Transcripción automática
0:00:00 Hablaremos hoy de los milagros. Hemos hablado muchas veces de ellos, pero hoy lo haremos nuevamente.
0:00:08 El milagro, según la sección más corriente, significa cosa admirable, pero también podría decirse,
0:00:22 revelando el carácter poco estricto de esa primera sección, que todo es admirable, pues de todo.
0:00:29 El sol, las planetas, las estrellas. Y en verdad llamamos milagro usualmente a la violación de las leyes externas de la naturaleza.
0:00:38 Por ejemplo, si hubiese un eclipse de sol durante la luna nueva o si un muerto anduiera caminando con la cabeza en la mano,
0:00:47 entonces diríamos que estamos ante un milagro. Los físicos sostienen, en ese sentido, que no puede haber milagros.
0:00:56 Dicen a estas personas, por ejemplo, una ley no puede ser al mismo tiempo inviolable y violada.
0:01:02 Y hay bien todas estas paradojas que tanto gustan a los manilleros ácratas.
0:01:08 Por ejemplo, las leyes que estableció Dios no pueden ser el mismo violado.
0:01:15 Dios no puede crear algo tan pesado que el mismo no puede levantar.
0:01:21 ¿Para qué se molesta Dios en hacer milagros?
0:01:26 Para que se cumplan algunos designos que si no no se cumplirían.
0:01:31 No le bastan las leyes que el mismo al Estado para que estos designos se cumplan.
0:01:35 Quiere decir, entonces, que no es tan perfecto si tiene que hacer un milagro para que algo se cumpla.
0:01:41 Porque no lo ha previsto en sus leyes primigenias, entonces estas leyes no son tan perfectas.
0:01:48 Todo eso es muy aburrido.
0:01:52 Pero los crédulos insisten y existen.
0:01:57 Y dicen, no importa, el mundo está lleno de milagros por mucho que cacaré en los filósofos.
0:02:03 Esto lo dice el carbonero, por ejemplo, con su fe característica.
0:02:08 Y ahí mismo empiezan a contar milagros.
0:02:11 Y ellos nos dicen, las tejas del gran sacerdote años convertían en trigo todos los objetos que se les presentaba.
0:02:21 O bien, a tal edad, la hija de Hermes, resucitó varias veces.
0:02:28 Habrá muerto también varias veces.
0:02:31 Es indispensable para resucitar.
0:02:35 Ya se sabe que los carboneros no son solamente crédulos, sino que se renuncian a estos demás milcultos.
0:02:42 Citaré otros milagros más allá de mi profesión.
0:02:46 Asclepios resucitó a Hipólicos. Acuerda, el hijo de Peseo.
0:02:50 Todo un lido familiar.
0:02:53 Estaba Fedra, que era la hermanita diariasna.
0:03:00 Aquí se acuerde a que le dio la punza del peorín para que entrara en el laberinto de Crespo.
0:03:07 Peseo andaba con Ariadna primero y después con la hermana, con Fedra.
0:03:13 Como tantos otros unimos lejos al paciente aquel suyo.
0:03:18 Usted lo contó.
0:03:19 Usted lo fue el hombre.
0:03:20 No, nada, nada.
0:03:21 Y Peseo se fue al final con Fedra, con la cuñadilla.
0:03:28 Se lo llevó a Pina, Peseo.
0:03:32 Y ahí Fedra conoció a Hipólico, que era un hijo que Peseo tenía de un matrimonio anterior, de un lío anterior.
0:03:39 Y se enamoró de Hipólico.
0:03:43 Que no es Peseo.
0:03:45 Un amor culpable.
0:03:48 Un amor que vale la pena.
0:03:52 Si no es culpable un amor, no es lo que vale la pena.
0:03:55 Y entonces la mina se le presentó a Hipólico.
0:03:59 Y el Polito estaba durmiendo la siesta, y la mina le golpeó la puerta y dijo que esto.
0:04:03 Hipólico salió corriendo y se precipitó más, se murió.
0:04:10 Y a Esclepio, esto le quería contar.
0:04:13 De Hipólico no hubo más reneo que contarlo, se hubiera querido callar.
0:04:16 Pero a Esclepio se decía es que laculatio lo resucitó a Hipólico.
0:04:23 Ese guano ya resucitó.
0:04:24 Y ahí se armó porque los dioses pensaron que si nadie moría y si la gente empezaba a resucitar,
0:04:31 el universo iba a sufrir numerosísimos inconvenientes, más allá de los inconvenientes previstos por mal.
