**INEDITO**

Transcripción automática

0:00:00 Bueno, hablaremos de los viejos.
0:00:06 Atención. Hablaremos de los viejos.
0:00:10 Dice los viejos en la historia, los viejos en la Edad Media,
0:00:15 consideración social del anciano, etcétera, etcétera,
0:00:20 pero más que nada en la Edad Media, porque hay un libro de Jean Menouin,
0:00:23 que es el que vamos a losar, que dice que desde el siglo V al décimo,
0:00:29 la alta Edad Media, fue la época de la brutalidad en estado puro.
0:00:34 Está muy bien, la brutalidad en estado puro es preferible a la brutalidad
0:00:40 amenguada con cierto glamour.
0:00:44 Lo mismo que un tonto.
0:00:46 Un tonto es preferir un tonto puro.
0:00:50 Un tonto puro. ¿Un tonto ilustrado? No.
0:00:53 ¿Por qué hace escuela, por ejemplo?
0:00:55 Porque del tonto puro todo el mundo sabe que es tonto.
0:00:58 Del bruto puro todo el mundo sabe que es bruto.
0:01:01 Ahora, si esté el bruto le pone un traje gris y lo empicha bien.
0:01:06 Y por ahí la gente no tiene conciencia del carácter brutal de este individuo.
0:01:11 Y lo mismo es un estúpido, que es más o menos lo mismo.
0:01:14 Dije un tonto por un amuno que decía que él prefería el tonto en estado de pureza.
0:01:24 Y yo también.
0:01:25 Así que no está tan mal que la Edad Media fue una época de brutalidad en estado puro.
0:01:33 Allí dice, menú, la justicia se reducía a su mínima expresión bajo formas caricaturezcas,
0:01:39 como la hordalía, si acuerdas, juicio de Dios.
0:01:44 Cuento lo que era.
0:01:47 Que acusaban de un crimen y entonces te hacían caminar sobre las brasas.
0:01:51 Si te quemabas, eras culpable y si no te quemabas, eras inocente.
0:01:56 Eso le llamaban Ministerio de Justicia.
0:02:00 El arte, dice Menúa, se limitaba en la Edad Media, al menos hasta el siglo X,
0:02:06 a la fabricación de espadas cuyo uso después de todo era el único arbitraje admitido
0:02:12 y la literatura era la copia de manuscritos en los monasterios.
0:02:17 En esos tiempos, cuando la única ley era la del más fuerte, física y militarmente,
0:02:22 el destino de los viejos no era nada bueno, dice Menúa.
0:02:26 Bueno, nunca es nada bueno.
0:02:29 Podría pensarse que el cristianismo primitivo tuvo buen trato hacia los viejos.
0:02:34 Los recibía en sus hospedajes, los alojaba en monasterios.
0:02:38 Sin embargo, los primeros pensadores cristianos creyeron que los viejos eran el paradigma del pecado.
0:02:45 Los cristianos usaban la vejez siempre en forma alegórica.
0:02:48 La decrepitud daba la forma de pecado.
0:02:52 El hombre viejo era el pecador que debía regenerarse por medio de la penitencia
0:02:57 y por el contrario, la juventud era la lozanía del hombre salvado por Cristo.
0:03:03 Esto es el punto de vista alegórico, naturalmente.
0:03:06 Juan Crisóstomo estableció un verdadero vínculo físico entre el pecado y la vejez.
0:03:11 Aseguraba que el pecado afectaba al hombre en su carne y que cada vez que cometía alguno,
0:03:17 envejecía más.
0:03:20 Sigo objetando. Yo lo mismo podría decirse de la virtud.
0:03:23 Cada vez que uno realice un acto virtuoso, envejece.
0:03:27 Y aún no realizando acto virtuoso alguno ni acto pecaminoso alguno, también se envejece.
0:03:35 Digo esto yo reclamando para el envejecimiento un carácter amoral.
0:03:40 Que es lo que opinan los médicos por otra parte.
0:03:43 Nunca he oído decirle a un médico no cometa actos de maldad porque le va a agarrar un ataque al hígado.
0:03:55 Ni por el contrario, le receto una buena acción semanal y usted va a rejuvenarse.
0:04:03 San Agustín, que era un tipo que tenía experiencia en pecado, ya que hasta los 30 años fue un verdadero calavera.
