Los Capuchinos de Trinidad

Transcripción automática

0:00:00 Hablaremos de los capuchinos de Trinidad.
0:00:02 De Trinidad la isla es aquella que haría el norte de Venezuela
0:00:06 en la salida del delta del orinoco, hay varias islas allí, Guadalupe,
0:00:13 la Martimica, la Dominica, Santa Lucía, Barbados, Trinidad y Tobago.
0:00:23 Vamos a contar algo que sucedió en la isla de Trinidad
0:00:26 que después de muchas disputas estaba
0:00:29 bajo dominio español.
0:00:31 Esto fue a fines del siglo XVII.
0:00:33 Era una isla que no le interesaba a nadie entonces.
0:00:36 Habían pasado por allí varias expediciones buscando el dorado.
0:00:39 Hablamos el otro día del Raleigh,
0:00:44 otro que se quedó allí esperando...
0:00:50 ¿Cómo se llama este tipo?
0:00:52 Esperando noticias de España que no llegaban.
0:00:54 Ah, sí, recuerdo.
0:00:55 Recuerda que ahí en la isla Trinidad.
0:00:59 Los soldados españoles que ocupaban el lugar vivían como náufragos,
0:01:03 únicamente preocupados por la supervivencia
0:01:06 y bastante mezclados con los indios arahuacas,
0:01:10 que eran más bien pacíficos.
0:01:13 La corona no enviaba ayuda
0:01:15 y llegó un momento en que ningún hombre quería ser gobernador de aquella isla.
0:01:20 El Consejo de Indias había presentado el nombre de dos personas.
0:01:25 Se propuso primero a Don Lorenzo de Cien Fuegos,
0:01:28 pero cuando le avisaron,
0:01:31 Lorenzo presentó sus excusas al Raleigh.
0:01:35 Otro fue Francisco de Santillán,
0:01:38 que también se negó a gobernar un lugar tan inópito.
0:01:42 Un lugar que era visitado muy frecuentemente por bucaneros
0:01:46 y también por los indios caribes,
0:01:48 que eran terribles, particularmente por sus costumbres culinarias,
0:01:53 ya que eran antropófagos.
0:01:56 Nunca hasta entonces se había despreciado un cargo de tal naturales.
0:02:02 Aparecieron algunos que sí se interesaron por poner el pie en la isla
0:02:07 y eran unos monjes, unos monjes capuchinos
0:02:11 que propusieron al Rey evangelizar a los arahuacas
0:02:15 e instaurar allí una especie de teocracia.
0:02:19 Y bueno, a falta de funcionarios reales,
0:02:22 en la trinidad bien podía ser una extensión de la iglesia.
0:02:26 Al cabo de un año llegaron hasta allí los capuchinos,
0:02:33 previo decreto real que los autorizó a establecer una misión allí,
0:02:38 llegaron.
0:02:40 Pronto escribieron al Rey sobre los felices comienzos,
0:02:44 la gran cosecha que podía esperarse,
0:02:47 la multitud de almas que debían ser salvadas,
0:02:50 pero esta sensación optimista duró poco.
0:02:54 Los misioneros no conseguían muchos resultados,
0:02:57 no evangelizaban a nadie.
0:03:00 Cuenta la crónica que los arahuacas no se dejaban evangelizar
0:03:05 así nomás, predres se morían de risa
0:03:08 ante los procedimientos de los monjes
0:03:10 y después repetían los ritos, casi como un paso de comedia
0:03:14 y hacían burla.
0:03:17 Los misioneros pensaron que habían llegado muy precipitadamente
0:03:22 y que no se llevaban lo necesario para evangelizar
0:03:26 y por eso fallaban.
0:03:28 Entonces pidieron que les enviaran campanas,
0:03:30 desde luego para llamar a la oración,
0:03:32 insensarios, candelabros, vasos para los sólidos, velas, no sé,
0:03:38 cosas para hacer algunos movimientos fatuosos y ornamentales,
0:03:42 pero no les llegó nada.
0:03:44 Entonces empezaron a trabajar en la construcción de misiones rurales
0:03:49 y a levantar iglesias.
