Alejandro, yo no imito a nadie. Comencé a expresar esos pensamientos y esos sentimientos, antes de saber siquiera que existían ése y tantos otros filósofos.
Esos filósofos también fueron niños y comenzaron a pensar, sin modelos.
Es la diferencia entre lo auténtico y una imitación.
El humano proviene de un origen común, ¿ qué le hace suponer que somos tan puros que no se repiten los elementos y las mezclas, que no existe en algún lugar del universo - no sólo planeta - productos de la ontogenia y la genética que son simple matemática y un toque estelar de algo nuevo.
Pero nunca faltará aquel que quiere tener patente de perspicaz, de "yo lo sé todo", el que antes de descubrirme a mí en mi espíritu y a cada uno en el suyo, recurre al propio bagaje de información ( si fuera formación no cometería ese burdo error del prejuicio, de permitir que la tendencia personal, afectara la verdad ) para ejercer, no como un juego inocente, el "piedra libre".
Ha querido herirme transversalmente - algo cobarde Alejandro, usted es capaz de mejores alturas y el as en la manga de alguna nobleza o el conejo en la galera ( no digo paloma, porque eso le pertenece a otro que yo amo ) -
No me hirió, me retrotrajo a un momento de melancolía, de desengaño : porque el modo virtual exige un gran cuidado en su práctica; no estamos las personas cara a cara, mirada a mirada. La "amistad" virtual exige mayor delicadeza y atención. Confiar aquí, es estar desarmado.
Me refiero a personas. Y me refiero a seres no psicóticos.
Repito : el ejercicio del prejuicio mata más gente que las armas : mata lo espiritual, vínculo y patrimonio personal y colectivo MÁS valioso y necesario que el cultural. Porque en nombre de la cultura se hacen esos "juegos" llamados intercambios, como autitos chocadores, olvidando que no somos máquinas sino seres sucesivos ultrasensibles o hipersensibles o sensibles o lábilmente sensitivos.
Como decía un escritor y médico francés que escribió el libro Cuerpos y almas : "No sólo somos carne, sino carne que siente, que sabe lo que siente".
Lamento no haber sabido serle útil. ;-)