0:04:11 Y después se dedicó a la santidad cuando era más fácil.
0:04:16 Es curioso esto, ¿no?
0:04:20 ¿Qué es calavera hasta los 30 como San Agustín?
0:04:23 Fue no solo calavera sino también hereje ya que era maniqueo.
0:04:26 Y después se convirtió y fue ejemplo de virtud.
0:04:30 Es mucho más frecuente que al revés el que era ejemplo de virtud hasta los 35 y después se convirtió en un calavera.
0:04:39 ¿Por qué se da esto?
0:04:42 Es posible que sea más fácil sostener la castidad a los 70 que a los 21.
0:04:49 Pero no estoy tan seguro.
0:04:52 Bueno, San Agustín dice que el viejo pecador ve marchitar su cuerpo.
0:04:58 Pero sin embargo, el pelo blanco es símbolo de virtud.
0:05:03 Y en la Biblia misma puede verse esto.
0:05:06 Cuando Dios le regala a Abraham pelo blanco como símbolo de su dignidad.
0:05:11 Y además se poste que es el color del pelo de Dios.
0:05:15 ¿De qué color tiene el pelo Dios?
0:05:18 Respuesta blanco.
0:05:21 Para los primeros pensadores del cristianismo,
0:05:24 era anciano servía como imagen para testimoniar la decrepitud de la creación y la vanidad del mundo terrenal.
0:05:31 La vejez no era otra cosa para ellos que un castigo divino.
0:05:35 Una maldición que pesaba sobre el hombre a causa de sus pecados
0:05:39 y formaba parte, recordemos, de la dolorosa herencia de Adam.
0:05:45 Según un doctor de la iglesia llamado Efren,
0:05:48 en el siglo, que vivió en el siglo IV,
0:05:51 la vejez era el castigo por excelencia del pecado original.
0:05:55 Ha sido proclamada en uno de los himnos que cantaban los fieles, cuya letra dice,
0:06:00 Adam era eternamente joven y bello en el paraíso,
0:06:03 pero su desprecio del orden lo convirtió en un anciano triste en su decrepitud.
0:06:10 Efren decía además que lo único que hacía del paraíso un paraíso
0:06:15 era el hecho de que allí nadie envejecía ni moría.
0:06:19 Bueno, por fin alguien que dice una cosa con sentido acerca del paraíso.
0:06:23 ¿Quién me viene a mí con paraísos de fuentes de oro,
0:06:30 árboles que dan esmeraldas, huertas donde crecen diamantes?
0:06:37 ¿Quién le puede interesar ese paraíso?
0:06:40 A un compadrito. Es un paraíso de compadres.
0:06:45 Bueno, esa clase del paraíso guarde sino, viejo.
0:06:49 Lo que hace al paraíso es que uno está siempre joven y no se puede.
0:06:54 Uno está siempre joven y no se puede. Ese es el paraíso de un con otro.
0:06:58 Todos los otros paraíso son copias exageradas de cosas que hay en la tierra.
0:07:04 Y lo único que no hay en la tierra es la juventud eterna y la inmortalidad.
0:07:10 Eso es lo que no hay en la tierra. Eso es lo que tiene que haber en un paraíso.
0:07:13 Que hubo un paraíso para sentarme en sillones, de andar a saber qué se da,
0:07:17 tejida con hilo de oro. ¡Mártela!
0:07:22 Continúe Fren, que ha dicho, esto que es muy sensado.
0:07:26 Dice que no importaban en los más mínimos las características geográficas
0:07:31 y se quejaban margamente por el castigo mayor,
0:07:35 que era el que obligaba a llevar el peso de la vejez.
0:07:38 Para insistir en esta idea que marca la vejez como castigo,
0:07:42 en todas las obras que cuentan la vida de los santos, aparecen algunas penas de este orden.
0:07:49 Teodoretto de Ciro escribió en la vida de Santiago,
0:07:53 ahí un lugar donde Santiago se enoja con unas lavanderas que mostraban las piernas.
0:08:01 Y maldice la fuente donde se enjuagaban.
0:08:06 Después maldijo también a las lavanderas y al recibir la maldición, envejecieron al instante.
0:08:13 Dice el biógrafo de Santiago.
