Alejandro 20:41 horas. Me gustó la charla de ese video. Qué lindo está Dolina en esa foto.
Me lo llevé a mi rincón virtual.
También el de Cabernet con Badía.

Es bueno quitarse, aún sin anestesia, una apariencia de verruga que duerme como un tumor : el prejuicio, su irracional enemistad compulsada a crecer donde primero mató.
Es crítico, oir, pensar, hablar, por primera vez sin él.
No hay amenazas de complacencia, de miedo, nada turba el aire que serenamente entra y sale, del cerebro, del corazón. Nadie, ni desde adentro, ni desde afuera, como un salteador viene a chantajear, "la bolsa o la vida". Se es libre.
Ni mercader, ni Barrabás, ni Pilatos, ni mercenario, ni cipayo, ni censor, ni Judas, ni tirano, ni Tartufo, ni apropiador : ningún traje que quiera ser impuesto, calzará ni se sostendrá.
El que está dormido y el que ha despertado, necesitan confiar en un puente; van por orillas paralelas, deben hacerlo sin enemistad.
No son enemigos, sus existencias se contradicen y contradicen esos trajes; lo que son los opone, sólo como la mentira y la verdad cuando la acción es engaño que quiere para sí lo que no le corresponde y justamente porque no le corresponde.
Pero nadie que esté despierto podrá mirar neutral cómo se cortan el talón o los dedos, los propios o los ajenos, para imponer el hecho ilegítimo del zapato de cristal, el hecho de la cuna por encima de las piernas mutiladas del niño.
El juicio previo es como un embarazo ectópico; su concepción es un error. Va a matar a la madre, pero crece porque quiere "vivir".

Creo que el ser más puro, más justo, más necesario para la vida, es aquel que da la libertad a otro, lo conduce a la libertad. Lo mira desde su libertad.