Patricia, como es lógico no sé quién eres; los que no somos personajes pero devenimos del capricho ajeno de serlo, nos desconcertamos un poco - tampoco demasiado - a la hora de responder honrada y verazmente : somos piezas móviles no esenciales en este rompecabezas donde tres o cinco se creen dioses sin creer en Dios; no hay un único otro lado del espejo,... depende si eres Alicia o eres el Sombrerero o eres el conejo...o un simple citalino trasnochado afectado por vulgares de tan comunes conflictos existenciales... cuando ocurren en el infierno ELEGIDO de una ciudad. LA DIFERENCIA la hace siempre el propio ser y el ser del interpretador.
"A los que me quieren" : a veces Patricia, los que nos quieren no son los que queremos y el ángel está en el sentir de ellos por nosotras. En cambio, el mediocre Luciferito, está en aquél o aquellos que queremos.
¿Amas a Dolina? Pasa, no necesitas contraseña. Yo - te cuento a tí - lo amo, lo reconoce mi alma. Durante años vaya a saber por qué, el cual existe y yo temo sospechar, alguien trató de desarmar, desvirtuar, patologizar, ningunear y ridiculizar, mi verdad, mi amor. A esta altura ya no importa. No soy yo quien ha perdido : lo han hecho perder a él, incluso él mismo lo hizo - ¿es tan puro como una siente?-
¿Por qué tanto detalle vano - no olvidemos dónde estamos -?... Porque la verdad es el Camino más directo a la salida correcta. Y en el Camino podemos levantar iluminadamente a quien o quienes hacen dedo. No obstante, el lector-ra de señales, no puede fabricarse.
Si eres - mujer o varón - el ser que blanquea esotéricamente su intención y a algunos-as no nos dejas más que la intuición, entonces Patricia o Patricio (nada que ver con Barton) te deseo paz, luz, amor, poder de sueños y creación, salud, coraje y juventud del Niño-a cósmico-a... Gracias por tus palabras coloridas y luminosas, curiosas y movilizadoras, no hace falta racionalmente comprensibles ( ahí las arruinamos y arruinaríamos).
Como dijo el hermano Francisco de Asís : donde haya odio, yo ponga amor. Y sea capaz de comprender y aceptar la diferencia, entre lo que no puede cambiarse y lo que sí.
Orfeo y Asís tenían ángeles y el Espíritu en común.
Yo te quiero : traducido,... quiero a la imagen que proyectas. Y porque quieres a Alejandro y su bien.
Que la Luz te abrace y abrase. :)