0:08:16 De árboles de primavera que supieron ser, las chicas, se cubrieron de hojas de otoño.
0:08:21 Pero lo que interesa esta charla es que la maldición consistía en volver las viejas.
0:08:29 Ese era producto de una maldición.
0:08:32 Quiero decir, era considerada incluso la peor de las maldiciones,
0:08:37 tan mala como petrificarte.
0:08:39 Había sin embargo excepciones sospechosas.
0:08:43 Digo a la tristeza propia de la vejez.
0:08:47 Por ejemplo, un viejo que gozaba de buena salud parecía ir en contra del plan divino.
0:08:53 ¿Entendés?
0:08:55 Si el plan divino era que para castigar el pecado de Adán, todos nos fuéramos poniendo cada vez más viejo,
0:09:04 pero también cada vez más débiles y más vulnerables,
0:09:07 un viejo con buena salud no confirmaba ese plan.
0:09:10 Entonces el fenómeno podía explicarse de dos maneras.
0:09:14 Por una intervención diabólica, eso me está gustando,
0:09:19 o por un favor de Dios ha sido un ser muy virtuoso.
0:09:23 Eso es lo que se le ocurrió.
0:09:26 San Jerónimo decía que los viejos viciosos que se confirmaban sanos estaban amparados por el diablo.
0:09:33 Así que, atención, levanten la mano los viejos viciosos que se conservan en buen estado de salud.
0:09:40 Mirá como ninguno levantó la mano, de todos los piolas que había recién.
0:09:45 No, por ahí si le saca la palabra vicioso, por ahí levantan la mano.
0:09:48 Claro, yo creo que levantarían más las manos y sacáramos la palabra viejo.
0:09:52 Bueno, en aquellos tiempos medievales, los viejos que se entregaban a la vida licenciosa
0:10:00 eran muchos más culpables que los jóvenes que se entregaban a la vida licenciosa.
0:10:04 San Genadio de Marsella se sentía horrorizado al asistir a las orgías
0:10:10 a las que se entregaban los ancianos de la alta sociedad en Tréveris,
0:10:13 en tiempos de las invasiones germánicas.
0:10:16 ¿Cómo? Y él iba, y iba de mirón.
0:10:20 ¿Por qué él creía que si la vejez era el castigo?
0:10:23 El castigo no podía producir otra cosa que dolor.
0:10:26 Y entonces era muy pecaminoso ser viejo y parecer joven.
0:10:31 En la epístola de San Pablo a los hebreos se insisten que la vejez es el momento
0:10:36 para purificar el alma y alzarla sobre un tumulto de pasiones.
0:10:42 El vigor del alma, en la vejez, dice San Pablo, debe sustituir al vigor del cuerpo.
0:10:49 Otros seguían indignándose, por ejemplo, con mujeres viejas que se maquillaban,
0:10:55 como tertuliano. Tertuliano decía, eh, qué sé yo.
0:10:59 Un ejemplo evidente de la poca consideración que la Iglesia Primitiva mostraba hacia los mayores.
0:11:10 En las reglas monásticas también se despreciaba los viejos.
0:11:15 La regla del maestro, que era un conjunto de normas monásticas del siglo IX,
0:11:20 relegaba a los ancianos a trabajar como porteros y en la limpieza del lugar.
0:11:25 No, que eran los que manejaban el asunto.
0:11:28 Debían, además, servir como mecanismo que confería grandeza a los monjes más jóvenes e importantes.
0:11:35 Por lo tanto, debían aprender, entre otras cosas, a recibir de esos monjes limónas y dádivas
0:11:42 con exagerada y apretada gratitud. Le enseñaremos, o anciano, a recibir limónas de los más jóvenes
0:11:50 con exagerada y apretada gratitud.
0:11:54 Así, los viejos de la Edad Media, humillados y diabolizados, fueron los más débiles entre los viejos.
0:12:03 Esto es lo que decía Jean Benoit.
0:12:08 No me parece que esté muy, muy demostrado.
0:12:13 Hay cuestiones en general de alegoría, de pensamiento.
0:12:17 Salvo de este último inciso, no hay cosas prácticas.
0:12:20 No hay, por ejemplo, ningún dato que diga que a los viejos los encerraban en el gallinero.
0:12:24 No hay. O se los sacaba de sus casas y se los enviaba a otras casas
0:12:28 apartados del mundo con trotos viejos.
