Soy mexicano y hace apenas un año mas o menos que escucho a Dolina por mera casualidad pero en ese corto tiempo se ha vuelto un hito en mi país gracias a esta página, creo que habríamos de ser mas comprensivos con el negro, finalmente no hay programa por que el no quiera sino por que esta enfermo, y la muestra de que Dolina se esfuerza tanto como le es pósible por complacer a sus escuchas es que transmite en un estado en que lo ideal sería reposar sin presiones de ningún tipo, es triste que no haya un programa diario, pero no digan que Dolina no respeta a sus escuchas, los respeto al punto de poner en riesgo su bienestar por darnos algunas risas (o muchas) cada noche, aquí en México estamos pasando por un momento social bastante dificil, creanme que tener un programa como el de Dolina, en cualquier faceta, es un lujo que no podemos darnos.