Yo tampoco escuché el programa todavía, pero no puedo resistir la tentación de decir esto, GUILLERMILESPIE:

Una cosa es una cosa, y otra cosa es otra cosa. Debe ser muy desagradable para un artista que trata de ser consecuente consigo mismo* y sus ideas, ver que tiene cada vez menos público. (Y que, en cambio, la obsecuencia llena salas)

*(¿está bien dicho "consigo mismo"? Me tildé, si está mal avisen jajaa)