0:03:52 Y esta arquitectura se realizaba con el trabajo de los propios arahuacas,
0:03:57 que después, según pensaban ellos,
0:03:59 deberían marchar a esas mismas iglesias
0:04:02 a venerar sus propias construcciones.
0:04:05 Pero los indios no aguantaron mucho esa situación
0:04:08 y se produjo una revuelta.
0:04:10 Y fue la última rebelión india de Trinidad.
0:04:13 Con ese estallido, Trinidad tuvo sus primeros mártires cristianos
0:04:18 y también su primer milagro.
0:04:21 Veamos.
0:04:22 Parece que estaban construyendo en iglesia
0:04:26 y había dos indios que trabajaban
0:04:28 bajo la supervisión de un monje y un carpintero,
0:04:31 ambos españoles, de los tipos de yaceto, clavaquino, sé qué.
0:04:37 Parece que los indios no entendían algunas de las explicaciones
0:04:42 y el monje le dio la impresión de que lo hacían a propósito,
0:04:46 de que se hacían los autarios para no trabajar tanto.
0:04:50 Y entonces los retó.
0:04:52 Se ve que se piensa en ustedes lo que sé.
0:04:55 Uno de los indios le encajó un palazo al monje.
0:04:57 Sí, para que más.
0:04:58 Y el otro acuchilló el carpintero.
0:05:02 A continuación, todos los indios, que supuestamente estaban convertidos,
0:05:07 arremetieron contra los capuchinos y los mataron a todos.
0:05:11 Y fueron enterrados en los cimientos de la iglesia en construcción.
0:05:15 Una proligidad.
0:05:19 Secientos españoles que vivían en una fortificación cercana
0:05:23 también fueron muertos por los indios.
0:05:26 Desde la Guayana no se pudo enviar a Lluy inmediatamente.
0:05:29 Pasaron dos meses hasta que llegaron
0:05:32 los primeros capitanes de infantería con unas tropas.
0:05:35 Y esas tropas empujaron a los indios rebeldes hacia el mar.
0:05:39 En la batalla definitiva tuvo lugar en la costa de Trinidad, en el Cabo Galera.
0:05:45 Un lugar que había sido autizado por Colón.
0:05:48 Porque lo vio de noche y le pareció que era una Galera.
0:05:53 No una Galera, el sombrero del mago, sino una embarcación.
0:05:57 Bueno, en aquella batalla muchos de los indios se ahogaron,
0:06:01 ya que cuando retrocedían se metían en el agua y ya agarraban.
0:06:05 Otros fueron fusilados, otros fueron arrastrados
0:06:08 hasta el puente San José y así ahorcaos.
0:06:11 Las cabezas y las manos de estos indios fueron expuestas en la Plaza del Puerto.
0:06:19 Y un año después fue hasta Trinidad una misión oficial.
0:06:25 Bueno, investigaron Cacho y al desenterrar los cadáveres de los monjes de la iglesia
0:06:30 descubrieron que estaban intactos
0:06:33 y que salía sangre de sus heridas.
0:06:36 Entonces se los expuso en las paredes incompletas de la iglesia
0:06:41 y fue precisamente con ese milagro que según la crónica española
0:06:45 empezó la conversión que antes no había funcionado con los capuchinos vivos.
0:06:50 Parece que los indios veían cómo aquellos hombres muertos,
0:06:57 así de tanto tiempo, se conservaban en perfecto el estado,
0:07:00 y entonces inmediatamente se convirtieron.
0:07:03 Algunos escépticos explican esa conversión por otra cosa,
0:07:07 por ejemplo la presencia de un temible ejército.
0:07:11 Sí, que era amenazante.
0:07:14 Así que sea por lo que fuere se convirtieron los arahuacas.
0:07:18 Y alguien escribió un poema acerca de estos acontecimientos.
0:07:23 Un poema que se llamaba romance muy doloroso
0:07:27 y es la única pieza literaria que escribieron los españoles en Trinidad.
0:07:31 Pero esa pieza fue rápidamente olvidada
0:07:34 y la gente que había oído hablar de ella sólo recordaba que no era muy buena.
