Matías, ¡ qué hermosa música !...
Desde los cuatro años escucho todo lo que consideraron bella música y me acercaron. No sé si mi padre me educaba o, experimentaba para "escudriñar" mi espíritu.
No hay ningún desatino que rastrear, pero otra vez ha habido causalidad; como no tengo sentido común aquí va ( los anzuelos suelen ser como hamacas de trapecio para el trapecista, como caballos para la ecuyere, nunca anzuelos )
http://www.youtube.com/watch?v=qGbmjX7AYyU&feature=related
Si aquella otra música de saxo sonara en la espera telefónica, seguramente primero la escucharía por bella y luego, cortaría indignada de que sonara en semejante canalla situación.
Me acordé de una letra de Dolina :"Canciones que estropean el olvido, mentiras cobardes de aquel que te ha herido"...