Buenas.
Me exclama la atención aquello que dices Ripio, de que mi ideal propuesto es padre de "la tolerancia cero, la disminución de la edad para la imputabilidad y tanto autoritarismo que sostiene que el rigor de la pena disminuye el delito." No lo entiendo, pero a lo mejor reconozco que mi idea carece de generalidad, dependería de qué "paraíso" tiene cada individuo, o cada clase social.
Pasa que me niego a reconocer que la vida es un castigo luego de haber disfrutado de un supuesto paraíso que ni te acordás si lo has vivido, y que ésta vida es un infierno imposible de poder transformarlo en un lugar armonioso.
Me niego a que un desamor impida sí o sí otro futuro amor. Me niego a que no haya soluciones, o una recuperación ante un problema de la vida, o que la vida es una enfermedad angustiosa y que la única cura es la muerte. En un ámbito más general, me niego a que tiene que haber gente muriendo de hambre y por guerras ajenas.
Y por supuesto, me niego a tener la verdad absoluta, ya que algo de acuerdo estoy con Ezequiel sobre "el camino: Nadie sabe a donde va", pero almenos muchos saben a donde quieren ir. Yo quiero ir a algún lado, pero no se si ésta calle me llevará a destino. Puede ser que... eso sea una de las dificultades de la existencia, no tener una "Filcar" certera.
Es lo que puedo pensar y ver a mis éstas bajas alturas. Mañana seré otra persona, parecida.
abrazos!