0:04:37 Entonces, hay otros, por ejemplo, de orden jurídico, el reclamo por parte de los resucitados,
0:04:42 de los bienes que ya sus regulos se habían repartido.
0:04:45 Pero esto que acabamos de decir desde los humildades.
0:04:49 A Esclepio, resucitando Hipólico, es humildad.
0:04:53 La cabellera de Berenice, que se convirtió en una confelación de estrellas.
0:04:57 Ahí tiene humildad.
0:04:58 La cabeza de Orfeo, que seguía pronunciando oráculos después de la muerte del cantor.
0:05:04 Las murallas de Estebas, que se construyeron así mismo.
0:05:08 Y eso son tibianas, además.
0:05:11 Porque hay paredes que se construyen así mismo totalmente en falsas cuadras.
0:05:17 Ese es un milagro, pero un milagro malés.
0:05:20 Lo peor que puede existir en el mundo es un milagro malés.
0:05:24 Más que inecer una divinidad que se equivoca de nuevo ya.
0:05:28 Usted pide el amor de A y le dan el de B.
0:05:32 Sí, y eterno.
0:05:33 Sí eterno.
0:05:34 Con lo cual ve lo floja nunca.
0:05:35 Por confusión, por desamor de la divinidad.
0:05:40 No dice más, se le da lo mismo.
0:05:42 Se le da lo mismo.
0:05:43 Se le da lo mismo.
0:05:45 Algunos tienen una posición intermedia entre la credulidad y la filosofía.
0:05:52 Y esta posición podríamos denominarla de credulidad selectiva.
0:05:58 Es decir, creemos en algunos milagros y en otros no.
0:06:02 No pueden creer algunas historias milagrosas que ellos creen que son de segundo orden.
0:06:08 Pero cuentan que un prieble estaba tan acostumbrado a ser milagros que el prior de su convento se lo prohibió.
0:06:15 Estábamos contados, ¿no?
0:06:17 Le dijo, mire, priebles, ya estamos podreos de esos milagros.
0:06:21 No haga más milagros.
0:06:23 Y el prieble obedeció, no hizo más milagros.
0:06:26 Pero un día vio que un obrero, que estaba cayendo la calle desde el techo,
0:06:30 y tuvo la tentación de salvarlo.
0:06:34 Entonces, recordó inmediatamente que el prior le había prohibido todo milagro.
0:06:39 Entonces, se lo suspendió en el aire al obrero.
0:06:42 Se lo suspendió en el aire y salió corriendo y fue a la oficina del prior a preguntarlo si podía seguir adelante.
0:06:50 Lo puse, ¿no?
0:06:51 Lo mire, empecé un milagro, pero lo dejé ahí.
0:06:54 Si usted me da autorización, lo salgo a este tipo.
0:06:57 Y si no, lo dejo que siguió el que se esclase contra el pavimento.
0:07:02 El prior lo absolvió del pecado que había cometido.
0:07:05 Había empezado a ser un milagro, ¿no?
0:07:07 Empecé a la cometer un pecado y ya es pecado.
0:07:11 Como lo sabe cualquier.
0:07:15 Incluso un buen argumento para inducir a alguien que empezó a cometer un pecado,
0:07:20 a que lo finalice, decirle, ya la penitencia la tenés.
0:07:24 La tenés igual, seguir.
0:07:27 No te detengas.
0:07:31 Bien, el caso es que el prior lo dejó continuar el milagro,
0:07:36 entonces, a condición de que no hiciera ningún.
0:07:38 Entonces, el fraile volvió, donde los logreros suspendieron el aire,
0:07:41 esperaba supongo que con mucha ansiedad resultaba de aquella gestión.
0:07:46 Y terminó el milagro.
0:07:48 No me pregunto de qué manera, lo terminó porque no lo sé.
0:07:51 Eso es lo que preguntaría, ¿ya cómo lo terminó?
0:07:55 ¿Cuál era el final?
0:07:56 Ya estaba suspendido el milagro.
0:07:58 ¿Qué es el obrero?
0:07:59 Bueno, habrá bajado lentamente, no sé, no me pregunto así.
0:08:03 Otro le contaré.
0:08:04 Digo, milagro, el segundo orden, ¿no?
0:08:06 Estos más difíciles de crear.
0:08:08 San Gervasio y San Protasio se le aparecieron a nuestro amigo San Ambrosio,
0:08:12 el maestro de Agustín, en sueños,
0:08:15 para indicarle dónde estaban ciertas religias.
