El control de cambios ni figura entre las recomendaciones del GAFI para combatir el lavado
Las Cuarenta Recomendaciones del GAFI son el manual internacional para el combate al lavado de dinero. Se trata de un conjunto de medidas, en algunos casos de alta complejidad, para ser adoptadas en algunos casos por el gobierno y en otros por las entidades financieras. De la lectura de las recomendaciones y comparándolas con las medidas dispuestas recientemente por la AFIP disponiendo la autorización previa para la compra de dólares, se pueden extraer distintas conclusiones. Para empezar, la amplia gama de recomendaciones, que abarcan todo tipo de operaciones bancarias, comerciales y profesionales, no incluyen y ni siquiera mencionan la conveniencia de controles previos a las compras de divisas extranjeras. Ni siquiera hay referencias específicas a la política cambiaria.
En cambio, son numerosas las recomendaciones del GAFI que en la Argentina no se estarían aplicando.
Un caso muy significativo es del punto B-6 de las recomendaciones, que se refiere al control de los movimientos financieros de las personas políticamente expuestas. En esta categoría entran los funcionarios y ex funcionarios públicos que, como es obvio, son un capítulo sensible, por tener mayores posibilidades que un ciudadano común para favorecer las actividades de lavado. El GAFI recomienda, entonces, controles más estrictos sobre la determinación del origen de los fondos y la contabilidad de los funcionarios. Todo indica que estas regulaciones no serían tomadas en cuenta en la sorpresiva vocación de la Casa Rosada para combatir al lavado.