Las supersticiones de Nisias

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0:00:00 las supersticiones de Nixia.
0:00:04 Vamos a ubicarnos en Grecia, poco después de la guerra del Peloponeso,
0:00:10 que la guerra tuvo lugar a mediados del siglo V al Creti Cristo
0:00:15 y entró como saben ustedes, a los Ateniences y a los Desfaltados.
0:00:20 La guerra había arruinado toda la región.
0:00:25 No parecía dar ganadores en una guerra de resultados de desuso en ese momento al mes.
0:00:32 Amenazada por una revueta de esclavos, Esparta propuso la paz.
0:00:38 En las telas donde también se temía una revueta de los esclavos, se afectó la propuesta.
0:00:46 Es la paz por el lado de los Ateniences, la firmó Nixia.
0:00:52 Nixia fue uno de los hombres y las ambleas Ateniences, que por su pretidio y por su utilacen,
0:00:58 gobernaba la ciudad.
0:01:00 El tratado que había firmado con Esparta preveía no sólo una paz por 50 años,
0:01:08 sino también una colaboración entre ambos estados.
0:01:12 En caso de que alguno de los dos sufriera una revolución de esclavos.
0:01:17 Es decir, los grandes enemigos volvían a encontrar concordias para sostener las injusticias sociales.
0:01:26 Nixias había desaprobado la guerra contra Esparta, pero no por ser afillamado a la paz.
0:01:33 Como todos sus colegas del Partido Más Conservador de la Asamblea, Nixias veía en Esparta un modelo a imitar.
0:01:42 Como todos ustedes saben, el gobierno Espartano era riguroso, un represor, amante del orden,
0:01:53 mientras que los Ateniences en general eran más propibles a las libertades, a la vida artística,
0:02:04 a ser todo el espíritu mundial.
0:02:06 Pero los más conservadores de la Asamblea desde luego eran admiradores de Esparta.
0:02:13 Nixias, que perteneciera al Partido, veía en Esparta un modelo a imitar.
0:02:18 Adoraba con Pergón a que el Estado eternamente militarizaba, porque hacían cosas en Esparta.
0:02:27 Nixias era muy rico.
0:02:29 Su patrimonio era más grande y antena y provenía en general de la disquiler de cuadrillas
0:02:37 de clavos a los administradores de mininas.
0:02:41 Y poco cuando vos administrabas de una mina, la mina es el sentido del lugar del que se
0:02:45 trae en el Estado.
0:02:47 Cuando vos administrabas de una mina, si necesitabas el clavo que no tenías, no se alquilabas.
0:02:53 Nixias ya alquilaba sus propios.
0:02:58 Pero más allá de sus inscripciones políticas y de la sorpresa que los enriquecieron, que
0:03:04 no eran muy recomendables, Nixias era muy conocido por su carácter perrícula y supersticioso.
0:03:13 Daremos una lista de sus creencias más extravagantes.
0:03:17 No transcurría un solo momento sin que hiciese algo por los dioses.
0:03:23 Nixias dedicaba a una estatua a Atenea, obra una parte de su patrimonio avioniso, financiando
0:03:30 los más suministrosos espectáculos en su amor.
0:03:35 Para cada mínimo acto a cumplir, consultaba al numen competente y pagaba la respuesta
0:03:43 con los más costosos exmotos.
0:03:48 Nixias había siempre palabras mágicas en las paredes de su casa para proteger la de los
0:03:54 incendios naturalmente y en los ácidos.
0:03:58 Los días nefastros, jamás iniciaba una empresa.
0:04:01 A cortarse el pedo esperaba la Luna Arena como hacemos todos.
0:04:05 Cuando el vuelo de los pátaros indicaba Maltivenpo, pronunciaba la fórmula de Conjuro y la repetía
0:04:11 27 veces.
0:04:13 Abandonaba la asamblea y escuchaba el chisilo de un rastón.
0:04:18 A cada muerto de su familia, que por antigua, le había hecho muchos muertos, le dedicaba
0:04:23 una ceremonia especial invocando el nombre de cada uno de ellos a cada vocado que él
0:04:29 quisiera.
0:04:31 Tipo Morpaba es este, este vocado para el abuelo José, este para el bisabuelo Pepe,
0:04:41 el otro para el final del cuando.
