**INEDITO**

Transcripción automática

0:00:00 Continuamos en la veganza, será terrible, estamos hoy en el galponcito de la casa de Dorriti, les recordamos que el jueves estaremos en corrientes en el teatro, en el club Boca Unidos y el viernes en San Martín en el complejo...
0:00:19 Cuatro pero libros.
0:00:21 A ver, acá llegan los libros del siglo XXI por ejemplo, de Sebastián Lipina, pobre cerebro, son los efectos de la pobreza sobre el desarrollo cognitivo y emocional y lo que la neurociencia puede hacer para prevenirlos.
0:00:37 De Sebastián Lipina, del siglo XXI edición.
0:00:44 Bueno, aquí tenemos un libro de Pablo José Semadeni que son aventuras del último flaner, por un lado, y Trenkelauquen y el mundo, excursiones de un caminante y por el otro, y Confesiones, son tres.
0:01:04 Aunque el del medio parecen dos.
0:01:07 Y llegó el versero, que es el libro de 100 poemas de Juan Sasturain.
0:01:12 Bueno, qué suerte.
0:01:14 El 76, algo que tiene.
0:01:15 Qué suerte un libro de Juan Sasturain.
0:01:17 Bueno, y allá qué tiene.
0:01:19 Y aquí también, del siglo XXI, ensayos argentinos, de Sarmiento a la vanguardia por Carlos Altamirano y de Atriz Arlo, es una serie de colección de ensayos con una letra muy pequeña.
0:01:31 Ah, sí, sí, así escribe Beatriz.
0:01:34 No, señor, se imprime así.
0:01:37 Y de Alzaguara, de Pablo Ramos, hasta que puedas quererte solo,
0:01:44 intuyo que es una novela que todavía no he visto de qué se trata.
0:01:47 Pero sí, efectivamente.
0:01:50 Eso de Pablo Ramos.
0:01:51 Es que estoy escribiendo a mi editorial.
0:01:56 Sí.
0:01:57 Está escribiendo un libro, a través de su libro.
0:02:00 Me mando pedacitos del libro por mensaje del texto.
0:02:03 Esta variedad es bocita, sí es babel.
0:02:05 Por ejemplo, sí.
0:02:06 Ella era una dulce mina de garrolla.
0:02:11 Él era un troesma pausar la ganzúa.
0:02:16 Por eso, que cuando de Afanar volvía, ella en la catrera, contenta reíga.
0:02:23 Contenta de echarse un dorima tan puro.
0:02:27 Después lo sí.
0:02:30 Si lo agarra el teclado, pregúrate.
0:02:32 Vería, dormía los dos abrazados.
0:02:35 De noche, el fanaba hasta la alborada.
0:02:39 Hasta que la yuta que nos perseguía lo alzó de su casa.
0:02:43 Y ella se reía mientras a Devoto iba al desdichado.
0:02:49 En la negra reja de la celda el orre a su compañera llorando batida.
0:02:57 Por vos me hice chorro, queré me paloma, pero indiferente al dolor del choma,
0:03:03 alzando los hombros, ella se reía.
0:03:08 Pasaron los años, vino la sentencia.
0:03:12 Pa' tierra del fuego, al punga embarcaban, a las seis en punto de una tarde freía.
0:03:20 A las siete, ella se apiló a otro rufa.
0:03:24 A las ocho andaba con él de garufa y al sonar las nueve, curda, se reía.
0:03:32 ¿Le gustó?
0:03:34 Sí, se llama...
0:03:36 Se reía.
0:03:39 Ella se reía, no tiene absolutamente nada que ver con esas cosas.
0:03:45 Pero, porque hoy no hablaremos de eso, sino de catón el sensor.
0:03:50 Atención, señores, los estudiantes de historia, los estudiantes de derecho romano,
0:03:58 Felipe Pina, atención Felipe, hablaremos hoy de Marco Portio Catón el sensor.
0:04:10 Más conocido como Catón el viejo, fue un político y escritor romano,
0:04:16 nació en una granja de túsculum.
0:04:21 Nacer en túsculum es extraordinario.
0:04:28 Y las afueras de túsculum mejor todavía.
0:04:33 Es distinto a hacer en el centro.
0:04:36 Sí, no va a comparar las afueras con el centro de túsculum.
0:04:42 Lindo para ser el formulario cuando repiden las afueras.
