Ya que estamos, lea esta nota, (que por las dudas aclaro, no la escribí yo)

LA TEORÍA CONSPIRATIVA DE LOS USUALES CONSPIRADORES
(diarioregistrado.com)

Ahora resulta que, para Perfil y La Nación, el crítico problema de la vivienda en Capital Federal se reduce a una conspiración del kirchnerismo. Entonces, el gobierno porteño sólo sería una víctima inocente de los hechos en el Parque Indoamericano.

Perfil tiró la piedra: “El líder de la toma de Villa Soldati es un militante ultra-K de Lugano”, tituló el sábado. Y el inefable Carlos Pagni aventura hoy en su columna de La Nación: en el macrismo creen –dice- que el responsable de la ocupación del Parque Indoamericano “fue el Gobierno, sobre todo por la conexión entre Alejandro Salvatierra, líder de los intrusos, y el kirchnerismo porteño de Francisco Nenna”.

El objetivo obvio es endilgarle al kirchnerismo, especialmente al porteño, una conspiración tendiente a “desestabilizar” al gobierno de Mauricio Macri (que, por cierto y entre paréntesis, se desestabiliza solo). Según esta descabellada ‘teoría’, la toma del parque por miles de personas tuvo su causa en un “impulso” del kirchnerismo –presuntamente “artificial”- y no en el crítico déficit habitacional que sufre la Capital, con fuertes inversiones estatales y privadas allí donde pueden realizarse negocios inmobiliarios pero nulas donde las necesidades –incluso de infraestructura básica- están a la orden del día.

Pero son Salvatierra y La Nación, justamente, los encargados desmentir la especie. El diario mitrista publica hoy una entrevista con el referente de los ocupantes del Parque Indoamericano en la que se le pregunta si pertenece a algún partido político y el entrevistado responde: “Es verdad lo que en los medios está instalado: yo empecé a hacer política a través del proceso kirchnerista. Porque yo venía de estar en cana y el kirchnerismo es lo que me sedujo de la política. Pero a mí el kirchnerismo, a través de los pocos conocidos que tengo, me pidió muchas veces que saliera de esto [en referencia a la toma]. Yo no soy ni de tercera línea, soy de sexta línea. Y les dije que no voy a obedecer lo que ellos dicen porque no estoy acá por ellos”.

En conclusión: según sus propias palabras, Salvatierra está en la toma a pesar de “los pocos conocidos” que tiene en el kirchnerismo, quienes le pidieron “muchas veces que saliera de esto”. El sorprendido periodista repregunta entonces a Salvatierra: “¿No vino acá por ellos [el kirchnerismo]?” Respuesta contundente: “Yo vine acá porque soy villero”.

Él, como las cientos de familias que en estos momentos están siendo censadas por el gobierno nacional, están ahí por ser “villeros”: por no tener dónde vivir, porque el Estado porteño no pudo dar, hasta ahora, respuesta a una de sus necesidades más elementales, como es la vivienda.