0:08:18 San Ambrosio las desenterró y curó con ellas a un ciego.
0:08:23 ¿Cómo durar de eso, dicen algunos?
0:08:25 Si otros dicen, no, ese milagro no me gusta.
0:08:27 Sin embargo esto lo cuenta San Agustín en la ciudad de Dios.
0:08:30 Los filósofos no creen en milagro alguno.
0:08:33 Si nunca hicieron el cuente, por ejemplo, que cuando San Policarpo,
0:08:37 el obispo de Smirna, fue condenado a morir en la hoguera,
0:08:43 se hundió una voz desde el cielo que gritaba,
0:08:46 Valar, Policarpo, se varíente.
0:08:50 Y que las llamas se separaron del cuerpo del obispo
0:08:57 y que para matarlo tuvieron que cortarle la cabeza en realidad.
0:09:01 Bueno, ¿hay alguien que da para qué sirve ese milagro?
0:09:05 ¿Por qué las llamas perdieron su naturaleza
0:09:08 y el hacha del ejecutor no perdió la suya?
0:09:11 ¿Qué ganó Policarpo con un milagro de esa clase?
0:09:16 Bueno, a lo mejor demostra que los milagros son pocos.
0:09:20 La verdad es que los padres de la Iglesia ya confesaban en aquella época
0:09:31 que había pocos milagros.
0:09:33 Es como el cuento del fútbol, en todas las épocas se creó que el fútbol pasado era mejor.
0:09:39 Y en todas las épocas se dijo que había más milagros en el pasado que en el presidente.
0:09:44 Habrá que pensar que a lo mejor los milagros son una cosa que ocurre solamente en el pasado.
0:09:50 Dice San Crisóstomo,
0:09:54 dones extraordinarios se concedían en aquellos tiempos,
0:09:57 incluso a personas indignas, porque entonces la Iglesia necesitaba ser milagro.
0:10:02 Hoy ya no, nadie resista muertos ni cura enfermos.
0:10:06 Pero San Jerónimo, en lo que escribí acerca de la vida del termitaño Pablo,
0:10:12 dice que a este termitaño un cuervo le trajo todos los días medio pan durante 30 años.
0:10:17 E incluso un día que lo visitaba San Antonio le trajo un pan entero.
0:10:21 Eso es lo que se llama escrupulo en el milagro.
0:10:26 Un sabio jesuita que predicó mucho tiempo,
0:10:30 se lamentaba de que él y sus compañeros no habían podido hacer ningún milagro.
0:10:36 Pero esto no es nada.
0:10:38 Este hombre se lamentaba en sus cartas de no poseer el don de lengua.
0:10:43 Lo habían mandado a Japón.
0:10:46 Un jesuita estaba en el Japón.
0:10:48 Y se quejaba en una carta, no posee el don de lengua,
0:10:53 porque aquí en el Japón no entiendo nada.
0:10:57 Estaba como una estatua muda en el Japón sin permitir pagar.
0:11:01 Sin embargo, los jesuitas han dicho que San Sabier, el mismo que escribía esta carta,
0:11:07 resucitó 8 muertos.
0:11:10 Con lo que uno puede conjeturar lo difícil que es aprender el japonés.
0:11:16 Por lo menos más difícil que resucitar 8 muertos.
0:11:20 Hemos contado también cómo el rey Enrique de Portugal,
0:11:26 en lucha con los arrasenos, dio a aparecer ante sí al Cristo y le dijo aquí,
0:11:32 no, señor, yo creo en ti.
0:11:35 Ve aparecerte ante los infieles.
0:11:38 Señor Razón, para que se le iba a aparecer a él si él la creí.
0:11:44 Si se llama ninguna revelación, la lea aparezca a él donde no cree.
0:11:49 Y los gobiernos teocráticos, todos milagros.
0:11:52 Volter dice, en su diccionario filosófico,
0:11:56 que cuanto más se perfeccionan las sociedades, menos milagros hay en mesas.
0:12:01 Hay milagros hoy día, se preguntarán ustedes,
0:12:04 se preguntarán el fotógrafo de Clarín, el fotógrafo de Canal 9, que ya se ha marchado,
0:12:09 se los preguntarán probablemente, no, se va a estar diciendo,
0:12:12 hay milagros hoy día.
0:12:17 No, a respuesta no.
0:12:25 Bueno, hay milagros,
0:12:29 hay gente que dice que se produce milagros,
0:12:32 pero eso no vale.