0:07:39 Bueno, después de la muerte de los indios rebeldes,
0:07:44 los colonos españoles presionaron al rey
0:07:47 para servirse de los indios como mano de obra.
0:07:50 De modo tal que en el siglo XIX los indios prácticamente desaparecían.
0:07:55 Un descendiente de arahuacas, allá en 1885,
0:07:59 sirvió de guía a un misionero dominico
0:08:02 hasta el lugar de la matanza, y se dice, aquí fuera matanza.
0:08:05 Según dijo este hombre,
0:08:07 era una tradición de los indios convertidos
0:08:10 que los jueves y viernes santos
0:08:14 se oyeron cánticos en medio de...
0:08:17 No era una tradición, era una creencia,
0:08:20 que el jueves santo y el viernes santo
0:08:22 se oían cánticos en medio del monte
0:08:25 y voces de españoles rezando.
0:08:28 Es decir, ellos creían que se oían, no es que los oían.
0:08:31 ¿Entiendes? No es lo mismo creer que se oyen que oírlo.
0:08:38 Y eso es todo lo que tengo que decir al respecto.
0:08:42 ¿A quién dedicar esta charla? A los indios.
0:08:45 Y también a todos los que estamos esperando
0:08:49 un milagro, pero un milagro de verdad,
0:08:52 para ver si nos convertimos.
0:08:54 Pues yo me convertiría con muchísimo gusto.
0:08:57 Pero a mí traiga un milagro polenta.
0:09:00 Un milagro polenta, por ejemplo.
0:09:02 ¿Qué entra en nuestro productor ahí?
0:09:04 En vez de bajar la escalera volando.
0:09:07 Entonces, bueno, chau, me convertí.
0:09:09 Sí, me convertí.
0:09:11 A la religión, primero me convierte, fue el pregunto...
0:09:14 ¿A cuál?
0:09:15 ¿A cuál religión me tengo que convertir?
0:09:17 En nombre de que la divinidad ha volado este tipo.
0:09:23 Es que uno quiere querer, ¿no?, en escuchar las voces
0:09:27 de los españoles cantando y...
0:09:29 Sí, qué sí.
0:09:30 Y para ello uno hace esfuerzo.
0:09:32 ¿Hay que hacer esfuerzos para creer?
0:09:37 Los que creen es porque han hecho un esfuerzo.
0:09:40 Nosotros nos gustaría no tener que hacer ningún esfuerzo.
0:09:43 Debo ser por eso que no creemos.
0:09:47 Claro, de tanto hacer fuerza ante...
0:09:50 ¿Contra qué hace fuerza?
0:09:52 ¿Esa fuerza qué...
0:09:54 ¿A qué otra fuerza se opone?
0:09:56 A la realidad, por ejemplo.
0:09:58 La lógica.
0:09:59 La lógica que no sería tan grave, pero la verdad...
0:10:08 hemos conversado con el discotecario,
0:10:10 hemos contado esta historia muchas veces,
0:10:12 porque un hombre que suele dormirse en mitad de los relatos...
0:10:16 Y no entendió mucho, pero...
0:10:18 o yo que la isla de Trinidad, al menos en aquel entonces,
0:10:21 estaba bajo la influencia de Venezuela,
0:10:24 y nos encajó...
0:10:26 nos dio un bellísimo Bals, un balvelesolano del agro.
0:10:29 El Bals, venezolano número 3,
0:10:33 que escucharemos ahora mismo.
0:10:35 Es un alemán al que toca la guitarra, ¿cómo se llama?
0:10:38 No sé, pero el alemán...
0:10:40 Bueno, tráganos el disco que ahí dice
0:10:43 y nos vamos a fijar.
0:10:46 Bueno, pero después del Bals.
0:11:45 vamos a ver...
0:11:47 y bueno,
0:11:49 vamos a ver...
0:11:51 y bueno,
0:11:53 vamos a ver...
0:11:55 y bueno,
0:12:11 www. lookin'ah Jeremy
0:12:12 BTS
0:12:14 PRODUCC IMAGLO
0:12:15 song
0:12:20 bırabulla