Che, que problema, igual que ALMALUZAR escribo desde las altas cumbres del norte, oteando por sobre mi morro más allá de la superficie, apreciando el reflejo del conocimiento en el mar más nuevo y más antiguo, codeándome con la burguesía adiestrada en tratos y maltratos.
Pero en unas semanas retorno al llano y lodoso sur, a embarrarme los tobillos en la ignorancia más tupida de nuestra realidad, siendo yo masa, el individuo manso y diestro en pleitesías, no dejando pasar una aunque se me escapen todas.
Imagínense que dejo de ser crítico con lo que no me parece bien, que me conformo con lo mediocre, que alabo a la mona porque se viste de seda, acaso libero risas equivocadas, adjudico talentos inexistentes, enturbio pequeños posos de aguas mansas para que me parezcan profundas dolinas…
Despierta, despierta, Inception no existe, Dorio no existe, el norte no existe, y uno solo habla para aprender a equivocarse menos.