0:12:34 Por ejemplo, el tipo de jugador 63,
0:12:38 él dice milagros, salió el 63, bueno, un número tenía que salir.
0:12:42 Eso no es milagros, sientes, no, no, no.
0:12:46 Y eso al que espera milagros verdaderos le da mucha bronca.
0:12:50 Uno le dice a su amigo, no existen los milagros y yo estoy esperando uno.
0:12:55 Y el amigo le dice, ¿cómo existen?
0:12:58 Yo le jugué al 63, etcétera.
0:13:01 Y uno se enoja, ¿no?
0:13:03 No, no, no, no, momento, estoy preparado.
0:13:05 Sí, no hay milagros en estos días, pero a lo mejor,
0:13:11 a lo mejor es posible que no haya habido nunca.
0:13:17 Yo le he contado algunas veces que durante mis épocas de carbonero
0:13:24 creía que casi todos los que prometían milagros mentían,
0:13:29 pero que casi todos.
0:13:31 ¿Que habría alguno que no?
0:13:33 Que alguno de los magos, si me presentaban a mi consideración,
0:13:37 hablo también de prodigios y maravillas,
0:13:40 que algunos eran verdaderos, que la mayoría mentían.
0:13:44 Esos tipos que te adivinan del futuro, pues ya claro,
0:13:48 sentados en la fila de los escépticos, ¿no?
0:13:51 Ya no, pues 99% de estas personas son pasantes.
0:13:57 Bueno, eso era ser crédulo.
0:14:00 Creo que por lo menos te había alguno que no.
0:14:03 A lo mejor, se levantó.
0:14:06 Y a lo mejor no solamente no hay milagros que habían sido,
0:14:09 sino que tal vez no hay milagros, no lo supongo.
0:14:12 E insisto, insisto, no.
0:14:17 Casi como dedicatoria a los que esperan milagros.
0:14:20 ¿A los que esperan milagros, de verdad?
0:14:22 No, no, cualquier cosa.
0:14:24 Cuando digo milagros, quiere decir que el mar rojo se abra,
0:14:27 vuelva hacia atrás o incluso que estos antiguos queden
0:14:30 sufrendidos en el albergue.
0:14:32 Es decir, una verdadera violación de leyes que parecen inviolables.
0:14:37 Ahora, si yo pongo un programa de tango radio nacional,
0:14:39 la FONOLA, y justo pasan el tango Rauson,
0:14:42 que era el que yo quería escuchar, eso no es un milagro.
0:14:45 Es una coincidencia entre el Mayor del Teo
0:14:47 y la Gerencia de Programación Super Radio Nacional
0:14:51 de la FONOLA.
0:14:53 Hablando de radio nacional,
0:14:55 me hicieron mi indignación por el levantamiento
0:14:57 del programa Jorge Duván.
0:15:01 Entonces, yo dedico a sacarla a los que esperan
0:15:04 verdaderos milagros, no a los que vienen
0:15:06 con baratija.
0:15:11 En todo caso, no le podría decir,
0:15:14 pero lo que hay es una baratija que vale la pena
0:15:19 comprar porque tal vez no está.
0:15:22 Y la única cosa que a mí me parece
0:15:25 que tiene algo milagros.
0:15:27 Y estoy hablando naturalmente del amor.
0:15:30 Estoy hablando del amor.
0:15:32 Pero, un verdadero filoso, no podría decirme
0:15:38 que el amor no es milagros.
0:15:43 Tal no lo es, que cumple las leyes.
0:15:47 Es más, que cumple la ley que dijo
0:15:51 que el motivo y motor de la unidad de su amor.
0:15:55 Eso podría serme un filósofo
0:15:59 cantor al mismo tiempo de voler.
0:16:03 Pero, este, es posible.
0:16:09 Tal vez el amor no es otra cosa que las leyes
0:16:13 indiolables de la naturaleza.
0:16:15 La única, la indiolable de la naturaleza
0:16:18 es el amor.
0:16:20 Y, por eso, la causa de todo,
0:16:22 incluso, principalmente,
0:16:24 lo long de la muerte.
0:16:26 Usted, a quien quiere dedicar
0:16:28 esta serie de milagros que hemos evocado,
0:16:31 algunos de primer orden,
0:16:33 otros de segundo orden.
0:16:35 Así que, ¿cuál es el que el milagro le gustó más?
0:16:39 Me gustó el último que mencionó recién.
0:16:42 A mí me gustó el de Israel.