0:04:45 Sí, sí, él nació en túsculum.
0:04:47 Señor, yo no estoy hablando del sé.
0:04:49 Sí, sí.
0:04:55 Nació en el año 234, antes del quimisto.
0:05:03 Bien, salgamos por favor del túsculum.
0:05:06 Hijo de un terratemiente romano, se desempello como funcionario de la República desde muy joven.
0:05:14 Primero, sirvió como cuestor, luego como edil, como pretor,
0:05:19 y como cónsul en el 195 a.C.
0:05:23 Se hizo famoso a partir del 184 cuando se convirtió en sensor.
0:05:30 Descripción de Catón según las crónicas.
0:05:34 Era un hombre enorme, de maderosa voz, ojos grises y dientes como colmillos de jabalí.
0:05:42 Su rostro era tan desagradable y odioso que según decían algunos epigramas que circulaban contra él,
0:05:51 ni él mismo inferno quería abrirle las puertas.
0:05:55 Una función que ejerció Catón sobre la República tuvo consecuencias nefastas.
0:06:05 Es la nota de nefastas.
0:06:08 Dice, durante algún tiempo los romanos trataron de dar la espalda a las cuestiones guerreras
0:06:15 para dedicarse a proteger la sabiduría de los griegos y a progresar.
0:06:22 Pero Catón no quiso saber nada con semejante propósito.
0:06:26 Espulso a los filósofos griegos, prohibió la lectura de sus escritos,
0:06:30 condenó toda clase de diversiones que venían de Grecia,
0:06:34 alegando que eran frívolas y obscenas para la dignidad de sus conciodad.
0:06:41 Su idea era transformar toda Roma en un campo de disciplina espartad.
0:06:47 Sí, señor, era un hombre cruel.
0:06:50 Para él luchar contra un enemigo implicaba matar el mayor...
0:06:55 Si, suélteme, señor, el mayor número de hombres, mujeres y niños en el menor tiempo posible.
0:07:00 Su vida íntima era prácticamente la de una serpa.
0:07:06 Vivía en una pequeña casa de campo.
0:07:11 Y iba diariamente desde allí hasta Roma, desde Túsculum,
0:07:15 hasta Roma y desde Roma hasta Túsculum.
0:07:20 Y para administrar justicia.
0:07:23 Cuando volvía por las tardes sacaba el arado que tenía bajo la cama
0:07:28 y labraba en las tierras.
0:07:30 Él mismo no bebía más que agua
0:07:33 y casi no comía otra cosa que pan enzopado.
0:07:37 Un pan enzopado o agua.
0:07:41 Era excelente orador, tronaba contra la inmoralidad de sus semejantes,
0:07:47 pero acá ya no puedo más y tengo que decir que en realidad era un verdadero libertismo.
0:07:58 Sí, señor.
0:08:03 Lo abrumaban los billes, lo abrumaban.
0:08:06 Mentira, es cierto, comía solo pan enzopado, pero andaba con todas, señor.
0:08:12 Pero recién decía que tenía una vida íntima que...
0:08:16 Se refería al pan y al agua.
0:08:19 Ah, está bien, está bien.
0:08:21 Pero en lo que se refiere a tipas andaba con todas.
0:08:25 Se cansaba de besar a las mujeres de sus congéneres.
0:08:29 Pero eso cuando no había nadie en su presencia.
0:08:32 Tuvo estas costumbres hasta los 80 años.
0:08:36 Bueno, murió a los 82.
0:08:38 Qué claro, sí.
0:08:39 Que le costaba seguir dos años más.
0:08:42 Bueno, la más grande ambición de Catón fue hacer negocios junto a Roma
0:08:50 a espensas de otras regiones del mundo conocidas.
0:08:54 Fue Catón quien empujó a sus conciodadanos a enriquecerse merced a la destrucción de Cartago.
0:09:00 Contemos lo que sucedió.
0:09:03 Cartago era una ciudad antiquísima, era una ciudad de los fenicios, ¿no?
0:09:08 Que estaba en la costa norte de África, cerca de la actual Túnez.
0:09:14 La ciudad se había establecido allí como puesto comercial,
0:09:19 a fines del siglo IX a.C.
0:09:22 Era más vieja que ropa.
0:09:24 Los cartagineces destacaban en la fabricación de camas y ropa de camas.
0:09:30 Claro, si fabricas la cama te conviene también fabricar las hábanas.