0:12:30 Eso no lo cuentan. No sucedía en la Edad Media.
0:12:34 Succede ahora, mi no.
0:12:37 Succede ahora.
0:12:39 Ahora es cuando a los viejos lo apartan de su casa y lo llevan a vivir a otra parte.
0:12:48 Siento que la casa por ahí la agarpaban ellos y después los mismos que lo mandaban a otro lugar
0:12:53 estaban ahí viviendo porque molesta un viejo.
0:12:57 Así que no sé.
0:13:02 A mí lo que me interesó fue esa idea del paraíso.
0:13:05 Yo no tiene nada que ver con la argumentación de que los viejos la pasaban mal en la Edad Media.
0:13:10 Que dice que el paraíso es un lugar donde uno es eternamente joven y donde uno no se muere.
0:13:18 Ese es el paraíso.
0:13:20 Eso y, como decía un amuno, la recuperación del pasado.
0:13:25 Las fuentes de oro no quieren ir al paraíso por el fuente de oro.
0:13:29 Quiere ir para ver si encuentra a su viejo que se ha muerto.
0:13:33 Paraíso quiere.
0:13:35 Paraíso, mira, siente ese aquí.
0:13:37 Digo, ¿dónde anda mi viejo?
0:13:39 No, no es así la cosa.
0:13:41 Acá son fuentes de oro.
0:13:43 Ah, cabecelada.
0:13:45 Cabecelada.
0:13:47 Bueno, así que...
0:13:50 Y también estoy en contra de tertuliano.
0:13:54 Se quejaba de que las mujeres se maquillaran.
0:13:58 ¿Y por qué no quieren que se maquillaran?
0:14:01 Pero ¿por qué?
0:14:03 A mí me gusta que las mujeres sean deseables,
0:14:06 incluso en edades donde en otras épocas estaban condenadas a la ancianidad.
0:14:14 Me puede haber un reprimido.
0:14:16 Pero sí, por eso.
0:14:18 Estoy en contra de todo esto, de tertuliano, de todo tipo.
0:14:23 Yo he visto una vez fotos de mi abuelo a una edad que yo ya he superado.
0:14:32 Y parecía lo que era mi abuelo.
0:14:36 Parecía mi abuelo, pareció un anciano.
0:14:39 Era el hombre de cierta edad.
0:14:42 Pero ya pareció un anciano.
0:14:44 Y además parecía cargar con la obligación de serlo.
0:14:49 Parecía cargar con la obligación de serlo.
0:14:51 Hasta un cierto orgullo de su mala salud,
0:14:58 de su pelo blanco, de su pelada.
0:15:02 ¿Y por qué?
0:15:03 ¿Y por qué así era?
0:15:04 Había una presión social que hacía que uno admitiera,
0:15:11 que hacía obligatorio la admisión de los hachaques.
0:15:15 Y cualquier esfuerzo por disimularlo.
0:15:18 Es eso.
0:15:20 Correr, dar vuelta manzana.
0:15:24 Era cual a pelota.
0:15:26 Era cual a pelota, teniese el pelo.
0:15:29 ¿Eran considerado?
0:15:30 ¿Cómo seré eso?
0:15:34 Ahora es todo lo contrario.
0:15:36 Me parece que en ese sentido hemos avanzado mucho.
0:15:41 A mí, yo me felicito de que las mujeres sean cada vez más hermosas.
0:15:48 Y incluso en alguna ocasión muy hermosas hay edades
0:15:54 en que podrías sospecharse ya una cierta decadencia.
0:15:59 Pregúntele al marido de una mena, vaya tertuliano.
0:16:04 Pregúntele al marido de una mena, que se arregla, que está flaca,
0:16:09 que está maravillosa, que se operó, si usted quiere lo que quiera.
0:16:15 A ver qué tiene que decir tertuliano, que se abieja, gorda y que esculpa el suelo como...
0:16:24 Lo diente potillo.
0:16:26 Claro, que deje lo diente potillo ahí en un vaso.
0:16:32 Bueno, disculpe, me ha quedado bien.
0:16:35 Bueno, de todos modos, a mí a veces alguien me dice a alguien de la vieja escuela
0:16:42 bueno, pero hay alguien que tiene ganas de renunciar.
