como Guillotine, terminaron lamentando que su nombre quedara asociado a la nueva invención,
0:08:37 que primero fue conocida como Louison o Louisette, y luego más comúnmente y para siempre, Guillotine.
0:08:48 El prototipo lo construyó en dos semanas, y enseguida se probó con cadáveres de animales, incluso de personas.
0:08:57 Al final, la instalaron en la Plaza de Greve, ahí frente al asuntamiento de París.
0:09:04 Y así, el 25 de abril de 1792, Nicolás Jacques Péletier, no aquel que se llamaba Le Péletier,
0:09:13 este era otro, casualmente llamado así, condenado por robo a mano armada, se convirtió en el primer ejecutado mediante este nuevo procedimiento.
0:09:23 Bueno, parecía que los verdugos habían quedado en el olvido, pero el 21 de agosto de ese mismo año fueron llevados ante la Guillotine,
0:09:36 dos reos políticos, dos servidores de Louis XVI que había sido depuesto del trono después de la insurrección del 10 de agosto.
0:09:46 Desde ese momento, bajo el régimen del gobierno revolucionario, el régimen del terror que había...
0:09:53 Ya estaba de Robespierre.
0:09:54 ...de la caída de Robespierre, son más o menos dos años, la Guillotine se convirtió en el instrumento que en el símbolo de la política del terror,
0:10:04 que la revolución desencadenó contra sus enemigos interiores, por como lo sé, aristócratas y otros partidarios del antiguo régimen,
0:10:14 y como reacción frente a la amenaza de las potencias vecinas que eran casi todas absolutistas.
0:10:22 Durante ese período, el total de condenas y de ejecutados con la Guillotine en toda Francia fue de 16.594 personas.
0:10:34 2000 fueron ejecutadas en París, principalmente en la Guillotine que se colocó en la actual Plaza de la Concorde.
0:10:43 Ahí donde hemos estado comiendo... ¿Víos donde comemos esos sanguichos?
0:10:47 Los panchos es.
0:10:48 Bueno, ahí mismo estaba la Guillotine.
0:10:51 Ahí fueron ejecutados tanto Louis XVI como María Antonieta y él mismo Robespierre, después del golpe de Terminón.
0:11:02 Ese fue el balance del llamado terror legal.
0:11:10 Hay que ver un intento de centralizar la violencia, pero hubo también alrededor de 35.000 o 40.000 víctimas más,
0:11:23 incluyendo las violencias populares, las ejecuciones humarias o las muertes en las cárceles.
0:11:31 Fue en momentos terribles.
0:11:33 Terminado el terror, la Guillotine no cayó en desuso.
0:11:37 Se siguió empleándose bajo el directorio, Napoleón y todos los regímenes posteriores durante casi dos siglos.
0:11:44 Y la última ejecución, mediante este método, se produjo en 1977,
0:11:52 antes de la abolición del objetivo de la pena de muerte en Francia, que fue cuatro años más tarde.
0:12:01 Sí, bien.
0:12:03 En 1981, que sé qué cerca estamos de la sombra de la Guillotine.
0:12:12 Tan cerca que no faltan todavía voces que se alzan pidiendo la pena de muerte.
0:12:20 Pero, nada más que un recordatorio, pues yo, máximo interés es que absolver al pobre Guillotine...
0:12:34 De esa herencia del nombre.
0:12:36 Claro, de la herencia del nombre y demás.
0:12:39 Un poco injusto, porque ni siquiera fue él que inventó la Guillotine,
0:12:43 sino fue inventado también como un método eficaz para matar, sino más bien como una metodología destinada a atemperar los rigoros.
0:12:53 O sea, la pena de muerte implica la privación de la vida, nunca otra cosa como si era antes,
0:12:59 donde, como hemos contado el principio de este informe, la gente iba a ver las ejecuciones igual iban.
0:13:10 Pero antes iban más, porque...
0:13:14 ¿Cómo se llamaba el tipo aquel que quiso matar a Luis XV? No me acordaré.
0:13:19 Bueno, lo hicieron de todo antes de matar.
0:13:22 Y la gente iba y disfrutaba muy...
0:13:24 A ver ese padecimiento.
0:13:25 Hay un relato de Casanova, en donde cuenta aquel presención, una ejecución en París.
0:13:35 Ya no en tiempo de la Guillotine, sino antes.
0:13:40 Y mientras estaba andando tormento, recondenado, había un señor que estaba beneficiando a su novia,
0:13:50 ayudado por el ardor que le comunicaba el estar viendo cómo atormentaban un tipo.
0:14:02 El tipo veía ese tormento, verificaba una excitación tal que luego atemperaba haciendo la mora.
0:14:11 Y con su novia, incluso, a favor de la montonamía.
0:14:15 Todo eso lo contaba con detalles, ya como Casanova, lo contaba desde luego con horror.
0:14:26 Pero eran cosas que sucedían.
0:14:28 Hemos ido a la discoteca y, obvio como es, el discotecario no pudo menos que entregarnos el tango por una cabeza.
0:14:43 De todos modos, no está mal escuchar este tango por una cabeza,
0:14:48 que es quizá el tango que más suerte ha tenido en el cine universal.
0:14:55 Tango que está en numerosísimas películas de toda índole, desde la lista de Schindler,
0:15:02 hasta perfumes de mujer, pasando o arrancando desde el tango en Broadway.
0:15:12 No, no, desde el tango en Broadway. No, desde el tango bar.
0:15:18 Ahi es que fue la primera.
0:15:20 Así que escucharemos este tango, que en realidad es un pedido aburricionista.
0:15:35 Es en principio una rey vindicación de Guillote.
0:15:41 No, habla de los caballos.
0:15:43 Eso por abajo.
0:15:51 En realidad la verdadera metáfora se cifra en la guillotina.
0:15:58 No había entendido la metáfora.
0:16:01 Por una cabeza, todas las locuras.
0:16:05 Pero dice un noble potrillo y todo.
0:16:10 El noble potrillo es el mismo guillotinado, que justo en la raya afloja el llegar.
0:16:17 ¿Cuál es la raya? El fin de la vida.
0:16:20 Ah bueno, sí, me parece.
0:16:23 Había tomado más de cien.
0:16:24 Y que regresar parece decir, que querés hermano,
0:16:28 vos sabés no hay que jugar.
0:16:30 De decir, no hay que jugar con el régimen del terror.
0:16:35 Estando Robespier, al frente de todo esto, no hay que jugar.
0:16:41 Es raro, no. La verdad no lo había interpretado de ese modo.
0:16:45 Nunca me parecía algo más literal, del hipodro.
0:16:49 Por una cabeza, si ella me olvida.
0:16:51 Bueno, si ella me olvida después de haber sido yo guillotinado.
0:16:57 ¿Qué importa perderme mil veces la vida?
0:17:00 ¿A qué se está refiriendo?
0:17:01 ¿Para qué vivir, terminal?
0:17:03 ¿Para qué vivir que es como un autoconsuelo del guillotinado?
0:17:09 Y casi podrían ser las últimas palabras.
0:17:13 ¿Qué importa perderme mirando al verdugo?
0:17:17 ¿Qué importa perderme mil veces la vida para qué vivir?
0:17:25 ¿Me convenció?
0:17:26 Sí, sí, esto también.
0:17:28 Escuchemos entonces la clásica versión de Gardel.
0:18:09 La verdad no es lo que se puede hacer.
0:18:12 No es lo que se puede hacer.
0:18:14 No es lo que se puede hacer.
0:18:16 No es lo que se puede hacer.
0:20:00 Eran Carlos Gardel
0:20:03 En la venganza será terrible
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