Me siento entre dos dimensiones ( la cuarta o cuántica y otra que se abre sólo aquí, intercambiando hálitos más complejos que los virtuales, más elusivos de aprehender, pero con más poder que la propia voluntad para generar interacción y lazos : íntimamente tienen que ver con la luz, la electricidad del Sol, y la Música).Acabo de ver la película que me recomendó Angie El Concierto. Y vengo y me encuentro aquí con un "concierto". La sombra, el perfil de Alejandro Dolina... El tono gris, de la perla, del ámbar, del ángel...Un diseño, elegante, de trazos finos... Estoy desbordada de la música de la película ( mi papá y esa música a mis 15 años...Él sonreía literalmente con chispas en los ojos y la boca y decía "¿te gusta Tachaica?" o llegaba a casa y del mismo modo, "¡ otra vez escuchando a Tachaica ¡" fingiendo fastidio - tenía sentido del humor del que yo carezco - No sé, este diseño de nácar y gris, vibra con ecos de la música, de las escenas de la orquesta tocando, de algunos diálogos fantasmales, de esa película. ¡Qué casualidad! Gracias Angie. Y felicito al diseñador y programador. El arte salva a la máquina.