Adolfo, es casi imposible no darse cuenta que el comentario de Mandeb esta vez iba con buena leche, y Federico le contesto... Como decirlo... Para la mierda...
Y por eso fué mi comentario, y supongo que el resto tambien.
Y no digo que Federico desconoce el valor de lo que enseña, solo le pregunto si está seguro de conocerlo, porque a veces no se nota. De verdad chocan los insultos, la insistencia en los temas, las discusiones, el querer tener razón y demostrar cuanto sabe, cuanto conoce, cuanto se embarra las patas, mientras los demás no sabemos, no conocemos, ni pisamos jamás el barro para no ensuciarnos los zapatitos de charol.
De todos modos, repito. Mi comentario iba porque no puedo creer que tan para la mierda le contestó a Mandeb, cuando (quizás por primera vez, jaja) estaba contestando con buena onda.
Y bueno, yo recuerdo haber tenido docentes así, que ni escuchaban lo que uno decía, y en esas clases no aprendíamos nada. A nadie le cae bien la soberbia y la falta de respeto. Entonces se me hace que debería replantearse él mismo que está haciendo mal en lugar de preguntarle a Dolina que hacer con la educación. A los chicos, la clase de música generalmente les gusta si el docente le pone un poco de onda.