0:04:43 La familia, conica proxerpia, el tipo de los los trabajaba con una tablida ante los ojos
0:04:50 y en esa tablida estaba en escrito los nombres de todos los filados, ¿no?
0:04:54 Para no olvidarse de ninguno.
0:04:56 Cada vez que hubiera un raba uno a cada vocado, tachaba el nombre del filado que había
0:05:01 un rado con esa, con esa mastica.
0:05:04 Creo que era el régimen del doctor Cornillo.
0:05:09 De que masticar mucho, claro, sí, tanto, sí.
0:05:13 Nicias tuvo un enemigo que fue alcidíades, eh.
0:05:17 En la tablida, alcidíades se dedicó a convencer a los atenienses de que el único modo de
0:05:22 recuperar el prestigio perdido de la guerra con el IV, era conquistar Cibacusa.
0:05:28 Nicias suplicó a la tablida que renasaba a esa propuesta.
0:05:33 Alcidíades avaló la propuesta porque estaba seguro de que el mando de la tablida, Cibacusa,
0:05:40 se le iba a dar a él.
0:05:42 No se veía, se le iba, no, que tenemos que ir a hacer guerra, mira, a Cibacusa, que
0:05:46 sucia Cibacusa en cisi.
0:05:48 Y se aprobó la guerra.
0:05:54 Una noche mientras se hacía lo preparativo para la experiencia de Cibacusa, las estajas
0:05:58 del Dios Hermes fueron multidadas.
0:06:00 Se encargó una investigación para indagar las responsabilidades del César Gileño y
0:06:06 las sospechas recaderos no vea al Cibíades, que también no tenía nada que ver con el
0:06:11 asunto, y a lo mejor era solamente la victima de una maquinación de los más conservadores
0:06:18 para evitarla.
0:06:20 Alcidíades solicitó un proceso y en la espera de que fuese celebrado el mando de la expedición
0:06:27 que iba a ir a Cibacusa, que iba a ser encargado al Cibíades, le fue compilado a Nicias, que
0:06:33 en verdad no la quería, no quería mandar a Nicias.
0:06:36 Y la expedición, y quería la guerra tampoco, pero ya se la encargaron.
0:06:42 Era tan conocida la devoción de Nicias que la se embriaba al culoro siguiente.
0:06:48 Un comandante de esas características tan meticuloso en honrar a los dioses, debería
0:06:53 ser muy querido por los dioses.
0:06:55 Y por lo tanto, la expedición de Cibacusa necesariamente tenía que ser venturosa.
0:07:01 Eso lo que se llama el pensamiento iniquipo.
0:07:06 Antes de aceptar Nicias con sus cuaros oráculos y hasta mandó emisarios de Cisto, que como
0:07:12 todos sabemos están los mejores ofas.
0:07:16 Interrogaron a Amón, por no decir Amón.
0:07:22 Los emisarios respondieron que el dios le había dicho que estaba todo en el ojo.
0:07:28 Nicias dio entonces la señal de partida.
0:07:30 En el último momento, recordó que estaban en la neplata frintilla, como quien dice en
0:07:37 el Mar de Estrés, pero ya era demasiado tarde para revocar la orden y se la tomaron.
0:07:43 Para congraciarse de nuevo con el cielo, durante los tiempos de navegación, Nicias ordenó
0:07:49 a unos y tareas a sus soldados, sacrificios, preces, de modo tal que los soldados embarcaron
0:07:57 demoralizados y completamente debilitados por la coneja que corrían.
0:08:03 Cibacusa pareció difícil y confista.
0:08:06 Y el cielo descargó lluvias torrenciales y después de nuevas ofrendas apareció una
0:08:13 epidemia antes de la muerte en Nicias.
0:08:16 Entonces, espantado, Nicias decidió abandonar la empresa y reembarjara a la casa y no
0:08:21 más llegué volvado.
0:08:22 Pero en aquel momento hubo una equilse de luna y Nicias interpretó que la equilse,
0:08:30 como una orden celeste, de aplazar la partida.
0:08:34 No de atacar, pero sí de aplazar la partida por veinticenties.