0:16:45 ¿Qué le gustó?
0:16:49 Yo me voy a quedar con Askletius,
0:16:51 con el amigo osculario.
0:16:53 Es una reacción de lo que me pongo.
0:16:55 Voy a recordar, Alejandro,
0:16:57 ya que usted dedicaba un poco a eso a lo que esperan,
0:17:00 una estrofa que usted dijo que vivía hace muchos años
0:17:03 y que seguramente ya había ido a dos,
0:17:05 que decía...
0:17:07 Ojalá que sí.
0:17:09 Ojalá que sí.
0:17:11 Pobre del que nunca viste una señal de allá arriba,
0:17:14 de la vida.
0:17:16 Una milonguita.
0:17:18 Si me permite usted, ya que hablamos del amor,
0:17:21 permítame dedicarme a este artista,
0:17:24 al milagro, no sé si es un milagro,
0:17:26 pero como ven muchos,
0:17:28 que es a Guillermo Fernández,
0:17:30 que representó el amor de la aura,
0:17:32 y también un milagro que me hubiera gustado,
0:17:34 que fuera posible,
0:17:36 que es el que imagina en el día 2 de exituido,
0:17:39 que es el de guardar su año de juventud,
0:17:41 para ir usando algunos días cada tanto.
0:17:43 Eso es un lindo milagro.
0:17:45 Es un lindo cuento de Papín,
0:17:47 y el llorno no restituto.
0:17:51 ¿Quién le dice, no?
0:17:53 Que no nos hemos guardado.
0:17:55 ¿Quién le dice que no es posible guardar
0:17:58 un poco de juventud para vivir la ultima vez?
0:18:00 Ojalá.
0:18:01 Es muy difícil, pero se puede.
0:18:03 Se necesita un poco de colaboración también.
0:18:05 Se necesita de alguien que te ayude a guardar.
0:18:11 vamos a...
0:18:13 Ya que usted habla de esa milagro relacionada,
0:18:16 de algún modo con el amor y con la juventud,
0:18:18 a escuchar un tango,
0:18:21 cuyo título es la pregunta que yo sé,
0:18:25 el que espera milagro.
0:18:27 ¿Vendrás alguna vez?
0:18:29 Es una pregunta que todo...
0:18:31 hombre que ha esperado milagro,
0:18:33 se ha formulado de una vez.
0:18:35 Así que escucharemos esta...
0:18:39 ¿Estás en este peligro, un proviso?
0:18:41 Es tan patética, solicitor.
0:18:46 Vendrás alguna vez.
0:18:48 Canta Hugo de Cana.
0:19:08 Y supiero que soy solo.
0:19:12 Entre esta y esta gente.
0:19:16 Y supiero que soy triste.
0:19:19 Y verdad rica y lo calente.
0:19:23 Venga todo y no parece
0:19:27 porque sin vos no tengo nada.
0:19:31 Y el de los que has volvido a lolevar
0:19:34 me pregunto, vendrá mi voz.
0:19:38 Vendrá alguna vez.
0:19:41 Entra por el camino de mi soledad.
0:19:45 Pero no importa lo que mira la gente,
0:19:49 supiera su vida desde que no se volva.
0:19:53 Vendrá otra vez.
0:19:55 Vendrá.
0:19:57 Vendrá si nunca, nunca volverá.
0:20:00 Porque te quiero vivir de con un vida,
0:20:03 te quiero dar atrás de la fuerza,
0:20:05 sabiendo la verdad.
0:20:09 Tu recuerdo me parecía
0:20:13 y tan pena como la sombra.
0:20:17 Y en la noche con mi falla
0:20:20 hoy volviendo a este nombre.
0:20:24 Los ojos son mi amargula.
0:20:28 Aunque nadie me conteste
0:20:32 y es sin útiles que conocerme.
0:20:34 Mi rencor es bajo el fe que toco mi amor.
0:20:39 Vendrá alguna vez.
0:20:41 Vendrá si no, nunca volverá.
0:20:43 Vendrá por el camino de mi soledad.
0:20:46 Pero no importa lo que mira la gente,
0:20:50 supiera su vida desde que no se volva.
0:20:54 Vendrá alguna vez.
0:20:57 Vendrá si nunca, nunca volverá.
0:21:02 Porque te quiero vivir de con un vida,
0:21:05 te quiero dar atrás de la fuerza,
0:21:08 sabiendo la verdad.
0:21:17 Ha cantado Hugo del Carrile.
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