0:09:35 Y diseñaban joyas.
0:09:40 Y exportaban animales salvajes de la cumplea preciosa.
0:09:45 Incluso los metían arriba de las camas.
0:09:48 Cuando cargaban un barco, pues habían primeras camas, después ya se hábara
0:09:53 y arriba los animales salvajes.
0:09:56 Era un pueblo que vivía en guerra, se enfrentaba siempre a Grecia y a Roma.
0:10:02 Y, como ustedes saben, en las guerras públicas,
0:10:07 allí donde nuestro amigo Amígicar, Amita Barça, y su hijo Aníbal, ¿no?
0:10:16 Catón se obsesionó con la idea de que aquella ciudad, a la que odiaba por su lujo y su riqueza,
0:10:23 era una amenaza para Roma.
0:10:25 Y comenzó entonces a dar discursos en el Senado, que siempre terminaba diciendo,
0:10:31 de lenda es cartago.
0:10:33 Cartago debe ser destruida.
0:10:36 Catón se obsesionó con la idea de que aquella ciudad ya lo leí.
0:10:43 Pero lo puedo decir de vuelta.
0:10:45 Están obsesionados estaba este hombre que no pensaba en otra cosa.
0:10:52 En una oportunidad, estaba diciendo un discurso,
0:10:55 y dejó que unos higos se cayeran de su túnica.
0:11:00 Entonces un senador, Ortiva, estaban en ese lado de los romances.
0:11:05 Se agachó y agarró el higo, y escúntame la tracción.
0:11:10 Qué lindo higo, porque eran higos enormes.
0:11:13 Catón dijo, estos higos son de cartago,
0:11:17 y si destruimos cartago, nos vamos a encontrar todos estos higos.
0:11:22 Yo aproveché este recurso oratorio, y cuando fui,
0:11:28 ¿cómo se llama el programa ese de donde vos vas y te peleas?
0:11:33 Indomables, dice.
0:11:35 No, indomables.
0:11:36 No, intratables.
0:11:37 Intratables, deje que se me cayera un higo.
0:11:44 Yo quería que votaran por el Partido Demócrata Progresista.
0:11:48 Y se agachó y agarchó y dice, qué lindo higo.
0:11:51 Estos higos son los que vamos a importar de cartago los demócratas progresistas.
0:11:57 Donde así no votó la idea del partido.
0:12:01 No, no sé.
0:12:02 Perdimos la selección, señor.
0:12:04 Sí, bueno, perdieron.
0:12:06 ¿Qué me venís con el higo?
0:12:07 No, pero si no le dije nada.
0:12:09 Bueno, no sé, pero no es una buena cosa.
0:12:13 Quizás no por los higos, pero la cuestión es que todo el mundo estaba entusiasmado
0:12:19 con la invasión, los banqueros, todos esos tipos que pensaban en enriquecerse.
0:12:27 Y los cartagines ya habían sido derrotados en dos guerras públicas.
0:12:31 Y habían quedado muy maltrechos, desarmados, pobres.
0:12:38 Roma le había hecho firmar condiciones de rendición espantosas, que eso.
0:12:45 Y había una condición que era esta.
0:12:47 No podían relacionarse con ningún enemigo de Roma.
0:12:55 Y le hicieron una trampa.
0:13:00 Hablaron con Masinisa, rey de Numidia, y lo convencieron para que se lanzara contra los cartagineses,
0:13:09 que incendiera a sus campos, cargara contra sus remanios.
0:13:13 Y tampoco podían los cartagineses luchar contra un aliado de Roma.
0:13:18 Entonces lo mandaron a este tipo, que era un alió menor, que ni sabía los cartagineses donde era.
0:13:23 Y fue, empezó, prender fuego a las cosas.
0:13:25 Cuando los cartagineses se defendieron, apareció Catón y le dijo,
0:13:30 ah, ha, ha, ha, ha, han combatido a uno de nuestros aliados, lo vamos a invadir, qué se lo.
0:13:35 Y los cartagineses empezaron a aceptar todas las condiciones que Catón le ponía.
0:13:41 Te queremos, tenés que pagar una multa, la pagamos.
0:13:44 Tenés que, este, todo.
0:13:47 Las armas, destruí todas tus armas, las destruí.
0:13:51 Y dijeron que enviaran, este, no sé si eran 1500, creo, jóvenes como rehenes,
0:14:01 jóvenes de la aristocracia cartaginesa como rehenes a Roma.