0:16:47 Bueno, ya hay un momento en que uno tiene que dejarse de embromar.
0:16:52 ¿Qué quieres decir?
0:16:53 Sentar cabeza.
0:16:54 Sentar cabeza.
0:16:55 Dice, ¿qué quieres decir?
0:16:56 Dejar de desear, supongo yo.
0:16:59 Dejar de pensar, supongo yo.
0:17:01 Dejar de gozar.
0:17:02 Dejar de gozar.
0:17:04 Ah, qué.
0:17:06 ¿Por qué? Está loco.
0:17:09 ¿Qué quieres ya?
0:17:12 Ahí viene el mandato de su abuelo.
0:17:15 Hay que empezar al suelo.
0:17:17 Y hay un punto en la vida que puede estar en cualquier parte
0:17:20 en donde uno debe elegir a ver quién es.
0:17:23 Porque uno puede ser su abuelo o usted.
0:17:26 Elija.
0:17:28 Un día aparece un ángel y dice, ¿qué quieres ser?
0:17:34 ¿Usted o su abuelo?
0:17:36 Si quieres ser su abuelo, bueno, agarre y camine para el...
0:17:39 Mi abuelo es un hombre extraordinario.
0:17:41 Yo quisiera ser mi abuelo, pero no quisiera tener el aspecto físico de mi abuelo
0:17:47 que pudo haber estado mucho mejor si hubiera vivido en estas escopas.
0:17:51 Bueno, le preguntan, ¿usted qué quiere ser viejo o joven?
0:17:55 No, es...
0:17:57 Sí es la cosa.
0:17:58 Entonces, te dije, ¿quieres ser viejo?
0:18:00 Si quedan un rincón, empieza a mandar calorías,
0:18:03 deja de pensar,
0:18:05 se pone a mirar la televisión de la mañana a la noche
0:18:07 y usted se convierte...
0:18:09 Cuando quiera acordarme, está caminando arrastrando los fanguses
0:18:13 y no va a pensar más.
0:18:16 Va a empezar a reírse de chistes, de otario,
0:18:19 hablar fuerte en las reuniones,
0:18:22 a no mirar las minas
0:18:25 y a decirle a otros que no las miren
0:18:27 porque les va a dar bronca que otros las miran y usted no.
0:18:30 Entonces, y llena, pero eso ya no es para nosotros,
0:18:33 le va a decir a sus amigos, a su nieto.
0:18:36 Y a las minas que se tapen las piernas también.
0:18:38 Y a las minas les va a decir que no muestren las piernas,
0:18:40 que no muestren las piernas, que no existan.
0:18:43 Y a los jóvenes les va a decir también que no existan,
0:18:46 que en vez que es tan rápido
0:18:48 y que pasen de largo por la juventud sin gozar
0:18:51 para llegar rápido a la vejez y sentarse los dos
0:18:54 en la estación a contar los trenes.
0:18:57 Déjese enromar, déjese enromar.
0:19:00 La edad la tenemos y la vejez viene,
0:19:03 pero la renuncia a los placeres ni muerto.
0:19:09 Ni muerto.
0:19:11 Así que tertulia no.
0:19:13 No, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no.
0:19:15 No continúe. No siga.
0:19:18 Estoy polimizando con la fuente de nuestras propias reflexiones.
0:19:22 Déjese enromar.
0:19:25 Bueno, le hemos sido a la discoteca.
0:19:30 Estaba al discoteca.
0:19:33 Bueno, ese ya envejeció antes de tiempo.
0:19:36 Discoteca es un hombre grande,
0:19:38 pero es un hombre grande desde hace 45 años.
0:19:40 Desde que cumplió los 30 es un hombre grande.
0:19:43 Que amargo.
0:19:45 Le gusta cumplir años para que le sean funcionarios unos refranes
0:19:51 que la juventud no tenía sentido.
0:19:53 Ya se los lleva aprendiendo a la juventud.
0:19:56 Es extraordinario. Hay tipos que son así.
0:19:58 Que están deseando tener muchos años
0:20:01 para poder decir antes no era así.
0:20:06 Qué mal negocio, ¿no?
0:20:08 Un písimo negocio.
0:20:10 Y hablar de los tiempos de antes.
0:20:12 Espere que pase la juventud.
