Lo lamento Andréa, me parece que la afortunada es la silvina.
Agradezco su buen talante don Ricardo.
Sobre J.D. creo que está casi todo dicho. Pero añadiré que estaría estupendo que entrara sólo para momentos de reflexión, donde saldría bien parado. Pero el humor! el humor! se necesita un talento diferente del que J.D. carece.
Saludos a todos, hayan o no pensado alguna vez en el suicidio. Disculpe señor Joaquín, esta intromisión.