0:14:06 Y los cartagineses que sabían, que no podían soportar un asedio romano,
0:14:13 enviar a los chicos, eran 300 en realidad, ¿no?
0:14:18 Los de funcionarios, quedaron ahí, como rehenes, y los trataron como esclavos.
0:14:24 Al poco tiempo le dijeron a los de Cartago que tenían que destruir todas las armas.
0:14:31 Y secuestraron los mismos romanos, 3000 catapultas y 200 mil armaduras.
0:14:38 Y cuando Cartago hubo accedido a todas las exigencias,
0:14:45 fueron llamados una vez más los embajadores cartagineses y Catón exigió la última de las prendas.
0:14:52 La ciudad debía ser destruida. Destruida por los mismos cartagineses.
0:14:57 Y los embajadores solo pidieron que les dieran el tiempo necesario
0:15:03 para que los habitantes pudieran salir de la ciudad, llevarse al indispensable,
0:15:09 y se viviera otro lado.
0:15:12 Y mientras los romanos le daban un poco de tiempo,
0:15:18 los cartagineses empezaron a destruir todo lo que tenían de metal, lo fundían y hacía las armas.
0:15:26 Y así estuvieron hasta que pudieron.
0:15:29 Cuando los romanos llegaron, se encontraron ante un cuadro que los dejó perplejos.
0:15:34 Las puertas estaban cerradas, los puestos de guardia debidamente vigilados,
0:15:39 y entonces le pusieron sitio a la ciudad.
0:15:42 Y los cartagineses que habían liberado a sus esclavos habían dispuesto a sus hombres,
0:15:47 sus mujeres y sus niños y habían forcado las armas, tal cual lo les dije, lucharon.
0:15:53 Y la seguieron tres armas. Lucharon tres armas.
0:15:58 Y los tres sal. Fue la tercera guerra pública, comandada por Pedro...
0:16:04 No, Publio Cornelio, esición, que si yo no recuerdo mal, era esición en Africano.
0:16:12 Estaba el otro esición menos conocido, que era el emiliano.
0:16:17 Este era el africano, me parece a mí.
0:16:19 Los cartagineses fueron destruyendo ellos mismos su ciudad para poder defenderse,
0:16:24 y muertos de hombres se rindieron.
0:16:27 Los romanos tardaron 60 días para arregollar a los vencidos.
0:16:33 La población de casi 400.000 habitantes fue reducida a un puñado de gentes que fueron vendidas como esclavos.
0:16:41 En la ciudad entera no quedó ni una sola muralla en pie.
0:16:46 Los soldados romanos volvieron a su país para celebrar el triunfo,
0:16:53 pero Catón ya no estaba para festejar si había muerto un año antes de la destrucción de la ciudad que tanto odiaba,
0:17:03 y un año después de haber dejado la práctica de seducir a las mujeres de los amiguitos.
0:17:10 Durante 25 años se prohibió ocupar las ruinas que quedaron.
0:17:14 Recién en el 29 a.C. fundó así Colonia Julia Cartago,
0:17:21 ciudad que prosperó hasta un nuevo asesio en el 697,
0:17:27 pero estos fueron los árabes y una vez más fue totalmente destruida.
0:17:33 ¿A quién dedicaré esto?
0:17:36 Y los cartaginesos que se aguantaron pionga, pero no eran muy buenos tampoco.
0:17:42 ¿Qué es lo que lo podemos que lo podemos?
0:17:45 Vamos a escuchar a los muchachos de antes,
0:17:51 Pancito Cao, Horacio Maldicino y el nene Nicolini,
0:17:58 que tocan un tango de chomperera, creo que es este tango, pero a la manera del 900,
0:18:04 que evidentemente fue compuesto para recordar aquella tercera y crudelísima guerra pública.
0:18:15 Que autores de tango de nuestro país se ocupen de la historia romana,
0:18:23 particularmente de la tercera guerra pública,
0:18:26 es un ejemplo solo sobrepasado por Felipe Pina.
0:18:29 No, no, no, no, no, no, no, no.
0:18:31 ¿Qué tiene el dato cierto de que esto es así?
0:18:34 No glossé solamente una suposición, pero cuando usted escucha el tango se dará cuenta de que es así.
0:18:42 ¡Adelante!
0:20:59 Era en los muchachos de antes, la venganza será terrible el africano.