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Estimado Efecto: no es que Alejandro Dolina resulte un soberbio, como tú lo catalogas. Sabemos del aplomo de su personalidad aunque muchas veces denote falsa modestia. Pero a los grandes como él se le perdona todo.
Podría a modo de prologo y epílogo juntos mencionar aquellas frases de:
"Dime con quién andas y te diré quién eres"
"Dios los cría y el viento los amontona"
Pero, nada más lejos de la verdad. Ocurre -y esto que quede entre nosotros- que cierta vez, en un viaje a Montecarlo, el Negro perdió mucha guita en el casino al punto de quedarse vacuo de bolsillos. Dorio, a quien la suerte le había sonreido, contrariamente se llenó de guita. Fue cuando Dolina le pidió un préstamo para palear sus gastos de la gira y aqué se lo facilitó con un número de condiciones.
Una de ella fue un lugarcito en la radio, y hoy simplemente el Negro está pagando su deuda.... No prejuzguemos