0:08:39 Habiendo comprendido finalmente con quien se enfrentaban los ciracusanos de rectuárgora
0:08:44 salía nocturna y asaltaron la flota de Mi'anice, Nicias se bateó con bravura hasta que la
0:08:53 lectura de unas ondas, en el mar honda, digo, fueron interpretadas como que debía recibarse.
0:09:00 Entonces se dejó de pelear.
0:09:02 Los ciracusanos lo persiguieron y lo alcanzaron.
0:09:07 Nicias fue pasado a Cuchillo inmediatamente junto con la mayoría de los demás prisiones.
0:09:13 La crónica cuenta que los ciracusanos los cometieron una prueba.
0:09:20 Serían ejecutados todos menos aquellos detenientes que estuvieran recintar de memoria
0:09:26 a algún paro de eurífiles.
0:09:29 Entre muchos Nicias cayó.
0:09:32 No lo sí.
0:09:33 Y fue muerto.
0:09:34 Entraros del desastre de ciracusa alcindíades quien había estado a la guerra fue Cuclar.
0:09:43 Se lo dio el proceso y se recuperó una espanta pero esa famosa tradición de alcindíades
0:09:48 es parte de otra historia.
0:09:50 Esta termina aquí en la obstinar, en la utusa interpretación de una senora.
0:09:59 Hay de los que interpretan equivocadamente la historia.
0:10:09 Aquí termina la historia.
0:10:10 Dejo que usted la dedique.
0:10:12 No tengo alguna.
0:10:13 Yo se la voy a dedicar a los esclavos de ambos andos, Alejandro.
0:10:19 Yo se la voy a dedicar a los que permitieron que sabía algunos versos de Eurífiles salvar
0:10:32 a su vida.
0:10:33 Había en la India, recuerdo usted, una aclánsula policial que permitía evadir algunas sanciones
0:10:46 de delitos menores, recitando una cierta cantidad de versos, no sé si del Rigver o del
0:10:52 Mahabharata o del Primero.
0:10:54 Pare decir que mi conocimiento de la poesía y de la historia servía para evitar prisión.
0:11:08 No es preso bien porque, cierto, es una garantía de llevar una forma de vida que es contra
0:11:18 la vida del índice.
0:11:19 Sin embargo, ya se sabe que muchos delincuentes con tal de salir libre de la comisería se
0:11:26 aprendían índices o el Rigver y después cometían toda clase de desmanes.
0:11:32 No había otro inconveniente.
0:11:34 La ignorancia que los vigilantes tenían de aquellos libros.
0:11:40 Ignorancia que era aprovechada por los detenidos, que sean cualquier cosa, y la hacían pasar
0:11:46 por el Rigver.
0:11:47 Aprendo a las huellas, a el Cienlar o ese ejemplo de las robas.
0:11:51 Eso que al Rigveras.
0:11:53 Aquí les traigo el montón porque usted me mató a comprar.
0:11:59 El Mahabharata.
0:12:07 Por suerte hoy la superstición ha sido derrotada.
0:12:11 La superstición está en Franca retirada.
0:12:15 Adiós, adiós, Seban.
0:12:17 No lo venga nopando.
0:12:19 Los últimos astrólogos, los últimos adivinos, los lectores de entrañas de aves, los lectores
0:12:31 de cartas y cartones y cartonazos, los que leen la suerte en la borra del café o en
0:12:39 las hojas del ti o en el chocolate que queda en el fondo.
0:12:45 Ya no la conocí así, yo tampoco.
0:12:51 Allá se van mientras que trufan, las hildan sus banderas, los amantes de la razón, el
0:12:59 pensamiento y la ciencia.
0:13:01 ¿A qué se le va a ocurrir hoy leer un horófago por el sierra?
0:13:07 ¿Quién cree en los prestigitadores?
0:13:11 No lo muergo.
0:13:13 ¿Pues eso piezera?
0:13:15 Vamos a escuchar la canción que se llama Estango, que se llama Lo Que Vendrá, que se
0:13:19 refiere a escutar la entidad.
0:13:21 No solo el futuro, sino la posibilidad de que nos visite ahora, de que nos visite en
0:13:29 el tercer.
0:13:31 Así que escucharemos lo que vendrá que es un tango de Astor.
0:13:35 Tiene suerte en la versión de Astor con su contexto.
0:17:51 ¡Hemos escuchado lo que vendrá por Astor Tiazola y su pinteto!