0:20:14 Decían que pase rápidamente la juventud para hablar de ella.
0:20:18 Para hablar de ella con nostalgia.
0:20:20 Porque le gusta más la nostalgia que la felicidad.
0:20:23 Eso es una porcaria.
0:20:25 Eso es una porcaria.
0:20:27 Bueno, este tipo es así.
0:20:31 Antes dice...
0:20:33 En mi tiempo...
0:20:35 Y ese tipo me está cerrascaba contra la palma.
0:20:39 Y se nos va a comparar como nos divertíamos antes.
0:20:42 No como ahora.
0:20:44 No como ahora que la juventud se pasa todo el día.
0:20:48 Los baile con sexo, rock and roll.
0:20:52 O leyendo y aprendiendo.
0:20:54 No, nosotros por ejemplo...
0:20:56 ¿Y cómo se divertían ellos?
0:20:59 Nos sentamos en un bar.
0:21:01 Que todavía es el mismo que me siento hoy.
0:21:03 Ya se ha aburrido.
0:21:05 Nos juntábamos con tres amigos que eran Balmaceda.
0:21:11 Y Pancho Alcina.
0:21:13 Y nos contábamos el pasado.
0:21:15 Así se divertían.
0:21:17 Desde los 18 años empezamos a contarnos cosas de los 17.
0:21:20 Largaron casi los 17.
0:21:22 Empecemos a añorar los 17.
0:21:24 Y así, éste era la juventud de antes, no la de ahora.
0:21:26 Que se pasa todo el día con mena de él.
0:21:29 ¿Y ustedes con las mujeres que hacían nada?
0:21:32 ¿Miraban a las mujeres desde ese bar?
0:21:34 Las mujeres mirábamos pasarias y hablábamos de ellas.
0:21:37 Exploramente.
0:21:40 Eso, todo eso me dijo este hombre.
0:21:42 Bueno, espero que está metido ahí adentro de una discoteca.
0:21:45 Accomodando discos en Anacely.
0:21:47 Y me dio un disco.
0:21:51 Yo le voy a dar este disco.
0:21:53 Que es este.
0:21:55 Sueño de juventud.
0:21:57 Ah, está bien.
0:21:58 El disco ha tinado.
0:21:59 El disco me lo dio bien.
0:22:01 ¿Qué otro sueño hay?
0:22:03 ¿Qué otro sueño hay?
0:22:05 ¿Qué otra cosa vas a soñar?
0:22:07 ¿Que te sacás la grande?
0:22:09 ¿Que te compraste una camioneta?
0:22:11 ¿Qué me importa?
0:22:15 Sueño de juventud es un hermoso valz.
0:22:17 Yo no sé si no es la mejor versión
0:22:19 de Carlos Gardel.
0:22:31 Sufre es porque me aleja la fe de urbaña.
0:22:40 Que muy guajaloso tan solo por ti.
0:22:45 Y es un collar de esteréza que a ti me voy a dejar.
0:22:49 Tus ojos seren mozos, tus honores donde así.
0:22:58 Sueño de joven y tu cabuera y tu adiós.
0:23:04 Si me daré a rememberar hasta que añoraré.
0:23:09 Carto de referar hasta que ambicío dé.
0:23:14 A cariñar a mi ala y ver en mi soledad.
0:23:21 Mi pobre corazón no sabe pensar.
0:23:26 Y al aparecer lo alejale de ti.
0:23:32 Solo sabe llorar, solo sabe que mir.
0:23:37 Para ganar a tu amor y para tu adiós.
0:23:45 Un amor primero caricia y tortura.
0:24:01 Casti y dulzura me me aparecer.
0:24:07 Su acunare nunca de tu inmersa terlura.
0:24:11 Un acunare duerme en mi cielo o tu imágenes de azar.
0:24:20 Sueño de joven y tu cabuera y tu adiós.
0:24:26 Un timbi de rememberar hasta que añoraré.
0:24:32 Carto de referar hasta que ambicío dé.
0:24:37 A cariñar a mi ala y ver en mi soledad.
0:24:44 Mi pobre corazón no sabe pensar.
0:24:49 Y al aparecer lo alejale de ti.
0:24:55 Solo sabe llorar, solo sabe que mir.
0:25:01 Para ganar a tu amor y para tu adiós.