No fue justo, no fue delicado... Bello abril de El Trío Sin Nombre no es igual sin la voz de Martín y el precioso sonido de la babosa.
Cuando llegó el momento de "...y las violetas que coronan tu tristeza y las guirnaldas de tu inmensa soledad" ni el eco de su fantasma que todo escucha lleva incorporado, evitó la pena. No estuvo bien que el Trío, la cantara sin él; porque su ausencia fue involuntaria - dijeron que estaba indispuesto.
Maestro Gancé, precioso su piano... y su pedacito de Flor de lino. Dúo, un gran placer.
No fue justo, no fue delicado... Bello abril de El Trío Sin Nombre no es igual sin la voz de Martín y el precioso sonido de la babosa.
Cuando llegó el momento de "...y las violetas que coronan tu tristeza y las guirnaldas de tu inmensa soledad" ni el eco de su fantasma que todo escucha lleva incorporado, evitó la pena. No estuvo bien que el Trío, la cantara sin él; porque su ausencia fue involuntaria - dijeron que estaba indispuesto.
Maestro Gancé, precioso su piano... y su pedacito de Flor de lino. Dúo, un gran placer.