A mi abuela y a mis tías abuelas, les hacía bajar los párpados para esconder vaya a saber qué, aunque lo que fuera se les escapaba por todas partes recordando el ¡ MÍA ! en la voz de Fernando Siro, dicho a Hilda Bernard en Esos que dicen amarse...
Me parece recordar que el "mamarrachito mío" ( que a esas mujeres de mi familia las hacía reir ) era para Susy Kent.
Eran peronistas a muerte y de armas tomar ( con pechos y polleras en las palabras ) cuando discutían con un conocimiento y fuego que a mí me dejaba perpleja, como quien observa un fenómeno digno de estudio. De madre criolla y padre uruguayo, con la misma pasión escuchaban radio El Espectador y radio Carve . Los diarios eran para ellas mapas del mundo,...político.
Eran un libro abierto que jamás causaba tedio escuchar, en su madurez y en su ancianidad : me narraban con fuego, y en sus ojos casi negros de criollas, encontré el valor puro, la raíz de lo femenino.