Me encantó el programa : vital e inteligente, una sola palabra.
Dolina es brillante sin vulgaridades.
Los temas, la gracia, lo agudo en los juegos de ideas y palabras, el público no se relajó ni un momento. Totalmente sincronizado con la gente. ¡ Se sacaban chispitas !
-¿ Mi familia ? - preguntó Dolina.
- Nuestra familia - respondió Martín.
Y Dolina repitió su frase y accedió al tema musical.
Tal vez se refería Martín a la familia Dolina. Tal vez la respuesta de Dolina, también. Tal vez se referían ambos a la familia de cada uno de los oyentes y presentes. Tal vez a la Argentina.
Para alguien, para algunos, para muchos, es lindo creer, que Martín se refería a "la gran familia dolinera" de LVST, "título" que se otorga y se comparte por amor. Por poseer, el don del gran arte de los buenos, lo que los hará doblemente -con un énfasis innecesario- perdurables en el canon de la leyenda del arte y, mucho más, en el corazón de la gente ("Si alguna sombra de mal - el de los otros - no enmascarara tu apariencia, entonces tú solo poseerías reinos de corazones").
En definitiva Martín y Alejandro Dolina dejaron flotando en todos, el "nosotros"; la imagen viva de esa gran familia que pueda decir como Borges : He ejecutado un acto irreparable, he establecido un vínculo.
virginia el jueves, 28 de julio de 2011 a las 04:42 AM
en La venganza será terrible del 27/07/2011 dijo: